Capítulo 3: ¿Estrés?

Después del incidente que se había ocasionado entre Heira y Ribbe todo volvió a la normalidad... O eso hubiera querido aparentar Heira.

En realidad nada volvió a la normalidad. Heira se había vuelto mucho más fría, reservada e irritable. Ribe, el cual, creía que aquello era imposible. Lo estaba viviendo en carne propia y presenciándolo con sus propios ojos.

--- ¿Que te pasó? --- dijo una preocupada Riana al ver el vendaje de su prima.

--- nada --- respondió con un aire seco la involucrada

--- ¿¡Nada?! --- se exaltó --- ese es un gran corte

--- He dicho que nada --- señaló algo irritada

--- ¿Ribbe lo sabe? Estoy segura de que está preocupado deberías de --- fue rápidamente interrumpida

--- POR UN DEMONIO RIANA --- soltó irritada --- no me pasa nada --- dijo enojada para irse del lugar dejándola sorprendida..

Esa no fue la única ocasión...

--- Así que ... Heira ¿no? --- preguntó una Mitchell emocionada

--- ajá --- respondió esta simplemente

--- He escuchado que tienes mucho talento. Eso es asombroso

--- ajá --- mencionó cortante

--- y.... ¿Que hacés? --- trató de que la plática continuará

--- nada --- dijo con un tono neutro.

Un silencio incómodo se instauró junto con la mirada fría de Heira

--- b-bueno c-creo que debo ir--- decía con nervios aquella de cabellos dorados mientras señalaba a un lado

--- adiós --- respondió seca está y se paró de su lugar dejando a la chica que hace un minuto había intentado iniciar una conversación. Mientras que ella buscaría un remedio para los mareos.

De pronto se acercó un chico con una sonrisa burlona

--- tienes razón. Es muy amigable --- dijo Steve en tono irónico con una sonrisa

--- callate ¿sí?--- dijo la rubia sin mirarlo

--- simplemente es encantadora --- se burló una vez más --- te lo dije... No me cae bien --- dijo tomando su mochila y retirándose dándole un vistazo a la chica de mechones rosa que se alejaba.

Incluso Ribbe había sido una víctima de la personalidad de Heira

--- quieres hacer algo luego de--- preguntaba de manera alegré el chico hasta que fue interrumpido por las palabras de Heira

--- no --- respondió sin más que decir

--- p-pero ni siquiera pude terminar --- dijo este alzando los brazos

--- no quiero --- dijo seria. Le dolía mucho la cabeza y no quería dar explicaciones.

--- últimamente estás muy rara siempre te--- decía para luego mirarla y concluir que había desaparecido sin más. --- ¡agh! ¿Qué le pasa? ¿Porque siempre desaparece? ¿Habré hecho algo malo?--- dijo para sí mismo y se fue a su habitación desanimado.. No la volvió a ver hasta la noche calurosa donde llevaba un tapado de mangas largas

--- Auch... Tal vez debí curarme antes de venir --- decía en voz baja inspeccionando su herida

--- ¡Heira!--- la llamó a lo lejos

--- Demonios --- susurró está y continuó avanzando a un paso más rápido para que no la alcanzará

--- ¿Donde te metiste? --- preguntó él curioso

--- estuve por allí --- respondió con vaguedad --- iré a clase --- dijo apresurando el paso

--- Podrías esperarme

--- ajá --- respondió fría sin darle importancia

--- oye espérame --- dijo él --- ¿no tienes calor con eso?

--- no --- mencionó y ahora la seguía de cerca. Mientras ella trataba de evitarlo

--- ¡hey! ¡Espérame !--- dijo tomándola del brazo para detenerla.

--- Auch --- grito un poco por el dolor de la presión que hizo Ribbe ---

Esto asusto al chico que rápidamente movió su mano y la observó con delicadeza. Logrando visualizar un corte y varios moretones. Heira se escapó cuando el se quedó pasmado y el tema no volvió a tocarse nuevamente. Heira siempre lograba desviar la conversación.

Era una reacción natural, no se le daba bien pedir ayuda o compartir lo que le pasaba. Y el trauma que presenciar un asesinato les había otorgado lo hacía aún peor. La muerte había sucedido un viernes a las 9: 17 PM exactamente... No sabía cuándo sucedería la siguiente... Y en vista de que las personas responsables de la institución no harían nada. Ella debía hacer algo...

Según "la muerte" era culpa de ella y Ribbe que eso estuviera sucediendo. Jamás se permitía dañar a alguien que no lo merecía... Y creía en que nadie de allí por más idiota que le pareciera merecía el final de su vida. Así que lo decidió, enfrentaría a "la muerte".

Había empezado a practicar con la guadaña que les habían entregado. Desde que Heira tuvo esa rara sensación de conectar con ella logró levantarla con mucha más facilidad y descubrió que esta misma volvía a sus manos cuando la necesitaba. Había logrado algo, eso era un hecho. Sin embargo, no era buena para nada con ella aún. Era de suponerse apenas si llevaba unos días, 4 días para ser exactos; nada se puede controlar con solo un poco de entrenamiento. Sus habilidades como gimnasta le habían ayudado; hacerlo con la guadaña era una cosa distinta y mucho más sin alguien que la guiará. Entrenaba todos los días sin falta durante unas horas antes de las clases nocturnas, por alguna razón el hecho de usar el arma la dejaba muy cansada. Además, algunos días los entrenamientos de sus especialidades también la agotaban.

Todo esto explotó cuando Ribbe llegó a su punto máximo. Y confrontó a Heira.

Ambos caminaban hacia su siguiente clase. El silencio era muy incómodo para Ribbe que disfrutaba de la plática aunque su compañera solo respondiera con sarcasmo. Ahora se había convertido en "La chica de los monosílabos"

--- ¡Ya basta Heira! --- dijo con un tono cansado y frustrado mientras enfatizaba con las manos

--- ¿Que? --- dijo desinteresada y algo irritada

--- ¿¡Qué?! --- respondió algo desesperado --- No te hagas la inocente. --- dijo en regaño --- me evitas siempre, desapareces luego de clases, apareces muy lastimada y cansada --- nombró mientras señalaba sus vendas, cortadas y moretones --- ¿Qué es lo que te sucede? --- dijo enojado más que todo preocupado.

--- nada --- dijo la chica restándole interés al asunto ---

--- Estás de broma ¿Verdad? --- dijo irritado --- Esos cortes sin duda no son "nada" --- dijo haciendo las comillas --- ¡ya Heira! dime de una vez ¿¡Qué demonios te está pasando!? --- esto sin duda sorprendió a Heira ¿Ribe insultando? Ese era su trabajo.

--- ¡QUE NO PASA NADA MALDITA SEA! --- gritó enojada alejándose

--- Heira estoy preocupado. No es normal que aparezcas tan lastimada ¡Por Dios! --- estaba frustrado --- ¿Dime qué te pasa? Lo vamos a resolver --- intento tomarla del brazo pero una de sus heridas, impedía que este la retuviera. No quería lastimarla más.

--- No te metas en mis asuntos --- dijo está para darle la espalda e irse de allí totalmente enojada. --- esta es mi lucha Ribbe... No necesitas salir lastimado --- susurró ya lejos

Ribbe la vio irse y enojado se pasó una mano por el cabello, no se quedaría de brazos cruzados e investigaría que le pasaba a su compañera... A su amiga.

--- ¿Porque tienes que ser tan terca? --- suspiro para ir a su salón.

Ambos ni siquiera sospechaban en lo que estaban en vueltos, pues a lo lejos y oculto en las sombras alguien acechaba. Observaba la escena con una sonrisa burlona y de satisfacción. Admirando a los elegidos enfrentados por una discusión y las consecuencias que los secretos causaban entre tan peculiar par que debía encargarse del mal que estaba apunto de aparecer... Una nueva muerte se daría en el campus en 48 horas . . . No había mucho tiempo y nadie lo sabía aún.

Aquella misma mañana Heira y Ribbe no se dirigieron la palabra. Estaban totalmente separados lo que dejaba a Heira aislada de todos los demás en aquel instituto.

--- ¿Se pelearon? --- preguntó sentándose al lado de Ribbe que se encontraba perdido en sus pensamientos

--- algo así --- hizo una mueca el chico --- Estoy preocupado por ella... Has visto la cantidad de heridas que tiene. No es normal...

--- dijo que tú la habías curado --- mencionó ella pensando que él sabía de qué se trataba

--- ¿Que? --- preguntó confundido --- no lo hice...

--- Tiene muchas heridas en los brazos --- dijo esta ahora muy asustada... Sabía que Ribbe no la curaría sin preguntar nada.... Así que asumió que él sabía algo. Sin embargo, ahora no sabía que pensar --- se estará cortando ella misma --- dijo incrédula pero ... Era una opción

--- Por Dios... Heira ---- se regaño a sí mismo aún más preocupado --- descubriré lo que está pasando y te diré si se algo...

--- okey... --- dijo algo asustada

Era hora de acabar con eso... Heira no podía seguir del mismo modo. Tenía razón... Aquello no era sano para nadie. Descubriría lo que le estaba pasando

Esa misma tarde al terminar las clases Ribbe se dispuso a seguirla. Lo había pensado toda la mañana, no quería sobrepasar su espacio personal espiando lo que hacía. Apoyaba que todos tenían una razón para tener secretos y decirlos solo si se estaba listo... Sin embargo, estaba muy preocupado por ella... ¿y si lo que Riana había dicho era real? Solo quería saberlo para ayudarla...

Comenzó su plan en cuanto la vio retirarse del salón de clases. La siguió sigilosamente por todo el campus. Primero a los dormitorios, luego a unas prácticas, después al jardín.

--- No he visto que se lastimé aún--- dijo en susurró inaudible para sí mismo.

Continuo con su plan pues ella comenzaba a retirarse rápidamente. Parecía correr de algo.

--- ¿Será que alguien la está siguiendo? --- pensó al verla correr. Que tal si alguien la estaba amenazando... Alguien de la escuela y ella por miedo no decía nada... ¿Sería eso posible?

No logró pensarlo más a fondo pues al parecer estaba por perder a la chica que se detuvo en seco en medio de una parte desolada del campus.

--- DEMONIOS RIBBE DEJA DE SEGUIRME --- dijo enojada volteando hacia donde estaba escondido.

¿Cómo lo había descubierto?

--- SAL DEL ARBUSTO --- ¿La gente tenía una obsesión con ellos o qué? --- ¿Porqué demonios me estás siguiendo? --- dijo enojada.

--- ¡Me preocupas! ya te lo he dicho. No quise meterme en un asunto personal --- fue abruptamente interrumpido

--- Pues ya lo hiciste --- se notaba que estaba muy enojada. Nuevamente tenía dolor de cabeza...

--- Tuve que hacerlo... Solo quería saber si estabas bien

--- ESTOY BIEN --- aseguró ella a pesar que justo en ese momento tenía migraña y empezaba a marearse.

--- ¡Deja de mentir! --- estaba cansado de esa actitud --- no estás bien ¡Heira por dios! Desde cuando estar lastimada esta minimamente cerca de estar bien --- comentó irritado y muy fuerte.

--- Esto no te incumbe --- mencionó de mala gana y gritando. Todo le daba vueltas, se llevó una mano a la cabeza como si fuera a apaciguar el dolor.

--- ¡A eso es lo que me refiero! --- dijo viendo como la chica hacia una mueca de disgusto.

--- ¡QUIERES CERRAR LA MALDITA BOCA! --- estaba mareada, el mundo le daba vueltas. Su cabeza retumbaba como una banda de rock y nada era estable...
La fuerza de su cuerpo se esfumó de un segundo a otro y sus sentidos se fueron apagando. Su visión se nubló hasta tornarse conpletamente negra, lo último que pudo percibir fueron los gritos asustados de su compañero.

--- ¡HEIRA! ¡HEIRA! ¿QUÉ TE SUCEDE? --- se escuchaba la voz preocupada de Ribbe para luego verla caer desmayada.

Tenía a Heira inconsciente en sus brazos y pedía ayuda.

--- creo que es hora de actuar --- una voz en las sombras dijo mientras se retiraba del reciente espectáculo.

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Tags: #muerte