Nozomi

El último año de universidad lo conocí, todos hablaban de él, el estudiante modelo, las mejores calificaciones, atractivo, amable, alto, moreno y cuerpo tallado por los dioses, todo el mundo sabía quién era Kim Namjoon menos yo.

Siempre estaba concentrada más en mis estudios, ser la mejor de mi carrera y poder hacer mis prácticas de odontología lo más pronto posible, así que no me interesaba conocer a nadie de otras carreras menos a los chicos de medicina que eran los que menos tiempo tenían.

Pero por lo mismo de que ambos éramos los mejores en nuestras carreras nos conocimos en una junta de la dirección. No voy a mentir en cuanto sonrió y me mostró esos perfectos hoyuelos cai rendida, aún así el fue el primero en invitarme a salir, ya ambos estábamos casi todo el tiempo en la universidad nuestra relación fue muy buena, compartíamos horas de estudio, tiempos libres, incluso me llegó ayudar con algunas clases. Todo siempre fue perfecto.

La manera en que me pidió ser su novia, cuando se presentó a mis padres, cuando conocí yo a sus padres, nuestra relación nada vez mejoraba más, al graduarnos nos concentramos en establecernos en nuestras carreras aún así no dejábamos de estar juntos, me propuso vivir juntos y poco después de eso me pidió matrimonio.

Nuestras familias estaban felices, mis padres estaban orgullosos de que mi clínica dental comenzó a tener más éxito, los padres de Namjoon hicieron una fiesta para anunciar que su hijo se iba a casar además de que fue promovido a jefe de cirugías.

En fin todo viento en popa, nuestra relación cada vez se hacía más fuerte, no tengo que mencionar el sexo siempre fue maravilloso. Estos seis años de relación se me fueron muy rápido.

—¿Seguro tienes todo?

—Si amor, todo va en la maleta, pasaporte, los documentos para el simposio y los cambios necesarios —Namjoon me sobaba los hombros mientras miraba su maleta abierta.

—Creo que estoy más nerviosa yo, me encantaría poder ir contigo.

—Pues vamos.

—Sabes que no puedo, tengo pacientes esta semana, además que debo terminar con lo de los invitados.

Me giro para tomarme de la cintura, besándome la frente.

—Entonces ve esto de manera positiva, regresando del simposio tu y yo seremos marido y mujer —me dio un tierno beso —tendremos que cambiar el logo de tu oficina, serás Kim Nozomi.

—¿Y si mejor tu eres Kitamura Namjoon?

—También suena genial.

Di un suspiro algo nerviosa

—La verdad aún no creo que el día ya casi llega.

Me comenzó a besar, jugando con los tirantes del vestido, aunque quería llevar esto a la cama no podíamos su vuelo sale en un par de horas. Gracias al cielo el oportuno de su amigo tocó a la puerta.

—Déjalo afuera sigue besándome —Sonreí abrazándolo.

—Anda que se no dejará de molestar, no entiendo para que nos va a acompañar.

—No quiero que te regreses sola del aeropuerto, ya es algo tarde.

—Tienes más amigos.

Me soltó y fue hacia la puerta.

—Pero solo un mejor amigo.

En cuanto las puertas se abrieron ahí estaba parado Kim Seokjin, amigo inseparable de Namjoon, se conocen desde la primaria y son demasiado diferentes tanto que no se cómo llegaron a ser tan cercanos.

—¿Estaban teniendo sexo de despedida? Me hubieras dicho llegó cinco minutos después —sonrió cínicamente —hola Nozo-chi

—Hola Seokjin, ya te he dicho que no me digas así.

—Es un lindo sobrenombre—me agito el cabello —vamos a abandonar a tu prometido al aeropuerto, quiero ir a comer algo antes de irme de fiesta.

Seokjin ayudo a Nam a meter su maleta en el auto, ellos se fueron en la parte de enfrente, platicando de cosas del trabajo, yo estaba atenta en la parte de atrás aunque no parezca Seokjin es un neurocirujano muy reconocido además que sus padres tienen algunos hospitales de prestigio en Seúl. Se toma su trabajo muy enserio, tan enserio como sus conquistas, así como es famoso por su habilidad en cirugías en famoso por solo buscar mujeres para acostarse con ellas nunca nada serio.

—Pórtate bien querida —Beso mi frente y me abrazo — en cuanto llegue al hotel te llamo.

—Bien, se que lo harás bien.

—Ya déjalo ir no se va ir para siempre.

Mire a Seokjin con enojo, Namjoon se rio se despidió de los dos retirándose  al área VIP a esperar su abordaje.

—Bien es hora de irnos, estoy muriendo de hambre, ¿Quieres cenar conmigo?

—No gracias, estoy algo cansada me la pasé como loca arreglando la maleta de Nam, solo quiero irme a descansar.

—Esta bien Nozo-chi te llevo a tu casa y de ahí me voy a cenar.

Rodé lo ojos no se cansa de llamarme así, mientras caminábamos a la salida, mire como Seokjin siguió con la mirada a una joven muy hermosa, creo que la había visto algunas veces por el hospital donde trabajaba Namjoon.

—Es Hyori, espera Nozo-chi deja voy y la saludo

Mire como entro al área VIP.

—No puedes entrar ahí, mejor vámonos.

—¿De que hablas? Soy Kim Seokjin, puedo entrar a dónde quiera —me tomo de la muñeca—vamos en lo que tú te besuqueas con Namjoon yo hablo con la bella Hyori.

—Pudiste hacerlo desde el inicio.

—No quería esperar a que estuvieran de empalagosos.

No mintió el guardia nos pidió el pase de abordaje de primera clase para entrar y basto con que Seokjin mostrará su identificación y una black card, para que lo dejarán pasar al área VIP.

—Vaya

—Te lo dije.

Apenas entramos me arrepentí, la hermosa Hyori estaba colgada de el cuello de Namjoon, este la sostenía de la cintura dándole un apasionado beso, parpadee un par de veces, escuché un "no puede ser" de parte de Seokjin, mire su rostro de furia que después fue hacia mi en manera de tristeza, lo único que pude hacer fue salir corriendo de ahí.

Igual vi mal

No podía ser verdad

Esto no puede estarme pasando

Escuchaba a Seokjin llamarme desde la distancia pero no quería mirar hacia atrás, tome un taxi de regreso al departamento, apague mi teléfono no quería saber nada.

Al llegar al departamento, mi mente me ponía una y otra vez la imagen de Namjoon besándola.

¿Puede que sea solo eso y nada más?

Fui al cuarto y tome mi agenda de la cajonera de la cama, me acerque al teléfono de la casa entonces marque.

—Agente Jung Hoseok, ¿En qué puedo servirle?

Mi voz aún se escuchaba llorosa.

—Hobi —intente calmarme —¿Me podrías ayudar con algo?

—¿Nozomi? Claro princesa —se escucho el ruido de una llaves —iré a tu casa.

Mire las invitaciones de la boda, el organigrama dónde se sentará cada invitado, mi vestido ya estaba en el armario, me ardían los ojos me tuve que ir  a lavar el rostro, empezaba a sentir que era mucho escandalo por solo un beso, llevamos mucho juntos debe ser un malentendido, no me quedé a pedirle explicaciones. Me hice un ovillo en la cama, quería pensar que fue un mal sueño, pero también sabía que me estaba engañando a mi misma.

Habían pasado como dos horas desde que estaba acostada, no me había movido de la cama y tampoco había dejado de llorar.

Escuche como tocaron el timbre, me levanté de la cama y  camine arrastrando los pies, cuando abrí la puerta mire a Hobi en la entrada. Se lanzo a abrazarme, Jung Hoseok es como mi hermano, mis padres prácticamente lo criaron junto conmigo, el estaba casado ahora pero cada vez que lo necesitaba llegaba corriendo.

—Dime que sucede.

Trate de explicarle la situación, sin que me dominará la tristeza.

—Siento que estoy haciendo un escándalo por nada.

—Aun así sea solo ese beso, es suficiente como para ir a partirle la cara.

—Solo quiero confirmar todo antes de tomar una decisión.

Hoseok trabajaba para la policía de elite de Seúl, es agente especial, me pidió el nombre del hotel y el simposio al que asistiría Namjoon, estamos haciendo mal uso de los recursos pero quiero respuestas. Solo hizo un par de llamadas, me dejó con un te en la mano mientras cocinaba.

—Deberías de encender tu teléfono, trate de marcarte un par de veces y estaba apagado.

—No quería saber nada de nadie, Seokjin no dejaba de llamar. Además no quiero escuchar a Namjoon cuando me marque.

Mire como sirvió dos platos enormes de estofado de res, me hizo señas para que me sentará en la barra con él, siempre que estoy triste el me cocina de esta manera, su idea es de arreglar mis penas con comida, desde niños ha Sido así. Se sentó después de darme los cubiertos.

—¿Qué harás en cuanto sepas que pasó?

—No lo sé aún, sigo haciéndome a la idea de que pude malinterpretar todo.

—Pues Seokjin también lo vio, además siento que solo estás tratando de cerrarte, no lo hagas Nozomi, se que amas a Namjoon como a nadie y el dolor que debes estar sintiendo es horrible, pero no debes dejar que eso te domine.

—¿Y la boda?

—¿Te casarás para vivir con alguien que no te respeta?

—Es mucho tiempo de relación.

—Que ese imbécil no valoro.

El teléfono de Hoseok empezó a vibrar, note que eran mensajes de WhatsApp con imágenes. Mire la hora en el reloj de la pared, ya debería haber aterrizado Namjoon y registrado en su hotel hace media hora más o menos.

Tomo su teléfono para abrir los mensajes, vi que analizaba lo que veía, después me volteo a ver dejando el teléfono.

—Enciende tu teléfono deja que ese infeliz te marque porque será la última vez que te hablara.

Fui por mi celular y lo encendí, mientras de iniciaba, Hobi me mostró las fotos que le llegaron, era Namjoon de la mano con Hyori, otra foto más en la recepción del hotel como una linda pareja, otras fotos más besándose, me llegó un mensaje de Namjoon.

"Ya estoy en el hotel, si estás dormida te marco mañana"

—Voy a preparar tu maleta, no le daremos explicaciones no esperaremos sus excusas, solo nos iremos Nozomi ¿Entendido?

Asentí, mientras decidía si marcarle o no, en eso vibró de nuevo mi teléfono con una llamada.

—¿Hola?

—Amor que bueno que estás despierta, llegué con bien al hotel.

—Esta bien.

—¿Te sucede algo? Te escucho algo extraña.

—Nada, solo ya me iba a dormir.

—Muy bien te marco mañana, te amo Nozomi.

No pude decirle nada más le colgué sin más y volví apagar el teléfono.

¿Me ama?

¡¿ME AMA?!

Es un infeliz, un descarado, es..es..era el amor de mi vida.

Solo sentí los brazos de Hoseok a mi alrededor dejándome llorar en su hombro hasta el cansancio.