La puerta abierta revela la figura de un oficial del gobierno, un alto rango.

-Agente Clearke, acompañeme a la base- habla con voz severa, como si hubiera faltado a muchas normas-. Smith, Ichinose lo espera en la sala de reuniones.

Obedecen cada uno a la orden sin rechistar. Deben aparentar todo lo que puedan mientras trabajen ahí.

Smith pierde de vista a Clearke y a ese hombre al cruzar la puerta, sus direcciones van completamente opuestas en ese momento.

Es extraño que la llamen a ella, piensa Smith, por lo general siempre pedían hablar con él.

Unos cinco minutos más tarde estaba entrando en la sala de juntas, donde Guren Ichinose lo esperaba con aspecto nervioso, al verlo se levanta y comienza a hablar sin parar.

-Erwin, todos me mintieron, era mentira, ninguno sobrevivió, Armin morirá pronto... Necesito ir por él, necesito que Clearke me haga este pequeño favor, necesito que ella vaya, ellos confían en ella... ¿Donde está Clearke?- pregunta al no verla.

-La llamaron de la base- responde- ¿Como que Armin estará muerto?

Entonces recordó el otro mensaje que Shinya le había dado:

-Están comenzando a sospechar de nosotros tres.

‡•‡

Sebastian comenzaba a molestarse por la actitud de los chicos, eran como pollos asustados. Seguramente lo estaba pasando tan mal como sus protegidos.

-¿Y no hacen nada más?- pregunta, para romper el silencio.

-Esto y pasar tiempo de pareja- le contesta Hiragi, por como lo dijo debía ser algo totalmente horrible.

-¿Tiempo de pareja?- pregunta, sin comprender.

-Eso- habla Reiss-, es para que la falta de afecto no traiga consecuencias graves para todos- sus palabras son cuidadosamente medidas-. Si nosotras no compartimos un momento de intimidad podemos comenzar a sentirnos mal y hasta morir.

Sebastian analiza la situación. Alois había sufrido bastante, su cuerpo habia estado pudriéndose, pasó así un mes.

-¿Qué sucedería si alguien en la pareja se enamora de otro?- pregunta, la curiosidad era palpable.

-El cuerpo se pudre, los órganos dejan de funcionar, mueren, ese proceso puede durar una hora o dos meses, es algo realmente doloroso y aterrador- explica Shinoa, dejando de lado su reciente miedo-. Depende de lo inesperada que sea la noticia.

-Y si uno de los dos muere sin haberse enamorado de otro, el que sobrevive lo sigue unas horas o días más tarde. Nunca vive un mes entero- añade Historia.

Luego silencio, ninguno se atrevió a romperlo.

Sebastian continuaba pensando, entre un momento al otro recordó a Armin. Su corazón latió con fuerza, asustado, recordaba lo que había ocurrido, y aunque le hubieran practicado cualquier cosa no había ni un solo registro donde alguien en sus circunstancias quedara vivo.

-Chicos- les llama la atención-, iré a hablar con Ferid, así que tomense el día libre, trabajan muy duro y se lo merecen.

Sebastian se levanta como un huracán.

-Regreso pronto- es lo último que dice antes de correr de regreso a su muralla.

Iba contra todas las reglas dejarlos solos en ese día, pero debía hacerlo para saber si su teoría era real o no.

Real o no, se repetía eso hasta el momento en que llegó a la casa.

Todos estaban paralizados alrededor del cuerpo inerte. Sebastian lo supo en ese momento: era verdad.

Yuuichiro fue el primero en ver a Sebastian, por lo que corrió a pedirle ayuda. Los demás reaccionaron hasta ese momento, alejándose del cuerpo.

-Esto les pasa a todas las parejas de lazo compartido cuando una parte muere sin romper el amor- explica Sebastian, revisando el cadáver-, lo voy llevaré a donde se conserve mejor el cadáver, ¿Cuanto lleva así?

Levi mira la hora.

-Unos cuarenta minutos- responde.

-¿Y Bathory?- pregunta, comenzando a caminar con el cadáver entre los brazos.

Levi lo sigue para comentarle de todo lo ocurrido, los demás deciden quedarse en casa para lidiar con la sorpresa de esa muerte.

Nadie en las murallas debía pasar por tantas muerte, ellos ya habían visto tres sólo en ese mes.

-¿Creen que Clearke vendrá?- pregunta Yuuichiro, rompiendo el silencio.

-¿Para llevarse a Armin?- Eren parece tener los nervios a flor de piel-. Hablas como si fuese la Muerte.

Yuuichiro traga saliva.

-Parece- interviene Mikaela-, estuvo presente en dos de las tres muertes, podemos asociarla a la muerte.

Ciel continua en silencio, solo observando la situación.

-¿Ciel?- Eren se acerca a él con cuidado.

-Armin lo sabía- es lo único que dice.

Los tres se sorprenden ante esa declaración.

-¿Por qué dices eso?- pregunta Mikaela.

Ciel los observa.

-¿No lo notaron? Parecía muy triste, sabía que eso pasaría. Además, soy como él, nosotros sabemos muy bien cuando algo así va a ocurrir.

La habitación se impregna de silencio por unos minutos, hasta que Eren decide hablar.

-Entonces tu sabías muy bien que Alois estaba sufriendo bastante por tu elección.

-Ya lo dije antes- responde-, yo lo sabia y tengo mis motivos para no querer ayudarlo. Para no haberlo ayudado.

Yuuichiro toma la mano de Mikaela.

-Igual se te agradece- habla él-, sin el sacrificio de Alois tal vez Clearke no hubiese venido a ayudarnos para ser un poco más libres.

Ciel intenta lucir indiferente cuando en realidad, por dentro, está feliz de escuchar esas palabras.

No fue un sacrificio en vano, le recuerda una familiar y desagradable voz en su cabeza, eso es algo que nunca podrá suprimir, nunca logrará sacar de su interior lo que ellos dos comparten. Aún si uno está muerto.

-Ya terminará esto- Eren dice lo que siente-, en algún momento explotarán la muralla...

-Siento que no moriremos aún- lo contradice Mikaela-. Realmente no creo que nos dejen morir, Clearke no se tomaría tantas molestias si no le sirviéramos de algo.

Lo consideran en silencio. Ese día la casa estaba poblada por silencios.

-Siempre le pide lo mismo a Sebastiam- les recuerda Ciel-, le pide que nos cuide, como si realmente le importáramos.

Yuuichiro siente una fuerte arcada, las nauseas suben, haciéndolo correr al baño para vomitar todo lo que contenía su estómago. Mikaela lo cuidaba y, también, comenzaba a sospechar.

‡•‡

-Izbell Clearke...

-Solo Clearke. Yo no tengo nombre- le recuerda.

En la base, el encargado de detonación en las murallas había llamado a Clearke para darle un mensaje privado.

-¿Como estás?- pregunta, intentando parecer amable.

-No creo que te interese en lo más mínimo, Nanaba- contesta, irritada.

Sonríe al escuchar la respuesta.

-Yo también estoy increíble últimamente.

-Sigue sin importarme ¿Qué es lo que quieres?

-Hablar- entre una pila de papeles saca un folder negro y se lo entrega mientras explica-. Ahí está toda la información verdadera de la detonación en las murallas. No miento con ningún detalle. La hora exacta en que se sacará a Michaelis, cuando se retirará el oficial que cuida la puerta, cuantas explosiones serán y en qué posiciones estarán.

La sonrisa que adorna sus labios no desaparece en ningún momento.

-¿Por qué me das esto?- pregunta, desconfiada.

-Hace unos días tuve que hacer un interrogatorio a uno de los... Guardianes de las murallas- el color desaparece del rostro de Clearke-. No te preocupes, está intacto, no apliqué tortura física, pero si me contó de la organización secreta que intenta salvar a los moradores de las murallas. Me contó acerca de una chica con un hermano secuestrado que está en la muralla que detonaremos en dos semanas. Una historia conmovedora.

Clearke esta paralizada en la silla, no sabe como responder a eso.

-No dio nombres, pero supongo que eres tú, por toda tu historia y la forma en que llegaste aquí. Como la historia realmente conmovió mi corazón te hice este regalo. Tomalo como una muestra de compasión, pero no metas la pata al salvarlos- en ese momento la sonrisa desaparece y se convierte en un rostro totalmente serio e intimidante-. Vete antes de que me arrepienta.

Con el folder apretado entre sus manos, Clearke sale de esa oscura oficina, sintiendo otro peso cayendo sobre ella.