Un pelimorado y una ojimiel paseaban por un bosque en calma, ambos iban a una pequeña distancia pero uno al lado del otro.

Helina: nunca habías tenido una cita antes? -dudosa viendo el camino- digo, esto es poco común

Tiberio: -suelta una muy leve risa- no Helina, eh tenido más citas antes, pero... Si eres la primera a la que traigo aquí

Helina: puedo preguntar porque aquí? -curiosa.

Tiberio: -sonrie- Helina, te conozco desde los 11 años, se que no te gusta lo común, es por eso que te llevo a uno de mis lugares favoritos y tranquilos, está lleno de criaturas mágicas asombrosas -emocionado-

Helina: criaturas mágicas? -curiosa sonríe- genial, a Euphemia y Fleamont jamás les gustaron las criaturas, ni hablar de James... -caminando-

Tiberio: sigues llamandolos por sus nombres, ya veo -tranquilo- a mis padres tampoco les gustan, claro, a excepción de los elfos domésticos, sabes que esos les fascinan, creo que son mejores con ellos que
Sirius y conmigo -divertido-

Helina: lo dices tan calmado... -rie- eres extraño, pero me agradas

Ambos siguieron caminando hasta que llegaron a lo que parecía un hermoso lago, había una manta en el piso y una canasta encima.

Tiberio: se... Se me ocurrió por una novela muggle que leí... Te molesta? Es demasiado? Si te molesta puedo...!

Helina: Tiberio cálmate! -lo toma de los hombres- es hermoso, de hecho es un... Detalle bastante hermoso -con un pequeño sonrojo- solo relájate... Y respira

Tiberio: -avergonzado asiente- l-lo siento, me puse nervioso... Es que... Es la primera vez que salimos y no quisiera que fuera la última...

Helina: -sonrie con levedad para besarle la mejilla- vamos a comer? -toma su mano para irse a sentar con el.

En poco ambos estaban disfrutando su picnic, aún así charlando y bromeando, dejando pasar las cosas con naturalidad, pasaron el día así, hasta que cayó la noche y comenzaron a caminar de vuelta a sus hogares, solo bajo las luces del cielo nocturno.

Helina: Tiberio... Dijiste que querías salir conmigo otra vez... No...?

Tiberio: p-por supuesto! -con un pequeño sonrojo- d-digo, si tú quieres...

Helina: -viendolo suspira levemente- escucha... No quiero ilusionarte, lo diré desde ahora sí? Yo... Cuando cumpla los 18 me volveré mortífaga Tiberio, y... Bueno, no pienso cambiar de opinión, y se que tú estás con mi hermano y sus amigos en la Orden del Fénix -el contrario pareció sorprenderse- si Tiberio, sabía lo de la Orden... -desvia la mirada- entiendo si... Si tú no quieres salir conmigo, o quieres alejarte para siempre... Esto es algo que yo quiero hacer...

El pelimorado solo se quedó callado, para después abrazarla con algo de fuerza.

Tiberio: esto no cambia nada -murmura- está bien, no estoy de acuerdo con esto, con tu toma de decisiones... Y estoy seguro que no lo haces por ti... -se separa tomándola de los hombros- pero yo estaré para ti si? Quizás suene adelantado, pero... Quiero estar para ti siempre, sin importar que... Quiero estar para cuando te tropieces, cuando te sientas sola, cuando te sientas aterrada, estaré yo si? Cuenta con eso... -acaricia su mejilla, por la que caía una lágrima- ni tu me darás datos de los mortifagos, ni yo te daré datos de la orden si?

Helina: -con lágrimas en los ojos y un sonrojo solo asintió- gracias Tiberio... Pero... Porque...?

Tiberio: dios, me has gustado desde la primera vez que te vi, que clase de pregunta es esa? -la besa con delicadeza-

La joven Potter solo le correspondio ante aquello, siendo ella la sonrojada en esta ocasión, y la luna siendo la única testigo del inicio de lo que parecía ser una larga relación.

~Meses después~

La joven azabache de lentes estaba impaciente esperando a que su novio llegará, de verdad se sentía nerviosa, no era una noticia fácil de dar, después de haber estado unos meses saliendo y formalizado la relación, habían tenido ciertos descuidos.

Tiberio: Helina! -llegando- lo siento, tenía problemas para salir de la casa -la mira- porque estás tan nerviosa? P-pasa algo...? Hice algo malo? No me digas! Me discurlpare desde ahora y...!

Helina: -lo toma de los hombros viéndolo fijamente- Estoy embarazada -soltó directamente-

El joven Black palideció unos segundos, pero en esos momentos su cabello se puso rosa y la abrazo.

Tiberio: n-no bromeas? Es en serio?

Helina: -corresponde temblorosa- si! Que es lo que voy a hacer?! Que vamos a hacer?

Tiberio: alegrarnos? Helina estoy contigo! Y-y es maravilloso! Claro que no estaba planeado pero... Podremos con esto, mientras terminamos la escuela podriamos dejarlo con alguien y ya...

Helina: -viendolo- pensé que me dejarías! -se aferra a el- esto es tan repentino, ni siquiera yo sé cómo reaccionar! -lamentó-

Tiberio: a ver Heli, esto es una sorpresa enorme para todos, pero es nuestra... Hay que... Dejar que las cosas fluyan no crees? -animado-

Helina: no se cómo eres tan tranquilo con algo así, yo estoy aterrada...

Tiberio: -rie levemente- alguien se tiene que mantener firme no? -le besa la nariz para luego desviar la mirada- como crees que lo tomen nuestros padres?

Helina: nos asesinaran...

Ambos soltaron un suspiro ante aquello.

Helina: ya quiero decirle a James -sonrie levemente- quizás se ponga feliz por nosotros...

Tiberio: aunque dices que lo odias... Se ve lo contrario...

Helina: calla... Se que el pensaría en decirme cosas importantes -con un pequeño brillo en la mirada- somos familia después de todo...

Tiberio: sabes quién si se volverá loco? Sirius, estará de insoportable todo el tiempo -divertido-

Helina: lo dice el sobreprotector -divertida-

~1978~

James: no puedo creerlo Helina! Son asesinos! Sabes todo lo que han hecho y te uniste! Sabía que estabas demente pero jamás me imaginé que tanto! -le grito a su hermana, está se veía bastante molesta, aún así tenía unas maletas- solo renuncia a ellos y regresa, mamá y papá lo entenderán... Por favor... -la tomó de los hombros-

Helina: -lo empuja con brusquedad- no sabes cuánto te odió! A ti y a ellos! Para ti debe ser muy fácil escoger! Podrías ser el mismísimo señor tenebroso y te recibirían con rosas! Estoy harta! N-no se porque creí que podría hacer algo que les enorgulleciera! Era obvio! No soy su adorado hijo!

James: no lo entiendes?! Esto no tiene nada que ver con esto! Te uniste a ellos! Quieres terminar en Azkaban?! Siempre sacas lo mismo y sabes que no es cierto! Dime, Tiberio sabe de esto?!

Helina: se que no es cierto?! Tu no sabes lo que es pasar toda tu vida esforzándote para que te noten! Yo no pedí ser su maldita hija! -se le quebró la voz- y tiene todo que ver! Tu también me trataste como basura mientras pasaba más el tiempo! Luego te enamoraste de Evans y pasaste de molestarme a ignorar mi existencia!

James: eso no es...!

Helina: no es cierto?! Siempre tuve mejores calificaciones que tú! Nunca lo notaste?! Adivina qué más no notaste, que ni siquiera consideraron a esta Potter para formar parte de la Orden! Es más, se supone que no debería saberlo incluso a estás alturas del partido! -deja caer las lágrimas- lo único que deseaba era que me reconocieran algo un poco! Pero ni siquiera en la escuela sucedió eso... Y sabes quién no estuvo cuando te casaste...? Yo James... Pero felicidades, sigue viviendo en tu maldita burbuja de niño privilegiado! -apreto el agarre a las maletas- y para que lo sepas, Tiberio lo sabe, y adivina que, a pesar de estar en bandos opuestos no me juzga... Porque me ama... Al menos alguien siente algo hacia mi -le dedicó una mirada de tristeza para solo sacar su varita y usar un hechizo para irse.

~1979~

La Potter iba llegando bastante herida a la casa, haciendo que su ahora esposo se tensara notoriamente.

Tiberio: Helina! -corre a ella rápidamente para sostenerla con cuidado- v-vamos... Hay que curarte... Fue otro combate? Sabes que no me gusta que llegues así... -la llevo con cuidado hasta la sala- Aaron trae la bolsa cariño!

Un pequeño azabache de ojos miel y pelo lacio se levantó del piso donde estaba jugando para correr a un armario y tomar una bolsa para correr de vuelta con sus padres.

Aaron: mami otra vez está lastimada? -con los ojos llorosos- le duele mucho?

Helina: -lo mira con cariño- n-no cariño... Todo está bien si? Mami se va a poner bien, solo tuvo un mal día...

Tiberio: como todos últimamente -murmura tratando las heridas, ganándose una mala mirada de la de lentes- no me mires así Heli, sabes que es cierto, esto va a doler -le extiende su brazo.

En cuando el otro dió la advertencia, la ojimiel mordió en brazo del Black mayor.

Tiberio: ya quedó, en una hora ya estarás mejor... -suspira viéndola- porque sigues estando allí...? Que objetivo tiene?

Helina: sabes que desconocen que estás en la Orden del Fénix, es para mantenernos a salvó, más con Severus siendo la mano derecha del señor tenebroso

Aaron: Mami, yo nos puedo defender -se sube al sillón con cuidado, aun así tenía una varita en la mano- así! Expelliarmus! -lanzo un hechizo sin dirección dándole a un espejo el cual se quebro haciendo que los 3 dieran un brinquito del susto, aún así los dos mayores empezaron a reír con levedad.

Helina: que niño tan fuerte tengo -acaricia sus cabellos con cariño.

Tiberio: bien gran guerrero, la próxima vez debes ver a dónde lanzas si? -le recuerda- más tarde entrenaremos, quédate con mami mientras yo limpió...

Helina: es muy talentoso para su edad, que tan común es que lance hechizos tan pronto?

Tiberio: es irreal -divertido- suelen manifestar la magia hasta los 4 años, pero este enano ya nos superó -divertido- aun así todavía te necesita, no te arriesgues tanto -le recuerda-

Helina: lo sé lo sé...

~1979 Julio~

Una ojimiel de 2 meses se estaba preparando para salir en calma.

Tiberio: porque te quiere ver Snape? No me fío de el, lo siento pero debo ser sincero

Helina: Severus es mi mejor amigo Tiberio, no te pongas así, no haría nada sabiendo que estoy embarazada, volveré después si?

Tiberio: -le besa la mejilla- con cuidado... Aaron, ya se va Mami!

El pequeño corrió a abrazar a su madre con ternura.

Aaron: puedo ir...? Quiero ver al tío Severus -suplicante.

Helina: -suelta un suspiro para ver a Tiberio.

Tiberio: está bien, vayan, yo me quedaré aqui solito -dramatizo-

Aaron: yeii! -ignoro la dramatización- vamos mami! Ya alimente a Helena y Drome!

Helina: -rie levemente para cargarlo- nos vemos más tarde Tiberio, mires el lado bueno, tienes a Helena y Drome~

Dicho eso se fueron, llegando a una pequeña montaña con un árbol, ya era de noche ante todo, aún así Snape estaba allí.

Helina: Sev? -baja a Aaron con cuidado-

Aaron: tío! -corre a abrazarlo.

Snape: hola pequeño -murmura acariciando su cabeza para luego ver a Helina- lo trajiste?

Helina: el quiso venir...

Snape: no importa, tengo algo importante que decirte, fui con Dumbledore y escuchamos una profecía! Cometí un grave error, se lo dije al señor tenebroso... -alterado-

Helina: Snape... Me estás preocupando... Que pasa?

Snape: "los únicos con poder para derrotar al Señor Tenebroso se acercan..., uno nacido de los que lo han desafiado tres veces, mientras la otra será una nacida de una traidora de su señor y un traicionero de sangre vendrán al mundo al concluir el séptimo mes y a la mitad del segundo mes... Y el Señor Tenebroso los señalará como sus iguales, pero ellos tendrá un poder que el Señor Tenebroso no conoce... Y uno de los tres deberá morir a manos de los otros, pues ninguno de los tres podrá vivir mientras siga uno con vida... Los únicos con poder para derrotar al Señor Tenebroso nacerán al concluir el séptimo mes y a la mitad del segundo..."

La ojimiel se tenso ante aquello.

Snape: -la toma de los hombros- has los cálculos Helina... Cuando nacerá tu bebé?

Helina: q-que...? -reacciona y niega- no no, no hay manera de...

Snape: nacerá en febrero Helina, y tú y yo sabemos que has dado información a Tiberio por el y por los otros... Empezarán a hacer investigaciones, tienes que irte lo más lejos que puedas, tenemos que hablar con Dumbledore, deben ayudarte después de todo lo que te has arriesgado... Dile a Tiberio también, mudense, desaparezcan del mapa...

El más pequeño solo escuchaba todo un tanto asustado, aunque era pequeño, era muy inteligente como para no entender eso.

Helina: -viendo a su amigo solo lo abraza asustada- gracias Sev, gracias...

Snape: Dumbledore no tarda en llegar, yo le contaré mientras, lleva a este pequeño a casa -corresponde- cuidense por favor, si dejarás que algo le pase al enano no te lo perdonaré

Helina: -rie- de acuerdo -murmura.