Wei Ying estaba ahora frente a la casa de sus padres, por fin los conocería, tenía que pedir perdón, como lo había prometido, su corazón latía tan fuertemente, que casi se salía de su pecho, era como si 100 caballos pasaran por su pecho.

—No puedo —musitó nervioso.

Lan Zhan había tomado su mano y sonreído cálidamente dando su siempre apoyo.

—Tu puedes —dijo sin soltar su mano —estaré a tu lado siempre.

Wei Ying dio un gran suspiro dejando salir el aire de sus pulmones, toco el timbre que minutos después fue la puerta abierta por una mujer de edad avanzando.

—Oh si es el pequeño joven amo A-Ying, sus padres serán felices de verle

—¿Están aquí ahora?

—Lo están, lo están, están en el patio con la joven ama YanLi ─indicó la ama de llaves

—¿Mi hermana está aquí?

—Si, vino con su esposo e hijo, por favor pasen, les avisaré que han llegado

—No, déjenme que yo los vea sin aviso

—Bien.

Pasaron al patio, el aire juega con su cabello, sus padres están dándole la espalda, YanLi está siendo sostenida por su esposo, al parecer esta volviendo a caminar después del accidente, donde quedó en sillas de ruedas al salvar a Wei Ying, a su lado su hijo, el mismo niño, solo que ahora ya no tiene aquel ceño fruncido, como aquella vida donde fue cuidado por su tío, ahora el chico parece muy feliz, su corazón se regocijaba con aquella escena, esta vez tiene la oportunidad de verlos vivos y feliz.

YanLi lo mira, sus ojos se llenan de lagrimas.

—A-Ying —dijo en tono feliz.

Sus padres se giraron para verle, Wei Ying sintió como su corazón se detenía, su respiración se contuvo, era la primera vez que los veía, que los conocía, sabía bien que eran ellos, su corazón se lo dejo saber, soltó la mano del hombre que amaba y camino hasta a ellos para abrazarles, las lágrimas salieron, esta vez era de felicidad.

—¡Perdonme!, ¡Los extrañé tanto! ─musitó en lagrimas.

Lan Zhan miro aquella escena, lo más importante en su vida a parte de su hermano fue siempre Wei Ying, ahora verle feliz, era lo único que necesitaba, todos aquellos años en la soledad, siendo un Extraño, valieron la pena, ahora valoraría la vida de aquella persona como la suya, el camino que vendría, sería uno de felicidad absoluta.

Wei Ying conoció al esposo de su hermana, era el mismo pavo real de aquellos tiempos, su sobrino tenía mal carácter seguía pareciéndose aquel chico criado por su tío, que ahora solo era un amigo, no un hermano, sus padres ellos eran unas personas que no conocía pero gracias aquella persona tendría la oportunidad de estar a su lado, valoraría aquella nueva oportunidad de vivir, esperando y agradeciendo aquello.

Todos cenaron juntos, hablaron hasta cansarse y aquello se volvió el inicio de una nueva vida.

Wei Ying y Lan Zhan serían felices para siempre.

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Jiang Cheng salia de su trabajo, afuera de este estaba a Lan Xichen, desde que salió del hospital, no había hablado mucho, curar las heridas de un corazón roto, no es fácil, es poco a poco.

—Jiang Cheng ¿podemos cenar juntos? —propuso Lan Xichen con una sonrisa

—Esta bien.

Los dos salieron a cenar, aquel lugar era el restaurante favorito del menor.

—Seré directo, se que te he lastimado, que he sido un tonto, pero si me das esta oportunidad, prometo hacerte feliz, he estado leyendo todo los pergaminos necesarios para dejar de tener el cultivo máximo, no quiero una vida eterna si tengo que verte irte de mi lado, cásate conmigo —saco los anillos —Estos fueron alguna vez nuestros anillos

—Pero yo no soy esa persona

—No lo eres, no eres aquel líder del Clan Jiang, no eres el estudiante, no eres el mismo, pero te ame de la misma manera, una y otra vez, te ame desde que te vi, por ello déjame amarte por favor, déjame quedarme a tu lado, déjame hacerte feliz, déjame pagarte todo el daño que te hice —tomo su mano suavemente —Jiang Cheng te amo

—Yo a ti... soy una persona difícil, no tengo buen carácter y decir mis sentimientos me cuesta mucho, pero yo quiero quedarme a tu lado... —le sonrió gentilmente

Lan Xichen tomo su mano y le coloco su anillo, para luego besar su mano.

—Te amaré todos los días

—Mnh —Asintió.

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Nie Huai Sang había expuesto las reliquias de los clanes, exponiendo todo lo que había recordado, aquello fue un éxito las personas conocieron más de aquello que se había olvidado.

Aquel día ya había pasado 6 años desde aquella pelea, la herida en su pecho solo era una marca de lo que alguna vez pasó, Mo XuanYu había pagado por todo, aunque pareciera que nunca fuera suficiente para el daño que había hecho.

Nie Huai Sang cerraba el museo, miró el lugar y luego salió, al salir solo pudo mirar un ramo flores, cuando aquel ramo bajo, pudo ver la sonrisa de Mo XuanYu.

—Lamento la demora, felicidades por tu exposición, he sabido que ha sido un éxito.

Nie no hizo nada, un silencio se produjo, Mo XuanYu sintió que su corazón se paralizaba, pero entonces fue recibido por un abrazo, tan cálido y perfecto.

—Bienvenido a casa, te extrañe.

Los dos regresaron a casa, las cosas no iban a se fáciles, aún había dolor, heridas que sanar y tiempo que trabajar, pero si tienes alguien a tu lado tomándote la mano, las cosas pueden ser más fáciles.

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Guang Yao, siguió trabajando en la empresa de su padre, cual se volvió una de las más importante, tardó un tiempo en lograr olvidarse de su amor por Jiang Cheng pero ellos nunca dejaron de ser amigos.

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15 años pasaron...

Wei Ying se quedó a lado de Lan Zhan el cual siguió siendo aquel actor y él su asistente, el tiempo pasó por su cuerpo, pero seguían siendo tan unidos y felices como la primera vez que estuvieron juntos.

Los dos caminaban tomados de la mano, mientras observaba todo.

Una pareja de chicos pasaban por ahí, uno de ellos se chocó con Wei Ying.

—Lo siento, —se disculpo uno de los chicos.

Wei Ying se detuvo y giró su cuerpo para ver el chico, quien sonreían felizmente, tomado del brazo de la persona que quizá fuera su persona amada.

—Así que has renacido, gracias por esta oportunidad, espero que seas muy feliz —musitó con una sonrisa

—¿Wei Ying? —pronunció Lan Zhan

—No es nada, vámonos.

Los dos siguieron caminado tomados de las manos, siendo felices, juntos, amandose para siempre.

FIN

Espero les haya gustado, gracias por acompañarme en esta historia, por su apoyo.

No olviden apoyar mis otros fics.

Gracias de nuevo.

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¡Nos vemos en otra historia!

Makishi Konue