12.- Cena Part. 1
Mientras Lan Zhan y Wei Ying estaba en el auto de camino a casa del mayor. Wei Ying se preguntaba así mismo, ¿por qué todas las personas tenían un mal concepto de Lan Zhan?, al final solo recibía comentarios de que él, era una persona sola que no se involucraba con los demás, que no era amable y que era frío, cuando Lan Zhan era todo lo contrario, si era estricto respeto a su vida diaria, pero era normal, si no lo fuera así, no tendría la fama que tenía, sin embargo lo poco a estado a su lado, había visto a ese hombre mirarle de maneras diferentes, de sonreírle levemente, de hablar, de enojarse con él, todas esas facetas lo hacían sentirse de manera cálida, de manera feliz, ahora tendría que pensar en sus sentimientos, decirle a Lan Zhan que le gustaba, pero estaba el miedo, si ese miedo de ser rechazado, de confundir la amabilidad con el amor, como había pasado con Jiang Cheng.
Mientras estaba hundido en sus pensamientos podía mirar aquel hermoso hombre que miraba a la ventana, su corazón latía fuertemente, ahora entraría en un lugar donde al parecer nadie entraba, se sentía nervioso y ansioso a la vez.
—Llegamos —dijo Lan Zhan mirándolo
—Oh, si llegamos —pronunció Wei Ying intentando controlar sus propias emociones
Los dos bajaron del auto y Wei Ying camino un poco antes que Lan Zhan, pero este se quedó quieto a ver aquella figura frente a la puerta, con lo que parecía unos pequeños pastelillos.
—¿Jiang Cheng? —preguntó Wei Ying
—¿Wei Ying? ─respondió
—¡¿Qué demonios haces aquí? —pronunciaron al mismo tiempo
Lan Zhan suspiro, sabia la razón porque estaba Jiang Cheng, pues conocía su relación con su hermano lo que le sorprendió y lo tenía en shock era que los dos sin darse cuenta los habían invitado aquella misma noche.
La puerta se abrió en aquel mismo instante.
—Jiang Cheng —pronunció Lan XiChen
—Entremos —indicó Lan Zhan entrando a la casa
—Si, si entren —dijo Lan XiChen quien también estaba algo confundido y sorprendido.
Dentro de aquella casa se produjo un extraño silencio, estaba los cuatros sentados en la misma mesa, Wei Ying y Jiang Cheng de un lado y frente a ellos Lan XiChen y Lan Zhan.
—Se que dijiste que no era necesario traer nada, pero me atreví a traer algunas cosas dulces —aunque no me gusten pronunció Jiang Cheng
─Oh trajiste cosas dulces, que lindo —se burló Wei Ying, el habiente se relajo
—Si animal, se te olvida que fui criado por Manda Yu y por ello se ser educado —dijo entre dientes Jiang Cheng pellizcando el brazo de Wei Ying
—Si, si Madan Yu —pronunció Wei Ying quitando la mano de Jiang Cheng —lamento yo no haber traído nada
—No te preocupes —respondió Lan XiChen con una cálida sonrisa —permite presentarme, soy Lan XiChen el hermano mayor de Lan Zhan
—Si, creo que lo note, ustedes se parecen mucho —sonrió Wei Ying —soy Wei Ying mucho gusto
—Mucho gusto Wei Ying —respondió el saludo con una sonrisa Lan XiChen
—Así que es tu hermano —pronunció Jiang Cheng —soy Jiang Cheng mucho gusto Lan Zhan —pronunció entono cortes
—Gracias —respondió Lan Zhan, dentro de él esto no era lo que esperaba para aquella noche, pero no tenía otra opción.
—¿Ustedes cómo se conocen? —preguntó Lan XiChen
Los chicos se quedaron un momento en silencio, se miraron como no sabiendo que decir. Aunque Lan Zhan sabía toda la historio, se limito a mirarlos en silencio.
—Somos amigos de la infancia —respondió Jiang Cheng
—Si, si lo conocí cuando se volvió mi vecino, este niño rico mimado por sus papis —volvió a bromear con Jiang Cheng
—Por desgracia se volvió mi vecino —dijo con una sonrisa mientras golpeaba la cabeza de Wei Ying
El habiente se sentía familiar, cálido y extraño a la vez, la primera vez que Lan Zhan y Jiang Cheng se conocieron, no fueron compatibles de ninguna manera, Lan Zhan siempre protegió a Wei Ying y Jiang Cheng lo culpo por todo, como una manera de aliviar su propia desgracia, su hermano a penas hablo alguna veces con el líder de aquella secta, pero en aquella vida siguiente se amaron de la manera en la que Lan Zhan amo a Wei Ying, ninguno de los 4 estuvo juntos de esa manera.
Mientras Lan Zhan estaba sumergido en sus pensamientos el sonido del estómago de Wei Ying hizo salir de estos.
—Ah... ja... creo que tengo hambre —pronunció Wei Ying nervioso
—Es verdad, te dije que vinieras cenar, que cenaríamos hamburguesas —dijo Lan Zhan
—¿Hamburguesas? —pregunto Lan XiChen —tu eres vegetariano hermano
—¡Es verdad! —dijo Wei Ying como si lo hubiera recordado de golpe
—Pero a ti te gustan y tú eres mi invitado —respondió Lan Zhan a Wei Ying quien se sonrojo y se puso nervioso
—Por mi está bien —hablo Jiang Cheng sintiendo aquel habiente incómodamente dulce para él
—Entonces hagamos hamburguesas —dijo Lan XiChen levantándose de la mesa
—¿Vas a cocinar? —preguntó Lan Zhan —tú no eres muy bueno en la cocina al final siempre lo hace A-Yuan
Jiang Cheng y Wei Ying se miraron el uno al otro, para después suspirar, aquellos pares de hermanos eran un desastre juntos, cuando Jiang Cheng y Wei Ying fueron a la universidad cada uno aprendió a hacer las cosas por sí mismo, aunque siempre cocinaban juntos.
—Ustedes quédense aquí, nosotros haremos la cena —pronunció Wei Ying
—Si, tomaremos prestado su cocina —indicó Jiang Cheng
—¿Seguros? —cuestionó Lan XiChen quien no se sentía bien haciendo que Jiang Cheng cocinara para ellos
—Estoy seguro, dime, ¿por dónde llegamos a la cocina? —pronunció Jiang Cheng con una mirada fríamente gentil
—Derecho y luego a la derecha —indicó Lan XiChen —gracias
Los chicos se fueron dejando a los mayores en la mesa.
—Esto si fue un desastre —Lan XiChen —no sabía que lo invitarías también
—Créeme que fue un impulso hermano, lo quería sacar de una situación en la que yo lo metí, entre más me quiero alejarme de él y tomar distancia, más termino involucrándome y arrastrándolo, no quiero ser odiado... —pronunció Lan Zhan
—Tu fuiste el que me dijo que no tuviera miedo, que fuera claro y ahora pareces ser tu quien no lo es, Lan Zhan tú y yo hemos vivido tanto y hemos sufrido miles de batallas, pero siempre fuimos unos tontos en respecto al amor, aunque creo que no tuvimos buen ejemplo con nuestros padres, Lan Zhan ya no tenemos nada más que perder —sonrió nostálgicamente
—Lo sé.
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¡Gracias por leer!
Makishi Konue
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