—Ngh~...Shouta...~

—Sácame esto, por favor.

Empieza a lloriquear la castaña, no le gustaba para nada de este castigo.

—No, te lo buscaste tú solita.

—P-pero...

—Shh, calla y sigue con tu castigo.

—P-pero este castigo no era lo que yo... (Pensaba)

—¿Pensaba? Ah si? ~ ¿que pensabas, pequeña? —pregunta levantando la mirada de entre todos los papeles, mirando al escritorio, viéndola acariciarse la mano con dolor.

El reloj figuraba que eran las 10am, habían pasado bastantes horas y ni siquiera se había percatado de que ya era sábado, en realidad Aizawa Shouta no se había percatado de eso.

Pero ahora si se había percatado del color sonrosado que empezaba a cubrir las mejillas,  por lo que por mas que quisiera sonreír ante lo bella que le parecía aparenta lo mejor posible la seriedad.

—Etto... Yo... Uhm... ¡Shouta! Deja de ponerme nerviosa, tu sabes bien lo que pensaba —admitió en un manojo de nervios mientras se miraba las manos mientras se la acariciaba.

Había estado más de siete horas corrigiendo algunos documentos con Aizawa, ese era el castigo del cual le correspondía por haberse saltado sus clases, por lo que le dolían un poco, era el cansancio de tomarse tan serio los castigos que su amado le imponía.

Aunque estando en el pasillo del instituto, parecía que hablaban de otra cosa, o tal vez el líbido sexual le había jugado una mala broma.

—Ah.

A veces ella lo odiaba por ser tan seco y frío con ella, por lo que cuando lo iba a ignorar y darse la vuelta siente como se levanta y lleva como si nada los papeles a la sala, ignorandola.

«Te odio Aizawa Shouta, no sabes tratar a una mujer.»pensó.

Volviendo su mirada a su "castigo" y con una mueca de disgusto volviendo a hacer sus quehaceres, pero al escucharlo entrar nuevamente en la habitación, traga saliva y era ahora ella quien lo ignoraba.

—¿Y ahora que te pasa, Brumary?

No le contestó y siguió escribiendo, pero siente como le arrebatan el lápiz,  lo mira con el ceño fruncido.

—¿Que?

—tks... No me ignores. —gruñe mientras se acerca a ella y luego la pega contra él,  deslizando su mano alrededor de su cintura.

—¿Qué haces? Tu mismo lo hiciste, ¿porque no hacerlo y-....?

Aizawa Shouta no la deja terminar por lo que la besa, arrebatándole todas las palabras de aquellos labios que tanto adoraba.

Si bien para Brumary este ataque la había puesto un caos de nervios, pero no negaría que lo estaba esperando, lo deseaba por lo que no tardó en corresponder pero, sin embargo, cuando las manos del pelinegro se fueron deslizando por el vientre hasta llegar a un seno y apretujarla un poco, un jadeo se le escapa en medio el beso creando una suave gemido.

—Ngh~...

Aquello tampoco había pasado desapercibido para EraserHead por lo que empieza a moldear con su dedo indice donde probablemente estaría la aureola del seno de su amada, ocasionando en ella una sensación calida y cosquillosa.

—¿Mmm? Ngh~

Hace mucho que no tenían estos tipos de encuentros, bueno, no tenía ni tuvo, solo eran sueños fantasiosos con que el fuese así con ella, pero de lo que se imaginaba, esto era mas delicioso que eso, era excitante.

Mas no previó que las hábiles manos de Aizawa deslizaran el cierre del vestido que se encontraba en su espalda para luego soltarsela frente a él, y observar su figura atentamente, pero al conectar miradas ambos, sus corazones se estrujaron y latieron con frenesí, poco a poco eran consumidos por el deseo.

Pero Brumary le dio vergüenza de que Aizawa notase algunas de las cicatrices que se hizo en el pasado por lo que, quizas no fue la mejor opción, pero entró en pánico, se había arrojado a la cama a ocultarse del hambriento hombre que estaba cerca. Pero fue lenta al cubrirse con la sábana por lo que se tensó y soltó un jadeo al sentirse aprisionada por un peso mayor que le rodeaba una calidez y bulto palpante justo golpeando una nalga.

—M-mejor... S-si lo dejamos para otro d-día...

Tartamudea nerviosa, pero al sentir la barba del pelinegro contra su cuello y luego un calido beso no pudo evitar gimotear ante la extraña y buena sensación que le había producido.

—Brum... No habrá proxima vez, te deseo demasiado, y se qué lo sabes... ¿qué es lo que no quieres que vea? —pregunta ientras empieza a dejar un manto de besos y roces de sus dientes por el cuello, hombro y espalda.

Logrando que cada toque, caricia y roce le empiecen a nublar el juicio, temblando bajo su arrinconamiento.

—yo... Ngh~... no quiero que te enojes...

Los besos se detuvieron pero las manos ásperas, varoniles fueron deslizándose por su espalda y cintura, ocasionando estremecimiento y piel de gallina cada paso que daba. Pero de un momento a otro un jadeo mas sorpresivo llegó de la castaña, ya que de sorpresa Aizawa la había dado la vuelta y su posición era muy al contacto de pieles.

—Seré crítico y serio, pero se esperarte cuando no me tientas. Si confías en mi, sabrás el momento exacto que esté enojado.

Las palabras habían sonado roncas, suaves pero mas que nada dulces para ella, por lo que desliza sus brazos por los omóplatos de Aizawa y lo abraza.

—Hace años atras... Tuve un mal desenlace, no quiero hablar aun de ello... Pero el daño quedó en mi, y ya no soy tan bonita como antes para ti, Shouta...

Admitió a medias, ocasionando que en los ojos de Aizawa por leves instantes se demostraran la sorpresa, pero al verla bajar la cabeza, la toma del mentón y roza sus labios en un corto beso.

—Siempre serás la mujer mas bella ante mis ojos, con o sin imperfecciones, eso nunca lo olvides, cariño... —dijo en un tono íntimo pero serio.

Lágrimas sin querer fueron deslizándose por las mejillas de la castaña, aquellas palabras la atesoraría por siempre, no era cierto que lo odiaba, lo amaba y no podía escapar de esa verdad.

Por lo que con cierta timidez toma la mano de su contrario y le permite acariciar en el punto del daño ya cicatrizado, una vez que se deshizo de la primera prenda femenina que ocultaba sus senos ante los demás ojos. Siendo así como dejaba a la vista una salpicadura notable a un costado del seno derecho, se notaba que parecía haber sido de ácido corrosivo,  con la confianza que ella había confiado en él, desliza su mano a acariciarlo suavemente haciendo que su contraria cerrase sus ojos, tal vez de martirio o vergüenza, por lo que una vez que se lo acarició sutilmente dejó un beso sobre la herida para luego tomar entre sus labios el seno y pezón,  chupandolo y besando, como acariciandolo con su lengua resbaladiza haciendo que justamente una descarga electrica de deseo se viera mandada directamente a la entrepierna de Brumary, soltando un gemido de placer y dulzura, era tímido pero demostraba que aquello había sido sorpresivo como gustoso para ella.

Por lo que Aizawa no perdió tiempo para ir deslizando sus manos por el vientre y quedar entre aquella zona que emitía perfectamente el aroma a cerezas, empezando a acariciar las piernas sin tomar directamente esa zona, absteniéndose a su propio deseo. Aquello empezaba a inquietar a la chica quien cada vez su respiracion se encontraba mas acelerada, pero entre uno de los movimientos de ambos, ella había deslizado y cerrado con sus piernas el lugar de su femenidad, pero rozando el miembro retenido de Aizawa ocasionando que esa acción lo hiciera gruñir de satisfacción y cerrar los ojos.

—No sigas... Que no me contendré mas... Cherry.

Aquella frase había hecho que el rostro de la joven se enrojeciera y asintiera nerviosa, quedandose quieta pero le intrigaba saber que tan cerca estaban de sentir esa sensacion que tanto leía en libros ecchi, por lo que solo se dejó llevar ante de nuevo las caricias del pelinegro que ahora se dirigían a esa zona, pero los dedos habiles de su contrario se deslizaban desde la parte baja de su vulva hasta el clítoris, haciendola removerse temblorosa, cada vez se sentía mas humeda en esa zona pero cuando sentía que algo se acercaba aprisionaba su interior, Aizawa paró su cometido.

—P-pero que...?

Preguntó inquieta al verlo sonreír lascivo al ocasionar esa reacción en ella, sus labios humedos y sus ojos dilatados por el deseo que le ocasionaba le llenaban de orgullo. Pero el también quería su ayuda.

—Te toca preciosa... Te necesito.

Aquello la descolocó nerviosamente pero se acercó timidamente, sentándose y ayudándole a desvestirlo con la cara totalmente ruborizada, este era el momento mas vergonzoso de su vida. Pero cuando sus manos guiadas por Aizawa tocaron aquel miembro que estaba retenido, sintió algo que de verdad le encantó, lo sintió temblar ante su caricia, por lo que animó a deslizar la prenda que lo contenía haciendo que este golpease su rostro.

—Shouta... No se si sea buena en esto... Yo... Esta es mi primera vez..

Admite logrando que Aizawa abriera los ojos ante esa confesión, cada día la amaba más, se sentía tranquilo ser él quien la despojarse de ese momento especial y fuese suya de principio a fin.

—Siempre estaré para guiarte, no temas, solo dejate llevar... Todo lo que venga de ti me encantará, Brumary —admitió roncamente.

Aquello fue sin duda la mejor forma de apoyo para ella por lo que se animó a seguir, colocando sus manos entre el miembro y deslizando sutilmente su lengua para luego depositar un beso en la punta, haciendo estremecer por completo a Aizawa.

«Oh, yeah, leer mucho ecchi, todo este tiempo valió la pena»se felicitó a si misma.

Sin más poco a poco fue elevando el recorrido y velocidad con el que dejaba el placer que carcomiese a su contrario hasta que sintió como su contrario la aparta de ella y la coloca contra la cama desesperado, besándola hambriento.

—No sabes como me enloqueces, realmente te quiero.

Aquellas palabras tocaron hondo pero apenas sintió frío ante la separación de ambos, ya que Aizawa buscó entre sus cajones algo, y sacó un condón, colocandoselo rápidamente.

—Hoy serás mía, Brumary.

La voz ronca de Aizawa la hizo jadear y temblar pero al ver que realmente el miembro desde esta perspectiva se sentía pequeña.

—Sé suave, por favor...

Aizawa se recoloca entre sus piernas, desliza la pantaletas por sus piernas, dejandola absolutamente desnuda, una bella imagen para sus ojos. Por lo que antes de ser brusco en la primera parte, acaricia directamente con sus dedos su vulva, para luego deslizar un dedo y acaricia como si fuera un gancho la pared superior hacia él, estimulando el punto g, quería dilatarla bien para él  y disminuir lo máximo el dolor próximo. Por lo que en alrededor 55 minutos sintió como el interior humedo de su amada le aprisionaba el dedo, y cuando la escuchó gemir fuertemente supo que había llegado a su primer orgasmo, por lo que no desaprovechó el momento empezó a rozar su miembro con la entrada de la vulva humeda, sintiendo aun las contracciones de la castaña y sin mas ingresó de una en ella haciendo que estaba abra los ojos y grite de sorpresa y ardor.

No tardo en notar la sangre, muestra de que en verdad era virgen, por lo que solo se quedó a esperar que ella se acostumbrara a tenerlo dentro. Dejando infinidades de caricias en el clitoris, sintiendo otra vez como culminaba pero esta vez removiendose para él.

Logrando que así comience una larga hora de su primer momento y único juntos en una burbuja de sentimientos a flor de piel, y roces que los estremecieran por completo, finalizando asi un sábado haciendo el amor incondicionalmente, dejándose amar, ambos estaban empezando a aceptarse, mas solo este era el comienzo de toda una aventura.

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Hola! Espero esten bien y que les haya gustado este capítulo, ¿que les pareció?
¿que parte les gustó mas?
7w7 fueron malpensado@s desde el principio, no me lo nieguen xD

¡Nos leemos pronto! Salud y mucha lokura! Los quiero, y gracias por leer como siempre.