*Continuación del #56 Cat Valentine*

–Eso me gustó mucho– Confiesa Jade

Tras un par de días conseguiste escribir una canción dedicada a su hermoso cuerpo, halagando sus curvas, sus labios, sus ojos, su trasero.. La chica estaba halagada y fue el detonante para tener sexo sobre el piano de tu casa. Al terminar se acurrucaron en el sofá bajo una sábana grande

–Estuve pensando en algo...– Comienza la chica –Si cumples una tarea por mi, te daré lo que tú quieras

Abres los ojos con interés –¿Qué debo hacer?

–Darle a Tori, Trina y Cat un calzón chino y tomarles una foto

–¿Todas a la vez o una por una?– Preguntas acariciando distraídamente su pecho

Ella lo piensa –Sorpréndeme

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Tu primer objetivo en tu misión fue la tierna pelirroja, la atrajiste con engaños al cuarto donde se guardaban escobas y demás cosas del conserje

–Cat, ¿Te gustaría hacer una apuesta conmigo?– Preguntas con una sonrisa

Ella jugaba con un mechón de su cabello –¿Qué clase de apuesta?

–Es simple, tengo 7 palitos en mi mano, todos largos excepto uno. Si tú sacas el palito corto ganas un punto y ahora será mi turno de sacar uno de tu mano, el primero en llegar a tres puntos gana

–¿Y qué ganaré?

Sonríes más ampliamente –¿Te suena esa botana británica llamada "Bibble"?

Conocías bastante bien la adicción de la pelirroja hacia esos dulces, misma adicción a veces la hacía comportarse de forma errática y loca, más de lo normal, quiero decir

–¡¿Tú tienes Bibble?! ¡Quiero Bibble! ¡¿Dónde está el Bibble?!

Pones las manos sobre sus hombros –Cat, respira.. Así, tranquila. El Bibble está en un lugar seguro y será tuyo si ganas– La sonrisa vuelve –¿Quieres saber qué pasa si gano?– Cat asiente –Deberás ayudarme a recrear una serie de fotografías

–¿Qué clase de fotografías?

Sacas tu teléfono –Estás– Y se las enseñas

La chica se sonroja e inmediatamente recuerda la venganza que ejecutaste junto a Jade, tú decides ceder un poco y guardas otra vez tu celular

–Seré amable y solo recrearemos una foto, solo si gano obviamente

Ella baja la mirada –No lo sé.. El calzón chino es algo muy doloroso

–Bibble..– Le susurras al oído

–OK lo haré

Era imposible que perdieras, los palitos en tu mano eran todos largos así que ella nunca podría sacar el corto. Cat se decepciona al sacar uno largo y ahora fue tu turno de sacar un palito, sin que se de cuenta quitas uno largo del montón y añades el corto, el cual no perdiste de vista mientras ella los revolvía

–Escojo este– Dices al sacar el corto

Ella gruñe –Diablos...

–Hey, aún no gano

Eso le devuelve los ánimos –Es cierto, prepárate porque no sacarás uno corto nunca más

Te los da y vuelves a hacer el cambio, desapareciendo el corto y cambiándolo por uno largo

–¡Rayos!– Grita al sacar uno largo –¿Cómo haces para sacar el corto?

–No lo sé, suerte

Si bien la chica no aparentaba ser lista la mayor parte del tiempo, sabías que era cuestión de tiempo para que pueda notar la estafa, así que los siguientes turnos los perdiste y le permitiste ganar un punto. Por desgracia para ella el resultado era el mismo

–¡NO!– Grita completamente frustrada

–Es momento de pagar rojita– Le susurras con burla

Ella gruñe –Bien, hagámoslo. ¿Qué foto debo recrear?

Habías planeado ya qué calzón chino recibiría cada chica y el de Cat era uno al hombro. Le enseñas la foto y le pides que se baje un poco los pantalones, lo suficiente para exponer la pretina de sus bragas tanto por detrás como por delante y los costados

–Las voy a estirar un poco para que sea más fácil ¿De acuerdo?

Su mirada era frustrada y arrepentida, no respondió pero igual lo hiciste. Sujetaste la parte trasera al mismo tiempo que la frontal y tiraste, eras una persona fuerte así que la pudiste levantar con facilidad

–¿Estás bien? Esa no es una buena cara

Cat traga saliva –Me-Me duele...

–Lo sé rojita pero cuando menos te lo esperes habrá terminado

Comienzas a rebotarla unas cuantas veces hasta que sus tiernas bragas azules con nubecitas estuvieron lo suficientemente estiradas. Sujetas con fuerza un costado y estiras hacia arriba, pasando el brazo de la pelirroja por el agujero de la pierna, llegando en poco tiempo al lugar objetivo

–Ahora va el otro lado

Ella solo asiente con la mirada baja y en poco tiempo tuvo los costados de sus bragas en los hombros y una expresión incómoda

–Ahora solo haz una pose y sonríe

A su pesar lo hizo, posando y sonriendo aunque el enrojecimiento de su cara denotaba el dolor y la vergüenza por el que pasaba

–No te desanimes Cat, te daré el Bibble de todas formas

Ella eleva la mirada hacia ti sin poder creerlo, salta y se cuelga de ti –¡Gracias! ¡Gracias! ¡Amo el BIBBLE!

Ríes –Se te nota

Y aprovechando que aún tenía las bragas en los hombros, la levantas así

–Fue un placer apostar contigo Cat

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Tenías ya una trampa planeada para alguna de las hermanas Vega, la más propensa a venir a tu casa y caer en ella era la propia Trina pues en algunas ocasiones había intentado besarte y algunas cosas más

–Excelente Trina, te espero aquí– Decías por teléfono –Estoy preparando algo romántico solo para nosotros dos

Se le escuchaba su voz emocionada desde la otra línea –¡Genial! Ahora mismo me prepararé

–Perfecto. Recuerda, no le digas a Tori, sabes que es algo celosa y además entrometida

–Y no queremos que arruine nuestro momento romántico– Termina la frase por ti

–Exacto. Te espero aquí

La chica tardó 15 minutos en llegar, denotando prisa pues tu casa estaba algo retirada de la ciudad y aún más de donde se ubica la casa de Trina. Trina era una linda chica de piel entre morena y clara, castaña y de ojos color marrón oscuro, copa C y un trasero redondo

Ella llega a tu hogar vistiendo unos jeans azules, una blusa sin mangas roja y unas botas cafés, secretamente te preguntaste qué tipo de ropa interior usaría esa chica; seguramente tangas o algo de ese estilo

–Me alegra que hayas venido Trina, sígueme y en un momento iniciará nuestra cita ¿De acuerdo?

Trina asiente y te extiende la mano para que la beses –Andando

La llevas en dirección hacia tu piano y la dejas esperando en el sofá mientras traías unas botanas para pasar el rato, seguías evaluando tu trampa y la mejor forma de ejecutarla. Era difícil la convivencia con Trina más que nada por su gran ego, pero la idea de causarle un calzón chino era un estimulante muy poderoso

–¿Qué te parece si te toco algo con el piano?

Ella sonríe –¡Sería asombroso! Tú tocas y yo canto

–Tus grandes ideas nunca dejan de sorprenderme Trina. Andando

La cargas por la cintura para sentarla sobre tu piano con la excusa de que así parecerían personajes de alguna película musical. Sin que se diera cuenta ataste su tobillo a una cuerda que tiraría de su pierna y comenzaste a tocar

En exactamente dos minutos presionas un botón que hace que una polea jale de la cuerda del tobillo de Trina, su trasero se despide del piano y ella habría caído de no ser porque la sujetaste de la pretina de sus bragas moradas

–¡AAAAAGH! ¡¿Qué es esto?! ¡¿Porqué me haces esto?!

Ríes –Nada personal Trina, solo cumplo con una misión

Tiras de las bragas más fuerte y consigues algo que nunca habías hecho, prácticamente forraste todo el piano con la tela morada y aún así ella seguía colgando un poco

–¡Ja! Estas bragas son sorprendentemente elásticas, perfectas para esto aunque no pensé que fueras del tipo de chica que usa bragas de abuela

Ella gruñe –¡¿Y qué querías que hiciera?! ¡Es día de lavandería!

Conseguiste atascar bien las bragas y sabiendo que no podía liberarse fuiste a tomar la foto

–¡Espera! ¡No tomes ninguna foto!

Y en la imagen se vio capturada su expresión de dolor además de su cara completamente roja. Decides dejarla ahí hasta que sus bragas se rompan y ella pueda irse, cosa que hizo pues en cuanto su trasero topó con el suelo ella desató su pie y se fue a casa, completamente enojada y avergonzada

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Para Tori Vega tenías planeado algo interesante, ella no era tu favorita ya que en ocasiones podía ser entrometida y egoísta, pero aún así la veías como una amiga a la cual ayudar y sobre todo, hacerle calzón chino. Ella era una chica similar a Trina, cabello castaño oscuro y ojos cafés, copa B y un trasero redondito

Gracias a la venganza que le hicieron a Cat, tenías un par de artículos que nunca pudieron usar con la pelirroja, entonces le tocaría a Tori llevarse el honor de estrenar esa máquina

Era una mesa de madera con una polea en un extremo y unos cepos pequeños que sujetarían las extremidades de la persona. Ya con máscara para ocultar tu identidad y la máquina donde debe, te acercas a Tori por la espalda para aplicarle la llave del sueño, tras esto la cargas y la llevas al auditorio de Hollywood Arts

Ella abre los ojos lentamente –¿Mh?... ¡¿Qué pasó?! ¡¿Dónde estoy?! ¡Ayudagh...!

No terminó porque le metiste algo en la boca

–Así está mejor. Tranquila Tori, no morirás ni nada por el estilo, solo quiero divertirme– Dices fingiendo otra voz

La castaña estaba bocabajo sobre esa mesa, sus jeans y su blusa se habían ido y sus extremidades estaban sujetas a los cepos de la mesa

Le das una nalgada –Luego de esto podrás irte y continuar con tu vida normal, así que no deberías temer. Para saciar tu curiosidad te diré que haré contigo.. Te voy a hacer calzón chino al enganchar tus bragas a este gancho de aquí, luego iré girando esta palanca la cual girará la polea y estirará tus bragas más de la cuenta– Ríes –Me alegra que estés usando unas bragas de abuelita o si no se romperían antes de lo planeado

Ella se retuerce pero no puede decir nada gracias a su mordaza, tomas el gancho y lo sujetas a sus bragas amarillas y tras darle una nalgada comienzas a girar la palanca. Esta estira lenta pero firmemente sus bragas, haciendo que se le metan entre las nalgas al instante

–¡MhMhMh!– Se queja cuando sus bragas llegan a sus omóplatos

Le das otra nalgada y esta vez acaricias su trasero –No sé tú pero yo me la estoy pasando genial

Sigues girando y las bragas llegan a su nuca, ella habría querido mover el trasero hacia arriba y aminorar un poco el calzón chino pero el par de cepos que sujetaban sus piernas no la dejarían moverse. Giras otra vez la palanca y las bragas ahora están en su cabeza, otro giro las hace superar esta altura y es el giro siguiente el que le saca unas lágrimas

Giras unas cuantas veces y las bragas llegaron a dimensiones que no esperabas, su dolor sin duda se comparaba con el que paso su hermana en tu hogar. Al oír un leve desgarre decides dejar de girar, en cambio tomas una vara de madera y se la enseñas

–Así es, la usaré para golpear tu trasero

Ella trata de retorcerse pero el calzón chino no la deja mucho. Caminas hacia atrás y tras tomarle una foto usas la vara para picarle el trasero, ella da un saltito que te hace reír y al siguiente suelta chillidos silenciados con cada golpe al trasero, golpes que dejaban líneas rojizas que atravesaban ambas nalgas

Fueron veinte golpes al trasero, mismos que lo dejaron rojo y a la chica en completo llanto, esta vez decides hacer un video para capturar la expresión de su rostro, lo lejos que llegó el calzón chino y lo rojas que quedaron las nalgas. Por desgracia para ella tú habías perdido la noción del tiempo, el plan era castigarla durante un ratito y luego sacarla al igual que a tu máquina de tortura, todo antes de la obra de esa noche

Escuchas como todos van llegando, los actores ya están disfrazados y el público en su lugar, el telón se abrirá en cualquier momento y tú sales corriendo tras una leve disculpa. Al abrirse el telón solo ven el castigo de Tori, el público y los actores inmediatamente comienzan a reír y son los maestros y los amigos cercanos a Tori los que la sacan de su tortura de calzón chino

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–¿Lo hiciste? Hoy no fui a esa obra pero dicen que hubo un gran alboroto– Cuenta Jade cuando llegan a tu casa

Sonríes –Pues si, hice todo lo que pediste– Le extiendes una Memoria USB

La chica ruda sonríe y va hacia la laptop en el escritorio, introduce a Memoria y ve los archivos con tu misión

–¿Cómo hiciste que Cat posara estando así?

Ríes un poco –Bibble, apostamos y perdió, tuvo que seguir mis órdenes

–Eres un genio malvado. Veamos a Trina.... ¡WoW! Eso se ve doloroso, nunca creí que pudieras forrar el piano con unas bragas, menos cuando alguien las estuviera usando

–Todo es gracias a las bragas de abuelita y al día de lavandería. Ve el siguiente para que veas a Tori

Ella ve el archivo con una sonrisa burlona, ahora entendía el alboroto en la obra. Sin más ella te abraza y besa

–¿Qué es lo que me pedirás?– Pregunta al mover las cejas de forma coqueta

Ríes y acaricias su trasero –En realidad, no busco tener sexo ahora, eso vendrá después. Lo que quiero que hagas por mi es tener una cena romántica en mi casa, usarás un vestido que te compré y te daré unas instrucciones antes de la cena

Ella asiente –A la orden entonces, me iré a bañar. Tendré que usar estas mismas bragas ya que no traje más, las que tenía aquí las has roto todas

–Ok– "Solo espero que esas bragas no estén sudadas, mi amor" Piensas con una sonrisa

Pasa un rato y esperabas a Jade en el comedor, la comida estaba lista y el ambiente también. Ella sale de tu recamara usando un lindo vestido rojo que tenía la espalda descubierta

–Te ves genial

Ella sonríe –Gracias

–Bien, estas serán mis instrucciones– Comienzas con emoción oculta –Quiero que te des la vuelta porque te haré calzón chino, te dejarás el atómico el resto de la cena y además vas a posar para una foto

–No entiendo cómo no lo vi venir...

Se miran por un momento hasta que ella solo suspira y se da la vuelta, tomas el vestido por la zona descubierta de la espalda y tiras hacia afuera para exponer sus bragas verdes. Sujetas la pretina y tiras con suavidad, lo suficiente como para exponer los agujeros de las piernas

–Ponte de rodillas, por favor

Jade solo obedece y se pone sobre sus rodillas, aún dándote la espalda. Tiras más fuerte y consigues levantarla poco a poco, no es que no pudieras levantarla, como dije, eres fuerte, pero esa calma al levantarla y oír sus leves resoplidos de dolor, era simplemente perfecto

La rebotas un momento para que las bragas estuviesen más estiradas, y con la misma inercia le pones el atómico

–¿Ya me puedo levantar?– Pregunta

Sonríes aún más –Te ayudo

Sujetas el fragmento de tela que pasa entre sus nalgas y la levantas cargándola de ahí

–¡AGH!– Finalmente gritó

–Bien, ahora sonríe un poco para la foto– Dices preparando la cámara

Jade se negó a sonreír, pero al menos posó, se puso de lado y giró la cara hacia la cámara. En la foto se podía ver su rostro enrojecido y cómo sus bragas salían por la parte trasera del vestido, ella solo estaba ahí, aguantándose y con los brazos cruzados, era perfecto

*Espero que les haya gustado este Capítulo. Este es el final de esta miniserie con las chicas de Victorious y decidí poner a las hermanas Vega juntas ya que no se me ocurrió algo largo para cada una en un Capítulo individual, sin embargo me gustó el resultado. Finalmente aquí les dejaré un par de dibujos que hice de Jade y Trina en sus calzones chinos. Gracias por leer*