*Hace 10 Años*

–Hola amigo– Saludaste a tu mejor amigo llamado Erick

Erick era un chico delgado y de piel clara, cabello negro y ojos castaños

–Oh, hola ¿Cómo estas?

Comienzan una conversación normal camino a la clase de historia, por desgracia se cruzaron en el camino de Silvia Sánchez, su novio John y su hermano Raúl. Ellos tres eran chicos populares a diferencia de ti y tu amigo, que eran unos nerds...

Silvia era una hermosa chica de piel entre blanca y morena, cabello negro, copa C y un trasero regordete

Este trío los lleva a la fuerza al baño y al ver lo que ocurre los pocos chicos del lugar escapan. Raúl sujeta a Erick con una llave de lucha mientras John te deja en la perfecta posición para que Silvia ataque tu ropa interior....

–¡Agh!– Gritas en cuanto Silvia tira de tus bóxers

–¡Vamos chicos! ¡Lamento haber hecho mal su tarea! ¡Ow!... ¡No volverá a pasar!

–Oh, créeme que no volverá a pasar... Y este castigo te hará no cometer ese error..

Y ese día a ti y a tu amigo les arrancaron la ropa interior, además de que metieron sus cabezas en el inodoro...

*El día de hoy*

–¿En serio crees que es buena idea ir a esta reunión de ex-alumnos?– Le preguntas a Erick, que ahora se convirtió en tu roomie

–¡Claro que si! Raúl y John ya ni viven en la ciudad... Significa que nos podremos divertir con viejos amigos

Él tenía un buen punto, esos dos chicos se habían mudado hace un par de años y no asistirán a la reunión

Llegaron a la reunión en su antigua escuela, topándose desde el inicio con una antigua compañera la cual fue tu amor platónico, Samantha. Ella era una chica de piel morena, cabello negro y ojos marrones, copa A y un trasero no muy grande en aquel entonces, pero para el día de la reunión había cambiado, copa D y un trasero mas grandecito

Samantha era una chica nerd como tú, y también fue victima de Silvia

–¡Sammy!– La saludas con ánimos

Ella sonríe –¡Hola!– Y te da un abrazo –Han pasado muchos años ¿Verdad?

–¡Si! ¿Qué fue de ti?

–Nada interesante, solo comencé la carrera de medicina hace unos años y estoy haciendo unas prácticas antes de graduarme. ¿Qué tal tú?

Sonríes –Erick y yo nos hicimos roomies, nos queda cerca de la universidad y ya estamos por graduarnos. Oye te ves hermosa

Sam se sonroja un poco –Jeje, gracias, tú también has cambiado mucho para bien ¿Eh? Dejaste atrás el acné y varios kilos de más– Bromeó

Ríes –¿Qué me dices tú? Antes no sabíamos si estabas de frente o de espaldas de tan poco pecho que tenías– Contraatacaste en tono de broma

–¡JA! No, mis niñas y yo crecimos con el tiempo– Y te da un amistoso golpe en el hombro

Finalmente Erick regresó del baño y los tres se sentaron juntos en una mesa, el maestro de  ceremonias dio un discurso y en un proyector pusieron fotos de su generación. Las que destacaban mas para ti eran cuando ganaste la feria de ciencias o cuando Sam salió en una obra, aunque claro, para el resto de tus antiguos compañeros lo único que importaba eran las fotos de campeonatos de los equipos deportivos o cuando hicieron un concurso de belleza en la escuela, el cual Silvia ganó

Silvia no había cambiado mucho con los años, solo se veía un poco mas rellenita pero seguía siendo hermosa, esta misma se encargó de dar un discurso

–No me trae muchos recuerdos lindos pensar en Silvia– Comentó Sam

Ríes –Dímelo a mi, una vez me metió en el vestidor de chicas a la fuerza con ayuda de Raúl y John

–Pero por lo menos no llegaste a terminar en un hospital por un horrible calzón chino, o tampoco te robaron la ropa y te empujaron fuera del vestidor

–Recuerdo eso– Comentó Erick–El mejor día de toda tu vida ¿Verdad hermano?

Le das un golpe en el hombro –Cállate...

Sam ríe –No te preocupes, ha pasado mucho y ya no me avergüenza

–Pues las secuelas de ella y sus tontos amigos aún me incomodan– Admitió tu amigo –Si no tuviese tanto control sobre mi, me vengaría ahora que no están los otros idiotas

Sam sonríe imaginando eso–Eso sería genial, habría justicia luego de todo ese tormento

Los tres se miraron un minuto

–Sería tonto ¿No creen? Han pasado muchos años?

Tu amigo ríe –¿Y porqué nos sigues si no te quieres vengar?

–Curiosidad– Respondes –Además puedo decidirme por actuar en el último minuto

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Ya tenían el plan hecho, lo primero era esperar a que Silvia fuese al baño, esperaron fuera del cubículo y cerraron la puerta principal con el seguro para que nadie entre

–Cielos, esa fue mucha agua– Comentó Silvia saliendo de su cubículo

–Hola Silvia– Saludó Samantha

Silvia puso una cara confundida –No puede ser ¿Eres tú Samantha? ¡Dios! Han pasado muchos años ¿Cómo estas?

–Mejor que la última vez que te vi– Bromeó

Silvia borró su sonrisa –¿El día antes de la graduación? Oye perdón...

Ese día Sam tenía comprado un vestido y otras cosas para ir al baile, pero un día antes Silvia le dio un calzón chino que la dejó en urgencias, ya que su trasero incluso comenzó a sangrar

–Bueno.. Un simple "Perdóname" no alivia eso... Una cosa es darme un calzón chino tres veces a la semana, pero ese día te excediste ¿Sabes? Cuando a alguien le sangra el ano por un calzón chino es porque te pasaste de la raya

La antigua bully suspiró –Lo sé... Me sentí horrible por eso

–Bueno, a ti no te sangró el ano así que dudo que te hayas sentido peor que yo, además recuerdo que te reías incluso cuando me sacaron cargando porque no podía caminar

Erick abrió los ojos sorprendido –Creí que no tenía rencor

–Dijo que no tenía vergüenza, no dijo nada del rencor. Mejor hagamos silencio hasta que nos llame

Silvia recibió unas palabras de Sam, unas donde la mujer le describió todo el dolor que sintió gracias a ella, su novio y su cuñado

–Pero basta de hacer que te imagines todo, es hora de hacerte sentirlo

Fue la señal y salieron de un cubículo

–¿Y ustedes quienes son?– Preguntó Silvia –¿Erick? Y tú eres...– Dijo tu nombre sorprendida –Oigan, ya no estamos en la secundaria, somos adultos, no me van a hacer calzón chino ¿Verdad?

–Algunas veces, la justicia es lenta, pero puedes estar segura de que llegará, Silvia– Dijo tu amigo con una voz atemorizante

Entre los tres sujetaron a Silvia, ella nunca destaco por ser fuerte físicamente, así que no fue ningún problema. Tu antiguo amor y tu roomie la sujetaron de los brazos y la obligaron a inclinarse

–¿Haces los honores?

Sonríes emocionado –Con mucho gusto

Sujetaste sus bragas de abuela color morado y tiras lo mas alto que puedes, tan fuerte que incluso sus piernas dejaron el suelo un segundo

–¡Ay! ¡Vamos, paren! ¡Soy una mujer adulta ahora! ¡Ustedes no pueden hacerme esto!

Sam ríe –Como tal, nadie puede o debe hacerle calzón chino a alguien, tú tampoco debías y sin embargo lo hiciste.. Así que ¿Porqué no hacerlo nosotros?

Sujetaste las bragas con mas firmeza. Tú nunca habías dado un calzón chino, tampoco imaginabas que el primero se lo darías a una mujer, ni mucho menos que esa mujer sería la misma que te atormentó en la secundaria; aún mas increíble era que esta estaría lloriqueando

Sam y Erick sueltan sus brazos y juntos sujetan las bragas de Silvia contigo. Juntos la levantan unos segundos en el aire y luego comienzan a rebotarla hasta que escuchan un desgarre

Finalmente le colocan un atómico y con la misma adrenalina le meten la cabeza en el inodoro

–Deberías agradecernos, el plan A era colgarte delante de todos nuestros viejos compañeros, pero te salvaste porque el maestro de ceremonias no nos dejó usar el reflector– Dijo Sam

*Espero que les haya gustado este Capítulo. Es algo corto pero me gustó el resultado, además esta idea lleva un tiempo en mis notas y quería usarla si o si. Gracias por leer*