El apodo de Deku

Midoriya no podía llegar a creer que de verdad fuera a contar a esa chica sobre su pasado, esa parte suya que tanto le costaba asimilar y recordar. Pero ya había llegado a este punto y era difícil dar marcha atrás.

Izuku: Deku es un apodo, un apodo que tenía desde pequeño.

Ochako le miró extrañada.

Ochako: ¿Un apodo? ¿Por qué ese apodo?

Izuku: Bueno, una forma de leer mi nombre Izuku es también Deku, y para la persona que lo pensó le parecía gracioso que mi nombre se pudiera leer de manera que sonara a la palabra inútil. Para él era una razón más para insultarme y meterse conmigo.

La chica de pelo castaño se quedó callada escuchando y mirando a Izuku apenada.

Ochako: ¿Acaso... acaso se metían contigo?

Izuku se tomó unos segundos para respirar lentamente. Los recuerdos de sus compañeros de clase y de Bakugou metiéndose con él le bombardeaban la cabeza y no quería alterarse por eso, no al menos delante de otra persona.

Izuku: Sí, no pude hacer amigos a causa de eso. Los días de escuela no fueron fáciles para mí porque siempre tenía a Kacchan insultándome, y eso que yo siempre lo admiré por su singularidad y su personalidad ambiciosa...

La expresión facial de la chica pasó de empatía a sorpresa en el momento que escuchó a Midoriya mencionar a Bakugou.

Ochako: U-un momento... Kacchan es Bakugou, ¿cierto? ¿Era Bakugou uno de los que se metía contigo cuando ibais al colegio?

Los ojos del de pelo alborotado s encontraban mirando al vacío durante su explicación, pero en el momento en el que escuchó la pregunta de Uraraka su mirada se movió hasta la cara de su oyente y contestó:

Izuku: Kacchan no era tan solo uno de los que se metía conmigo, él fue el causante de todo. Fue él quién empezó con el apodo de Deku y fue él el mayor causante de los insultos y burlas que sufrí.

Ochako no sabía qué responder. Sabía que la personalidad de Bakugou no era precisamente agradable, pero en ningún momento se habría esperado haber escuchado eso sobre él.

Una leve sonrisa salió de las mejillas de Midoriya justo antes de decir:

Izuku: Supongo que te sorprende escuchar algo así de alguien que aspira a convertirse en el héroe número uno.

Ochako: P-Pero debe de haber cambiado algo, ¿no? Quiero decir, tal vez durante el tiempo que has sido villano y él haya desconocido de tu vida puede que haya estado arrepentido de tratarte así...

Esta vez lo que salió de la boca de Midoriya fue una leve carcajada ante lo que dijo la chica en frente suya.

Izuku: A juzgar por su reacción al verme dudo mucho que haya estado especialmente arrepentido de sus actos.

La sonrisa del peloverde desapareció.

Izuku: Pero bueno, el caso es que una vez me convertí en villano decidí que el nombre de Deku podía ser un buen nombre. Así al escuchar mi propio nombre podía recordar las burlas de mi compañeros y podía recordar una de las razones por las que me convertí en villano. Una forma de animarme a conseguir venganza, por decirlo de alguna forma.

Unos segundos silenciosos transcurrieron en los que Midoriya trataba de pensar en qué decir para acabar su explicación.

Izuku: Y bueno, supongo que eso es todo.

En cuanto dejó de hablar, el chico pudo ver con sus ojos verde esmeralda como sin previo aviso los ojos castaños de la chica comenzaban a llenarse de lágrimas. Izuku, alarmado ante esa situación la preguntó:

Izuku: ¿Po-Por qué lloras?

Ochako: Lo siento... Supongo que esa historia me ha puesto triste y me he dejado llevar por mis emociones... lo siento...

Al ver la figura de la estudiante en frente suya llorando de alguna forma se vio a él mismo llorando y sintió la necesidad imperiosa de reconfortar a Uraraka, como a él le hubiera gustado que hubieran hecho consigo mismo.

Antes de que se pudiera arrepentir de su acción, Izuku alargó su brazo para intentar reconfortar de alguna forma a la joven de mechones de cabello largos. Sin embargo para su sorpresa, rápidamente Ochako se limpió las lágrimas y volvió a mirar a Izuku con una sonrisa. Ante esto, Midoriya rápidamente escondió su mano con la que estuvo a punto de tocar a la joven preguntándose qué demonios le estaba pasando mientras escuchaba la voz de la castaña hablándole.

Ochako: De todas formas Deku no me parece tan mal apodo. Deku me suena a: "puedes hacerlo" y me parece algo motivacional, creo que te llamaré así. De todas formas te lo debo por no haberme hecho caso cuando te dije que me llamaras Uraraka, así que haré eso.

Aquella sonrisa, aquel aura de determinación y positividad, todas eran cosas a las que el pecoso había empezado a odiar por sentir que se las habían arrebatado de su vida, pero ahora verlo en esa chica no le producía odio. Su corazón comenzaba a latir más fuerte y el estómago comenzaba a revolverse otra vez. ¿Qué le estaba ocurriendo? Tenía que salir de esa situación como fuera.

Izuku: Ha-haz lo que quieras, pero no le cuentes a nadie lo que hemos hablado durante este rato, ¿de acuerdo?

Ochako: Está bien, ¿pero por qué...?

Izuku: La verdad es que no me encuentro bien, así que me voy a ir a mi habitación. Gra-Gracias por ayudarme explicándome los conceptos y teoría de clases, a pesar de que no se te dé bien explicar.

Aunque disimulaba bien sus emociones, se podía notar en la forma de hablar que Midoriya tenía bastante titubeo y nervios, cosa que extrañó a Ochako.

Ochako: V-Vale, pues espero que te encuentres mejor. ¡Adiós Deku!

Al pronunciar su apodo el nuevo alumno de la academia sintió como si su corazón se saltara un latido. Ahora no podía pensar en otra cosa que no fuera en nuevo significado que le había dado la chica a su apodo cada vez que alguien dijera Deku. Pero debía de ocultar eso, tenía que actuar como si no hubiera ocurrido nada.

Izuku: A-Adiós, linda.

Nada más Deku cruzó la puerta del dormitorio de Ochako y salió al pasillo, este se fue corriendo a toda velocidad a su dormitorio, sin preocuparse o fijarse en si alguien estaba mirando.

Uraraka, por su parte se acercó a los documentos del peloverde incompletos y en la sección de datos relevantes comenzó a escribir lo que Deku le había contado antes de irse. Tan solo lo hacía para tener toda la información posible sobre él apuntada y para avanzar en esa misión especial que tenía. Esa era la única razón que podía haber para eso, y también era normal que se emocionara al escuchar la historia del nuevo aspirante a héroe, no podía haber ningún otro tipo de razón para eso, ¿cierto?

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top