𝟬𝟱. 𝗂𝗍'𝗌 𝗈𝗄𝖺𝗒

CHAPTER FIVE
  last act ; it's ok
evermore
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        DURANTE LAS ÚLTIMAS SEMANAS DE SEPTIEMBRE Y LAS PRIMERAS de Octubre, Olivia y Thomas se habían vuelto algo cercanos a los Merodeadores y claro que aquello estaba directamente relacionado con que el joven Diggory y Remus Lupin, habían comenzado a ser demasiado cercanos, todos estaban felices, los chicos de Gryffindor por ver a su amigo contento y Olivia, porque sabía cuán difícil había sido para Thomas aceptar su sexualidad teniendo como hermano al gran Amos Diggory.

    Los Merodeadores se encontraban en el Gran Comedor, tomando su desayuno antes de asistir a clases, cuando el dúo de Hufflepuff llegó, les hicieron una seña para que se acercaran, haciéndoles un lugar que ambos tomaron gustosos.

─ Buenos días, buenos días solecitos ─ Saludó Olivia dejando un beso en la cabeza de los cuatro.

─ Ella me agrada ─ Mencionó Sirius.

─ Estás de buen humor...

─ Por supuesto, hoy es otro bello día.

─ Pensándolo bien, nunca te he visto de mal humor, ¿Alguna vez estás de mal humor? ─ Preguntó Sirius.

─ Oh, créeme que no la quieres conocer.

─ ¿Eres tan terrible, Eyre? ─ La molestó James riendo un poco.

─ ¿Y tú tan burlón?

    Todos en la mesa rieron hasta que Thomas miró su reloj de muñeca ─ Liv, hora de irnos.

─ ¿Ya? ─ Se quejó ─ ¿Qué clase tenemos?

─ ¿Es en serio Olivia Eyre? Llevamos casi dos meses de clases y aún no te aprendes tu horario.

─ ¿Y para qué me lo iba a aprender si para eso tengo un pergamino con todas mis clases?

    Thomas rodó los ojos ─ No pierdes la cabeza porque la tienes pegada, ¿Y ya te tomaste tus pociones?

    Olivia se encogió incómoda evitando las miradas curiosas de los demás ─ No.

─ Olivia.

─ Me he sentido bien.

─ Patrick se molestaría.

─ ¿Pastillas para qué? ─ Curioseó Sirius recibiendo un golpe en la cabeza por parte de Remus.

─ No seas entrometido.

─ Oh, no, no... para ah, el... dolor de cabeza ─ Sonrío ─ Bueno, creo que Tommy y yo deberíamos irnos, tiene razón, no quiero llegar tarde.

    Y sin esperar una respuesta, la rubia jaló a su amigo fuera del comedor y comenzó a caminar sin rumbo.

─ Liv ─ La chica no contesto ─ ¿Liv?

─ ¿Ah?

─ ¿A dónde vamos?

    La joven se dio cuenta de que estaban parados justo en los jardines ─ Lo siento, ¿Qué clase tenemos?

─ Pociones.

    Olivia se quejó en voz baja y dirigió su paso a las mazmorras en total silencio, Thomas se sentía mal por haber hablado de más en el desayuno, pero también sabía lo peligroso que era que la chica Eyre no tomara su medicación, la última vez habían sido tres días en la enfermería y ya comenzaba a notar lo pálida que se veía su piel y las ojeras debajo de sus ojos, habían tomado un tono morado, parecido al de los hematomas.

─ Lamento lo que dije hace rato.

─ No te preocupes, Tommy, pero gracias por disculparte.

─ Es solo que... no quiero...

─ Sí, sí, ya lo sé... las tomaré después de que termine esta clase.

─ Es solo que eres mi mejor amiga.

    Olivia se detuvo para abrazar a Thomas, quien se escondió en la curvatura de su cuello ─ Ya lo sé, tú también eres el mío... pero no te pongas muy sentimental ─ Ambos rieron y continuaron caminando hacia su clase.

    El resto del día se pasó entre clases y descansos, los Hufflepuff no se volvieron a encontrar al grupo de Gryffindor en todo el día, hasta que llegó la hora de la cena, en donde aprovecharon para sentarse todos juntos.

─ ¿Ya escucharon que el sábado será la primera salida del año?

─ ¿A Hogsmeade? ─ Preguntó Peter y Sirius asintió.

─ ¿Qué pasa, gusano? Últimamente tu cabeza anda quién sabe dónde y ahora no escuchaste cuando Minnie lo dijo.

─ Ah... sí, lo siento.

─ No, no, no te disculpes, en fin, ¿Ustedes irán?

    Thomas asintió mirando de reojo a Remus, quien se sonrojó de inmediato y las miradas cayeron en Olivia.

─ Mhh, no lo sé, supongo que sí.

─ ¿No era que Patrick no había querido firmarte el permiso?

    Eyre rodó los ojos con molestia ─ Ni me lo recuerdes, pero conseguí que Alya lo firmara así que...

─ ¿Por qué tu padre no te quiso firmar el permiso? ─ Preguntó Sirius confundido.

    Olivia y Thomas se tuvieron que aguantar la risa, si Patrick escuchara que alguien lo llamaba el padre de Olivia...

─ Patrick no es mi papá y ciertamente Alya tampoco es mi mamá.

─ Ah no, ¿Entonces?

─ Su hermano y cuñada.

─ Ah, ¿Y tus padres? ─ Preguntaron Pettigrew y Black al mismo tiempo.

    Olivia miró hacia otro lado incómoda y bebió de su jugo de calabaza, James extendió su mano por encima de la mesa y la colocó en la de ella, recordaba algunos detalles sobre lo que la chica le había dicho anteriormente. La rubia sonrío en su dirección, tomando un suspiro.

─ Murieron... eran aurores y bueno, había demasiados magos oscuros en ese momento.

─ Lo siento. ─ Dijo Sirius.

─ Está bien.

─ En fin, ¿Vamos a Hogsmeade el sábado?

─ ¿Y por qué no?

. . .

       El sábado llegó y el paseo al pueblo de Hogsmeade también, el grupo de Gryffindor había salido del castillo con los dos tejones, sin embargo, en algún momento del día, Remus y Thomas se distanciaron del grupo para ir a su propia cita, o algo parecido, por lo tanto, en Las Tres Escobas solo quedaban Sirius, James y Olivia, debido a que Peter había decidido no salir, ya que no se sentía tan bien.

─ ¿Y desde cuándo conoces al niño Diggory? ─ Preguntó Sirius.

─ Primer año.

─ ¿Y cuándo se volvieron mejores amigos?

─ En tercero.

─ ¿Y...?

─ ¿Esto es un interrogatorio?

─ Déjala, Canuto, seguramente por eso, Pet no quiso venir, lo incomodas con tus preguntas.

─ ¿Cómo te atreves? Claramente no fue así, Pet me adora.

─ Claro...

    La conversación quedó pausada cuando la puerta del lugar se abrió, Lily Evans, Marlene McKinnon y Dorcas Meadowes entraron tomando una mesa algo alejada de donde estaban los tres, James suspiró y miró hacia la mesa.

─ Es verdad, a ti te gusta Evans.

─ No, no me gusta... ─ Bajo las miradas de incredulidad de Olivia y Sirius, el azabache se corrigió ─ Bueno, bueno... ah, define gustar.

    Sirius resopló ─ Cornamenta ha estado enamorado de Evans desde que llegamos aquí en primer año.

─ ¿Y por qué no le has pedido una cita?

    Black estalló en carcajadas, llamando la atención de la mayoría ─ Pero lo ha hecho, miles de veces, ahora que lo recuerdo, este año no lo has hecho.

─ Sí, es solo que... bueno, no estoy seguro si quiero una relación ahora.

─ ¿No?

    James negó con la cabeza, no se sentía preparado para tener una relación y mucho menos para ser rechazado de nuevo, siempre pensó que el día en el que tuviera una novia, la llevaría a su casa para conocer a sus padres y ellos estarían ahí para darles su bendición para casarse, sin embargo eso ya no podría ser posible y Potter no sentía que ese fuera el momento para salir con alguien.

─ Bueno, igualmente no tienes que preocuparte, todo a su tiempo y está bien no estar listo para algo.

    El azabache asintió sonriendo, sin saber que esa frase sería la clave para muchas situaciones futuras.

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