Prólogo
Este pueblo tiene dividida las casas en grupos por clases. En la montaña, está la enorme y preciosa mansión de los monarcas del pueblo. Después de ellos, un poco más abajo, sigue la clase alta (Mare), con casas muy lujosas y llenas de luz, disfrutan de muchos beneficios. En tercer lugar está la clase media (Mijloace, [mijloache]), hay casas de todo tamaño y la gente siempre está feliz y llena de música, ahí se encuentra la mayoría de la gente del pueblo y también está la entrada principal.
Por último, en la zona más baja estamos nosotros, la clase baja o como algunos nos dicen, los pobres... también conocen a nuestra zona como "Săracii" (sarachi)
Nosotros tenemos que trabajar mucho en el campo o trabajar para la gente de la clase media y alta, los que no hacen algo de provecho y son descubiertos el monarca los aprisiona y los vende como esclavos, hay algunos que a pesar de ser trabajadores son tomados y vendidos pero nadie puede contradecir o meterse con las órdenes de los monarcas o también te irá mal.
Mi nombre es Amy Rose, tengo 19 años, pronto cumpliré 20, vivo en una casa pequeña con una conejita llamada Cream, ella es unos años menor que yo así que me hago responsable de ella. Llevo trabajando por las dos desde que tengo 15 años ¿Por qué dos jóvenes estarían solas desde entonces?, bueno, la respuesta tiene su historia.
Cuando era una niña vivía con mi madre, ella trabajaba arduamente para poder hacernos una pequeña casa, cómoda y que por lo menos estuviera en buenas condiciones, ella atendía el campo por las mañanas y en las noches, mientras que en las tardes trabajaba en una tienda en la sección de la clase media.
Todo iba bien, vivíamos bien gracias al trabajo de mi madre, teníamos comida diaria, pero un día mientras mi madre cosechaba en la noche una mujer se le acercó, se veía en mal estado, estaba a punto de morir, mamá le ofreció comida y asilo en lo que teníamos como casa en ese entonces, estaba casi lista y a pesar de no estar en un excelente estado, era acogedora.
Aquella mujer era muy amable, mamá la estuvo cuidando y dándole medicinas que hacía con sus plantas, permaneció en casa 3 días, se marchó después de que se recuperó pero antes de irse le dejó a mi madre un pergamino, era extraño, ella nos dijo que no se lo mostráramos a nadie porque sería peligroso para nosotras, se dirigió a mamá y le dijo que lo usara cuando esté sola y en sus cosechas, "sé precavida" agregó de último, ella un poco extrañada sólo asintió y agradeció mientras que la mujer se marchó, ni siquiera vimos a dónde.
Todo estaba bien, de hecho las plantas de la cosecha de mamá se llenaron de mucha vida parecía magia porque crecieron sorprendentemente rápido, cuando le pregunté a mamá cómo le hizo para que la cosecha creciera así de rápido ella río nerviosa y dijo que tampoco estaba segura, aunque en el fondo sabía que me estaba mintiendo.
Unas semanas después fue cuando pasó aquella tragedia que marcó mi vida...
El monarca llegó "de visita", más bien, venía a ver a quién se podría llevar. Mi madre se veía sumamente nerviosa y hasta temerosa, en ese entonces no entendía el motivo de aquella acción, tuve que darme cuenta de la peor manera.
-¡Espere, puedo explicarlo su majestad!- gritó una eriza adulta entre lágrimas
-¡No hay nada más que explicar! Es bastante claro lo que está pasando, sólo hay una forma de tener ese tipo de cosecha, ¡¿le ha dicho a alguien de esto?!- El rey se veía desesperado, le estaba gritando a mi madre, mientras que yo estaba escondida donde me dijeron, tratando de contener las lágrimas y de no hacer ruido.-Le he preguntado y le ordeno que responda ¿¡LE HA DICHO A ALGUIEN SOBRE ESTO?!-
-¡NO!, lo juro, nadie sabe, no le he dicho absolutamente a nadie, de verdad y no le diré a nadie, ¡nunca! Dejaré de hacerlo, lo prometo- dijo la eriza desesperadamente, su miedo era muy notable.
El rey parecía analizar la situación, no entendía la razón por la que estaban discutiendo por algo tan simple, el monarca se dio cuenta de que la cosecha de mi madre estaba sorprendentemente llena, ningún granjero había podido lograr algo como eso, fue entonces cuando el rey cambió completamente de actitud y vino a nuestra casa a exigir respuestas.
-Aunque eso fuera cierto, no puedo correr el riesgo de dejarla libre teniendo conocimiento de un secreto de esta magnitud, vas a venir conmigo ahora mismo- dijo el rey mientras salía en busca de los guardias.
-¡NO, ESPERE POR FAVOR!-
Esto no podía ser verdad, salí inmediatamente de mi escondite mi madre al verme sólo me empujó y me llevó a mi escondite de nuevo.
-Por lo que más quieras Amy, quédate aquí sin importar qué, por favor, hazlo por mí- mi madre estaba envuelta en un terrible llanto- hija, escucha bien, no debes salir de aquí hasta que todo quede en silencio cuando eso ocurra ve con Vainilla y dile que el rey me ha llevado, ella entenderá la situación, estoy segura que estarás bien en sus manos-
-¿Qué?, no mami, no entiendo qué está pasando, ¿a dónde te llevarán?, ¿cuándo volverás?- todas las lágrimas que estaba tratando de aguantar comenzaron a salir sin más, tenía mucho miedo y un muy mal presentimiento, mi madre sólo me miró en silencio y me abrazó fuertemente-
-Te amo Amy y siempre lo haré, nunca lo olvides, yo te cuidaré desde donde esté, lo prometo, cuídate mucho por favor- No me dio tiempo de responder cuando la puerta fue tirada y un guardia entró, mi madre se alejó de mi escondite lo más que pudo y trató de salirse del agarre del guardia, pero le fue imposible...
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Corrí y corrí, lo recuerdo como si hubiera sido ayer...
-¡Vainilla!, ¡Vainilla!, ayúdeme por favor-
-Pequeña Amy, ¿qué ocurre?, ¿dónde está tu madre?- respondió la coneja algo asustada
-El rey... EL REY SE LA LLEVÓ- rompí en llanto nuevamente- ella... me dijo que viniera contigo en cuanto haya silencio... que estaría bien en tus manos... qué ha pasado Vainilla, no entiendo...- Vainilla sólo guardo silencio y me abrazó
-Descuida Amy, nosotras te cuidaremos- una conejita se asomó por la puerta, Cream vino y me abrazó con mucha fuerza, supongo que había escuchado todo, aunque era pequeña había entendido lo que estaba pasando y la tristeza que estaba teniendo- Pronto te explicaré algunas cosas pero por ahora, serás parte de nuestra pequeña familia- Vainilla me sonrío con dulzura y eso me tranquilizó un poco.
Fue así como ese yo de 8 años sufrió su primer trauma.
Años después, 7 para ser exacta. Seguía viviendo con Vainilla, ella y Cream se volvieron mi nueva familia y las quería demasiado, pero desgraciadamente Vainilla comenzó a enfermar, por lo tanto dejó de trabajar, estuve ocupándome de sus cosechas pero no sabía lo suficiente para mantenerlas en buen estado y también tuvo que dejar el trabajo que tenía en la sección de la clase media.
Y nuevamente, la desgracia apareció.
-NO POR FAVOR, NO SE LA LLEVEN- ahí estaba yo, una joven de 15 años siendo detenida y viendo cómo se llevan a otra persona importante en su vida, nuevamente- Por favor, está enferma y no tiene fuerzas suficientes para trabajar, ¡les prometo que me haré cargo de todo, me esforzaré más!
-Eso no es suficiente, además, si está enferma ya no sirve, el rey ha ordenado llevárnosla ante él- dijo fríamente un guardia mientras jalaba a Vainilla fuera de la casa, "ya no sirve" qué clase de objeto creen que somos nosotros este maldito rey y estos malditos guardias.
-¡MAMÁ!, ¡NO!- dijo una Cream de 12 años en un mar de lágrimas abrazando a su madre.
-Detén a esa niña o también la llevamos- dijo el guardia con molestia
-Espere, déjeme despedirme, será rápido- dijo en modo de súplica Vainilla
-¡Bien! Sólo porque hoy me encuentro de buen humor- el guardia soltó a Vainilla unos momentos, pero no se alejó, yo me acerqué
-Amy, Cream, lamento mucho tener que dejarlas, sólo quiero que sepan... que las amo- Vainilla comenzó a romper en llanto- De verdad lo siento, si tan sólo fuera más fuerte yo...
-¡No digas eso, no es tu culpa!- Ahora yo estaba rompiendo en llanto- Te prometo, que cuidaré de Cream, no dejaré que le hagan daño jamás, haré todo lo que pueda para mantenerla bien, así que... no te preocupes...- traté de darle una sonrisa pero me era imposible dejar de llorar.
-Amy... gracias, sé que puedo estar tranquila si estás con ella, Cream... mi pequeña- se arrodilló a su altura- lo siento tanto por dejarte a tan corta edad, pero no estarás sola, Amy estará contigo siempre, al igual que yo desde la distancia, cuídense mucho por favor- Vainilla abrazó fuertemente a Cream y seguidamente me abrió un espacio para que yo también me uniera al abrazo, nunca creí que volvería a pasar por lo mismo una segunda vez, no permitiré que pase una tercera, lo juro por mi vida.
El abrazo se vio interrumpido por los guardias quiénes dijeron que el tiempo se acabó. Fue así como sólo pude quedarme parada abrazando a Cream mientras veía cómo se llevaban a la que fue una segunda madre para mí. Sentí impotencia, tristeza y enojo, pero no podía hacer nada.
Juro por mi vida, que cuidaré de Cream y me esforzaré por mantenerla lejos del peligro, no permitiré que me arrebaten a la única familia que me queda.
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Y así fue cómo me quedé responsable de esta tierna conejita, aún me duele recordar aquellos momentos pero debo ser fuerte, debo hacerlo por ambas...
¡Hola! Está será mi primera historia Shadamy en publicar, espero les agrade :3
Seguimos con la magiaaa. <3
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