- ¡Corra y no se detenga!- dijo aquella voz masculina.

-¡Pero!- dijo con desesperación aquella joven que estaba preocupada por su amado.

-¡No deje de correr, vaya al lago ya mismo!- interrumpió.

-No me iré sin usted- gritó firme y decidida.

-Mi lady, no es tiempo de discutir, tengo que encargarme de que esté a salvo-

-¡Si no está a mi lado no puedo estar a salvo! Lo necesito ¡Te quiero a mi lado!- ordenó más como una súplica la cuál fue respondida.

El hombre tomó en brazos a la dama y corrió con toda velocidad, tomando ventaja sobre quienes los perseguían.

Llegaron finalmente al lago y el caballero bajó a la mujer de sus brazos.

-No podremos perderlos por mucho tiempo, hay que apresurarnos, puedo sentir que están cerca- dijo la mujer reflejando pesar en su mirada.

-Yo la protegeré, no se preocupe y comience- dijo sin más adoptado una pose de guardia.

Dicho esto, la mujer se acercó al lago y comenzó a recitar un encantamiento en aquella lengua que pocos magos conocían.

El lago comenzó a brillar y un aura comenzó a salir.

Sonidos de distintas criaturas se escuchaban a lo lejos, aullidos, gritos y susurros, ¿qué era todo eso?

El primer aura tomó un color blanco combinado con tonos amarillos y morados, para después, esparcirse por medio de aros en todo lugar.

Por un instante los gritos y sonidos extraños se hicieron más fuertes.

-Mi lady...- dijo algo preocupado

La mujer se concentró, comenzó a recitar de nuevo, formando un aura rosa con azul y verde para después hacer la misma acción anterior.

Algunos sonidos habían parado pero no eran suficientes, todavía se podía sentir el descontrol.

-Esto no es suficiente, necesito algo más fuerte- dijo para sí misma algo desesperada, cuando dirigió su vista al caballero y recordó la clave de todo- Deme las esmeraldas- ordenó desesperada.

-¿Las esmeraldas? No, es peligroso para usted usarlas todas y no puedo permi-

-No tenemos otro remedio, por favor... Dámelas... Lancelot- dijo con una sonrisa triste, ambos sabían lo que implicaba esto, pero era necesario por el bien de todos.

A duras penas le entregó las esmeraldas.

No sin antes darle una mirada de súplica a la mujer recibiendo a cambio una sonrisa y una leve negación para después, el caballero arrebatarle un beso a su lady, el cual fue correspondido con un toque de tristeza pero mucho amor de por medio.

Las esmeraldas fueron elevadas por la magia de la mujer, un hechizo comenzó a ser recitado y luces salían de las piedras preciosas.

El aura de la dama comenzó a ser absorbido por las gemas lo que hizo preocupar al erizo azabache que la veía desde cerca.

-¡NIMUE!- gritó desesperado con toda la intención de ir por la mencionada pero fue detenido por la misma eriza.

-¡No! ¡Detente Lancelot! Ya... no hay marcha atrás... también serás... ¡absorbido si te acercas!- gritó como pudo la dama del lago mientras su energía disminuía.

Los aullidos se detenían, las sombras se alejaban pero quedaban gritos y sonidos extraños que todavía se escuchaban.

La dama no podía más, pero debía seguir si quería salvar a todos, sentía sus piernas perder fuerza, sus brazos temblaban, estaba a punto de caer cuando sintió un cuerpo tomarla por atrás y elevó sus brazos y manos junto a las suyas.

-Lancelot...- dejó escapar, lágrimas amenazaban con salir de sus ojos.

-Te lo dije antes, Nimue, estaré contigo hasta el final- dijo sin más mientras su energía comenzaba a ser absorbida igual que el de la dama. 

Las gemas comenzaron a brillar más y la fuerza de ambos a disminuir con cada segundo que pasaba.

La dama era quién peor la estaba pasando pues ella estaba tratando de dar más energía cosa que no pasó desapercibida en el azabache.

Sus ojos brillan y su corazón latía rápido, no podía dejar a su amada seguir así.

-¡Lancelot!- gritó ella débil desde el suelo, el caballero la había empujado- ¡No, por favor, detente!

El erizo hacía caso omiso.

-¡Lancelot!-

-LANCELOT-

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-LANCELOT- gritó la asustada chica desde su cama.

Una gota de sudor caía de su frente y su respiración era agitada.

Otro sueño que no recordaba bien y sólo la dejaba con un sentimiento de tristeza y dolor.

La puerta se abrió de repente dejando ver a la conejita junto a su amiga tejón.

-Amy, ¿estás bien?- preguntó preocupada -otra vez esto- mientras se acercan a ella.

- Estoy bien, tranquila- sonrió para tranquilizarla- otro sueño que no recuerdo- dijo cabizbaja

-¿Cómo?¿Acaso eso es común en ti?- se escuchó la voz del erizo azul desde el marco de la puerta.

-Sonic- regañó el equidna apareciendo a un lado de él.

-¿Qué? Acaba de gritar para despertar en este estado- le respondió mientras señalaba su evidente confusión y explosión de emociones- eso no tendría que ser normal, bueno, digo- terminó restándole importancia y regresando a la cocina.

Cierto, sus invitados se quedaron a dormir anoche al no ver señales de su compañero cuando intentaron volver, así que optaron por pedir hospedaje con las chicas.

Se encontraban desayunando cuando el grito de la chica pareció alarmar a todos.

-Puedo apoyar esa idea un poco, dime, ¿esto te pasa seguido?- preguntó el equidna acercándose.

-Últimamente, sí, no entiendo por qué pero cada vez que despierto no recuerdo nada de mi sueño y siempre digo algo pero tampoco sé qué- respondió cabizbaja

- Los sueños muchas veces son mensajes, señales, advertencias, incluso premoniciones- dijo pensativo mientras regresaba la mitad a las confusas chicas- o al menos para nosotros que tenemos esas creencias, es así-

-Pues podría ser verdad, si tan sólo Amy recordara lo que sueña, claro- dijo la tejón

-Olvidemos eso mejor- intervino la erizo, hablar de ese tema le causa incomodidad y confusión, prefiere postergarlo- ¿su amigo no ha dado señales de nada todavía?- dirigió su pregunta al equidna

-No, hace un rato, Sonic fue a ver de nuevo pero no se encuentran señales de él- respondió algo preocupado

-¿Eso es malo?- preguntó Cream.

-No creemos que esté en problemas, pues el vigilante sigue ahí, así que es por otra cosa que se fue-

-El problema es que no sabemos cómo volver sin problemas- agregó el azul regresando a la conversación.

-Pero tu eres muy rápido, ¿No fue así como pasaron?- preguntó Sticks.

-Pues sí, pero Knuckles es algo pesado y me hace ser un poco más lento, además de que el vigilante es capaz de verme por más rápido que sea, sólo necesito que se distraiga un poco para pasar- dijo algo molesto por el vigía que todo ve.

Se quedaron pensativos un momento.

-Creo que, podemos ayudarlos a distraer al vigía- fue Amy la primera en hablar- si una de nosotras finge estar perdida y pasa por ahí, me imagino que el vigía pondrá su atención en ella, ¿Necesitas mucho tiempo para poder pasar?- dijo con una sonrisa.

-Con unos segundos bastaría-

- ¿Cómo es mejor, de día o de noche?- dijo pensativa la rosada

-Creo que tiene más sentido perderse de noche- respondió la tejón

-Entonces que sea en la noche- se unió la joven coneja al plan

-¡Chao!-

-Oigan, oigan, calmen esas ansias, ¿No tienen miedo de que sea un poco peligroso para ustedes?- interrumpió el rojo la emoción que se presentaba

Se quedaron en silencio unos segundos hasta que la erizo rosa habló.

-Tal vez un poco, pero si vamos a trabajar juntos, hay que aprender a enfrentar algunos riesgos- dijo determinada.

- Me gusta esa actitud- respondió Sonic y Knuckles asintió orgulloso de sus nuevas amigas- entonces, elaboremos un plan-

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Amy's Pov

Bien, después de terminar el día en la panadería, ahora nos encontramos caminando en algún lugar del bosque que parece extraño, su ambiente es diferente al igual que la flora, cosa que ya no me sorprende, al parecer cerca de aquí fue que Sticks vio a Sonic por primera vez.

- Mi pregunta es, ¿qué hacías por aquí, Sticks? Digo, sola, en un bosque tenebroso, a horas cercanas de la noche- dijo Sonic

- Pues qué más haría ¡Buscar tesoros!- respondió como si fuera lo más obvio del mundo.

Todos pusieron caras de crédulos.

-No sé si eres muy valiente... o muy rara- susurró el azul lo último pero Sticks tiene buen oído.

-¡Oye!- se quejó y todos comenzamos a reír.

Cada vez nos llevamos mejor.

Seguimos caminando un rato, si no fuera porque Sticks es buena para memorizar el camino, tendría miedo de seguir y perderme al tratar de volver.

-Ya estamos cerca, recuerden, mantengan la calma y actúen como si estuvieran perdidas- dijo Knuckles

-No te preocupes, yo me siento perdida de verdad- dije en forma de broma.

-Esa es la actitud- se unió Sonic.

- Si todo sale bien, que dudo que no sea así, nos volveríamos a ver en una o dos semanas- dijo Knuckles.

-Yo creo que nos daría mejor tiempo dos semanas- respondió Cream.

-En dos entonces, bien, hora de regresar- terminó la conversación el erizo azul.

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Comenzamos el plan, primero Sticks, Cream y yo, nos adentramos fingiendo que estamos perdidas.

Acto seguido, el vigilante debe ponernos en su mira y estar pendiente de nosotras.

Ellos aprovecharán para entrar rápidamente y luego nosotras salimos de su campo de visión.

Fácil, supuestamente.

-Amy, tengo miedo, creo que estamos perdidas- dijo la conejita "asustada" tomando mi brazo, Cheese se había escondido en la canasta que traía consigo.

-Lo sé, Cream, también tengo algo de miedo, pero no te preocupes, encontraremos el camino pronto- le sigo el juego.

-Tranquilas, no conozco está ruta pero si no me equivoco he pasado cerca de aquí, caminemos un poco más hasta que encuentre algo conocido- ahora fue Sticks quién siguió la corriente.

Miré disimuladamente a mi alrededor buscando aquel vigilante que dijeron los chicos.

"un pequeño cuervo negro de ojos rojos y algunas plumas blancas" recordé, ese el aspecto que tiene, muy distinguible. 

De repente sentí un escalofrío recorrer mi espalda y una sensación de que alguien nos veía, debe de ser él. 

-Amy...- susurró Cream, lo ha de haber sentido también.

-No se preocupen, sigan con el plan- ahora fue Sticks quien susurró sin mirarnos. 

Caminamos un poco más con esa sensación de tensión sobre nosotras, nuestro objetivo es alejarlo un poco.

-Sabes Amy, de repente se me ha antojado una deliciosa rebanada de pan con mermelada- dijo Sticks cortando el silencio, bien es hora de seguir.

-¡Ah, ni lo digas que también se me antoja!- le sigo. 

-Un rico PAN CON MERMELADA nos vendría bien- dice Sticks. 

-¡Sí, sobre todo uno hecho del señor Badger!- se une Cream.

-Creo que quedaba un poco en la casa, cuando lleguemos hagamos más pan con mermelada- terminé de decir. 

Miré hacia atrás, la mirada seguía sobre nosotras, se podía sentir; pude ver una pequeña ráfaga azul que pasó rápidamente.

Creo que ya entraron.

Un suave pero largo silbido se escuchó a continuación. En definitiva, ya pasaron del otro lado.

-¿Qu-qué es ese sonido?- Cream me abrazó "asustada"

-No lo sé, Sticks, ¿todavía no recuerdas el camino?- pregunto. 

-¡Ya recordé! Vengan, síganme- comenzó a caminar.

Aumentamos nuestro paso para terminar lo antes posible con esta incomodidad que sentimos, poco a poco nos alejamos de la zona y dejamos de sentir la mirada.

-Creo que ya no siento nada- dice Sticks.

-Sí, yo tampoco- suelto un suspiro largo de cansancio y me dejé caer al suave pasto.

-Sentí que esa mirada nos iba a seguir toda la vida por un momento- dice abrazándose a sí misma.

-¡Chao!- el pequeño azul sale de la canasta y abraza a la conejita

-¡Cheese!- correspondió su abrazo- bien hecho, te ocultaste muy bien, perdón por la demora-

Ya todo estuvo hecho y salió bien, uff.

-Vamos a casa- digo levantándome con una sonrisa que es correspondida y comenzamos a caminar.

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Sonic's Pov

"Creo que quedaba un poco en la casa, cuando lleguemos hagamos más pan con mermelada"

¡La señal!

Corrí lo más rápido que pude cargando a Knuckles en mi espalda, como es algo pesado me hace ser ligeeeeramente más lento, al menos lo suficiente como para que ese cuervo me vea.

Una vez que pasamos y llegamos aun lugar seguro, Knuckles silbó como señal de que ya debían irse, nos aseguramos que se alejen y nosotros fuimos directo a la aldea.

-¡Amigo! ¡Eso estuvo genial! Todavía no se me ha quitado la sensación de euforia- digo mientras doy unas vueltas al rededor de mi amigo rojo.

-Debo admitir que esa sensación de peligro fue... ¿genial? pero eso no quita que no debamos tener cuidado- dijo con una sonrisa mientras comenzaba a caminar.

-Claro, claro- confirmo siguiéndole el paso- vayamos a ver a Tails, quiero saber por qué no fue por nosotros, me da un mal presentimiento-

- Ciertamente, Miles no es de olvidar las cosas, menos algo así de importante- respondió de acuerdo el equidna.

- ¡Sonic!- escuché una conocida voz femenina llamarme.

- ¡Cosmo! Qué bueno verte, justo nos dirigíamos a casa de Tails - dije alegre

-¿Tails? Creí que estaba con ustedes- mencionó con algo de preocupación.

Me contagio con su preocupación, volteo a ver a Knuckles y ha captado la misma idea, Cosmo se la pasa con Tails casi siempre y si ella no sabe dónde está, es porque algo pudo haber pasado.

-No, no, la última vez que lo vimos fue cerca de- me detengo abruptamente, no puedo decirle a Cosmo de lo que hicimos.

-¿Cerca de dónde?- pregunta con algo de preocupación.

-¡Ah! No importa, vamos a su casa a ver si ya regresó- me doy vuelta rápidamente junto con mi amigo equidna y aceleremos el paso siendo seguidos por la chica de magia verde.

Llegamos y Tails no estaba en casa, esto es preocupante.

-No ha vuelto...- soltó triste la verde.

-Tranquila Cosmo, tal vez se fue a investigar o se topó con alguien, ya ves, como cuando desapareció por 4 días porque andaba investigando la energía de una piedra- intento calmarla, aunque las palabras son más para mí que para ella.

Es verdad, tal vez se topó con alguien, pero, ¿quién?

-Preguntemos si de casualidad alguien lo vio andando a la par con otro- propuso el equidna, ambos somos conscientes de que no pudo irse a investigar, al menos no ahora.

Salimos directo a recorrer la aldea, caminamos, preguntamos, pero al parecer nadie lo había visto.

- No puede ser, no lo creo, Tails no puede simplemente desaparecer... yo... el... lo prometió... ¡prometió que no desaparecería así como así otra vez!- se escuchaba a Cosmo con la voz quebradiza y lágrimas amenazando con salir.

-Calma, debe haber una explicación, pero no creo que esté en peligro, si fuera así ya lo habría pasado algo- trato de tranquilizarla Knuckles.

-Bueno... eso sí- dijo más calmada. 

-Debe haber alguna forma de localizarlo- digo pensativo. 

-¡Hola chicos! Qué andan haciendo- volteamos a ver donde estaba aquella voz.

-Silver... ¡Silver!- cómo no pensé en él antes, con su psicoquinesis tal vez podría ayudarnos- Oye, ¿de casualidad no has visto a Tails?- todos nos ponemos atentos a su respuesta.

-¿Tails? Em...- se puso a pensar unos segundos- no... creo que no- su respuesta nos decepcionó.

-Crees que tal vez-

-¡Ya recordé!- fui interrumpido- La última vez que lo vi, si no me equivoco andaba acompañado-

-¿De quién?- pregunta Cosmo un tanto ansiosa.

- ¿De verdad no lo saben?- dijo confuso y hasta algo preocupado.

-Pues no, ¡por eso preguntamos!- responde Knuckles un poco molesto por lo obvio de la pregunta. 

-Ah, bueno, jeje, no te molestes Sonic, pero tal vez no te agrade mucho la persona con la que estaba-

-No creo que sea para tanto, sólo dime- insisto.

-Bueno... él iba acompañado de- hizo una pequeña pausa.

-¡Ya dilo de una vez Silver!- está jugando con mi paciencia.

-Estaba con Shadow- finalizó con una sonrisa medio incómoda.

¡Maldición!

 Tenemos que ir por él ahora mismo.