Jungkook se había encargado ésa misma noche de llamar primero a Mark para saber el número donde él había ido hace tiempo a ver el estado de su bebé y todo lo necesario sobre el embarazo, no sin antes, claramente, decirle que estaba embarazado. Dejando de lado que casi se queda sordo al escuchar su grito emocionado del otro lado, después el grito de regaño a Jackson por no haberle dicho nada y sus felicitaciones a él y Yugyeom. Cortó la llamada con el pelinegro, mirando la hora, aún era una hora temprana, así que supuso seguía abierto. Marcó el número, con los ojos puestos en su estómago, sonrió tranquilo y del otro lado de la línea contestaron.

Hablando con la persona que lo atendió le explicó que quería hacer una consulta, dándole todos sus datos y tuvo la suerte de que al siguiente día no habían muchas consultas, pero iría hasta la tarde. No le importó mucho la hora y aceptó, agradeciéndole, y cortando la llamada.

Yugyeom no pudo estar presente en la llamada porque hacia la cena para ambos. Saliendo del cuarto se encontró con Yugyeom poniendo las cosas en la mesa, de espaldas. Lo abrazó, haciéndole reír.

— ¿Qué te dijeron?— Besó su frente apenas se separó.

— Mañana a las seis debemos de estar ahí.— Jungkook sonrió jugando con su collar. Yugyeom lo abrazó de nuevo, besando sus labios una y otra vez.

— Sigo sin creer que voy a ser papá, bueno, vamos a ser papás Kookie. De una pequeña o pequeño bebé.— Juntó sus frentes, llevando las manos hasta su estómago, acariciándolo.

— ¿Y si llegan a ser dos Yugy?— Los dos se quedaron pensando en ésa posibilidad, si llegaran a ser dos... Vaya, no podrían ni dormir un poco, pero sea lo que sea, serán unos tiernos bebés o tierno bebé. Su esposo era realmente hermoso y el tener un hijo suyo sería un bebé bonito, como podría decirle él.

Se sentaron en la un poco extensa mesa que adornaba el medio después de la cocina y antes de la sala. Yugyeom quiso preparar algo sano para Jungkook, después de lo que dijo que no podía comer nada grasoso. Hirvió algunas verduras y cocinó un poco de pollo, poniéndoselo en el plato. Sabía que a Jungkook no le gustaban las verduras, la única que comía era la papa por el simple hecho de que era rica.

Jungkook al mirarlas formó un gesto de asco, el mayor rió poniéndole un tenedor en el plato, alentándolo. Lo tomó con una mano y llevó un brócoli a su boca, masticando sin ganas. Tragó con dificultad y sonrió un poco.

— Sabe bien.— Tomó una zanahoria, bueno, la zanahoria la consideraba su segunda verdura favorita, tenía buen sabor y a veces tomaba jugos con la zanahoria integrada. El hambre comenzó a invadirlo poco a poco y ya comía las verduras como si fueran nugets. No tocó el pollo, sólo comió las verduras y Yugyeom se sorprendió al verlo servirse de nuevo. Al parecer el bebé amaba los vegetales.

Jungkook satisfecho acarició su estómago tomando agua, volteó a ver a su esposo, que tenía la boca abierta y sorprendido. El resto de líquido de su boca desapareció y rió sin entender. Yugyeom comenzó a comer lo que le restaba de su comida con tranquilidad. Mientras recogían la mesa hablaron de temas variados, especialmente sobre el bebé, como que debían comprar ropa apenas supieran el sexo del bebé. Y en ningún momento sintió asco.

***

El embarazado estaba enfurecido y lo siguiente. Repitió una, y otra, y otra vez a Yugyeom a que hora debían de estar en el consultorio, pero no, a su esposo se le ocurrió llegar tarde a su casa, exactamente quince minutos antes de la consulta. Apenas entró por la puerta, Jungkook lo esperaba con los brazos cruzados y el ceño fruncido.

— Lo sé, lo sé, llegué tarde. En mi defensa a un alumno se le ocurrió dar un giro a lo tonto y se torció un tobillo, tuvimos que esperar a la ambulancia, por eso llegue tarde amor mío, bebé que espera un bebé mío, precioso.— Lo abrazó besando diferentes partes de su rostro, logrando hacer sonreír a Jungkook.– Mi conejito, corazón hermoso. Ésa sonrisita es la que quiero ver. Vamos, hoy no bailé, podemos irnos ya.

El entusiasmo del próximo papá se notaba a kilómetros. Jungkook quería dejar de lado su enojo o si no su hijo nacería tan amargado como él a veces. El lugar es cercano a su casa, pero aún así tenían que ir en carro hasta allí. Yugyeom colocó su mano sobre la de Jungkook, acariciando los nudillos de ésta. Él se acercó a besar su mejilla con cariño. Ellos normalmente eran así de románticos, disfrutaban demostrarse el cariño que se tenían recordando a veces su odio hacia el otro años atrás.

Odiaba a su profesor.

Podía decir libremente que no le caía nada bien el profesor Yugyeom. Un total creído, raro y amargado hombre que se creía el mejor de todos. Lo soportaba sólo porque le gustaba bailar, su pasión se había vuelto el baile, lo dejó por varios años, desde pequeño amaba bailar en lo recitales de la escuela y en su adolescencia salía a los juegos de baile para demostrar que tan bueno era.

Cuando se mudó a Seul por los estudios de su universidad dejó por completo ésas ganas de bailar de lado, concentrándose en lo que lograría sacar una carrera. Sin pensar en que le traería cuando lo conociera a él.

Todos ésos meses bailando en la compañía le fueron buenos, exceptuando los apodos tan estúpidos del profesor como "mocoso" "niño" y a veces "conejo". En muchas ocasiones tuvo la necesidad de golpearlo para demostrarle que no era un niño o mocoso.

Su relación con el profesor era complicada, en algunas veces podían hablarse bien, sin apodos ni nada, pero en otras se sentían perros y gatos. Mayormente la segunda fue de todos los días. Supo tolerarlo, porque digamos que su profesor no es necesariamente feo, realmente guapo y sexy el muy idiota. Muchas veces lo encontró mirándolo mientras se estiraba, sonrojándolo en puntos indescriptibles. Y bueno... Seducirlo no estaba mal, sólo un poco se ponía a propósito enfrente de él, agachándose con una perfecta vista de su trasero. Él no se encontraba mal, no sólo él. Jimin tenía un problema con el profesor Yoongi y Taehyung con Hoseok, pero por lo que supo enterarse Taehyung ya andaba con Hoseok, olvidándose de sus amigos casi al igual que Jimin, aunque aún seguían yéndose juntos en la salida.

— Uno, dos... Eso es mocoso, vas bien.— Se giró para reprocharle, ganándose un dedo sobre su boca, quedando a centímetros de él.– Ya hemos hablado sobre esto niño.

— Podrías simplemente decirme Jungkook-ah, no mocoso o niño.— Murmuró quitando su dedo de sus labios.– No entiendo tu necesidad.

— Me encanta verte molesto, intentas parecer malo cuando eres demasiado tierno.— Rió de espaldas a él, cambiando la música en la laptop sobre una de las tantas bocinas.– No sirve pelear niño.

— Si te golpeara no sería un niño para ti.

— O podrías demostrarlo de otras...— Lo recorrió con la mirada, sonriendo ladino,– maneras.— Jungkook abrió la boca y los ojos sin que su boca pudiera articular alguna palabra.– Eso pensaba niño. Formate, comenzaremos de nuevo.

Caminó dando leves sacandas por tal indirecta hacia él, evitando que vieran su sonrojo, murmurando un “estúpido” en voz baja.

— Te escuché mocoso.

Y de nuevo contuvo las ganas de tirarse encima de él para darle su merecido.

— Buenas tardes, pueden pasar.— La voz de un hombre lo sacó de sus pensamientos, levantó la mirada junto con Yugyeom encontrándose con alguien que parecía hasta de la edad de Yugyeom aunque no fuera así. Juntaron sus manos y se levantaron entrando al cuarto donde había un escritorio y varias máquinas normales como ejemplo la que mostraba al bebé. Tomaron asiento frente a él, sonriendo algo nerviosos.

— Un gusto, soy Lee Taemin y supongo que el embarazado aquí eres tú.— Señaló a Jungkook con una sonrisa.

— Sí, él está esperando el bebé.— Sonrió Yugyeom notando el sonrojo de su esposo con la mirada gacha.

— Oh, que lindo. Muchas felicidades a ambos. Bueno, estaremos aquí durante treinta y seis o cuarenta semanas, así que debo de conocer sobre ambos. Diganme, están casados, sólo novios, como se enteraron, un ambarazo deseado, platiquenme.— Para Jungkook eso sonaba mucho tiempo y para Yugyeom eso sonaba como abstencia dolorosa.

— Eh, llevamos tres años de casados y tres de novios, él es menor que yo por unos años y la historia de como nos conocimos es muy larga.— Río contagiando un poco a Jungkook.– El primero en enterarse fue él obviamente, a mí me dijo horas después. No lo planeamos completamente, ni tampoco no lo deseábamos, fue como una buena sorpresa para los dos.

— Sentía ascos desde hace días, pero no le dije nada pensando que estaba sólo enfermo, así que fui a ver a un amigo llamado Jackson, que es doctor normal. Me sacaron una prueba de sangre y me dijo que tenía una hormona que no recuerdo bien, conocida como la del embarazado. Yo soy Jungkook y él es Yugyeom, se me olvidaba comentarlo. Yugyeom trabaja en un estudio de danza como el director y yo bueno, no hago realmente nada.— Rió avergonzado.

— Te detectó la gonadotropina coriónica humana o HCG. ¿No has sentido dolores en los pies, como hinchazón o en tus, pechos?— Jungkook negó sólo un poco, recordando sus síntomas.

— Dolor en los pies sí, sólo un poco. Pero no, dolor en los pechos nop. Lo que tengo mayormente son ascos, aunque ayer no pude comer nada más que vegetales, al parecer odia la grasa, pero es sólo por las mañanas, supongo.— Explicó y Taemin asintió anotando en una hoja.

— Normalmente las hormonas empiezan a preparar a la persona embarazada para el amamantamiento. La hormona progenestora incide en lo que es el crecimiento de las glándulas mamarias y los estrógenos ayudan a los conductos de la leche. Para que me entiendan mejor es posible que pronto te comiencen a crecer los pechos por la leche.— Argumentó Taemin con paciencia.– También me alegra realmente que tus nauseas sean por las mañanas, es menos probable que sufras algún aborto no deseado. El estrógeno tiene mucho que ver, ya que es el causante de las nauseas, rechazando varios olores y sabores.

— ¿Por eso es que no acepta nada más que vegetales?— Preguntó totalmente curioso sobre el tema, y el brillo en sus ojos por toda la información delataba su algo de angustia y entusiasmo.

— Exacto Jungkook, al parecer el bebé no tolera la grasa por el momento, pero luego llegarán los antojos, tu cuerpo alguno de éstos días querrá un mineral o vitamina que contenga el alimento que veas.— Continuó viendo a Jungkook asentir.– También debes de cuidarte de los mareos, que son por la tensión arterial que disminuye. Esto empieza después de las cinco a ocho semanas. Puedo seguir contándoles ahora, pero tenemos que checar sobre como está desarrollado el bebé. Oh, Dios, se me olvidó algo completamente importante ¿Cuántas semanas tienes?

— Llevo seis semanas.

— Oh, entonces no tardas mucho en comenzar todo lo que te digo. Jungkook, ¿Podrías recostarte en la camilla que ves ahí? Necesito que te alces un poco la camisa para ver tu estómago y aplicarte el gel que todos odian para sacar la ecografía.— Rió y Jungkook hizo caso haciendo lo que le pidió. Yugyeom se puso a un lado de él, tomando su mano de nuevo. Taemin se acercó colocándole el gel, escuchando un suspiro.

— Sí, a nadie le gusta éste gel, porque absorbe el calor que desprende tu cuerpo.— Tomó el aparato conocido como transductor y lo colocó encima, llevando la mirada a la pantalla. Comenzó a moverlo por toda la extensión, analizando con la mirada.– Todo parece estar bien, aunque por ahora, como ustedes lo ven sólo es una bolita.

Jungkook apretó la mano de Yugyeom con entusiasmo y él besó su frente mirando la pantalla.

— Parece estar todo bien, me alegra.— Murmuró Taemin.— Felicidades, tienen un bebé completamente saludable.

Y en su vida, Yugyeom nunca se sintió tan orgulloso de poder haber creado un bebé en Jungkook.

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Tenía planeado que fueran dos, pero ya es muy cliché últimamente que resulten siendo dos 😂.

Investigué mucho sobre el embarazo, hasta le pregunté a mi mamá y me miró raro 😂😂😂.

¿Les gusta cómo va quedando? Realmente no sé si voy bien u.u💔.

Pero bueno, espero les haya gustado el cap~

Me voy a terminar un ensayo para el Martes uwu.

¡Nos leemo luego!