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Yoongi no lo entendía, ¿cómo su novio podía ser tan ciego y no darse cuenta de cómo era Namjoon?

Entró a su casa y se desplomó en el sofá. Eran cerca de las diez de la mañana, había estado toda la noche en el hospital. Necesitaba una ducha urgente

Tocaron a la puerta, desganado se levantó a abrir.

—Buenos días gatito... Aunque no muy buenos parece.

Hoseok se sacó los zapatos y entró a la casa de su mejor amigo.

—Muy malos en realidad.

—Cuéntame de eso... Pero antes dame comida muero de hambre. —Hoseok se sacó su mochila y chaqueta.

—Pensé que tenías clases.

—Ah, si. Suspendieron la clase de la profesora Manoban recibió una llamada y salió corriendo. No sabemos qué pasó, pero salió llorando de la sala de ensayos.

—Y entonces ¿no tienes nada que hacer?

—Nop. ¿Tú como estás?

—Ya mejor.

—¿Hyung está bien?

—Si, pero parece que el golpe que le dieron le hizo mal para tomar decisiones.

—¿Cómo así? —Hoseok se acostó sobre el sofá.

—No quiere denunciar al hijo de puta... Saca tus pies de la mesa de mi madre. —Yoongi alzó sus ojos.

Hoseok no hizo caso y se acomodó mejor. —¿Discutieron?

—Un poco. Me molesté pero traté de no salir enojado del hospital, no se da cuenta de como son las cosas y la verdad es que no se como ayudarlo y que vea lo que realmente está pasando.

Hoseok hizo una mueca —Vas a tener que esperar Yoongi, si ya hablaste con él, le diste tu punto de vista, entonces no te queda nada más que esperar hasta que él crea en tí.

Yoongi mordió su labio. —¿Tú dices que no cree en mí?

—Osea no tan así, mira... Tú llegaste a su vida hace unos meses ¿cierto? —Hoseok bostezo y prosiguió —su mánager ha estado con él todos estos años. Imagínate lo difícil que tiene que haber sido para él lo que pasó... Me has dicho que habla de él como si fuera su hermano, imagina lo confuso que se debe sentir.

El rubio tomó asiento, —Si, tienes razón pero él tampoco me entiende a mí, no te imaginas lo mal que lo pasé, por un momento pensé que lo había matado Hobi. —su voz sonó temblorosa y Hoseok se enderezó para abrazarlo —Pensé que lo iba a encontrar muerto... Estaba tan asustado.

—Pero él está bien Yoon, Hyung es fuerte... No le eches la culpa por lo que pasó.

—No lo hice Hobi, solo no entiendo por qué no quiere denunciarlo... Lo asustó, ¿sabes lo difícil que va ser para Seokjin recuperarse de esto?

—Por lo que pasó antes ¿no?

—Exacto, él sonríe y no demuestra lo que realmente pasa por su cabeza, pero yo lo veo, siento sus miedos... Mierda, estoy tan enojado. —Yoongi se levantó del sofá. —Vamos a comer algo sino voy a salir a buscar a ese hijo de puta.

—Vamos y tranquilo, acá estoy... Evitaré que te vayas preso.

Ambos se encaminaron hasta la cocina.

—Siéntate yo te sirvo, tienes una cara espantosa Yoon.

—Sí. Me siento peor por dentro créeme.

Hoseok miró a su amigo, hace mucho tiempo que no lo veía así de deprimido, le dolía saber que Seokjin no estaba pensando en Yoongi y en como se pudiera sentir con todo lo que estaba aconteciendo en sus vidas.

—Toma. Después te irás a dormir.

—¿Y tú?

Hoseok se encogió de hombros. —Da igual, a la casa no puedo ir.

—¿Por qué?

Hoseok se quedó en silencio.

—¿Qué pasó Hobi? Habla.

—No pudimos pagar el agua, la cortaron anoche. Jiwoo noona se fue a la casa de una amiga...

—¿Por qué no me llamaste tonto?

—De hecho si te llamé, pero no contestaste... Fuí donde Soyeon...

—¿Y?

—Nada, solo que se estaba besando con otro chico fuera de su casa.

—Mierda Hobi, lo siento.

—Nunca me había pasado... Que te engañen, digo... Parece que Soyeon tampoco es mi chica.

—¿Qué hiciste, la encaraste?

—No, solo me dí media vuelta y volví a mi casa.

—Bueno desde hoy te quedas acá ¿si? Hablaré con mamá, para que pague esa cuenta.

—No Yoon, tu madre hace mucho por nosotros.

—Oye, tú eres como un hermano para mí, no vamos a dejar que esa deuda se acumule.

Hoseok odiaba no poder solventar los gastos de su casa, no poder ganar un poco más, se sentía de manos atadas.

—Gracias Yoon.

—Ni lo digas, más tarde vamos a tu casa a buscar ropa y te puedes quedar  todo lo que quieras.

Hoseok tragó, sus ojos se llenaron de lágrimas. Yoongi le tomó la mano.

—Estoy tan cansado Yoon, todos los días me acuesto pensando en si voy a tener algo para comer, si alcanzará la poca comida que tenemos para la semana... Pienso en la Universidad, en mi beca... En noona... Extraño a mis padres, deben estar tan decepcionados... Me siento tan sobrepasado... Y además extraño a Dahyun... Mi vida es una basura, ni siquiera sé si podremos sobrevivir hasta fin de año. Estamos llenos de deudas. —Hoseok lloró, tapó su cara con sus manos y se dejó llevar por todo lo que estaba pasando.

Yoongi acercó su silla y lo abrazó, le dió palmaditas en su cabeza mientras escuchaba como su amigo se desahogaba.

—Yo te voy a ayudar, algo haremos, tranquilo.

—No puedo seguir dependiendo de otros Yoon.

—Lo sé, pero así se empieza, mi madre siempre me dice que recibió mucha ayuda de sus amigos cuando llegamos aquí los dos solos, tienes que aceptar la ayuda de las personas que te queremos Hobi. Por favor, no nos dejes fuera de esto...

El bailarín asintió. —De verdad la extraño.

Yoongi sonrió por el cambio de tema pero agregó —Y lo más probable que ella a tí tonto.

—Está con el hermano de Hyung ahora...

—¿Estás celoso?

—No... No lo sé.

—Ustedes deben hablar.

—Últimamente cada vez que hablo con ella la termino cagando.

—Me recuerdas a mí cuando empecé a salir con Seokjin —Yoongi sonrió.

Hoseok se limpió las lágrimas. —Ya, ve a dormir, yo limpio todo.

—Esta bien, me iré a la cama un momento, más tarde tengo clases.

—Gracias Yoon, dile a tu madre, si no está de acuerdo...

—Oye, tú sabes que ustedes son como hijos para ella... Va a estar feliz que vengas a estar con nosotros, siempre dice que tu eres algo así como un rayo de luz —Yoongi hizo una mueca de desagrado pero sonrió. —Tranquilo, estás en tu casa hermano.

El pelirrojo esperó a que Yoongi se fuera a su habitación, sacó los tazones de la mesa y los dejó en el lavaplatos. Buscó el delantal de la señora Min y se dispuso a dejar todo limpio para luego finalmente darse la ducha que requería. Si iba a estar ahí tenían que ser de ayuda y no un estorbo.

Salió de la ducha y al pasar por la sala escuchó unos suaves golpes en la puerta, se dirigió hasta esta.

Al abrir se sorprendió al ver a Dahyun de ahora cabello completamente morado abrazando a un pequeño cachorro café.

—Hola. —Dahyun recorrió rápidamente el cuerpo de Hoseok que estaba solamente con la toalla en su cintura.

—Hola, pasa. Iré por Yoon.

—No lo hagas, sé que debe estar descansando... Vine a verte a tí.

Entraron a la sala, Dahyun se sacó sus zapatillas y su chaqueta. Dejó al cachorro en el suelo, vigilandolo en todo momento.

—¿Cómo sabías qué estaba acá?

—Yoon me contó. Creo que fue antes de irse a dormir.

—Ah, ya veo. —Hoseok sacó de su mochila que estaba sobre el sofá una camiseta y se la puso.

—¿Porqué no me llamaste? —Dahyun puso sus manos en su pequeña cintura —Sé que dije que no quería saber de tí... Pero si estás en problemas yo siempre estaré para ti Hobi.

Hoseok solo dijo. —Lo tomaré en cuenta la próxima vez.

Dahyun suspiró —Bien, ¿quieres arreglar las cosas o prefieres que sigamos así?

—¿Estás con él?

—¿Hablas de Mingyu?

—De quien más.

—¿Eso es lo que más te interesa?

—Responde. —Hoseok sé cruzó de brazos.

—Sí, estamos saliendo.

El bailarín arrugó su ceño molesto.

—¿Estás contenta? —el pelirrojo sé sentó en el sofá, de pronto sus piernas se sentían un tanto débiles.

Dahyun se sentó a su lado. —Lo estoy intentando... Yo —lo miró a los ojos —aún no te olvido, es difícil después de tantos años... —sonrió con tristeza —Pero te he echado de menos... Ese día me sentí muy mal, estaba tan enojada contigo por haberme ocultado que sabias de mis sentimientos, pero está bien... Yo he pensado mucho en eso y realmente me odio por haberte alejado de mí... Pero no te puedo obligar a que me quieras de esa forma. —terminó mirando sus manos que descansaban en su regazo.

Hoseok tragó —No, Dubu, yo me equivoqué, tenía que haber hablado contigo antes, hice todo mal y siento mucho que las cosas hayan terminado así.

—Lo sé, pero empecemos de cero ¿si? Como si no hubiese pasado nada.

—¿Estás segura?

—Si, yo ahora estoy dándome una oportunidad de querer a alguien que no seas tú —rió suavemente avergonzada de sus palabras —Mingyu es genial y creo que podría enamorarme de alguien como él.

Hoseok se levantó del sofá ¿Porqué era tan extraño escuchar eso?

Dahyun se veía tranquila, hasta aliviada en cierto punto, entonces, ¿porqué él se sentía tan raro?

—Oh, iré a buscar al perrito, Yoongi me pidió que lo trajera y ahora no se donde se metió —la muchacha salió de sala riendo.

Todo se sentía tan raro, si bien estaban volviendo a acercarse con su mejor amiga, tenía la extraña sensación de que era todo lo contrario. Dahyun estaba mucho más lejos de lo que él quería aceptar.

— —

—Hola hermanito.  —Jisoo entró en la habitación de Seokjin con una sonrisa en su rostro.

—Hola Ji.

—Dios tu cara ¿Porqué tus ojos están tan rojos? —Jisoo levantó el rostro de su hermano para mirarlo mejor —¿estuviste llorando?

—No. —El pelinegro desvío su mirada hacia la televisión que estaba colgada en una de las paredes.

—No te creo nada.

Alzó sus hombros tratando de parecer relajado. —Estoy bien.

—¿Estás listo?

—Sí.

Jisoo tomó un pequeño bolso de ropa y se lo puso al hombro. Seokjin se levantó y salió detrás de su hermana.

—Vamos a salir por la parte de urgencias, cuando llegué habían uno de periodistas en la puerta principal.

Seokjin caminaba con la cabeza agachada. Llegaron al automóvil de la castaña y se metieron rápidamente dentro.

—¿Dónde te llevo? —Jisoo puso la llave y encendió el motor.

—Quiero ir a casa.

—¿Nuestra casa?

Seokjin asintió con los ojos cerrados.

Jisoo no esperó más y apretó el acelerador. Las calles de Seúl a esa hora estaban atestadas de automóviles por todos lados, demoraron más de lo que normalmente duraba el trayecto desde ese centro médico hasta la casa de los padres de Seokjin.

—Llegamos.

Seokjin bajó, tomó su bolso y entró en la casa que amaba. Quizás el estar ahí le quitaría la tristeza que de pronto invadió su corazón.

—Tu habitación está lista, el que hayas enviado a la señora Lucy no ha aligerado mucho la carga.

—Ella es genial.

—¿Me vas a contar que es lo que te tiene así?

—No quiero hablar ahora.

—Tú nunca quieres hablar Jinnie.

El pelinegro caminó hasta su habitación seguido de cerca por su hermano mayor.

—Ji, estoy bien —pero eso no era cierto. Antes que su hermana llegara a buscarlo, Seokjin había recibido una llamada de su compañía.

Una llamada que le había destrozado el corazón.

—¿Pasó algo con Yoongi?

Por supuesto que sí, pensó Seokjin.

—Sólo tenemos opiniones dispares. Ya lo vamos a solucionar.

Jisoo movió su cabeza y salió de la habitación de su hermano menor.

Seokjin se cambio de ropa. Llamó un taxi, mientras esperaba por este observó como unos niños corrían por la calle, riendo y gritando.

Sus pensamientos se fueron directo a Yoongi, nunca habían hablado de niños, de una familia. Seokjin quería hijos, siempre había anhelado una familia. Y si tenía que pensar con quien quería formar un hogar, ese era Yoongi.

Su corazón retumbó dolorosamente en su pecho.

¿Porqué cuando en su vida las cosas marchaban bien tenía que aparecer algo a opacar su felicidad?

No lo entendía, él no era una mala persona, no tenía pensamientos negativos hacía otras personas entonces ¿porqué la vida se quería burlar de esa forma de él?

Su taxi llegó y se fue de casa sin despedirse de su hermana.

Ya en la compañia entró hasta la oficina de Park Jungsoo.

—Hola Seokjin, toma asiento por favor —el tono serio de su jefe solo le indicaba lo jodido que estaba todo. —Como te comenté cuando te llamé, nos llegaron diversos correros electrónicos y fotos de ustedes dos... También te llamé por qué tenemos que discutir lo que pasó anoche con Namjoon...

—¿Me dejas ver las fotos? —Lo de Namjoon podía esperar, ahora lo que importaba era saber que tanto sabían de él y su relación con Yoongi.

Tomó las fotografías, había una de ellos paseando por los jardines de la Universidad, otra de ellos dos en la terraza de ese lujoso restaurant donde se había declarado a Yoongi. Otra, más reciente de ellos en el estacionamiento del Hospital, Seokjin recordaba ese día, ellos habían discutido.

Esa fotografía en particular era lo suficiente reveladora, en ella los dos se estaban dando un beso. Ese pequeño beso enojado por parte de Yoongi después de su primera discusión como novios.

Sus manos temblorosas dejaron las fotografías sobre el escritorio.

—Creo que debemos hablar con la prensa Seokjin, parece que llegó el momento de hacer pública tu relación amorosa.

Sus manos estaban sudando, ese no era el plan que él tenía, las cosas no tenian que ser así. Alguien los había estado siguiendo pero ¿quién?


—No puedo hacerlo... No estoy listo para las críticas... Mis fans ¿qué van a decir de esto? —Seokjin se tapó la cara evitando las ganas de llorar —Mi papá no sabe que soy homosexual, ¿se va a enterar por los medios? —se levantó y caminó por la lujosa oficina. —No es lo que quería, no quiero que las cosas sean así.

—Lo sé, creeme que estoy tan preocupado como tú —Park se acomodó en su asiento y preguntó— Entonces ¿qué quieres hacer? Te vamos a apoyar en lo que decidas. Estamos averiguando quien envió esto, llegó como una encomienda anónima.

—Yo... No se que hacer.

—Buscaremos la solución, lo primero es saber que quieres hacer...  quien sea que esté haciendo esto quiere hundirte. Podemos investigar, incluir a la policía, pero yo no haré nada que tú no quieras.

Seokjin mordió su labio —¿Qué opciones tengo?

Jungsoo se hizo un pequeño masaje en el puente de su nariz.

—Enfrentar este escándalo, sé que es una grave intromisión a tu privacidad, podemos hacer demandas e investigar a fondo, pero quedarían completamente expuestos a la opinión pública. Tu novio va a verse perjudicado también... Quizá deberias hablar con Yoongi.

—No... No puedo hacerlo. No estoy listo... No ahora.

Sentía ganas de vomitar, ¿por qué su vida seguía estando ligada a los problemas?

—Los caprichos de esta persona son claros. Quiere que estés solo, no quiere a Yoongi a tu lado. Además dice tener más material ¿porqué fuiste tan descuidado Seokjin?

—Yo... No lo sé, con Yoongi todo es tan ¿natural? —caminó hasta llegar a una de las ventanas.

—¿Has recibido llamadas o algo que nos indiqué que estás siendo acosado nuevamente?

—No, nada de eso.

—Entonces Seokjin dime ¿qué vas a hacer?

— —


—Dr. Park —Taehyung levantó su cabeza de los informes que estaba firmando su cabeza dolía, la noche de turno como médico en el Asan había terminado pero su trabajo administrativo no.

—¿Sí?

—En la línea cuatro tiene un llamado de la Universidad de su hermano, dicen que es urgente.

—Gracias —se acercó al teléfono —¿si?

—Hola Buenos días, ¿estoy hablando con Park Taehyung?

—Sí con él.

—Disculpe, estoy llamando de parte del jefe de la carrera de Danza y Coreografía en la cual su hermano es alumno y usted su tutor responsable.

—¿Qué pasó? —Taehyung se apoyó en el respaldo de su silla.

—Hay un tema que debe venir a conversar personalmente. No podemos hablar por teléfono, es un asunto muy delicado.

—Bien, aun estoy en el trabajo pero iré a penas me desocupe.

—Muchas gracias señor Park, que tenga buen día.

El castaño se movió rápidamente,  el trabajo lo terminaría después. Se sacó su bata blanca y la colgó en el perchero que estaba en un rincón de su oficina. Tomó su chaqueta y salió rápidamente para ver que había pasado con su pequeño hermano.


Se sentó frente al escritorio del jefe de carrera de su hermano, estaba todo en absoluto silencio, Taehyung aún sentía el golpeteo en su cabeza, lo único que quería era irse a dormir un poco para reponer energías.

—Señor Park, lamento tener que pedir que viniera por una situación como en la que su hermano está envuelto. Pero nosotros somos una prestigiosa Universidad y usted como ex alumno debe saber que hay cosas que están absolutamente prohibidas y su hermano lamentablemente está involucrado en un hecho que es profundamente vergonzoso.

Arrugó su ceño, ¿qué podría haber hecho de mal su pequeño Jiminnie?

—Necesito más información sobre lo acontecido.

—Se lo mostraré —el funcionario giró su notebook para que Taehyung pudiera ver el video que estaba a punto de reproducir.

El castaño trataba de entender que era lo malo en el video, su hermano besándose con un hombre. —Yo ya sabía que mi hermano es gay... Si es por eso...

—No Sr. Park, la persona que usted ve en el video y que está acompañando a su hermano es profesor de nuestra respetable Universidad.

—¿Qué?

—Lee Taemin, profesor de fotografía y destacado profesional y casado con una de las profesoras de danza de Jimin. 

—¿Lalisa? —Taehyung no lo podía creer. Esa profesora había sido su compañera en la secundaria en Busán. La conocía prácticamente de toda la vida. Y por supuesto que Jimin también la conocía hace muchos años

El castaño sabía que Lalisa era la profesora de Jimin desde su primer año en dicha Universidad, también sabía lo mucho que el rubio la estimaba y respetaba. Taehyung quería salir corriendo por la vergüenza que sentía, su pequeño hermano en medio de una familia, no entendía ¿qué había pasado con su pequeño Jimin?

—Nos llegaron las fotos y otras cosas, hasta el momento nadie sabe de esto, por eso lo llamamos a usted... Debemos cancelar la matrícula de Jimin, lo sentimos Sr. Park.

Pensó en sus padres y lo decepcionados que iban a estar si se enteraban que su hijo menor en vez de estar estudiando para ser un gran bailarín y brillante coreógrafo en el futuro, se estaba dedicando a acostarse con un hombre casado. Su hermano no era así, no era de los que no pensaba en sus actos... Algo no estaba bien.

Jimin no era de los que destrozaba familias.

El castaño hizo una reverencia y salió rápidamente del lugar, llamó a su abogado, pero como era de esperar no había forma de ayudar a su hermano. Las políticas de la Universidad prohibían cualquier tipo de relación amorosa entre estudiante y alumno.

¿Qué mierda hiciste Jimin?

El trayecto hasta su casa se le hizo interminable, lo único que quería era hablar con su hermano, saber que había pasado y tratar de ayudar por supuesto. No lo iba a dejar desamparado... O por lo menos eso pensaba hasta que llegó a casa y vió a Jimin besando al mánager de Seokjin.

Se bajó tan rápido que ni siquiera se dió cuenta que dejó el auto con el motor andando.

—¿Qué mierda haces con este tipo Jimin?

Su hermano se giró inmediatamente. —Tae.

—Hola Taehyung, tantos años sin vernos. —Namjoon saludó burlón.

—Aléjate de mi hermano.

—Tae, cálmate.

—¡Tú cállate y entra a la casa!

—¡No me trates como si fuera un jodido niño!

—Eso pídelo cuando te comportes como un adulto. Ahora entra a la casa. —Taehyung tenía su mandíbula tan apretada que dolía.

El mánager miraba todo con una sonrisa en su rostro. —Bueno yo me voy, dile a Jimin que pasaré por él en la tarde.

—No te atrevas a acercarte ¿me escuchaste?

—No puedes hacer nada para impedirlo Park, Jimin es adulto y es bastante conciente de lo que está haciendo, yo no lo estoy obligando a nada.

—Aléjate de él maldito enfermo.

Taehyung entró a su casa, necesitaba hablar con su hermano, necesitaba respuestas a todas las malditas preguntas que rondaban por su cabeza.

—¡Jimin! —gritó.

El médico subió hasta la habitación de su hermano y ahí lo encontró sentado en la cama, se apresuró a entrar.

—¡Dejame en paz Tae!

—Hoy me llamaron de tu Universidad... Tu ex Universidad.

—¿Qué? —Jimin abrió sus ojos sorprendido.

—Te expulsaron Jimin ¿qué mierda crees que haces acostándote con un hombre casado?

Jimin se defendió —¡Eso ya se acabó Tae!

—Eso es lo de menos ahora, Jimin por Dios ¿cómo te pudiste acostar con el marido de Lalisa? —Taehyung se sentó junto a su hermano abatido por toda la situación —Ella ha venido a comer tantas veces a esta casa... ¿Qué pasa contigo Jiminnie?

—Ese no es tu problema, yo no estoy con él, no hay necesidad de hacer tanto escándalo.

—¿No es mi problema? No te voy a permitir ese tipo de comportamiento, nuestros padres no te criaron para ser de esa forma.

—¿Qué forma Taehyung? Tú siempre has sido el favorito, el estudioso, el qué eligió una próspera carrera universitaria. Tú no entiendes.

—¿Te estás escuchando? —Taehyung se levantó de la cama se acercó al armario de su hermano y sacó una maleta mediana. —Yo no tengo la culpa qué te estés comportando como una zorra, asume que te equivocaste, qué tiraste a la basura tu futuro por enredarte con un hombre casado.

—¿Qué estás haciendo? —Jimin dejó de lado la discusión para enfocarse en su hermano qué estaba metiendo ropa dentro de la maleta. Se levantó y trató de quitársela. —¡Taehyung!

—¡Te vas a Busán Jimin. Le darás la cara a los papás!

—¡No! —el Rubio comenzó a llorar. —No quiero volver TaeTae, por favor.

—Basta con tus manipulaciones, vas a afrontar lo que hiciste y de paso te vas a alejar de Kim Namjoon.

—¡No puedes hacerme esto!

—Si puedo.

—Tae por favor —lloró más fuerte.

—Jimin ¿tú no entiendes lo que acaba de pasar? Te quedaste sin Universidad, si esto se llega a saber ¿qué crees que va a pasar contigo? ¿No has pensado en lo que las personas dirán?

—No me importa.

—Se nota, por supuesto que es así... A mí si me importa, por eso tienes que irte.

—¿Tanta vergüenza te doy? —su voz sonaba tan rota, tan triste que Taehyung por un momento pensó que estaba siendo demasiado duro con su hermano.

Taehyung dejó de meter ropa a la maleta —No bebé no me das vergüenza, pero estoy profundamente decepcionado de tí. Yo no te voy a dar clases de valor, por que yo también me he equivocado mucho en mi vida he tomado decisiones que hasta el día de hoy me arrepiento, —pensó en Seokjin y en todo el daño que le había hecho en el pasado con sus decisiones egoístas —por eso quiero que tengas un nuevo comienzo, aquí las personas te van a apuntar con el dedo. Te van a molestar y yo no quiero verte pasar por eso... Además que ninguna Universidad va a aceptarte a esta altura del año.

—Los papás van a estar tan avergonzados... —el rubio cayó al piso, abrazó sus piernas mientras lloraba desconsoladamente.

Taehyung se sentó en el piso y lo abrazó. —Siento mucho no haber estado para tí. —Taehyung sabía que esos dos años en que estuvo lejos habían cambiado su relación con su hermano.

Jimin negó mientras se secaba las lágrimas. —Tú no has hecho nada...

—Dime una cosa ¿Estás enamorado?

—Sí. Aunque sé que no debería y que él jamás me va a dar un espacio en su vida, yo lo amo.

—Y Namjoon, ¿qué pasa con él?

—Eso es solo una diversión, él es peligroso, quería hacerle creer que no estaba con Taemin. No sé cómo se enteró, pero un día fue hasta la Universidad, me mostró una fotografía de nosotros juntos y me llevó hasta una cafeteria en el centro.

—Ese hijo de puta.

—Me dijo que quería separar a Seokjin de Yoongi, y pensó que como yo era el ex novio de Yoongi podía hacer algo para separarlos, me dijo que si yo ayudaba él no iba a mostrar las fotografías —un lastimero suspiro salió de su boca —Tae. Me vas a odiar, pero tengo algo que decirte.

—¿Qué?

—Yo... Yo no quise atenderme en el Asan... Porque no tengo algo grave, los nódulos que tengo en mi cuello son benignos. Te mentí a tí y a Yoongi.

—No lo puedo creer Park Jimin, ¿qué mierda tienes en tu cabeza?

Taehyung se levantó y volvió a la maleta. —Te vas a Busán y de paso te vas a alejar de Namjoon. A ver si así dejas de mentir.

—¿Porqué no me dejas vivir Tae?

—Vivir no es andar de cama en cama Jimin. Madura de una puta vez.

—¿Y que importa si me quiero acostar con todos los hombres de Seúl? ¿Por qué las personas se sienten con el derecho de decirle a las personas como vivir?

—No se trata de eso, Jimin tú eres un chico maravilloso, hermoso, talentoso. Podrías estar con el chico que quisieras ¿porqué quieres ligar tu vida a malas experiencias?, los hombres con los que te relacionas no te están dando nada bueno Jiminnie, solo te están usando bebé.

—¡Eso no es verdad, yo elijo!

Taehyung levantó del piso a su hermano, recordó todas las veces que lo consoló cuando era pequeño. Ahora viendo a su hermano de 21 años se dió cuenta que los años no habían pasado. Jimin seguía necesitando su contención y su cariño.

Abrazó al rubio para que este llorara en su hombro.

—¿Por qué no empiezas de nuevo? En otro lugar... No es necesario que sea en Corea... Siempre has dicho que sueñas con vivir en Estados Unidos... Quizás esta es la oportunidad para encontrar tu camino —acarició con cariño sus ondulados cabellos rubios, amaba a su hermano, pero no podía dejar que su pequeño siguiera haciéndose daño de esa forma.

—No lo sé Tae, tengo miedo...

—Yo te voy a apoyar en todo, pero tenemos que hablar con los papás ¿si?

Jimin limpió sus lágrimas y asintió como un pequeño niño regañado por su padre.

—Creo que fue Namjoon el que envió las fotos a la Universidad.

—Aléjate de él Jimin por favor. Sé de lo que te hablo.

—¿Cómo lo conoces? —Jimin se alejó un poco de su hermano para mirarlo —Dime Tae.

—Hace dos años, yo recibí a Seokjin en el Asan, llevaba unos meses trabajando ahí...

—¿Es el mismo Seokjin de Yoongi?

—Sí... De Yoongi —dolió, pero era la verdad, alguna vez pudo decir que Seokjin habían sido suyo. Ahora eso era solo un vago recuerdo que trataba con todas ansias de no olvidar.

—Seokjin llegó con graves heridas en su pecho, se estaba desangrando. Yo lo operé, lo estabilice... Fuí su médico a cargo para el tratamiento... Ahí conocí a Namjoon.

—Tae... ¿Tú tuviste algo con Seokjin?

Suspiró. Pero antes de que pudiera hablar unos golpes en la puerta los alertó a ambos.

—Voy a abrir, quédate acá.

Taehyung bajó las escaleras y abrió a quien insistentemente tocaba su puerta.

—Vecino dejó su automóvil con la llave puesta.

—Oh, gracias. —Taehyung salió hasta su vehículo y lo apagó. Volvió hasta su casa, quiso cerrarla pero algo se lo impidió.

—¡Jimin!

Taehyung fue empujado por un hombre que entró corriendo a su casa.

—¡Sal de mi casa Taemin! —Jimin estaba parado en las escaleras, había bajado para ver quien había golpeado la puerta.

—¡Tú fuiste! —Taemin lo tomó fuertemente del pelo y lo arrastró escaleras abajo.

Taehyung se levantó rápidamente y tomó de los hombros al profesor que estaba pateando a Jimin en el suelo.

—¡Perdí todo por tu culpa pequeña zorra!

Jimin se protegió la cara mientras era insultado y golpeado por su ex amante.

El médico logró sacarlo y lo golpeó en la mejilla, uno, dos, tres golpes, perdió la cuenta de tantas veces que le pegó.

Jimin se levantó jadeando de dolor.

—¡Tae basta! ¡Lo vas a matar!

—¡Mírame hijo de puta! —el médico tomó su mentón. —¡Vas a salir de mi casa y no volverás nunca más!

—Tu hermano es una puta... —Taemin escupió la sangre que se había acumulado en su boca.

—¡No hables así de mi hermano, aquí el único que tenía que honrar a su familia eres tú pedazo de mierda no él!

Taehyung lo levantó y se sorprendió de la fuerza que tenía. Lo lanzó fuera de su casa y cerró la puerta de golpe.

Su respiración estaba agitada, se pasó una mano por su cabello y se acercó a su hermano que estaba llorando en el piso.

—Ven, déjame revisarte.

Lo levantó con cuidado y lo llevó hasta el sofá.

—Estoy bien Tae... El dolor físico no se compara al que siento aquí dentro —puso su mano en su pecho, dolía cada respiración, pero se lo merecía...

—Lo sé bebé —Taehyung presionó el abdomen del bailarín, Jimin gritó de dolor.  —Al parecer te fracturó una costilla. Te llevaré al hospital.

El castaño se iba a alejar pero Jimin lo tomó de la mano para que no se alejara. Lo miró a los ojos.

—Gracias TaeTae. Te amo hermano.

Taehyung sonrió y se quedó al lado de él —Yo te amo más pequeño, siempre voy a estar contigo... No quiero que sufras más, vamos a salir de esto. Te lo prometo.

Jimin asintió y cerró los ojos abatido. En algún momento su mente volvió en el tiempo, un tiempo en el que era realmente feliz, sonrió cuando llegaron las imágenes de él caminando con Yoongi cuando aún eran amigos.

—Jimin está haciendo frío, mira, va a empezar a llover.

—Solo un poco más Yoongi, me encanta la lluvia, creo que todos se ven más lindos mojados.

—Tú te ves siempre lindo Minnie...

Y ese había sido el momento exacto en que se miraron y se besaron por primera vez. Bajo la lluvia.

Una lágrima se deslizó por su mejilla.

Yoongi lo había amado sinceramente, no por su cuerpo, ni por su bonito rostro... Yoongi había amado al verdadero Jimin, había amado cada parte de su ser, cada rincón de su personalidad, había amado sus defectos y aplaudido sus virtudes, entonces ¿Porqué lo había dejado ir? ¿Porqué le había hecho tanto daño si el lo amaba?

Cansado de pensar en el pasado esperó por su hermano, cada vez le dolía más respirar. Parecía que Taemin le había roto todas las costillas, pero lo que más hacía eco en su cabeza eran sus palabras.

La culpa de saber que había roto una familia lo tenía muy triste, esas pequeñas no merecían tener a sus padres separados. Pero todo se había salido de control desde primer día que el profesor le había coqueteado.

No había justificación para haber estado con un hombre casado, nunca la habría solo esperaba que el tiempo hiciera su trabajo y le diera la oportunidad de ser una mejor persona y quizá con el tiempo encontrar a alguien que lo quiera tanto como para estar con un hombre como él.

Un hombre usado.

≪ °❈° ≫

El Comeback me tiene mal 🙂

Video ✔
Álbum ✔
Talento y sensualidad ✔

Como siempre un placer verlos y escucharlos.

Amé una y cada una de las canciones del nuevo álbum... Pero si tengo que elegir una seria...

Jamais Vu. 

Sentí tantas emociones al escucharla, es hermosa. Mi príncipe Seokjin luciendose, lloro.

💜

Muchas personas están leyendo esta historia y estoy profundamente agradecida de todos. En serio.

sujin084  👉🏼❤

Es todo. Nos leemos pronto ❤


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