Todos creemos en el amor, piensas que cuando hay amor todo va ser superado, no importa cuánto daño ocurra siempre sanara por que el verdadero amor perdona.

Claro porque eso nos han enseñado y nos han metido en la cabeza. Crees que nunca más volverá a ocurrir. Pero si conoces el ciclo del conflicto sabes que es mentira, nada es perfecto.

Hermione amaba a su marido más de lo que puede imaginar, pero cuando nacieran sus hijos, Draco pasará al segundo plano.

La princesa sentía que ya no podía caminar, ni siquiera veía sus pies.

— Te odio, Draco. — Le dijo cuando él le estaba ayudando a ponerse los zapatos de suela baja. — ni siquiera puedo ver mis piernas.

El príncipe sonrió con malicia, amaba hacer enojar a su esposa. — Están en el mismo lugar.

— Eres imposible. — Hermione gruñó como un oso. — Tú tenías que ser un semental.

Ambos se pusieron en pie.

— Según recuerdo decías. — Draco trató de usar la voz más femenina que pudo. — "Más mi amor, oh dios eres tan..."

No pudo continuar pues Hermione lo había halado de la corbata hasta su altura. — Una palabra más y mis niños serán los herederos directos del rey.

—¿Matarías a tu sexy esposo? — Draco simuló secarse una lágrima. — ¿qué crees que dirán nuestros hijos? "Mamá mató a papá sólo porque le recordó como gemía al hacernos"

La princesa abrió la boca ofendida. — Quiero el divorcio.

El príncipe rió por lo bajo — Es la millonésima vez que me lo pides... Y mi respuesta es no, además me amas y yo te amo. — apenas inclinó la cabeza para darle un casto beso en la frente. — Juntos hasta el asilo cariño.

— o hasta el psiquiátrico. — Se quejó Hermione. Aunque dudaba que dejaran que su esposo siendo el rey se internase.

— Ahora me voy mi dulce girasol — Draco colocó su oído en el vientre de su esposa. — Nada de armar fiestas mientras mamá está con sus invitados. Ni se les ocurra adelantarse o voy a morir de angustia en mi viaje.

EL príncipe de Gales debía de viajar a Irlanda, el primer ministro lo requería con urgencia, no podía enviar a ninguno de sus primos o su hermana. Todos tenían deberes, los gemelos de ya tenían responsabilidades, sus tíos de igual manera, no había manera de evadir sus responsabilidades.

— No van a salir. — Hermione acarició su vientre, no mientras ella estuviese tranquila. Faltaba tan sólo un mes para que nacieran y ella se sentía tan inmensa como una ballena.

Draco partió a Irlanda en un vuelo, claro que Astoria tenía sus planes para hacerlo caer, para tentarlo y mostrarle su disposición. Después del parto las mujeres están demasiado ocupadas para tratar de recuperar su matrimonio y según la señora Latimer tenía entendido su amado había estado en la abstinencia.

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Theodore caminó lentamente al jardín del palacio de Buckingham, donde vislumbró al rey y a la reina consorte (madre de Draco) tomado el té, tras saludarlos notó mientras Hermione saludaba a varios invitados, son los compañeros de la universidad, se acercó hasta la princesa quien al verlo sonrió ─ Hola princesa, ¿Cómo estás?

La princesa sonrió y se tocó el vientre ─ Muy agotada, siento que si sigo aquí voy a morir por el dolor de pies.

Theo tomó una silla que le aproxima a Hermione ─ Aquí puedes descansar.

─ Gracias ─ Hermione por fin reposa en la silla─ Mis niños no han dejado de moverse, siento algunos dolores cada cierto tiempo... creo que...

─ ¡Pensé que no vendrías! ─ Pansy desternilló en risas al verlos juntos ─ Me robaste a mi amiga el día de mi despedida de soltera.

Pansy se casó con un guapo duque de Dinamarca semanas después de graduarse de la universidad, rápidamente fundó su casa de modas y está a punto de vestir a la princesa de Gales, Hermione la llamó por ese motivo, la fiesta de universitarios es una fachada para que parezca casualidad.

─ Me gustaría atender a tu reclamo, pero mis niños no están de acuerdo... pretendí creer que en la madrugada sentía dolor era falsa alarma, incluso dejé que Draco fuera a... ─ Hermione sintió una punzada de dolor─ a Irlanda.

─ Necesito ir a mi habitación y un médico, van a nacer y luego de 7 horas de dolencias no creo soportar más. ─ Hermione soltó un gemido de sufrimiento.

Theodore no pensó en nada más que no fuera Hermione, la tomó en brazos ─ ¡Los príncipes vienen en camino! ¡Su majestad ordene que envíen al médico!

La primera princesa en dar a luz en un Hospital fue Diana de Gales en cambio Hermione Princesa de Gales deseaba seguir la tradición de parir a los hijos en el palacio de Buckingham, respiraba como le habían enseñado las parteras, trataba de no pensar en nada.

No podía pensar claramente, así que estaba furiosa con él ─ ¡Draco Windsor te iras a infier...!

─ Si, fue a Irlanda ─ El conde la interrumpió mientras caminaban por los pasillos para que siguiera dilatando.

La vida es una ironía, Draco no estuvo en el nacimiento de sus hijos, durante cada dolor y mientras Hermione pujaba a sus gemelos, por pedido suyo Theo le sostenía la mano, limpiaba su sudor, le daba palabras de aliento. La princesa maldecía a su marido, se sentía abandonada, pero agradecía a su querido conde por estar con ella dándole de su tiempo. Entonces escucharon un llanto fuerte.

─ Es niña─ El médico recibió a la criatura, rápidamente la limpio y cortó el cordón umbilical ─ ¿Cuál es su nombre?

Hermione trato de respirar, tenía 5 minutos o menos para descansar para que saliera el otro gemelo. ─ María Victoria Lyra Isabel Windsor. ─ Recibió a su hija en brazos, era rubia, abrió los ojos eran grises como los de Draco, toda una princesa. La futura reina, porque la Reina Isabel II muchas décadas atrás había eliminado la ley que ponía a los hijos varones sobre las mujeres, por ello la pequeña era la segunda en la línea de sucesión al trono.

─ Es preciosa ─ Theo desbordaba por la emoción, Hermione volvió a sentir como la presión en su vientre volvía a aparecer, así que se la entregó. ─ Se fuerte, Mione.

Hermione empezó a llorar, su esposo no estaba con ella, fue una tonta al dejarlo partir, pujó durante los siguientes 5 minutos, un llanto no tan fuerte como el de Lyra se oyó y nació el siguiente príncipe que fue limpiado por el médico.

─ ¿Cuál es su nombre? ─ Preguntó el galeno.

─ John Jorge Scorpius Eduardo ─ Hermione respondió agitada y aliviada, le pusieron al niño en el pecho, besó la pequeña frente, rubio de ojos azules, un hermoso niño, que sería su preferido porque sería tratado diferente a su hermana.

Draco recibió la noticia del nacimiento de sus hijos en medio de la reunión con el primer ministro, se sintió orgulloso al saber que eran, luego se sintió mal cuando supo que Theodore se encontraba con Hermione y había sido el tercero en cargar a sus hijos. Había dolor en su corazón. Astoria tropezó "accidentalmente" con el cuándo se dirigía a los servicios higiénicos del hotel. No tuvieron sexo pero Lady Latimer supo cómo ganarse su confianza cuando este le contó de su dolor.