Nota: Se que por ahora la historia está yendo bastante lenta, pero hay varias cosas que necesito desarrollar antes de que lo grande, suceda. No quiero decir mucho porque arruinaría lo que tengo preparado, pero, espero que lo entiendan y, a pesar de todo, continúen leyendo. En fin, al capítulo.

Acgualización: Sabrá dios lo que tenía preparado. A pasado tanto tiempo, que ya no recuerdo a donde quería llegar con esta historia. A pesar de todo, publico esta parte que ya tenía hecha, haber si me inspiro en algo xd

El ambiente que recorría el gimnasio era sin duda, alentador.

Cinco muchachas que habían aprovechado algunos minutos de su rutina para entrenar sus músculos y descansar sus lenguas ocupaban gran parte del recinto. El aura que las cubría hacía sentir a cualquier persona que las viera, enteramente motivado y completamente listo para comenzar su entrenamiento, mientras el esfuerzo que le ponían a cada una de sus acciones, parecía raramente calculado e inspirador.

-Ah. Vinimos a una escuela diferente solo para hacer lo mismo que hacemos en Yotsuboshi...- a excepción de algunas quejas salidas de la menor integrante de S4, que no soportaba el hecho de encontrarse en un lugar completamente desconocido, y no poder disfrutarlo completamente por el "entrenamiento" que habían decidido hacer.

Ako, a su lado, resopló cansada, deseando poder callar sus comentarios sin sentido con poca motivación.

-Vamos Haruka, es solo por unos minutos. Además, tampoco queremos afectar la rutina de entrenamiento de Madoka-chan- comentó la rubia, mientras estiraba sus piernas en busca de calentar sus músculos y prepararse para la usual rutina de ejercicios que ralizaba normalmente en su escuela (solo que esta vez, tendría que realizarla en ambiente techado).

-¡Lamento la demora!- la joven de coletas, bañadas de un color rosa pastel, entró por las amplias puertas del gimnasio, sosteniendo cinco botellas de agua en su regazo, junto a algunas toallas y lo que parecían ser bolsas de dulces a su lado. Mahiru se apresuró en ayudar a la joven a repartir cada una de las cosas por separado, al mismo tiempo que escuchaba las palabras de la menor, con paciencia. -Y, no volví sola...-

Una joven de cabellera palida, junto a un mechón rojo al lado derecho de su rostro, entró a la habitación con una sonrisa, caminando tranquilamente hacia el grupo de estudiantes. La bandana azul en la parte superior de su pelo resaltaba sus ojos de color ámbar y su traje de entrenamiento de un potente azul.

-Kurosawa Rin. Un placer conocerlas- saludó formalmente al mismo tiempo que realizaba una reverencia sencilla, pero mostrando un respeto notable en cada fibra de su ser. Las cuatro jovenes devolvieron el saludo de la misma forma, mientras inspeccionaban con la mirada a la recién llegada.

-Le pedí a Rin-chan su ayuda con algunos ejercicios, y ya que tenía tiempo de sobra, decidió unirse a la rutina. Espero no les moleste...- comentó mientras bajaba la entonación de su voz, temerosa por encontrar una represalia por sus acciones, a lo que las chicas negaron con la cabeza con rapidez.

-Nijino Yume, un gusto. Y ellas son Kasumi Mahiru, Saotome Ako y Ruka Haruka- presentó la rubia mientras volvían a realizar una reverencia rápida, buscando demostrar que no se sentían para nada incomodas con la presencia de Rin en el lugar.

-Bueno, debo decirlo. Personalmente, prefiero los ejercicios clásicos. Ya saben, abdominales, cardio, un poco de estiramientos si es necesario o algo parecido. Pero si tienen algo más en mente, sería genial- habló Rin, dejando sorprendida a la rubia quien sintió el pleno contraste de personalidades entre Rin y Madoka. Mientras que la primera parecía bastante extrovertida y segura, Madoka era alguien más retraída y nerviosa en todo su esplendor.

-Uhm. ¿No sería mejor algo más eficiente? Como, algunos ejercicios vocales o practicas de baile. Esas son siempre necesarias- habló la de cabellera naranja, agregando una mirada tranquila a su comentario.

-¡Voto por la idea del baile! ¿A quien no le gusta bailar?- agregó Haruka provocando que Rin, asintiera débilmente con la cebeza, considerando lo dicho, aunque, rápidamente fue interrumpida con la calmada voz de Madoka a su lado.

-A pesar de que lo del baile suena tentador... Pensaba en algo más habilidoso, entrenar la fuerza del cuerpo con el cardio también es bastante útil y ni mencionar en el trabajo de abdominales...aunque, lo que ustedes quieran estará bien...-terminó susurrando, provocando que toda la fuerza con la que había comenzado, desistiera y se perdiera en el "lo que ustedes quieran" del final.

-Bien. Será mejor que nos dividamos en grupos. Yo realmente quiero ejercitar un poco las piernas así que iré con Mahiru y Madoka a correr alrededor. Rin y Haruka practicarán baile y canto junto a Ako. Después, cambiaremos de equipos, y así podremos hacer todo en uno ¿Está bien?- habló Yume de forma calmada, buscando resolver el conflicto y acertando, pues, no hubieron más replicas al respecto y cada grupo se fue a trabajar por su lado.

-Nos salvaste de una gran pelea...- susurró Mahiru en el oido de Yume, a lo que la misma rió en voz baja, tanto de nerviosismo como de gratitud. Madoka, a su lado, se limitaba a caminar tranquila, volteando la mirada de vez en cuando al grupo de Rin.

-Bueno, ¿Comenzamos con abdominales?- preguntó Mahiru en voz alta, a lo que la joven de ojos azules a su lado, se sobresaltó ligeramente, antes de asentir con la cabeza y comenzar a buscar un punto para realizar los ejercicios.

Por su lado, Rin y Haruka habían comenzado una amena conversación, mientras Ako, por su lado, revisaba su teléfono esperando que las susodichas terminaran de conversar, y rehusandose a molestarlas mientras hablaban, pues, unos minutos sin la voz de Haruka valían oro, y no merecían ser perdidos en intentos de romperlos.

-Uh. Hace tiempo, estaba trabajando en una coreografía para la próxima presentación de Dancing Diva...- habló Rin en voz alta, a lo que las dos jovenes levantaron la cabeza intrigadas, y preguntando al mismo tiempo por el nombre que había mencionado al final.

-Oh, claro, lo olvidaba. Dancing Diva es el nombre de mi unidad con Sumire-senpai. Hace tiempo que no logramos presentarnos juntas por lo ocupada que a estado con la presentación de su nuevo álbum y la filmación de una serie con ella como la protagonista, pero, por fin logramos que nuestras agendas encajaran y tendremos nuestro primer concierto en meses en cuatro semanas. Estaba tan emocionada que preparé una coreografía especial para este concierto- admitió sonrojada la joven mientras reía nerviosamente.

Ako, sonrió por lo bajo, sintiendo como la admiración de Rin por su senpai llegaba a otro grado, y recordando cuanto admiraba a Tsubasa-san cuando solo se encontraba en su primer año, y, aunque seguía admirandola, había llegado a la conclusión de comenzar a pensar por ella, por su carrera y por lo que Tsubasa-san había representado en ella y solamente en ella.

Se preguntaba cuando sería el momento de Rin-chan para desplegar sus alas y usar la admiración que siente por Sumire, para crecer por ella misma.

-Wow, Rin-chan, esa coreografía es genial. Le va a encantar, te lo aseguro- habló Haruka, provocando que la de cabello anaranjado volviera al mundo real en un respingo, notando como ambas habían vuelto a su conversadera de antes y ella, al mismo tiempo, volviendo a observar la pantalla de su celular.

Solo Rin sabría cuando sería el momento correcto para comenzar.