Estaba en casa mientras miraba el celular, mi madre me llamo desde la sala y con mala gana fui con ella.

Con resignación mire el dinero en mi mano sabiendo que tenía que ir a la tienda me gustase o no.

Un presentimiento paso por mi mente, algo iba a pasarme y no quería ir, sabía, lo sabía pero no podía hacer nada.

Esos presentimientos nunca fallan.

Fruncí el ceño y me despedí de mi madre, al igual que mi padre que estaba en casa ya que era fin de semana.

Les mire con amor y los abracé muy fuerte con una sonrisa triste, esperaba que no me sucediera nada. Pero si el destino así lo quiere, así se hará.

Con temor me separé de ellos y fuí a dónde me encomendaron, al sentir ese presentimiento más cerca marque a mi madre, pues me lleve el celular.

Al contestar empecé a decir cuánto la quería y lo muy orgullosa que estoy de ser su hija. Ella estaba confundida, yo empecé a correr al escuchar disparos.

Un tiroteo.

Mi madre se preocupo, yo me agache y me puse en el lugar más seguro que encontré aún escuchando las preocupaciones de mis padres por teléfono.

Después de minutos que parecieron horas se dejaron de escuchar los disparos, me esperé un poco más y salí de donde me encontraba para ir a casa, pero no pude.

Escuchaba la voz lejana de mis padres y con un hilo de voz hablé.

—Los quiero mucho... Díganle a mis hermanos... que se arreglen por mi... y que si no lo hacen les jalaré las patas por la noche. Gracias por... todo... Los amo. —con mucha dificultad me despedí de ellos, me costaba respirar y pronto moriría por perdida de sangre.

¿Así es como moriré?

Duele, duele mucho.

Sangre, hay mucha sangre.

No me gusta el olor a mi sangre.

Rojo. Mucho rojo.

¿Que es ese ruido?

¿Por qué está tan oscuro?

Bueno, fue una buena vida.

(...)

Cuando volví a abrir los ojos me encontraba en un espacio obscuro, los recuerdos taladraron mi mente, pero no hubo arrepentimiento alguno.

Lo único que si, fue que no termine de ver mis animes favoritos. ¿Mis hermanos abran hecho las pases?

Si lo hicieron... ¿Que bien? Esos idiotas esperaron a que muriera para que se arreglaran y sean los hermanos unidos de nuevo.

Que estafa.

Sali de mis pensamientos al sentir una presencia, voltee hacia ella y me pude encontrar aún hombre de apariencia elegante.

Su cabello albino y sus ojos azul cielo era algo hermoso. Su cabello a simple vista parecía sedoso aún que lo tuviera corto, su piel era blanca contrastando muy bien con sus ojos. Vestía un Kimono azul con flores blancas. Sus ojos parecían cansados y sin ganas.

Su belleza era exótica, nunca había visto algo así en la vida real, solo en cuentos o animes de fantasía. Aún que por su puesto no le llegaba ni a los talones a Gojo.

Le miraba atentamente esperando alguna palabra, cosa que el pareció captar.

—Yo soy Dan, seré tu guia para que puedas tener una vida mejor. Dadas las circunstancias, tu podrás reencarnar en un nuevo mundo que tú al parecer conoces bien —hablo con una voz ronca y aterciopelada mirando una tablilla con lo que supongo es mi información—, se te concederán cuatro deseos para poder sobrevivir en este nuevo mundo.

—De acuerdo, pero antes de eso ¿A qué mundo o universo iré?

—Iras al mundo de Boku No Hero Academia.

—Ya veo...

Me quede callada unos minutos, tenía que pensarlo muy bien para que yo no me pueda perjudicar.

—Mhm... Deseo tener los poderes de 8 personajes de mi elección —sonreí triunfante al ver su mirada de sorpresa y molestia, tal parece que cambiar y ordenar laa palabras si sirve—. Los personajes seran B.., M......, M...., E........, N..... U......, O.... U....., C.... V...., J... M. A.....

El suspiro con fastidio, me miró y asintió.

—Mi segundo deseo es un collar anti-quirk, me explico; el collar no permitirá que usen sus quirk en mi, al igual que si intentan meterse en mi mente serán expulsados de inmediato, más sin embargo este no me afectará a mi.

—Mmh... Buena estrategia, ¿tu tercer deseo?

—Mi tercer deseo es tener un harem inverso con mis personajes favoritos de este mundo.

—...—me miró unos segundos y suspiro- Esta bien... ¿Y el cuarto? —aceptó, pero pude ver en sus ojos lo cotidiano que es aquello. Me miró como una pervertida.

—Mmmh... Antes de eso voy a preguntar algo, ¿tu me vigilaras y me darás consejos para no cagarla en este universo?

—...—se quedó callado unos momentos, pero luego asintió

—¿No te gustaría mejor venir conmigo? ¿O ser libre?

Su sorpresa fue muy obvia, pero recobro la compostura.— Aún que quisiera no puedo, aún me falta mucho para cumplir con mi condena.

Tararee en compresión.— Umh que lastima, ¿Pero que pasa si... Deseo que tu condena sea reducida hasta que yo muera?

—Eso significa que sería libre en los palacios... —abrió los ojos al darse cuenta.

—Entonces ese es mi deseo, que cumplas tu condena conmigo y seas libre por los palacios.

—¿Estas completamente segura de esto? —se notaba nervioso, pero sin dudarlo dije que si.

—¡Definitivamente!

En sus ojos se miro una chispa de esperanza, me sonrió y hablo calmado.

—Gracias... Bueno, como serás mi última humana te diré una advertencia —su tono y expresión corporal se puso serio, a lo que asentí— Aquella dicha que hes tenido se convertira en desgracia, aquellos que te apreciaron ahora se marcharán, aquello que no tuviste ahora se te dara. —hablo sin perder esa seriedad— Espero que te vaya bien, nos comunicaremos pronto.

Yo le sonreí, pero antes de decir algo simplemente una luz cegadora apareció.

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¡Capitulo 1 publicado!

Espero y les guste, estos primeros episodios son como una introducción de como se enamoraron algunos personajes de ella, sin que ella pensará en enamorarlos todavía.

¡Si tuve algún error ortográfico pueden decirme con confianza!