—¿Qué haces por aquí? Tu casa está muy lejos de aquí-Preguntó Izuku

—Acabo de terminar de entrenar e iba a casa, pero vi la playa y quise estar un rato aquí-Hable —¿Y qué haces tú aquí?

—La misma razón que tú, acabo de terminar de entrenar-Dijo él

Pasamos unos cuantos minutos más en silencio mientras mirábamos el cielo y el mar, era tranquilo y te relajaba mucho. Pasados otros minutos por fin tuve el valor de preguntarle una cuantas cosas que siempre me preguntaba en mi mundo.

—Oye Izu, ¿puedo hacerte unas cuantas preguntas?

—Claro, porque no

—¿Por qué nunca haces nada para impedir que Katchan se meta contigo?-Dije

Izuku se quedó en silencio mientras miraba el mar, después de unos segundos habló

—Supongo porque no tengo ningún quirk, y eso me hace un inútil inservible a lado de Katchan-Dijo-Katchan tiene un quirk muy fuerte, y él es más fuerte en comparación mía

—¿Que coño acabas de decir? —Pregunté—Tú eres increíble y si nunca te lo han dicho eres una persona maravillosa, con un corazón gigante lleno de amor que dar para cualquiera. Da igual si tienes o no un quirk, ya que con o sin él puedes llegar a ser una persona muy fuerte. Yo confío en ti, y sé que podrás ser un gran héroe que salve a todos, que venza a los villanos con una gran sonrisa en tu cara como All might— La verdad desde hace mucho deseaba decirle eso a Izuku, ya que no me gusta que se sienta inferior a los demás solo por no tener un quirk.

Me levanté y le di le mano a Izuku para que se levantara también, entonces lo abracé con mucha ternura, pero el problema es que él era unos 6 cm más alto que yo, entonces empiezo a oír sollozos provenientes de Izuku, lo miré y lo encuentre con lágrimas saliendo de sus ojos

—No llores Izu

—Muchas gracias Elena, de verdad nunca nadie me había dicho cosas así, sabes que te quiero mucho y te lo agradezco, eres mi mejor amiga

Eso llegó a mi kokoro, por dentro estaba que saltaba de alegría, Izuku me ha dicho que me quiere ¡AHHHHHHH!

Al final nos quedamos un rato mirando el cielo hasta que Izuku se fue a su casa y yo a la mía.

De camino a casa me sentía muy contenta.

Llegue a casa, dejé mis cosas en mi habitación y me fui a bañarme. Pasados unos 15 minutos salí, y me puse este pijama:

Bajé y empecé a hacer la comida favorita de Aizawa, después de acabar de comer y guardarle un plato a mi precioso padre, empecé a arreglar las cosas de mis gatos. Al acabar de construir sus camas y sus rascadores, me fui a jugar con ellos. 

Cuando ya me había cansado cogí a los gatos y los puse en sus camas, pero ninguno quiso quedarse, porque querían dormir conmigo, por eso los dejé dormir conmigo

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Espero que les haya gustado, a mí me encanta, ya que por fin me siento bien por decirle eso a Izuku, ojalá alguien en mi vida me llegue a decir lo mismo que Elena a Izuku

Saiounara