58. Niño rico parte 3

Máximo me ofrece vino y yo lo niego.

―No, gracias, estoy a dieta. ―Obviamente miento.

―De acuerdo. ―Sonríe―. Prefiero tenerte sobria, aunque no te lo niego, sí estás un poco rellenita ―se burla.

¡¿Qué?!

Me sorprendo y toco mi vientre ¡Maldición! En cualquier momento se notará que estoy embarazada.

―¡Cállate, tonto! ―Me enojo y se ríe―. Deja de hacerte el buen chico y dime qué quieres para que me pueda ir.

Posa su mano sobre la mía.

―Pasar tiempo contigo.

Sonrío.

―No digas estupideces. ―Ruedo los ojos.

―Es verdad. ―Acerca su rostro al mío y yo se lo muevo.

―Deja de hacerte el galán de telenovela y dime qué quieres.

―Ya te lo dije. ―Agarra mi rostro para que lo mire directo a los ojos.

―No seas imbécil, antes de verte todo el tiempo, me suicido. ―Frunzo el ceño y saco mi mano de la suya, corriéndole la cara otra vez.

―¿Nunca me vas a perdonar? ―Bufa.

―Lo que hiciste no tiene perdón. ―Miro hacia el agua y me levanto caminando hasta la baranda.

Él me sigue y se pone a mi lado.

―Y si te digo... que en realidad esa noche... no fue solo sexo. ―Por alguna razón que desconozco, hace pausas cuando habla, se torna muy pensativo, cuidando cada palabra.

Una punzada pasa por mi pecho.

―No quiero hablar de lo que me hiciste. No quiero recordar cómo me rompiste el corazón.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top