El Secreto

Estaba sentada ahí en la camilla, limpiándome de una forma absurda mis lágrimas que estaban en mis mejillas y escondiendo inútilmente bajo las sábanas el libro, con las hojas arrugadas y arrancadas, que Summer me había regalado, di nuevamente una sonrisa fingida para intentar... Hacer ver que nada malo estaba pasando.

Da vinci (termino de limpiarme las lágrimas): Ho-Hola, Bosnia (sonrío).

Pero era inútil, Bosnia me estaba viendo sorprendida y un poco apenada de mi estado y se acercó lentamente hasta llegar al lado de mi camilla. A pesar de eso, seguía sonriéndole para disimular algo que ya era bastante obvio.

Ella puso su pata en mi cabeza y comenzó a sobarla de forma lenta para tranquilizarme. Subestimé a esta gata, ella era enfermera y por supuesto que conocía muy bien a los pacientes, tanto dolencias físicas como emocionales y sabía que estaba actuando.

Bosnia (sigue sobando mi cabeza): Da vinci, tranquila, no llores. Sea lo que pase puedes contar conmigo para ayudarte (preocupada).

Mantenía la sonrisa en mi rostro y reía nerviosamente haciéndome la confundida, pero ella seguía mirándome con una semblante preocupada e intentaba brindarme más confianza.

Bosnia (preocupada): Da vinci, sin miedos, amiga. ¿Deseas que te ayude en algo? Escucha, si es algo solo entre hembras puedes darte la libertad de decirlo. No quiero ver esa carita triste (coloca una pequeña venda en el dedo que me hice el corte con la hoja).

Me sonaba muy convincente su manera de ofrecer su ayuda. Fue la primera vez que alguien me insistía hasta este nivel de decirle la verdad. Sentía que podía contar con ella, que yo podía comentarle y de esa forma me ayude a salir del infierno que vivía con DJ...

Pero había varios inconvenientes, DJ me tenía estrictamente amenazada en el que me mantuviera la boca callada o sino... Me haría cosas mucho peores de las que ya he pasado... Me dijo que lo que había soportado era solo la cereza del pastel, que si me atrevía a hablar ya tenía preparada una larga lista de macabras atrocidades hechas para mí, entre ellas estaban meterme un cuchillo en el ojo; arrancar mis orejas a mordidas, fracturar por completo mi cola; y muchísimas cosas igual de hórridas y desgarradoras de las que he mencionado que seguramente no quisieran imaginarse en sus peores pesadillas. Esa lista de cosas me las mencionaba a la hora de dormir para luego burlarse de mí. Pensar en solamente la sensación de cómo era experimentar esos tétricos castigos me hacía erizar el pelaje del miedo, y a veces incluso no dormía por el trauma de haber soñado numerosas veces esos escenarios.

Para empeorar las cosas, me dijo que tenía documentos, tenía contactos y que tenía suficiente dinero para sobornar a un juez y quedar impune, y cuando él esté devuelta aplicaría esa lista conmigo.

De tan solo pensar eso, me llenaba de escalofríos, comencé a temblar, a jadear y a sollozar frente a Bosnia, no quería que me nada de eso me pasara, no quería correr el riesgo y... ¡No quería él hiciera esas horribles cosas conmigo!

Da vinci (tiemblo y me pongo nerviosa): Bosnia... De seguro otro paciente te necesita... Yo... Estoy bien (sigo sonriéndole).

Bosnia (preocupada): ¡No! No lo estás (sujeta mi pata con delicadeza para darme confianza). Da vinci, deseo ayudarte, pero debes de decirme que está pasando.

Sentía una confianza en Bosnia, sus ojos denotaba preocupación y las fuertes ganas que tenía por ayudarme, ya no quería seguir sufriendo, ya no quería guardando este secreto y sentía que este era el momento más adecuado, di un suspiro y dejé de fingir mi sonrisa para mirarla con mi semblante deprimida a la gata enfermera: ella me miró mucho más preocupada que antes.

Da vinci (sigo temblando): Bo-Bo-Bosnia... Te diré algo serio... ¿Pro-pro-prometes no decirle a nadie?

Bosnia (asiente): Lo prometo, amiga.

Da vinci (nerviosa): Estas heridas que tengo... No fueron hechas por una torpe caída en las escaleras...

Bosnia ladeó su cabeza extrañada y a la vez intrigada por lo que dije, me miró apenada y quería que continuara, cuando...

Bosnia (preocupada): Entonces... ¿Qué pasó, Da vinci? Puedes decírmelo sin temor, amiga.

Mi boca temblaba, era la primera que estaba tan cerca de decirle a alguien sobre mi secreto. Me sentía bastante nerviosa, mis patas temblaban y Bosnia las sujetó con delicadeza para intentar tranquilizarme.

Bosnia (preocupado): Dav, debes de tranquilizarte, no hay nada que temer. Haz lo mismo que yo... Inhala... Exhala... Inhala... Exhala.

Obedecí lo que dijo Bosnia y respiraba profundamente para poder bajar toda esa angustia que sentía por alrededor de dos minutos para que pueda calmarme de una vez y decirle de una vez las cosas.

Mis patas y mi mandíbula dejaron de temblar, solo jadeaba de vez en cuando. Miré a Bosnia a los ojos y ella me devolvió una mirada tranquilizadora y sobó mi cabeza.

Bosnia: Tranquila, Da vinci, ¿ya te encuentras mejor? (Me sonríe).

Da vinci: Ajá (asiento).

Las puertas de la habitación tenían una pequeña ventana en la parte de arriba y justamente cuando asentí noté que en esa misma ventana había alguien mirándonos, mi pelaje se erizó del terror al notar la demencial sonrisa de cierto dálmata con auriculares. DJ me miró a los ojos con esa traumante sonrisa y luego observó a la enfermera felina con el mismo odio que él lo hacía conmigo. Sacó la lengua y noté que en ella había una cuchilla de afeitar, el dálmata la cogió con una de sus patas y la pasó delicadamente, sin hacerse cortes, por su lengua unas cuantas veces mientras continuaba viendo a la minina con vesania, demostrando sus maliciosas intenciones.

Bosnia al verme mirando la puerta con miedo volteó para ver qué cosa me alteraba y justamente DJ se hizo un lado y evitó ser visto por la gata.

Bosnia (me sonríe para tranquilizarme): Tranquila, Da vinci, no hay nadie. ¿Quieres que vaya a la puerta para demostrarte que no haya nada? (Se me separa y va a la puerta).

Da vinci (alterada): ¡NOOO! ¡No vayas a la puerta, por favor! ¡No lo hagas!

Bosnia se detuvo en seco y me miró más preocupada que antes, hubo un pequeño silencio en la habitación y le sonreí fingidamente para disuadirla y hacerla volver a donde estaba yo. Ella había sido buena conmigo y no deseaba por nada del mundo que le ocurra algo malo solo por un secreto... ¡No quería que DJ le hiciera algo parecido con lo que hacía conmigo con esa cuchilla de afeitar!

Sentía mi oportunidad se había ido, DJ ahora estaba ahí observando y si le decía media palabra a Bosnia, ella correría mucho peligro. Lagrimeé por la impotencia para luego dar un leve suspiro y mirar a Bosnia a los ojos mientras sentía que me rompía por dentro.

Da vinci (voz quebrada): Bosnia...

Bosnia no dudó en darme un reconfortante abrazo para tranquilizarme mientras me sobaba el lomo y yo lagrimeaba en su hombro mientras seguía mirando con mucho miedo a DJ en la ventana de la puerta.

El reconfortante abrazo duró un minuto y Bosnia se separó y limpió mis lágrimas con un pañuelo.

Bosnia (preocupada sirve un tazón de una jarra y me lo da): Da vinci... Toma esto, te sentirás mejor, es una infusión que tomaba muy seguido cuando era pequeña y vivía en Bosnia y Herzegovina. Créeme que te sentirás más tranquila con cada sorbo (me ayuda a posicionar mi cabeza y a tomar).

La infusión sabía diferente a otras que había tomado, tenía razón, me relajaba hasta cierto punto, pero aún sentía la presencia de DJ atrás de puerta, mirándonos con maldad y sobre todo a Bosnia.

Mi oportunidad se había ido, debía de volver a mentir, por el bien de Bosnia, por el bienestar de mi amiga gata. S me había quedado claro que no todos los gatos son malos, que... Hay tantos canes malos como gatos buenos. Y DJ y Bosnia eran claro ejemplos de ello.

Bosnia me trataba de muy buena manera y no porque sea enfermera sino porque en verdad ella tenía un buen corazón. Ella me había hecho calmar a base de abrazos y darme una infusión. No como lo hacía DJ en casa que me callaba colocando una almohada en mi rostro y haciendo presión hasta quedar inconsciente por falta de aire. Eso sucedió tres veces. Y en las tres veces creía que moriría. Aunque... Llegue varias veces a pensar que la muerte sería algo mejor que mi forma de vivir.

Estaba ya tranquila en la camilla y ya había terminado mi infusión.

Bosnia: ¿Mejor?

Da vinci: Ajá.

Bosnia: Me alegro, dálmata. Si deseas, me puedes decir luego esa cosa que te atormenta tanto. No quiero que te sientas presionada a decirme lo que en verdad ocurrió.

Sabía que Bosnia comenzaría al menos sospechar y eso no quería. Tenía algo planeado en mente para que se olvide todo lo que dije, pero... Hacer ese algo me dolería mucho más a mí que a ella. Mucho más porque se trata de alguien que realmente se preocupaba por mí.

Lograba olfatear a DJ, seguía atrás de la puerta, los gatos no tienen tan buen olfato por lo que Bosnia no sabía del peligro que corría. Tenía que hacer ese algo ahora para que DJ no lastimara a mi amiga.

Da vinci: Bosnia... Te mentí, e-era una broma, yo sí me caí de las escaleras porque fui una torpe. Puedes irte.

Bosnia (preocupada): ¿Una broma? Da vinci yo sé cuándo alguien dice la verdad y cuando alguien miente.

Da vinci (seria): ¡Te dije que estoy bien! ¡No me pasa nada y si me pasara no te debería de contar!

Como ya algunos lograron descifrar, la manera que tenía para que Bosnia se aleje del caso y que no esté en metida en problemas... Era hablarle de una forma ruda y grosera para que no tenga una razón de preocuparse por mí.

Da vinci (fingiendo enojo): ¡Déjame en paz, Bosnia! ¡Vete de aquí! ¡No necesito a una gata como tú que me ayude!

Me dolía fingir mi enojo... Me dolía hablarle de esa forma pero me sentí obligada a hacerlo o DJ le haría algo mucho peor. Y es que en efecto, mi plan funcionaba, DJ apegó su oreja a la puerta y oía atentamente cómo trataba rudamente a Bosnia, y de esa forma convencerle que ella no tenía nada que ver y que no sabía la verdad.

Bosnia (baja las orejas): ¿Da vin-...?

Da vinci (fingiendo enojo): ¡Sal de mi habitación, Bosnia! ¡No vuelvas a menos que te llame, estúpida gata! (Lagrimeo y me limpio rápidamente).

Bosnia: ...

Da vinci: ...

DJ cuando oyó que le dije eso a Bosnia, sonrió malvadamente y escondió la cuchilla de afeitar en otra parte. Había logrado poner a Bosnia a salvo... Pero... Me dolía en el alma todo lo que le había dicho, me sentía como la peor can del mundo e impotente de no hacer nada ni de pedirle perdón...

Bosnia (suspira apenada): Yo... Creí que estaba siendo un buen trabajo... Que estaba haciendo lo correcto... Mis compañeros tenían razón, ser enfermera no es lo mío... Perdón si te causé un gran malestar, Da vinci... (baja las orejas) Será mejor que me vaya, cualquier cosa toca el botón que tienes al lado, lo más probable es que venga alguien más que yo... Que te mejores, Da vinci (finge una una sonrisa y se voltea para salir de la habitación).

Pude diferenciar esa sonrisa que me dio, le había dolido mis comentarios y el hecho haber rechazado su ayuda. Yo también estaba con una terrible culpa y me sentía impotente. Todo había salido a favor de DJ y lo único que me aliviaba es que él no le hiciera daño a Bosnia, ella ni bien salió de la habitación tenía la mirada nublada por mis palabras y no logró ver a DJ sentado al lado de la puerta; corrió hacia la dirección contraria, exactamente a una parte del hospital donde no había nadie, donde solo había máquinas por reparar o cajas de medicina. DJ al ver que la gata estaba corriendo decidió mirar a los lados, comprobar que nadie los observaba y corrió tras ella junto a la cuchilla de afeitar.

Bosnia llegó hasta el almacén y se colocó en medio de dos cajas para mirar apenada el suelo.

Bosnia (suspira y sujeta una foto de ella): Creí que sería una buena enfermera para todos, pero veo que... No es así.

(Créditos del fan art: Ann_Nickole)

DJ, con la cuchilla de afeitar escondida en una pata ,entró al almacén y encontró a la gata ciertamente apenada.

DJ (finge preocupación): ¿Enfermera Bosnia?

Bosnia (lo mira sorprendida): Oh, ¿qué haces aquí? Espera... Eres el novio de Da vinci, ¿cierto?

DJ (finge una sonrisa): Así es, iba llegando (miente) cuando te vi salir apenada de la sala de ella y me preocupó, ¿cómo está ella y qué sucedió para que estés así? (se acerca a ella con la cuchilla de afeitar escondido en una de sus patas).

Bosnia (suspira): No lo sé, en un principio ella tenía miedo y se sentía angustiada con decirme algo que escondía. Pero luego misteriosamente me dijo que era una broma y cambió su actitud a una agresiva y algo grosera, realmente no entiendo qué sucedió para que se comportara así.

DJ (finge preocupación): Oh, lamento que haya dicho eso (se pone a su lado y la mira de manera comprensiva) ¿Te dijo algo más, Bosnia? (continúa escondiendo la cuchilla). Puedes contar conmigo, yo también estoy preocupado por lo que sucede con Da vinci.

Bosnia: Me dijo que sus lesiones no habían sido productos de una caída por las escaleras.

DJ (finge preocupación y acerca su pata con la cuchilla más a ella): ¿No? ¿Entonces?

Bosnia: No lo sé, hasta ahí se quedó, tenía algunos ataques de pánico que no la dejaban hablar y luego cuando ya estaba calmada dijo que no quería hablar conmigo y que me vaya de la habitación. Fue algo repentino y no me explico por qué hizo eso.

DJ al oír lo que dijo Bosnia no se sintió obligado a usar la cuchilla de afeitar y simplemente la siguió ocultando en su pata pero no con la intención de hacerle daño como lo tenía en un principio. "Menos mal que esta maldita gata aún no sabe nada" se dijo así mismo y le sonrió a Bosnia para luego sentarse a su lado.

DJ: Oye, te tengo que hablar algo sobre Da vinci que van a explicar las cosas que pasó hoy, solo no quiero que no estés triste y que levantes esas orejas caídas (le da un abrazo con una de sus patas). 

A Bosnia le sorprendió esta acción de DJ pero a la vez le agradeció con una sonrisa y lo miró atentamente. 

DJ: Verás... Da vinci tiene un secreto que ni ella misma sabe. (acerca su hocico a la oreja de la gata) Ella tiene síndrome de Asperger y no razona como el resto.

Bosnia (sorprendida): ¿Síndrome de Asperger?

DJ: Así es (saca unas hojas que verificaban lo que dijo). Perdón por no mostrártelas antes, estas hojas las traje de Londres, en ella se ve el historial médico de Da vinci y como podrás observar, aquí señala que ella padece de este trastorno.

Lo que decía DJ esta vez era verdad, en ese momento no tenía ni idea de que padecía de Asperger, ni siquiera sabía qué es lo que hacía este trastorno, créanme que no tenía idea. Simplemente... Era yo misma. Aunque... El hecho de ahora saber de que no podía razonar como los demás sea una explicación de que por qué era tan crédula en las palabras que me decía DJ.

DJ (con una sonrisa en el rostro): Debido a esto, es que Da vinci... Es tan inocente, tan desconectada al mundo que lo rodea y solo se la pasa pintando, ya sabes, es una forma de expresar sus sentimientos y le ayuda a relajarse tal cual hacen muchos pacientes con este síndrome. Es normal que ella tenga cambios de humor frecuentes (comienza a mentir), además de que en muchas ocasiones se siente asustada cuando no está alguien cercano con ella, y lo más importante, a veces dice cosas sin sentido o mentiras que ella se la cree en su mundo. He hecho todo lo posible para que ella tenga una vida normal y se sienta cómoda, pero a veces no puedo con todo y me preocupa mucho que ahora esté ella sola en aquella habitación... Me mencionaste que ella te dijo algo que te dejó desconcertada, ¿verdad? Pues... Seguramente sea otra de sus mentiras y cambios de humor que experimenta seguidamente. Agradezco todo lo que has hecho por ella, Bosnia, pero lo mejor será de que alguien que la entiende esté a su lado... Yo. Cualquier cosa, recurriré siempre a tu ayuda. No dudes que eres una gran enfermera, gatita (se muerde los labios para evitar reírse).

DJ es un experto en las mentiras sin lugar a dudas, con su voz, con su seguridad y con la forma que se expresaba era muy difícil dudar en lo que decía. Bosnia siguió leyendo los papeles y confirmando que yo tenía síndrome de Asperger, fecha de nacimiento, edad, entre otras cosas que toda enfermera revisa en la hoja médica. Bosnia poco a poco comenzó a "entender" la situación. DJ le había contado una verdad a medias, mezclando la verdad con la mentira para que él salga ganando y tome más control de lo que sucedía, era un genio para el engaño para seguir saliendo invicto.

Bosnia: Wow... Esto... Cambia las cosas... Es la primera que trato con una can que tiene síndrome de Asperger, creo que será cuando yo dé todo de mí para que Da vinci se sienta cómoda (sonríe).

 DJ (finge una sonrisa): Y yo estoy seguro que lo harás bien, enfermera Bosnia. Me alegra que te preocupes por mi novia tanto como lo estoy yo... La extraño y deseo ver cómo está, amiga. ¿Crees que me puedas dar la autorización para que yo esté en la habitación de Da vinci y la cuide en los momentos que no estés? Acuérdate que ella solo se sentirá cómoda con alguien a quien conoce a su lado. Y yo soy su novio, creo que merezco estar con ella.

Bosnia: Oh, esto jamás me ha pasado, tendré que hablar con mis superiores para ver si es que podemos hacer esto... Yo no te-

DJ (finge pena y fuerza una lágrima mientras agudiza su voz): Bosnia, por favor, se trata de Da vinci, yo no puedo dejarla ahí sola en su habitación, se debe sentir asustada y puede hacerse algún daño, por favor (sujeta la pata de la gata mientras le pone ojitos de cachorrito).

Bosnia (cayendo en su trampa): Muy-Muy bien, DJ. Te dejaré estar con ella porque en serio necesito que ella necesite todo el apoyo de sus cercanos, si es posible en el tiempo en el que se recupere le podría dar terapias para que ella se pueda comportar mejor y no tener esos cambios abruptos de emoción.

DJ (le da una lamida en la mejilla fingiendo emoción): ¿Lo dices en serio? Wow, eres la mejor, Bosnia. Gracias... 

Bosnia (ríe tiernamente por la caricia): De nada, DJ. Espero que esto traiga muy buenos resultados.

DJ (finge emoción): Ya verás que sí, amiga. Por cierto me alegraría mucho que sigas siendo la enfermera de Da vinci, ya verás que con el paso el tiempo te tendrá mucho cariño y quizá hasta sean muy buenas amigas, minina.

Bosnia (sonríe al oír eso y la vibración de su collar la interrumpe): Oh, al parecer mi descanso ya terminó, debo de volver al trabajo a ver a más pacientes, ten, toma (le da un carnet) con este carnet tendrás la autorización de entrar a la habitación de Da vinci incluso cuando no sean horas de visita. Ah y una cosa más, por favor... Llámame para lo que sea, quiero demostrarme a mí misma que puedo ser una gran enfermera y tratar de la mejor manera posible a los pacientes y sobre todo, cuidar a tu novia.

DJ: Bosnia, con lo que me has demostrado, eres una gran enfermera que se preocupa por los demás, en serio que eres la gata más generosa y bondadosa que he visto, además de verse tierna (se muerde los labios para evitar reírse).

Bosnia (se sonroja): Ay, DJ, me halagas (ambos ríen). Bueno (se levanta) me tengo que ir a atender a otros pacientes, hasta luego, DJ. Manda saludos a Da vinci de mi parte.

DJ: Claro lo haré (la ve alejarse).

Una vez que Bosnia salió del almacén a seguir con su trabajo DJ la miró cómo se alejaba y esa sonrisa alegre la transformó en una mirada de odio hacia la enfermera. 

DJ (susurra para él mismo): No puedo creer que haya abrazado y lamido a una maldita gata hija de p*ta. (mira el carnet) Al menos la muy ingenua me dio esto (ríe con maldad).

Camina lentamente a la habitación en la que me encontraba tarareando una canción de cuna que me estremecía cada vez que lo cantaba en casa.

*  *  *  *  *  *  * 

Spike y Summer estaban regresando a casa, había pasado un tiempo desde que me habían dejado el hospital y ya era de noche, y se encontraban por el parque por una petición de Spike.

Summer (preocupada): Cielo, debemos de ir a casa, va a hacer más frío.

Spike (sigue avanzando): Primero quiero ir a ver a esa escalera que Da vinci había mencionado.

Spike se fue a la escalera del parque que mencioné que había sufrido el desafortunado accidente.

Spike: Si es que tuvo ese accidente, al menos tiene que haber sangre o algún testigo que nos digas las cosas qué pasó, la historia de Da vinci no me da buena espina.

Demoraron un rato en llegar a la zona de mi supuesto "accidente" pero grande fue la sorpresa de los dos que estaba completamente despejado, no había olor a sangre, ni marcas de sangre, ni huellas en la nieve que denoten que alguien se haya caído de aquellas escaleras.

(Créditos del fan art: douligswad)

Summer (extrañada): Qué extraño... Esta es la única escalera que Da vinci se pudo haber caído.

Spike (serio): Te dije que algo me daba mala espina con la historia de Da vinci. Voy a volver al hospital a hablar con DJ de macho a macho (da media vuelta).

??? (desde arriba de las escaleras): Hey, ustedes dos, hola de nuevo ja.

Spike (voltea y observa seriamente a un chihuahua): ¿Tú otra vez? ¿Qué haces aquí?

Gerard: Oh... Nada, solo limpiaba las escaleras del duro accidente que tuvo Da vinci (finge tristeza). Verás, DJ me dijo por teléfono que limpie esta escena ya que los perros o humanos se pueden disgustar de ver la escena. ¿Entienden? (saca una pala que tenía al costado). Pobre DJ, debe estar tan estresado por lo que pasa con su novia, creo que lo mejor sería darle un respiro, ¿no lo creen? Es por eso que hago este pequeño favor con él. Por cierto, mi nombre es Gerard (les sonríe). 

Spike miraba seriamente al chihuahua, no le daba mucha confianza, pero... Lo que decía tenía sentido, no tenía idea de que ese tal Gerard estaba metido en este juego sucio de DJ. Summer le creyó inmediatamente a Gerard pero Spike le dio una mirada seria que hizo que Gerard se sintiera incómodo.

Gerard: Oigan, ya va a ser más noche y al parecer va a nevar, lo mejor es que estén abrigados en su casa. Cuídense, un gusto en conocerlos (Se retira).

Summer: Ya lo oíste, amor, es solo un amigo de DJ que estaba ayudando a limpiar las escaleras (se da media vuelta y camina unos pasos) ¿Spike? ¿Qué acaso quieres congelarte? (ríe y le jala de la bufanda en son de broma).

Spike caminó en silencio siguiendo los tirones que su esposa le daba, se había quedado pensativo, sobre el comportamiento de Gerard y si este estaba diciendo la verdad. Hasta que algunos copos de nieve cayeron en su nariz y lo hicieron despertar de sus pensamientos.

Summer: Vamos a casa, cielo, ya va a nevar.

Spike (dudoso): De acuerdo (aumenta la velocidad de sus pasos). 

Mientras que la pareja se alejaba, Gerard sonrió malévolamente, su plan les había engañado por completo y lo que hizo a continuación fue llamar a DJ.

Gerard: Oye, wow, tenías razón, esos dos vinieron hasta aquí para ver la zona del accidente. Vaya que piensas en todo, dálmata listo.

DJ (desde el celular): Te lo dije, no sospechan nada, ¿cierto?

Gerard: El dóberman me miró raro por un rato pero en sí todo bien.

DJ (desde el celular): ¡Rayos! ¡Ese metiche de Spike! Ya me encargaré de él luego. Oye, ve a casa y conéctate, hoy habrá show.

Gerard (sorprendido): ¿Show? ¿Bromeas? ¡Estás en un hospital!

DJ: Eso ya lo sé, pequeño bastardo (ambos ríen). Descuida que yo... Ya sé cómo arreglar las cosas, una gata me terminó dando un carnet y ahora soy libre de todo, compruébalo entrando a la transmisión desde mi laptop.

Gerard: Eres el mejor, DJ. Qué emocionante y excitante es participar en esto (aúlla y sonríe de maldad para ir a la casa de DJ). Te estaré esperando (cuelga y corre hacia la casa).

*  *  *  *  *  *  *

DJ estaba caminando por el pasillo, con unas toallas en su lomo, acercándose poco a poco a mi habitación, saludaba al personal médico o a otros pacientes perros para no levantar sospechas. Desde mi camilla, pude oír como alguien abría la manija, me encontraba preocupada por cómo estaba Bosnia cuando llamó mi atención el sonido chirriante de la puerta y vi a DJ parado en medio de la puerta, terminó de entrar y la cerró con seguro para proceder en tapar la ventana de la puerta con ayuda de una de las toallas que traía, encendió la cámara que usaba en su collar y comenzó a acercarse. Estaba temblando y no tenía las palabras adecuadas para describir lo aterrada que estaba, rápidamente traté de llamar a Bosnia con el botón que tenía a un costado, pero DJ corrió y me lo apartó a un lado presionando mi pata con sus dedos.

Da vinci (lagrimeando): ¡AU-AU-AU-AU! (me tapa la boca con una toalla imposibilitándome hablar).

DJ (hace más presión): Así que quisiste decirle a Bosnia sobre que te golpeaba, ¿eh? Te rompí esa patita que tienes y puedo hacer lo mismo con esta, maldita perra (hace más presión).

Traía la toalla en la boca y lo que salía de mí eran apenas gemidos ahogados del intenso dolor que me traía sentir su apretón en mi debilitada pata.

DJ (sonríe con maldad): Fuiste muy astuta al comportarte de manera impulsiva para que no le hiciera daño a esa estúpida gata. Pero mira ahora quién es la presa (ríe). La salvaste y ahora tendrás que tú asumir las consecuencias.

(tratando de hablar entre sollozos) ¡NO! ¡NO! ¡NOOOO!

•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•.

Nota de Autor: Yo NO promuevo los actos de maltrato e ideas maliciosas que se ve en este fic. Esta nota también va para los futuros capítulos.

Lamento la demora en actualizar, las tareas y deberes me quitan tiempo pero prometo esforzarme para seguir subiendo contenido más seguido, es por eso mismo que hice este capítulo más largo que los otros para compensar mi atraso.

Hasta aquí el capítulo, espero que les haya gustado.

Y ya saben, comenten, voten y recomiéndenme que así me apoyan mucho.

Sin nada más que decir...

BYE BYE

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top