Caída
Da vinci (Asustada hablo rápidamente): Yo me tengo que ir pronto a mi ca-
(oigo un disparo).
Cuando oí el disparo, lo primero que me pasó fue sentir que todo en pasaba cámara lenta, sentí cómo todo se volvía lento y solo mi corazón bombeaba en mi interior. Volteé la mirada por completo, muy asustada para ver a Alex y esperándome lo peor... Solo me alcanzó abrir tenuemente mi boca y gritar su nombre...
Da vinci (asustada): ¡ALEX!-
Sin embargo... Olvidé el detalle que aún me encontraba en la rama de ese árbol y cuando volteé hice un movimiento brusco; generó que una de mis patas delanteras se resbalara de la delgada rama e hiciera que caiga hacia adelante. Me golpeé ligeramente el mentón y la parte baja de mi cuerpo, no me dio tiempo ni de ver a Alex, estaba algo confundida y veía mareada producto del golpe, noté que poco a poco mi cuerpo se estaba resbalando hacia uno de los lados de la rama y que la parte de atrás de mi cuerpo cayó de la rama de donde estaba.
Todo en pasó en cuestiones de milisegundos y estaba colgada de esa rama, mis patas delanteras se sujetaron con fuerza de la rama para evitar caerme, era una caída de 3 metros y estaba segura que si me caía de esa altura posiblemente me rompería varios huesos o hasta podría morir. Seguía sin prestar atención o mirar a Alex, solo estaba concentrada en no caerme, mis lágrimas se deslizaban por mi rostro y solté un pequeño jadeo al ver que mis patas se resbalaban de la rama principal. Me comencé a desesperar y de un momento a otro, me solté de la rama de ese árbol...
Todo había pasado muy rápido, me preguntaba si hasta aquí había llegado mi vida, si Alex estaba muerto por mi culpa... Todo ese pesar se me presentó en la mente en menor tiempo del aleteo de un colibrí... Seguía en caída y, como les había mencionado antes, todo lo apreciaba en cámara lenta, supongo que sería algo que genera nuestro subconsciente en situaciones de riesgo y que solo gente que haya caído de un lugar alto lo ha experimentado... Lo único que hice en ese tiempo, fue cerrar mis ojos y prepararme para el impacto...
Hasta que...
Sentí una pata sujetando con fuerza a la mía. Miré hacia arriba y era Alex quien en su rostro denotaba preocupación, estaba estirado, con medio cuerpo arriba de la rama y la otra mitad estirándose para sujetarme y evitar que cayera.
Alex: ¡Da vinci, agárrate fuerte! (seguía sujetando con fuerza).
Era un gato, los gatos por lo general son más pequeños que los perros y yo era un poco más grande que Alex y por ende más pesada, se veía en su mirada que usaba todas sus fuerzas para evitar soltarme. No sabía que hacer en ese momento, si me movía podía balancearme y dificultar que Alex me siga sosteniendo. Así que lo que hice fue estirar mi otra pata y sujetarme fuerte a la de él.
No tengo idea de dónde Alex sacó la fuerza, posiblemente la adrenalina y las hormonas que el cuerpo expulsa en momentos de riesgo fue lo que le dio ese empuje, esa fuerza implacable que Alex sacó y logró subirme. Y fue algo que no desaproveché, con las punta de mis patas logré tocar la rama y sujetarla, poco a poco me fui impulsando para subir, estiré mi pata trasera al otro lado de la rama y finalmente... Luego de segundos de intensa tensión logré subir a la rama.
Con más cuidado, Alex y yo entramos al escondite que estaba en el árbol. Ambos sudábamos y jadeábamos luego de lo que acabamos de afrontar. Intercambiamos mirada y él se acercó con cuidado.
Alex (cansado): Da vinci... (suspira aliviado) Gracias al cielo que no te caíste... (me abraza preocupado).
Da vinci: Alex... (con las orejas bajas) Gracias (correspondo el abrazo entre lágrimas).
Estaba llorando y no sabía qué decir, solo agradecerle de que me haya sujetado con fuerza, le debía la vida y estuve abrazado de él durante un tiempo. Por un momento se me olvidó de que Gerard me oía y que había oído un disparo, fue en ese momento que miré de pies a cabeza a Alex para cerciorarme de que si le cayó la bala que Gerard disparó.
Alex: Mm, ¿qué me miras tanto, Da vinci? (le reviso atrás de sus orejas) Hey, suelta mis orejas (suelta una risita).
Da vinci (preocupada): ¿No te cayó la bala?
Alex: ¿Bala? ¿De qué bala hablas? Yo no oí nada (extrañado).
Da vinci: ¿No oíste ningún disparo? (Sorprendida).
Alex: No, Da vinci, ni ningún ruido fuerte.
No entendía lo que pasaba, había oído perfectamente el sonido de un disparo. Estaba nerviosa y mis patas delanteras temblaban, no entendía muy bien lo que pasaba, pero me aliviaba saber que Alex estuviera bien y que siguiera vivo.
Alex notaba que estaba nerviosa, él notaba que tenía miedo y que seguía asustada por todo lo que acaba de pasar, se acercó lentamente hacia mí y se puso a mi lado y luego, pude oírlo y sentirlo ronronear.
Da vinci (sorprendida lo veo): Wow... ¿Cómo haces eso?
Alex: ¿Qué cosa? ¿Ronronear? Pues es algo que los gatos hacen por varias razones, en esta ocasión, para calmarte y ayudar a que te sientas mejor (continúa con su ronroneo).
Da Vinci: Jeje (sonrío y levanto mis orejas) Pues sí, esto me hace sentir mejor, pero qué tierno te ves (acaricio su cabeza).
Alex: Jeje, gracias y me alegra saber que te ayudé a esbozar esa sonrisita (intercambiamos miradas).
Da vinci: Jeje, no sabía que los gatos podían hacer eso, ¿Cómo lo haces? ¿Me enseñas? (Le pongo ojitos).
Alex: Ehm... Davi, ronronear es propio de los gatos y felinos (se rasca la nuca). Los perros tienen habilidades para otras cosas.
Da vinci: Pero mí me gustaría ronronear. Mm... Prrr? (ambos reímos).
Alex: Jeje, eso sonó muy bien (me acaricia la cabecita). Oye, creo que me dijiste que ibas a ir a casa, ¿verdad?
Da vinci (miro a otra parte): Sí, debo de volver...
Alex: Pues cuando desees, llámame, estaré disponible (le entrega su número dentro de un pañuelo).
Da vinci (guarda la nota abajo de su pañuelo): Lo haré, Alex, gracias por todo.
Alex: Te ayudaré a bajar, ¿vale?
Da vinci: De acuerdo (le sonrío).
Me ayudó a bajar y ambos nos despedimos, se sintió muy bien hablar con él y a pesar de lo movida y hasta tensa que fue la noche, Alex estaba vivo... Me quedé un rato viéndolo, cómo se alejaba poco a poco y le despedí con la patita, estaba feliz que él estuviera bien y agradecida por darme su tiempo para pasar el rato. El inconveniente es cuando Alex se fue volvió una luz roja a apuntar mi pata.
Gerard (ríe a carcajadas): De verdad, DJ tenía razón es muy fácil manipularte.
Da vinci: Cállate... (voy a casa decaída mientras que luz roja me seguía).
No quería hablar con Gerard, le tenía miedo tanto como a DJ y solo caminé cabizbaja a mi casa, la luz roja me seguía no importa dónde iba. Pasé la noche así, vagando hasta llegar a casa, las luces estaban apagadas y esperaba que DJ no se hubiera levantado, abrí la puerta con cuidado y me fui al baño a lavarme sin hacer mucha bulla, al parecer DJ seguía dormido y ebrio.
Gerard: Da vinci, ¿quieres saber lo que hice esta noche? La verdad es que el oído es el sentido más fácil de engañar, ese sonido de disparo fue para asustarte, lo hice con un reproductor de sonido. Solo tú lo oíste porque lo puse cerca al micrófono. Y las luces rojas que te siguen, son de cámaras de seguridad de toda Ámsterdam, te estoy vigilando ahora mismo desde la comodidad de mi cama (ríe fuerte). Pero ojo, eso no significa que no te haré daño cuando lo merezcas o atacar a quienes amenacen lo que DJ y yo estamos haciendo. No le diré nada a DJ, será nuestro secretito pero si lo haces de nuevo, no dudaré en acabar la vida de ese gato y avisarle a DJ para que te corrija jaja. Agradéceme a mí la forma en la que DJ te trata, yo lo jalé a este mundo de los videos en el que tú sales como protagonista.
Da vinci: ¿Quieres decir que tú corrompiste a DJ? (temerosa miraba a todas partes). ¿Eso hiciste?
Gerard: Más o menos, él aceptó sin ninguna duda, al pareces, ya lo tenía guardado y solo lo incentivé jaja.
Da vinci: Ambos están mal de la cabeza. ¡Ambos son unos monstruos! (lagrimeo golpe sin mucha fuerza el suelo).
Gerard: Shh, no hagas mucha bulla, no quieres que DJ te encuentre en la sala (de manera burlona). Ahora creo que mejor será que descanses, lo necesitas, cachorra jaja.
Asentí y lagrimeando en silencio subí las escaleras... Tan cerca y a la vez tan lejos... De salir de esta pesadilla... Abracé fuerte el cubo Rubix que Alex me dio y me eché a dormir. Pensando en que las cosas acabarán algún día...
Te extraño, Londres... Jamás debí dejarte...
•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•=•
Nota de Autor: Yo NO promuevo los actos de maltrato e ideas maliciosas que se ve en este fic. Esta nota también va para los futuros capítulos.
Lamento la demora en actualizar, las tareas y deberes me quitan tiempo pero prometo esforzarme para seguir subiendo contenido más seguido.
Una aclaración, el universo en el que se desarrolla este fic es completamente diferente al que se realiza la saga, también de mi autoría, "Hey Brother".
Hasta aquí el capítulo, espero que les haya gustado.
Y ya saben, comenten, voten y recomiéndenme que así me apoyan mucho.
Sin nada más que decir...
BYE BYE
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top