Capítulo 11

*Narra Ai*

Law-¿Te está gustando de momento la ciudad?

Ai-Pues si, me la imaginaba distinta.

Law-¿Distinta para mejor?

Ai-No, es mejor de lo que me lo imaginaba (sonriendo)

Su mano rozó la mía, la cogió con cuidado y le dió un beso.
No pude evitar sonrojarme.

Law-Esta noche...Serás mía(susurrándome al oído)

Se levantó y se fue. Se podría decir que el sonrojo de antes no era nada comparado con el de ahora.

Ai-¿Adónde vas?

Law-Al baño.

Ai-Vale.

Esperé durante unos minutos a que Law volviera.

Law-Si que tardan en cocinar...

La comida estaba bastante buena, la gastronomía era distinta a la de Dressrosa. Aquí era todo más natural.

Law-¿Te ha gustado?

Ai-Si (sonriendo)

Law-Me alegro, ¿qué te apetece hacer ahora?

Ai-Podríamos ir al hotel a dejar lo que hemos comprado.

*Narra Law*

Llegamos al hotel, en el ascensor aproveché para besarle el cuello. Ella se estremecía, no se quejaba, de hecho cuando paraba soltaba un gruñido.

Law-Tranquila gatita, tenemos todo el tiempo del mundo.

Ai-¿Gatita?

Law-Ronroneas cuando te beso el cuello.

Se puso roja. Me gustaba causarle sonrojos, parecía muy inocente.
Lo que no esperaba es que se me lanzara nada más llegar a la habitación.

Law-¿Qué quieres gatita?

Ai-N-No lo sé, t-tengo mucho calor.

Tenía una idea en mente, dado que debía castigar a Ai-ya por lo de la tienda.

Law-Túmbate en la cama.

Me hizo caso, tal y como esperaba. Me coloqué con cuidado encima de ella.
Le había dicho a Monet que la convenciera para ponerse un vestido o una falda, al parecer lo había conseguido.
Comencé a besarle el cuello mientras mis manos se metían por debajo de su falda aciariciando todo lo que encontraban.

Law-¿Cómo te sientes Ai-ya? ¿Sigues teniendo calor?

Ai-S-Si.

Toqué cierta zona por encima de la ropa interior, eso hizo que se pusiera tensa.

Ai-L-Law(suspirando)

Law-Solo seguiré si tu quieres.

Ai-S-Sigue.

Seguí acariciando esa zona, iba a retirarle la prenda que me impedía llegar hasta su intimidad. Ai-ya tenía los ojos cerrados. Decidí parar.

Ai-¿Por qué paras?

Law-Porque era un castigo, ¿recuerdas?

Mi gatita puso cara de sorpresa.

Law-Si, gatita estos son los castigos.

Me levanté directo al baño.

*Narra Ai*

Estaba en shock, así que estos eran los famosos castigos de los que me había hablado antes. Me sentía rara, nunca antes había tenido esta sensación.
Me arreglé la ropa y me senté en la cama. ¿Por qué sentía que me había gustado?

Law-¿Lista para irnos?

Ai-¿Adónde?

Law-Ya lo verás.

Me cogió de la mano y salimos de la habitación.
En el coche no hubo mucho tema de conversación, yo tenía la mirada fija en mis manos.

Law-¿Qué pasa?

Ai-Nada.

Me cogió las manos, levanté la vista. Con su mano izquierda me acarició la mejilla.

Law-No me mientas, estás pensativa.

Ai-Es que...(sonrojada)

Law-¿Si?

Sus ojos grisáceos me examinaban intentando adivinar lo que iba a decir.

Ai-¿Te lo puedo decir más tarde?

Law-Claro, siempre y cuando me lo cuentes. No quiero que tengas preocupaciones.

Ai-No es una preocupación, tranquilo.

Observé donde estábamos, era un parque.

Ai-¿Eso son?

Salí del coche rápidamente, me encantaban esos animales.

Ai-¡Ardillas!

Me acerqué a una, ella hizo lo mismo. En cuanto estuvo lo suficientemente cerca, me dispuse a acariciarla.

Law-No sabía que te gustaran las ardillas.

Ai-¡Si, me encantan!

Por algún motivo Law me estaba mirando extrañado.

Continuará...

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