https://youtu.be/T8QmtK4Ai2M

La responsable del ataque, quien destruyó la base... y nos dejó escapar... fue tu hermana.... Mireia Gremory

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¡¿QUÉ?! – Takao se levantó de golpe, seguido de Satoshi. Era imposible, realmente imposible, absolutamente imposible. Pese a que Taiga no miente, era algo que se negaban a aceptarlo. Ellos recordaban aquel fatídico día en que perdieron a su amiga, aquel día en el cual se sintieron completamente frustrados, con lágrimas, después de perder a sus amigos, la pérdida de Mireia en ese entonces fue su golpe más doloroso.

¡¿REALMENTE ERA ELLA?! –Senko estaba en shock, Taiga no podía negarlo, incluso ella se negaba a creerlo, pero ese momento lo dejó en claro.

Podrá sonar una mentira, ni siquiera yo quiero creerlo, pero realmente.... Realmente era ella... cambió físicamente, pero seguía siendo ella. – Taiga derramó lágrimas.

Mi... mi hermana... no... no es posible ¡NO ES POSIBLE! – el hijo de Rías comenzó a llorar, pero la pelirroja estaba en un estado de negación al saber que su hermana seguía con vida.

Rías... por favor... - Senko se acercó pero Rías salió se retiró mientras derramaba lágrimas la rubia se quedó cuidando a su bebé mientras que daba un suspiro, no la culpaba, una noticia así, devastaría a cualquiera.

Juvia está confundida. ¿Qué pasó con la hermana de Rías-san? Porque su reacción fue de incredulidad y negación. – dijo la peli azul con mucha curiosidad y no era la única.

Nosotros queremos saberlo también, no sabemos mucho de lo que pasó, sólo que ella era tan cercana a mi hermano junto con Ravel. – comentó Shun mientras que Takao apretaba los puños.

Lo lamento Shun-san... tendrás que esperar un poco... - el peli azul se sienta, mientras se llevaba las manos a la cara. – Maldita sea.... Maldita sea...

Nezuko tomaba la mano temblorosa de Satoshi, no parecía salir del trance pero no lo dejaría solo, sea lo que sea que estaba pasando, era algo que les dejó una profunda marca. Shun y Enju se miraron, el tema era tan delicado pero tenían que esperar a que se calmen ahora.. o cuando tengan que informar a los líderes de la Resistencia, porque también necesitaban de su testimonio.

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ESTE AHORA ES MI HOGAR

SATOSHI CRUZ - INFERNAL SCORPION

FACCIÓN: RESISTENCIA

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Kenichi había llegado a la base del puerto finalmente y las cosas estaban algo jodidas, Wardes y Louise estaban enfrentándose contra un sujeto enmascarado y lo primero que hizo, fue hacer una línea para separar a los dos, era por eso que se escuchó el estruendo hace minutos. El enmascarado se lanza contra Wardes con un torrente de viento, combinado con escombros, haciendo que le caiga uno en la rodilla.

Tsk... - recibió otro en la costilla y termina de rodillas, usando su bastón para no caer, eso hizo que el atacante aproveche para acercarse a Louise y raptarla.

¡SUÉLTAME! – Wardes se levanta con algo de dificultad y trata de usar su estoque para hacer un ataque preciso, pero la herida en la costilla. - ¡SUELTAME MALDITO!

Pero el enmascarado iba al borde de un barranco, justo antes de que de un salto, usa su arma para bloquear un tajo horizontal, lo que no se esperó es que Kenichi suelte el manto por momentos y le conecte una patada en el abdomen, tomando a Louise de la cintura y alejándola, tomando su arma en el proceso.

Me ausento por un momento y les llueven los problemas. – mencionó el pelirrojo con sarcasmo. – ¿Se identificó?

No, simplemente fue tras de mí y casi me lleva. – ella mira al pelirrojo. – ¿Y tus "amigos"?

Fue fácil lidiar contra ellos, pero como escuché el estruendo. – se prepara para atacar. - ¿Reconoces algo de su patrón, Wardes?

Tiene buen manejo del viento, pero, si atacamos juntos, podremos romper su defensa. – comentó Wardes mientras se levantaba y preparaba su estoque.

Bien, llamaré su atención entonces.. – el pelirrojo sale corriendo y arroja su espada en hélice, pero el enmascarado desvía la espada, devolviéndosela. Al momento en que Kenichi atrapa la espada, hace una barrida, el mago se aparta y el pelirrojo entrecierra la mirada, coloca su mano en el suelo y se impulsa, para conectarle una patada, pero para su sorpresa, el mago se apartó. - ¿Qué?

Hasta ahora, nunca fallaba con ese ataque, oponente que luchaba y usaba esa patada, terminaba inconsciente, pero para su sorpresa, el oponente logró predecir ese ataque y lo aparta con una cortina de aire, haciéndolo caer contra un barril de agua, mojándose en el proceso. El pelirrojo creyó que al menos pudo ganar su atención lo suficiente para que Wardes contrataque, pero lo vió sujetándose de la herida que recibió hace unos minutos y el enmascarado sólo tenía un objetivo, el pelirrojo.

¡COMPAÑERO, SUÉLTAME! – dado que Kenichi estaba en trance, no reaccionó a tiempo y recibió una fuerte descarga eléctrica, por parte del enmascarado.

El ataque mágico del enmascarado no era para paralizarlo, era para matarlo y era peor ya que Kenichi se empapó al caer en ese barril, siendo la parte más afectada, su brazo izquierdo. Eso, con las heridas en el camino y el poco descanso, le dejó de rodillas y con un fuerte dolor. El enmascarado se acerca para darle una perforada, pero esquiva una onda de viento, por parte de Wardes quien lo alejó un poco de Kenichi.

Maldición... - el enmascarado iba a lanzar otro hechizo potente, pero el pelirrojo se levanta y con el brazo derecho, hace girar la espada, directo a la cabeza, pero pudo retroceder a tiempo y apenas logró cortar una parte de su capucha.

¡AHORA! – Wardes notó que lo dejó al borde del barranco y le arroja un torrente de viento a toda potencia, empujando al enmascarado, haciendo que caiga desde una gran altura ya que terminó soltando su arma.

Debido a la fuerza de la ráfaga de viento, el pelirrojo también fue afectado y cayó en el borde del precipicio, sujetándose con tan sólo su mano derecha, pudo ver cómo caía y perdía de vista al enmascarado, suspiró ya que con la caída, no molestaría más, pero nuevamente enfoca su mirada en el borde, estabas a punto de romperse y con eso se caería.

Maldición... - el borde se rompe y comenzó a caer....

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O eso pensaba ya que su brazo fue atrapado, Kenichi mira a Louise quien no le importó lastimarse, ella tenía atrapado el brazo del pelirrojo y comenzó a levantarlo.

¿Pensaste que te dejaría atrás? ... - ella no era fuerte físicamente, nunca ha levantado cargas pesadas, pero, por esta vez, sentía que podía hacerlo. - ... Soy tu maestra... ¡Si no puedo protegerte! ¡NO PUEDO LLAMARME A MÍ MISMA MAGA!

Finalmente Louise pudo levantar a Kenichi, quien lo dejó aturdido, pero la fuerza fue tanta, que terminó perdiendo el equilibrio y cayeron hacia atrás, la peli rosa estaba debajo del pelirrojo y se miraron a los ojos, uno era de sorpresa y la otra era de agotamiento. Se miraron y la respiración estaba volviendo a la normalidad. El pelirrojo veía los ojos rosados de Louise y ella veía sus ojos azul zafiro.

¿Se encuentran bien? – Fue la pregunta de Wardes mientras se acercaba, el pelirrojo se levantó con algo de dificultad y luego extiende su mano derecha para levantar a Louise.

Todo bien... - Kenichi levantó el pulgar.

¡Nada que todo bien! – Louise revisa su brazo izquierdo, además de que la ropa se rasgó, tenía heridas y quemaduras. - ¡Ese mago te dejó muy lastimado el brazo!

Es sólo un rasguño. – dijo Kenichi sin importancia, a pesar de que le ardía. – Igual, te has lastimado.

Louise veía sus rodillas lastimadas, dejó sus actos de noble por una vez y se lanzó a salvarlo, sin importar que se lastime en el proceso, sus rodillas se pelearon al deslizarse, al igual que una parte de su abdomen,.

Mis heridas no son tan importantes, debo atenderte primero. – respondió Louise con preocupación.

Ya estamos cerca del barco, una vez partamos, podrán estar más tranquilos para curarse. – comentó el peli plata y ambos asienten, con algo de dificultad, se dirigen hacia el barco, pero Kenichi se detuvo por unos momentos, bajó la mirada y encontró un trozo de tela, con algunos pelos.

Kenichi se agachó a recogerlas y al revisarlo cuidadosamente, entrecerró la mirada y enfocó su vista en el lugar donde cayó el enmascarado, se acercó nuevamente al borde y no había nada, a pesar de que dificultaba la vista debido a lo profundo que no se podía ver bien, afiló la mirada, apretó los dientes y apretó los puños.

¡Kenichi! ¡Vámonos! – el pelirrojo guardó la tela con cuidado y procede a seguir a los demás.

Kenichi, Wardes y Louise finalmente llegaron al barco, solicitaron urgentemente al capitán para que los lleve a Albion, en un momento, el piloto se negó a zarpar debido a la hora, pero Louise informó que era de carácter urgente, al ser una orden de Su Alteza, inmediatamente llamó a sus tripulantes y procedieron a prepararse para partir.

Tomaremos casi toda la noche para llegar a Albion, ahora sí podremos descansar un poco. – dijo Wardes mientras que el barco finalmente salía del puerto.

Kenichi miraba hacia abajo, sosteniéndose de la baranda por unos momentos, ahora entendía por qué el puerto estaba en lo más alto de la montaña, era un barco volador, supuso que así llegaría más rápido. Louise lo siguió al cuarto, comprendía que quería descansar, pero tenía que atender su brazo quemado.

Muéstrame el brazo. – ella extendió la mano pero el pelirrojo tenía su brazo izquierdo retraído.

Estoy bien, fue sólo un rasguño. – La peli rosa se enojó y tomó el brazo a la fuerza, sacándole un quejido al pelirrojo. - ¡Arghh!

¡¿Llamas a esto un rasguño?! ¡Ese hechizo te dejó con una herida abierta y quemaduras! ¡Es un milagro que pudieras levantarte después de esto! – busca algo de su pequeño inventario. – A ver... dónde está... No... - Ella examina bien y se desesperó. - ¡Ay no! ¡NONONONONO!

¿Qué sucede? – Kenichi estaba confundido pero Louise sacó un frasco dañado.

¡No puede ser! ¡Lo tenía bien cuidado y era para casos de emergencia! – Louise se frustró cada vez más, el pelirrojo la miraba con duda. – Era un frasco que Ravel-san me entregó, una lágrima del Fénix.

Ahhh... Ya veo... - el pelirrojo tomó el frasco con cuidado. – Me sorprende que aceptaras algo de ella ya que se llevaban mal.

Pero ella fabricó esta lágrima para una situación de emergencia. ¿Y ahora? – el pelirrojo acaricia la cabeza de la peli rosa.

Estaré bien, sólo haz unos tratamientos básicos, evitaré usar mi brazo izquierdo hasta que lleguemos a zona segura y podamos contar con medicina para tratar mejor mi herida. – la peli rosa bajó la mirada y colocó su cabeza en el pecho, no dijo nada, pero el acto era como un "sí" a resignación. Ambos cerraron los ojos y terminaron por quedarse dormidos, bajo las luces de las dos lunas llenas.

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ESTE AHORA ES MI HOGAR

AISAKA TAIGA - TIGRE COMPACTO

FACCIÓN: RESISTENCIA

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Ya veo... así que fue un ataque muy coordinado. – dijo Odín al escuchar el informe de Taiga, ella estaba frente a los líderes de la resistencia para dar el reporte de lo que pasó, el dios nórdico da un suspiro. – Tendremos que reforzar las defensas, he escuchado que han dejado la invasión por el momento, pero no sabremos por cuánto tiempo.

Lo que más preocupa es que haya alguien que fuera capaz de controlar a las fuerzas enemigas... - dijo Azazel con seriedad. – No descartemos la posibilidad de que haya más con esa habilidad... Taiga ¿Nos podrías decir quién dirigió el ataque?

... - la peli naranja aprieta los puños. – Es difícil para mí decir eso, incluso me niego a que sea esa persona.

¿Qué? ¿Es alguien que conoces? – preguntó Yasaka con duda.

De hecho... todos los presentes... también... - Taiga comenzaba a apretar los puños.

Nos estás dejando con la duda... ¿Podrías decirnos quién es? – preguntó Sirchez.

Tch... - ella temblaba, pero ya no podía con esto. – Bien... Si quieren saberlo se los diré... - mira con total seriedad a los líderes. – La responsable de haber dirigido este ataque a gran escala y bien coordinado.... Es Mireia Gremory.

¿Qué? – Odín abrió su ojo, Azazel casi se cae de su silla, Michael casi se desmaya al escuchar esa noticia, Sirchez estaba peor.

¡Imposible! – exclamó Yasaka levantándose. – Mireia murió en la batalla, dando su vida en la batalla fi.... – se quedó paralizada al ver la mirada de Taiga la miraba con una furia incontrolable.

¿DIO SU VIDA EN BATALLA?..... ¡TEN CUIDADO CON LO QUE DICES! – toma la silla donde estaba sentada y la arroja en la cabeza de la rubia quien no pudo esquivarlo.

¡Cal-Cálmate Taiga! – pidió Michael con preocupación.

M-Mi... Mi hermana... - Sirchez estaba en shock, pero también sentía alegría, alegría al saber que su "hermana" estaba con vida. O bueno... lo era hasta que escuchó una voz familiar.

¿Tu hermana? ¡Solamente yo tengo derecho de llamarla así! ¡TÚ LA DEJASTE MORIR! – Rías señala a Sirchez quien bajó la cabeza.

Hermanita.... Yo... - Rías le da una fuerte bofetada.

Te odio... ¡Me dolió mucho al saber lo que le pasó a mi hermana! .... Y ahora... - aprieta los puños. - ¡AHORA ESTO! - golpea la mesa, destruyéndola en el proceso. - ¡CONVERTISTE A MI HERMANA EN ESTO! ¡TODO POR TU MALDITA CULPA Y TU DESEO DE CHUPARLE LAS BOLAS A UN IMBÉCIL!

Sirchez intentó decir algo, pero Rías nuevamente lo golpeó, mandándolo contra una pared, Takao veía esto en la entrada con una mirada sombría y con los brazos cruzados. No sintió ninguna pena al ver a Sirchez sufrir, todo lo contrario, era satisfacción.

Mantente alejado de mi familia, maldito desgraciado. – Rías se retira de la sala, seguido de Taiga y Takao, Shun estaba en el borde de la puerta con los brazos cruzados y fue el último en seguirlos, mirando de reojo a Yasaka levantarse con dificultad y por otro lado Azazel y Michael ayudaban a sacar a Sirchez de entre los escombros.

Al momento de llegar a la habitación, Shun se cruzó de brazos y miró a Takao, en su pequeña investigación, vió una foto, una de la señorita Mireia, al lado de ella, estaba su hermano., ambos con una sonrisa y levantando dos dedos en señal de amor y paz.

Querías saber quién es Mireia Gremory y qué fue lo que le pasó ¿Verdad? – comentó Takao mirando al peli negro con mechón rojo.

Por lo poco que he visto, Mireia y Kenichi parecen más que amigos. – el peli azul suspira.

Tienes razón, Mireia y Ravel fueron las más cercanas a él, sabía que ella tenía sentimientos por Kenichi, incluso fue quien hizo el pacto con Ravel al momento de formalizar su relación. Sin embargo, ocurrieron dos desgracias. – levanta un dedo. – La primera y lo sabes...

La llegada del intruso y el destierro de uno de los héroes de la alianza.. – Takao asiente. – Cuando fue deserrado, Mireia encaró a su hermano quien de manera sin vergüenza, desestimó los logros, argumentando que "es la envidia". Claro, un rubio imbécil llega de la nada, se roba créditos, atención y se mete con las mujeres de otros, haría que cualquiera reclame pero lo justifican con la "Envidia".

Es alguien tan imbécil que le pagaron con la misma moneda, con cuernos. – comentó Shun sin inmutarse.

La segunda desgracia, fue durante la invasión de esas criaturas. Batallamos, peleamos, dimos nuestras vidas para hacerlos retroceder, perdimos a nuestros amigos, perdimos a seres queridos, fue un enfrentamiento sangriento pero teníamos la ventaja. Ya estábamos cerca de expulsarlos, pero....

//==//==//FLASHBACK//==//==//

https://youtu.be/Hmb63mRkH7A

Los líderes y campeones de la Gran Alianza estaban en una reunión, previo al golpe final, se detectó que las fuerzas enemigas estaban a punto de atravesar una brecha, si lo hacían, el esfuerzo de múltiples batallas, habría sido en vano, además, se rumoreaba que había una fuerza oculta.

Desconocemos sobre aquel destacamento, dudo que sean humanos. – dijo Azazel con seriedad.

Por favor ¿En serio crees que unos humanos mediocres sean capaces de enfrentarlos? – dijo Sona con soberbia.

Te recuerdo que muchos que pocos humanos, te han puesto patas arriba, así que bájate de tu nube de arrogancia. – respondió Takao con frialdad.

Maldito híbrido. – Trató de darle una bofetada, pero el peli azul atrapó su mano.

¿Cuántas veces te lo voy a decir? – mientras que el peli azul apretaba su mano, una corriente fría rodeaba el brazo de la demonio, la peli negra gemía del dolor, trataba de liberarse, pero nada funcionaba.

¡ES SUFICIENTE TAKAO, SUÉLTA A MI HERMANA! – reprendió Serafall, pero tembló al ver la mirada fría del peli azul. – Po-Por favor...

Como quieras... - suelta la mano del brazo de Sona y la demonio retrocede, sujetando su brazo completamente inmóvil, la piel estaba azul y no podía mover su mano.

¡MI BRAZO, MALDITO! – Sona miraba con rabia al peli azul quien ni se inmutaba.

Agradece que en cuestión de días puedes moverlo, además, no has hecho ni mierda en todas las misiones, así que no me reclames. – respondió con los brazos cruzados.

Tranquila Sona-chan, yo cuidaré de ti. – dijo Naruto con amabilidad. – Más vale que te disculpes luego.

Lo haré cuando tu "prometida" demuestre respeto, cosa que hace tiempo lo perdió. – la mirada de ambos era tensa, pero Mireia dio un fuerte aplauso.

Nos estamos desviando del tema, Sona, tú te buscaste eso, por enésima vez, deja de subestimar a los humanos, además. – mirando el mapa. – Desconocemos sus intenciones.

¿Creen que sea lo poco que queda de la Brigada del Caos? – sugirió Satoshi con seriedad.

Si son de la Brigada, podría ser perjudicial, abriendo la brecha y desatando el caos una vez más. – dijo Sirchez con seriedad. – Nuestra prioridad es devolverlos a la brecha de donde han venido.

Pero no podemos mandar todas nuestras tropas. ¿Alguna idea? – cuestionó Takao con los brazos cruzados.

No, ustedes son los más hábiles para esta situación. – Sirchez mira a todos pero no tenía ninguna idea, ante eso, su cuñado toma una decisión.

Enviaremos a Mireia, con un destacamento para luchar con esos intrusos, Takao y Satoshi, ustedes se quedarán en la retaguardia.. - ambos levantaron una ceja.

Primero dejaste que muchos de los soldados estén a merced de esas criaturas. ¿Y ahora quieres que peleemos contra esos desconocidos? – la paciencia de Takao se estaba desvaneciendo. - ¿Y ENCIMA PIENSAS ENVIAR A MIREIA AHÍ SIN REFUERZOS?

Yo confío en las habilidades de Mireia-chan para que pueda hacerse cargo de esto. – Naruto miraba con deseo a la pelirroja.

Hijo de puta... ¡Mireia...! – la pelirroja lo detiene.

Voy a realizar esta misión. Ante una situación así, tenemos pocas opciones. – se retira de la base mientras que Takao la miraba con curiosidad.

Mireia... Yo no te vi como una mártir. - ve que Naruto chasqueaba los dientes mientras se iba con su harem, en ese momento, las que una vez estaban interesadas en sus amigos Issei o Kenichi, ya estaban con él, salvo Senko, Ravel, Taiga e Irina.

//==// Fin del Flashback //==//

Espera ¿Naruto la ordenó para que haga el ataque? ¿Acaso los líderes no tienen autoridad o qué? – el peli azul niega.

A estas alturas, ya le lamían los pies, lo que dice, lo cumplen, además, estábamos en conflicto, así que no cuestionaron mucho. – Takao aprieta los puños. – Pronto me di cuenta que Naruto lo hizo a propósito...

¿Cómo así? – el peli azul suspira.

Naruto no la mandó a esa misión por sus habilidades. – Takao apretaba los puños. – El bastardo la envió a propósito para que desista y pida que lo salve.

¡¿QUÉ?! -Shun se acerca, completamente alterado. - ¡¿ESE BASTARDO FUE REALMENTE CAPAZ DE HACER ESTO?!

Sí, su deseo de tenerla, fue obsesiva, no pudo con Ravel, no pudo con Rías y el maldito quiso ir tras la hermana. – Takao baja la cabeza. – Pero el plan no le salió como se esperaba... - se retira a su habitación, Shun quiso seguirlo, sin embargo, Mirajane lo detiene.

Es mejor que le des tiempo, a veces, algunas heridas, son difíciles de cerrar. – el peli negro con mechón rojo abraza a su esposa.

Si tan sólo hubiera estado ahí para apoyar a mi hermano... si tan sólo hubiera podido enfrentarme a esos malditos cuando pasó por eso. – Shun siente un cabezazo en la espalda, al momento de voltear, mira a Enju con una mirada triste.

No cargues con esto solo hermano, yo tampoco estuve para apoyar a mi hermano mayor. – Shun abraza a su hermana también. – Mi hermano no debería pasar por esto solo, pero estoy segura que alguien está con él, brindándole ese apoyo y Ravel está con él.

Si hermana... Tienes razón... En cuanto nos reunamos, le ayudaremos en todo para que pueda ser alguien feliz y tener su familia. – Enju asiente y aprietan el abrazo.

Lo que me pregunto... - Mirajane se lleva un dedo a su mentón. - ¿En qué situación estará Kenichi-san?

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ESTE AHORA ES MI HOGAR

LOUISE VALIERE - LOUISE LA ZERO

FACCIÓN: TRISTAIN

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Kenichi tenía dificultades para descansar, en primer lugar, su brazo le dolía demasiado, el ardor le hacía moverse y al sólo utilizar unas vendas para tratarlo, no podía sanar como se debía, en segundo lugar, era por la muestra que encontró antes de llegar al puerto, en el momento en el que el enmascarado salió volando. La tela era lo de menos, pero ahí quedaron algunos mechones de cabello que también fue cortado.

Pero su sueño fue interrumpido por gritos, Kenichi se levanta con algo de cansancio, al lado, para su sorpresa, Louise estaba al lado de él, levantándose también.

¿Qué sucede? – la peli rosa se frotaba los ojos.

Tengo un mal presentimiento. – Kenichi intenta levantarse pero Louise lo detiene.

Espera, deja que yo vaya a ver. – la peli rosa se coloca su manto y procede a salir de la habitación, el pelirrojo revisó su brazo izquierdo, Louise se las arregló para curarlo, aunque fue tosca, lo hizo.

¿Irás compañero? – Kenichi ve a su espada.

Sí, probablemente hayan visto algo en el camino. – se acerca y toma la empuñadura para luego salir de la habitación.

Al salir, los tripulantes estaban extendiendo las velas a toda prisa, jalaban cuerdas y giraban a estribor, el pelirrojo fue a la proa y abrió los ojos. Ahora lo entendía.

Vaya, por esa razón tenían barcos voladores. – lo admitía, esto lo dejó completamente sorprendido. Pero tuvo que centrarse al notar que a lo lejos, divisaba un barco y se estaba aproximando.

¡Piratas! ¡HAY QUE RETIRARNOS! – el pelirrojo suspira, ni siquiera en el barco podía estar tranquilo.

Primero los traidores, luego los mercenarios, luego la vieja loca, un enmascarado miserable ¿Y ahora piratas? – Kenichi se quejó, era molesto tener que lidiar con estas cosas de manera seguida y sin poder descansar bien, todo el viaje ha sido jodido.

¿Has podido descansar algo? – el pelirrojo voltea y ve a Wardes. – En caso estés cansado, puedes....

Dormí un poco, con eso me basta. – mira al peli plata. - ¿Tu brazo y pierna están bien? Porque recuerdo que ese enmascarado te dejó con una herida algo profunda.

Ah si, llegué a tratarlos como se debe, ya no me duele para nada, estoy como nuevo. – dijo el peli plata con naturalidad y no parecía mostrar signos de dolor, el pelirrojo frunció el ceño pero no pudo decir nada ya que una bala de cañón impactó el barco. Astillas salieron volando, algunos de los tripulantes salieron lastimados.

¡Maldición! ¡DAÑARON EL MASTIL DELANTERO! – exclamó uno.

Si dañan el mástil principal, estaremos perdidos. – el capitán da un suspiro resignado. – Lo lamento, pero hasta aquí llegó su viaje. ¡BAJEN LAS VELAS!

¡Esperen! – Louise intentó convencer al capitán para poder escapar, pero ya no se podía hacer nada. En cuestión de minutos, el barco pirata se acercó y los visitantes no deseados procedieron a entrar en el barco.

¡No se muevan! – algunos usaron espadas para atrapar a cada tripulante, Wardes y Louise intentaron defenderse, pero ocho piratas los rodearon y el uso de la magia no era lo más recomendable.

¡Quédate quieto! – intentaron hacer lo mismo con el pelirrojo, pero él sujetó a uno de la cara y lo estrella contra el suelo. Dos más intentaron atacarlo, pero Kenichi los detiene con su espada y aleja a uno de una patada, al segundo le dio un golpe en la muñeca con la empuñadura.

Un pirata de musculatura lo atrapa por la espalda, el pelirrojo gruñó del dolor porque su herida del brazo izquierdo estaba siendo lastimada. Dos más intentaron acercarse a golpearle en el estómago, pero el pelirrojo da un cabezazo al musculoso, aflojando el agarre y le da un codazo en el pecho, dejándole sin aire y le conecta una patada en la costilla.

En cuanto a los soldados que se le acercaron, se lanzó hacia adelante, tomando sus caras y con la fuerza que llevaba, los hace estrellar contra el suelo. Intentó atacar a otro, pero escuchó un silbido, al voltear, nota que uno de los piratas tenía una pistola apuntando a Louise.

Yo que tu me detendría, no querrás que una bella figura termine bañada en sangre. – dijo el capitán con una sonrisa burlona mientras tenía su dedo a punto de presionar el gatillo.

Kenichi llevó su mano izquierda a su arma oculta, pero se detuvo por algunos momentos, un mal paso y le dispararían, pese a que quería seguir peleando, pese a que quería defenderse, las situación no era favorable. Apretando los dientes, finalmente suelta la espada y levanta las manos, el capitán pirata sonríe y manda a sus tripulantes a amarrarlo.

Llévenlos al calabozo y llevémonos esto. ¡En marcha! – todos asienten y proceden a llevárselo, lo más seguro es que los usarían para exigir una paga.

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ESTE AHORA ES MI HOGAR

RÍAS GREMORY - PRINCESA DE LA RUINA CARMESÍ

FACCIÓN: LA RESISTENCIA

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Taiga estaba regresando, no se sentía bien emocionalmente, saber que una de sus grandes amigas estaba con vida y recordaba el día en el que la perdió, todo por culpa de ese rubio que tanto odiaba, ese rubio que le quitó su felicidad, el futuro planeado, una familia que se había planeado y sobre todo, las traiciones de algunas. Pasó por muchas desgracias, una injusticia por culpa de Koneko.

(Kenichi.... Me pregunto ¿Cómo habrá estado? ¿Ravel lo estará cuidando? La verdad, no sabría su reacción, tal vez aún no sepa lo que le pasó a Mireia...) – la peli naranja aprieta los puños. – (Maldición, tener que decirle eso... es probable que lo deje devastado... más de lo que ya está por culpa de esta injusticia.)

Ella se detiene, su mirada pasó a una seria y dirige su mirada hacia atrás, ahí estaba Koneko, quien la miraba con seriedad.

¿Es verdad? – fue lo primero que dijo la nekómata. - ¿Es verdad que Mireia está con vida?

Si así lo fuera... ¿Qué te importa? – la peli blanca apretó los puños.

Yo.. yo le prometí que... - Koneko es interrumpida por Taiga.

¿Qué prometiste? ¿Qué serías leal? Te recuerdo que tiraste tu promesa cuando te revolcaste con ese rubio de mierda y Kenichi te vió in fraganti... - la señala con enojo. - ¡NO ME VENGAS CON ESAS ACCIONES DE PERRA ARREPENTIDA QUE NO ENGAÑAS A NADIE!

¿CREES QUE ÉL NO ME PERDONARÁ? ¡HE SIDO DE SUS FAVORITAS, SIEMPRE ME ACARICIABA LA CABEZA! ¡ERA LA CONSENTIDA! – la peli naranja le da una bofetada.

¡Sí, fuiste su favorita! ¡Pero te recuerdo que le diste la espalda! - lo sujeta de la blusa, la nekómata intentó darle un arañazo, pero la peli naranja le conecta un rodillazo, lo que siguió fue una lluvia de puñetazos, cada uno más feroz que el anterior, la nekómata no tuvo posibilidad de defenderse y recibe una patada, enviándola contra una pared.

Buaghhh.... – la nekómata vomita algo de sangre mientras veía con rabia a Taiga.

Y ahí está, la marca de la deshonra... la marca de la vergüenza y la prueba de que te acostaste con ese bastardo, aún cuando estabas en una relación con Kenichi y decías amarlo. – dijo la peli naranja con enojo. – Quédate ahí y sigue lamentándote, porque ni en esta... ni en la otra vida...recibirás tu perdón.

La peli naranja se va lentamente, pero escuchó un grito de Koneko.

¡YO SÉ QUE ME PERDONARÁ! ¡YA LO VERÁS! ¡CUANDO LO VEA, ESTARÁ TAN FELIZ Y SERÉ SU GATITA FIEL! ¡NUNCA MÁS LE HARÉ DAÑO! ¡NI TÚ NI RAVEL SE INTERPONDRÁN! ¡ESO TE LO PUEDO ASEGURAR! – gritó con furia la nekómata mientras se sujetaba el brazo con dolor. Taiga ignoró sus delirios, ella sabía que ni aunque el fin del mundo se acerque, su amado nunca la perdonará y con eso en mente, se retira de ahí.

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Sonidos del botín recolectado, era lo que escuchaban los prisioneros, todo el botín que les fue arrebatado y no podían hacer nada, las cosas estaba jodidas. Louise iba de un lado a otro en la celda, tratando de encontrar algo para poder salir de ahí.

No hay nada para poder hacer. – dijo Wardes con los ojos cerrados. – Estamos a merced de estos piratas.

No podemos quedarnos de brazos cruzados. – Louise estaba con impaciencia, mira a Kenichi. - ¿Hay algo que nos pueda ayudar?

Aún si logro abrir un agujero al barco, estamos a varios metros de altura, y estaríamos en caída libre. – la peli rosa se sentó, completamente frustrada.

Ya sea usando explosivos o la alquimia, el resultado sería el mismo y con tanta frustración, la peli rosa empezó a derramar lágrimas, no podía contenerse, por más que tratara de mantenerse fuerte, esto la frustraba. Kenichi la observó, notó que Wardes estaba metido en sus pensamientos y se cuestionaba.

(¿No se supone que eres su prometido?) – miraba con desconfianza a Wardes que no hacía absolutamente nada, seguía absorto en sus pensamientos.

Oye... - Kenichi se separa y Louise toma su mano izquierda. – ¡Tu herida se ha abierto! ¡Necesito curarte!

Pero aquí no hay nada... - la peli rosa usa sus dientes para arrancar un trozo de su camisa y colocó la suave tela en la herida con cuidado, limpiando la sangre que salía, era brusca, pero hacía el esfuerzo para tratar su herida, se arrancó la manga de su otra camisa para envolverla con cuidado en el brazo.

Con esto estarás mejor, pero sin un mago de agua o equipo para curar, estará así. – trataba de sonar calmada, pero su mano temblaba. – No merezco ser una maga... no estoy cuidándote como se de be... se supone que como tu maestra... tu salud... es mi prioridad... - iba a bajar la cabeza, pero su mano es tomada por el pelirrojo.

Nadie dijo que esto sería fácil, como maga, afrontarás situaciones como esta, pero lo importante, es que de esos fracasos, nos levantamos y seguimos adelante, tú lo estás experimentando ahora y en un futuro... podrás tomar mejores decisiones y estarás más preparada. – con la mano sana, acaricia su cabeza, Louise tenía un par de lágrimas a punto de salir, pero solo intercambiaba mirada con el pelirrojo. Ambos parecían estar en su propio mundo, Louise se acercó más pero golpearon la jaula.

El capitán quiere verlos. – dijo uno de los piratas mientras abría la puerta.

Wardes abre los ojos y sale de la prisión junto con Kenichi y Louise, camino al camarote del capitán, notaron que la madera em el interior era refinada, demasiado refinada, el pelirrojo tenía una ceja levantada. Al entrar, veía al capitán, devorando un filete con toda comodidad hasta que mira a sus invitados.

Oh, tomen asiento por favor, me gustaría hablar de manera "civilizada". – dijo el capitán con una sonrisa. – Dado que eres una estudiante noble, podrían pagarnos una gran cantidad por tu rescate.

Escúcheme primero, bruto. Yo soy Louise Valiere, enviada a un trabajo importante en Albion y no seré producto para intercambiar de nadie. – el pirata aplaude.

Vaya, me gusta esa determinación, digno de un noble. Y dime ¿Qué asuntos te trae en Albion? – preguntó el capitán, aún sonando animado.

Eso no es asunto tuyo. – respondió Louise.

Sí que eres muy persistente, pero no me molesta, es la voluntad de un noble y respeto eso. – el pelirrojo bufa.

Lo que a mí me parece gracioso es que te hagas llamar pirata. – el capitán levanta una ceja. – Madera refinada, los tripulantes actuando muy limpios, comida bien preparada Si te haces llamar pirata con esos modales tan refinados... - toma un trozo de carne. – Entonces, yo podría ser un rey. – procede a comerlo de forma educada.

Tanto los tripulantes como Louise y Wardes miraban atónitos ante el comportamiento relajado de Kenichi, incluso el capitán lo miraba con algo de incredulidad.

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¡JAJAJAJAJAJAJAJAJA! – el capitán pirata terminó estallando en carcajadas. – Hace tiempo que no me reía de esta manera. Tienes buen ojo chico, a pesar de nuestros actos, pudiste descubrirlo sin mucho esfuerzo.

El capitán procede a quitarse su barba falsa y sus ropas de pirata, portando debajo un elegante traje de la realeza, el cabello cubierto por el sombrero, ahora relucía una cabellera rubia, unos ojos azules y una sonrisa serena.

Me presentaré apropiadamente ante mis invitados. – el rubio hace una reverencia muy elegante, digno de la realeza. – Soy Wales Tudor, el príncipe heredero del trono de Albion, el país del viento. Por lo que veo, señorita Louise, usted tiene asuntos que tratar conmigo ¿Verdad?

Eh...yo... este... - Louise aún no podía salir del shock, no se esperaba que fuera así de atrevida contra el príncipe, aunque estaba disfrazado, pero la duda permanecía ahí. El príncipe nota que portaba un anillo, por lo que se acerca.

Acerca el Rubí del Agua. – la peli rosa lo mira sorprendida. – Hazlo, yo también mostraré mi anillo, el Rubí del Viento. – se retira el guante con cuidado, mostrando en efecto tal joya y al momento de acercarse, ambos emitieron un brillo, dando la tonalidad de un arcoíris. – Se dice que los Rubí del Agua y del Viento son heredados de generación en generación a la realeza y una vez se juntan, brillan en un arcoíris, bendiciendo los reinos.

En-Entonces... realmente... - el rubio sonríe.

Sí, con esto las dudas han sido despejadas. Lamento mi rudeza, pero estábamos bajo perfil, como ustedes ya habrán escuchado, estamos en una guerra interna y los insurgentes están buscándome, disfrazarme como pirata, es la única manera para conseguir algunos recursos o pasar desapercibido ya que suelen usarlos para contrato. – explicó el príncipe con calma. – Además de nuestra invitada, me gustaría saber de sus nombres.

Por supuesto Su Alteza. – Wardes se inclina. – Me llamo Wardes, el líder de la guardia imperial de los grifos.

Y yo soy Son Kenichi Uzumaki, familiar de Louise. – continuó el pelirrojo con tranquilidad.

Oh, no me esperaba que exista un humano como familiar, es muy único. – respondió el príncipe con sinceridad. – En cuanto sus cosas, serán devueltas, los llevaremos primero a mi castillo para que se puedan reabastecer y arreglar los daños ocasionados. Pido mil disculpas por lo sucedido, pero ustedes ya lo comprenden.

Los tres asintieron, ante una situación como esta, hacerse pasar como pirata era una opción recomendable, al menos así su cabeza no estaría en peligro. Kenichi salió de la cabina, si bien las cosas se habían solucionado, quería ver el continente ya que no tuvo la oportunidad momentos antes.

Aquí estabas... - la voz de Louise lo sorprendió.

Creí que te quedarías hablando con el príncipe, por eso opté por retirarme. – dijo Kenichi mirándola de reojo.

Bueno, quería acompañarte, el príncipe me dijo que cuando lleguemos, te administrará tratamiento para tu brazo quemado. – el pelirrojo asiente y vuelve a mirar el cielo. – Jennifer me dijo que en tu mundo no hay ningún continente flotante.

Está en lo correcto, no tenemos continentes flotantes, pero sí han hecho viajes espaciales. – la peli rosa lo mira.

¿Quieres decir... que hay más cosas para ver? ¿Además de esto? – preguntó con curiosidad mientras que Kenichi levanta la mirada.

Hay cosas que aún no han logrado hacer, pero sí, llegaron a la misma luna, exploraron el espacio, viendo su mundo con pasión. -Louise también levanta la mirada.

¿Crees que alguna vez pueda verlo? – el pelirrojo no pudo evitar soltar una risa. - ¿Qué es lo gracioso?

Me parece curioso que me pidas algo como esto, en sí, es complicado, pero si se diese la oportunidad, podrías observarlo. – lo dijo como un sueño distante, algo que probablemente ella lo olvidaría, pero para su sorpresa, ella colocó su cabeza en su hombro.

Entonces, lo tomaré como una promesa. – dijo con su tono orgulloso, pero al mismo tiempo sonaba tierno. – Oh, mira...

El pelirrojo abrió los ojos al ver la cantidad de nubes debajo de un continente, formado por la caída del agua de la cascada, su sorpresa era que se mantenía firme a pesar de todo.

Bienvenido a Albion. – dijo Louise mientras que el pelirrojo miraba asombrado el paisaje, no era de sorprenderse seguido, pero esta vez, lo dejó maravillado.

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Cao Cao y su grupo estaban tomando algunas bebidas, celebrando por haber robado la energía de Kenichi, todo por parte de un encargo.

¿Tienen lo suficiente? – preguntó un holograma.

Robamos lo suficiente, pero no me esperaba que esa mocosa tuviera tal poder. – el holograma lo desestimó.

Desesperación, no es importante, lo que quiero, es el poder de ese bastardo, el zorro ya no me sirve y el poder de él, es envidiable, debe estar en mis manos. – respondió el holograma. – Dense prisa y traigan mi trofeo.

Como usted ordene, Naruto-sama. – dijo Cao Cao mientras cortaba la comunicación.

¿Nos vamos? – dijo Jeanne aburrida. – El vino de este mundo es delicioso.

Es pacífico, lo sé, pero tenemos que irnos antes de que se enoje con nosotros. – Heracles iba a recoger el artefacto, pero alguien más lo levanta.

Vaya, si que rebosa de energía esta cosa, sobre todo, cuando se la extrajeron de un saiyajín. – todos reaccionan inmediatamente y se preparan para atacar. – Oh vamos ¿En serio creen tener lo suficiente para matarme?

Suelta eso. – dijo Cao Cao apuntándole con la lanza.

Sólo eres uno ¿Qué posibilidad tienes contra nosotros? – dijo Heracles mientras coloca su mano en el hombro del intruso.

Hum... sí que eres confiado. – una cola lo enrolla en la muñeca, antes de que Heracles reaccione, recibe un codazo en el estómago, iba a salir volando, pero con la cola enrollada en su brazo, no salió a ningún lado, el intruso lo acercó y le conecta un fuerte puño al estómago y una patada de hacha en su costilla. – Pero si no pudiste con él. ¿En serio podrás conmigo?

Un dragón de hierro emergió detrás de él, a punto de preparar para darle un zarpazo, pero el sujeto tan sólo sonríe y extiende su mano, generando una bola de energía, dándole de lleno en la boca, destruyéndolo., Jeanne, Georg y Cao Cao estaban con la soga al cuello, por lo que decidieron bajar sus armas.

Buena decisión, en vista de que mis lacayos están indispuestos, ustedes trabajarán para mí, tendrán podrían tener riquezas y vino, además. – les arroja una fruta roja. – De probar el verdadero poder.

Los tres miran la fruta y proceden a darle un mordisco, al principio no parecía la gran cosa, el sabor no los sorprendió, pero en segundos, abrieron los ojos y sintieron que su fuerza incrementaba, Cao Cao, al tener la fruta, la terminó destruyendo con tan sólo apretar la mano.

¿Qué es esto? – dijo Jeanne con los ojos abiertos.

Siento que mi magia es más poderosa. – dijo Georg y no duda en realizar un ataque mágico, dejando sorprendido por el daño que dejó. – Es... Es increíble...

Me siento... más poderosa... - dijo Jeanne con emoción.

Es un poder... increíble... - Cao Cao mira al sujeto. – Si te seguimos, ¿Podremos tener esto?

Por supuesto, todo el vino, riquezas y el poder si se unen a mí. – dijo mientras extendía su mano y sin dudarlo por segundos, Cao Cao corresponde el saludo.

La Facción de los Héroes, se une a ti. – la lealtad hacia Naruto no era tan sólida, él se unió porque era el más poderoso, pero esta oportunidad que le está brindando, lo aprovecharía. – Aunque te pareces familiar a alguien.

Sí, estoy seguro que sí, pero no, no tengo nada que ver con él, mi apariencia simplemente se asemeja al padre de ese Saiyajin con el que te enfrentaste. – esboza una sonrisa. – Me llamo Turles, solía ser un pirata y ahora protejo el árbol que otorgará el fruto que han comido, el árbol sagrado.

Como usted diga, Turles-sama – dijeron los héroes con una rodilla en el suelo mientras que el mencionado veía el artefacto.

FIN DEL CAPÍTULO.

ESPERO LES HAYA GUSTADO...

https://youtu.be/ht6HidxKYnQ

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