Narrador

Tom nunca se había sentido tan bien en toda su vida, recuerda haber dormido con pesadillas desde que tiene memoria, nunca en verdad descansó, pero ahora puede decir que es la mejor noche que ha tenido.

Sin mencionar su magia y alma, nunca las había sentido cantar o estar tan en paz como él mismo que se sentía llenó y cálido, tan cálido que no quería alejarse de lo que fuera que le provocara esa sensación.

Dejando escapar un suspiro y se acurrucó más contra esa fuente de calor, esa cosa que hacía que su magia revoloteara contenta. Él mismo se sentía tan bien, pero no duró para siempre cuando recordó todo lo que había pasado, su conversación con la Muerte, su regreso, Hogwarts y el inicio del ritual donde perdió la consciencia.

Frunció el ceño al ver que estaba vivo ¿Había funcionado el ritual? Esa pregunta se fue al fondo de su mente cuando sintió una caricia tan cálida en su cabello que lo hizo ronronear del gusto y acurrucarse más cerca de esa magia fría que se envolvía con la suya y le causaba escalofríos.

Fue que su mente le recordó la alarma de que no estaba solo en esa cama, algo inusual ya que siempre dormía solo y no menos importante estaba acurrucado contra un completo desconocido. Se sobresaltó al caer en cuenta de todo eso y se alejó de esas sensaciones tan agradables.

Harry por su parte, había pasado los últimos 3 días preocupado por su pareja destinada, no había despertado en ningún momento, pero parecía en perfecto estado. Vigilando a Tom cada unos cuantos segundos se tomó la molestia de asegurar toda su casa sabiendo que cuando Tom despertara no se tomaría para nada bien estar en quien sabe dónde con la persona que lo mató.

Aprovechando su inconsciencia limpió el lugar con ayuda de su nuevo elfo y fortificó las barreras y cada puerta y ventana para que solo él pudiera entrar y salir. No permitiría que Tom escapara por ningún medio posible.

Ahora una nueva mañana se encontró durmiendo junto a un joven Lord Voldemort que usaba un pijama verde de seda. Se veía tan pacífico dormido que no creía que fuera capaz de matar una mosca.

Todas estas noches junto a él se encontró envuelto en su magia y la suya propia enredada con la contraria y envolviendo ese cuerpo de dios griego. Y no podemos olvidar que durmió en la misma cama que él y se encontró cada mañana despertando con Tom apegado y acurrucado a su lado con una sonrisa, hasta su misma cicatriz estaba inactiva seguramente por la paz de su creador.

Nunca pensó encontrarse con Voldemort durmiendo en su cama abrazándolo, tampoco pensó que a él le gustara acurrucarse se veía hasta lindo de esa manera, tuvo que acostumbrarse a esos pensamientos que se hicieron cada vez más reiterativos.

Lo que lo lleva al punto de saber lo que son. Lo único que le permitía seguir adelante con ser pareja de Voldemort son las palabras de Muerte, vería al verdadero Tom, conviviría con aquel que mató a sus padres, pero sabe que nunca estuvo 100% cuerdo, le daría una oportunidad.

Por eso ahora se encontraba abrazándolo contra su cuerpo acariciándolo con su magia ahora fría por ser Maestro de la Muerte, pero al parecer a Tom no le molestaba por el suave zumbido en su cicatriz que no pudo evitar sonreír al sentir vestigios de felicidad y paz venir de sus sentimientos lo que indicaba que por fin después de 4 días despertaba.

No pudo evitar dejar unas caricias lentas y suaves en ese sedoso cabello castaño, se sorprendió al escucharlo ronronear ¿Acaso era posible emitir un ruido como ese? Mandó esa pregunta al fondo de su mente para volver a dejar caricias y lograr escuchar de nuevo ese sonido.

Se quejó cuando lo vio alejarse de su cuerpo quedando al borde de la cama, su magia antes pacífica arremetió ante los sentimientos de sorpresa y alarma de su dueño. Fue que su mirada se cruzó con la de Tom y no vio ese rojo profundo, sino un gris azulado, unos ojos tormentosos que lo miraban confundidos.

Tom por su parte, vio a un joven de cabello negro piel bronceada y unos penetrantes ojos verde esmeralda brillando iguales a la maldición asesina. Le gustaron esos ojos, pero el sentimiento no duró mucho cuando identificó al chico quien antes estaba abrazando por la cicatriz en su frente.

Harry Potter.

Su miedo a morir llegó a nuevas alturas al verlo frente a él que se alejó más de Harry lo que provocó que cayera de la cama, ni siquiera sabía por qué estaba en una si su acompañante era Potter.

No tardó en levantarse sintiendo pánico al no tener su varita, se tomó unos segundos en mirar alrededor agitándose más al no identificar donde se encontraba. Volvió a mirar a Harry quien le dio su espacio, aunque se sentía herido de que se alejara de esa manera de su cuerpo.

Tom quiso usar uno de los tantos hechizo o maldiciones para atacar al joven y buscar una salida, pero su magia no reaccionó a lo que quería, es más, se encontró conteniéndola para que no envolviera protectoramente a Harry.

Harry al verlo pudo ver y sentir la conmoción de Tom, aunque estaba completamente en su derecho cuando la última vez que se vieron trataron de matarse el uno al otro por lo que una buena impresión estaba sobrevalorada.

Fue que Tom enfocó sus ojos en la varita que estaba junto a Harry, él había adquirido la costumbre de dormir con una encima por la caza de Horrocruxes, pero el castaño no lo sabía y sintió pánico al pensar que lo mataría nuevamente con la varita mayor.

El castaño buscó con sus ojos una salida y poder huir a un lugar seguro, ya que no logró aparecerse. Sus ojos se iluminaron con esperanza al ver una puerta abierta, miró cauteloso al joven queriendo arremeter con su magia y esta vez funcionó.

Harry se sobresaltó al caer de la cama de espaldas por un impacto puro de magia, apenas sentarse escuchó ropa romperse. Extrañado miró hacia donde estaba Tom y se quedó sin habla al ver como un leopardo de las nieves saltó hacia la puerta y corrió lejos.

(Forma animaga de Tom) (Créditos)

¿Acaso Tom era un Animago también? Se preguntó sorprendido y maravillado, por un momento pensó que sería una serpiente al parecer se equivocó.

Mientras Harry fantaseaba con acariciar la forma animaga de Tom este se encontró bajando las escaleras corriendo, buscó por cada ventana la oportunidad de escapar siéndole eso negado. Probó con cada habitación y ventana del segundo piso, con la esperanza de encontrar algo abierto corrió al primer piso, pero tampoco funcionó, su última oportunidad fue la puerta principal y no se sorprendió al averiguar que no pudo abrirla.

Entre su corrida confirmó que estaba en la residencia Black y como casa antigua y noble debía tener una chimenea. Con ese pensamiento corrió a la sala con la esperanza de aparecerse en cualquier lugar menos cerca de Harry, aunque su magia y alma cantaran de esa forma en su presencia.

Gruñó bajo al recordar que estuvo acurrucado contra su cuerpo, se sintió hasta mortificado por ronronear cuando acaricio su cabello. Aunque eso ya era sorprendente por sí mismo ¿Acaso Harry Potter estuvo durmiendo con él en una misma cama sin matarlo?

Apartó la pregunta de su mente al ver la chimenea, pero antes de que pudiera estar lo suficientemente cerca Harry se apareció frente a él interponiéndose en su camino, de nuevo. Paró en seco al verse acorralado de nuevo y con su magia cantando otra vez que la única opción que le quedó fue gruñirle con fuerza al joven.

-Tranquilo -Levantó las manos, una con una varita.

Tom volvió a gruñirle retrocediendo, tal vez en otra habitación podría encerrarse y tomarse su tiempo para romper las barreras y huir.

Harry por su parte, vio la forma de Animago de Tom, vio sus orejitas ir hacia atrás con cada gruñido que salía de su garganta hasta le mostraba sus grandes colmillos. Bueno viéndolo así entendió por qué fue capaz de ronronear, algunas características se pasaban a la forma humana si se ocupaba mucho la forma animal.

Y tiene que admitir que un Tom leopardo es muy lindo, desea acariciar su esponjoso pelaje, esas tiernas orejitas y Merlín sus ojos de un azul cristalino brillante con una pupila negra alargada. Era simplemente hermoso.

Salió de su ensoñación al sentir un miedo más palpable de parte de la cicatriz, no pudo evitar fruncir el ceño al sentir y ver lo cauteloso que estaba su pareja y que tratara de huir de él dolía. Por eso agitó su mano con la varita y cerró la puerta casi de golpe sobresaltado al felino frente a él.

Tom se giró espantando al ver la puerta cerrada y estaba seguro de que por las salas de la casa no se abriría por nada del mundo, aunque forzara su magia no funcionaría con un hogar antiguo como Black.

-No te haré nada.

Tom bufó y volvió a gruñirle más amenazante que antes Harry lo notó y sin dudarlo guardó la varita en su funda ganando una mirada curiosa del felino que paró sus orejitas mirándolo atentamente.

-Solo quiero hablar ¿Sí?

Tom le gruñó otra vez recordándose con quien estaba, Harry suspiró comprendiendo la cautela de su pareja, por lo que tendría que hacerle ver que en realidad nunca quiso matarlo ni a los horrocruxes.

-Estuviste 3 días inconsciente, fuiste muy imprudente al iniciar ese ritual solo. -Lo regañó consiguiendo que bajara las orejitas.

Tom se recompuso en segundos y le gruñó con furia haciendo que Harry soltara un quejido por el fuerte ardor en su cicatriz. El felino se paralizó sintiéndose horriblemente mal hacerle daño al azabache, bajó las orejitas y se encogió en su lugar.

Harry al sentir tantas emociones venir de Tom como nunca antes se arrepintió de quejarse sabiendo que su Tom estaría confundida y no sabría que él es su pareja destinada.

-Te ayude con el ritual que querías hacer -Esas palabras consiguieron la total atención del felino que llegó a inclinar la cabeza a un lado confundido- Soy heredero de Gryffindor.

Tom paró las orejitas abriendo un poco más los ojos, él no había sabido esa información, pero al parecer Harry sí lo que significaba que lo ayudo muy conscientemente. Giró la cabeza a un lado confundido ¿Por qué lo ayudo en vez de dejarlo morir?

-Hogwarts también es mi hogar -Lo miró con una pequeña sonrisa- Haría lo que sea para restaurarlo y ya que tú habías iniciado ese ritual decidí ayudarte.

Tom lo miró mucho más cauteloso que antes, sentía demasiado y su magia, Merlín, estaba haciendo un gran esfuerzo para contenerla y que no envolviera a Harry ¡Eran enemigos! ¡Ni siquiera debería tener una conversación con él!

-Tengo algunas cosas que contarte, si pudieras...

Él le gruñó y retrocedió no se fiaba de Harry, algo sabía y planeaba hacer con él ¿Lo llevaría a Azkaban? ¿Lo mataría él mismo? Se estremeció ante sus pensamientos provocándole dolor, no quería eso. Increíblemente solo deseaba dormir una vez más en esa cómoda cama junto a...

Tom sacudió la cabeza, desear algo así era inaudito, ni siquiera debería tener esos pensamientos ni los que rondaban por su mente sobre lo atractivo que se ve Harry sin sus lentes dándole paso a esos hermosos ojos.

-Tom -Llamó sintiendo la confusión de él- Solo hablemos.

El nombrado agitado por tantas emociones que antes no sentía lo miró, Harry identificó muchas de ellas en esos ojos azul grisáceo, por eso tomando todo su valor Gryffindor se dejó expuesto al felino sentándose a solo unos centímetros de la chimenea.

Tom lo miró indeciso, pero no fue un Señor Oscuro por nada, por lo que muy cauteloso se acercó y se sentó frente a él a una distancia muy razonable que fastidio al adolescente, deseaba estar cerca de su pareja, pero esta tenía que ser demasiado paranoica.

-Bien, si pudieras... ¿Transformarte?

Tom gruñó mostrando sus perfectos colmillos dejándole claro que no saldría de su forma animaga.

-Bien, está bien -Suspiro- ¿Cómo estas vivo?

No gracias a ti.

Harry vio con sorpresa unas letras flotar frente al felino dejando obvio que Tom uso algún tipo de encantamiento. Sin embargo, no pudo profundizar en eso al leer esa frase y saber lo que significaba, había matado y torturado a su pareja matando sus fragmentos de alma uno por uno hasta que no quedo ninguno.

-Sí, sobre eso...lo siento, no quise...

No me mientas Potter, parecías bastante motivado a destruir mis Horrocruxes.

Tom le gruñó crispándose en su lugar recordaba vívidamente lo que sintió con cada destrucción de sus fragmentos de alma, hasta de la misma Nagini, recordar a su querida serpiente le provocó dolor y eso pudo sentirlo Harry quien se removió culpable.

-No era yo mismo.

¿Me estás diciendo que no fuiste tú quien cazo todos mis Horrocruxes y los destruyo? Porque estoy seguro de que fuiste responsable de por lo menos 5 de los 6.

-Siete.

¿Qué? Hice 6.

-No, hiciste 7 -Lo miró sorprendido- ¿No lo sabías?

Hice 6 no 7 -Insistió gruñendo furioso.

-¿Acaso nunca pensaste por qué podías acceder a mi mente? ¿Cómo encontré los Horrocruxes?

Tom se crispo levantándose de un salto y retrocedió sintiéndose perdido, no, no era posible, él no había... ¡Él había muerto esa noche!

-Yo fui y soy tu Horrocrux.

Tom en este punto no pudo resistirlo, se tiró contra el joven cambiando en el proceso, Harry cayó de espaldas soltando un quejido ante el brusco movimiento, pero lo que más le sorprendió fue sentir una mano en su cicatriz, miró a Tom encontrando una conmoción en sus rasgos y ojos cuando pudo sentir el llamado de su alma.

El castaño se alejó de Harry volviendo a su forma animaga aturdido, primero no iba a estar desnudo frente al mocoso, segundo había creado un Horrocrux sin saberlo y tercero lo había tratado de matar tantas veces cuando debió haberlo protegido.

-De verdad no lo sabías.

¡Si lo hubiera sabido habría hecho lo posible para mantenerte a salvo!

Tom le gruñó furioso caminando de un lado a otro gruñendo debió haber sabido que le faltaba un pedazo de su alma, aunque fuera tan pequeño. Refunfuñó al saber que Harry tenía conocimiento de aquello seguramente por ese viejo.

-¿De verdad me hubieras protegido?

No te habría dejado a manos de ese viejo si lo hubiera sabido, te habría mantenido a salvo de todo.

-¿Encerrado?

Lo más probable -Lo miró gruñendo bajo.

-No estás en posición para encerrarme, curioso que sea al revés -Se burló ganando un ardor en su cicatriz por la furia de Tom.

Si fuera una casa normal ya me habría ido.

Harry sintió una punzada de dolor al saber que Tom no quería nada que ver con él, aunque puede que no sepa lo que son, había escuchado de la Muerte que él se rindió a los 40 y tanto de encontrar a su pareja destinada y la soledad lo llevo a su ruina, si lo dejaba ir ahora Tom se volvería loco de la necesitad de sentir su magia. De sentirlo cerca.

-¿Cómo volviste?

Muerte -Se estremeció crispándose.

-¿Muerte? -Se sorprendió, no le había dicho nada de eso- ¿Él te trajo de regreso?

Ahora Harry comprendía el significado de "regalo" le había traído a Tom de regreso y le daba la posibilidad de quedarse con él hasta que él mismo muriera ya que tenía un fragmento de su alma siendo Harry inmortal su Tom lo sería.

¿Lo conoces? -Retrocedió gruñendo bajo.

Tom de repente se tambaleo casi cerrando los ojos ante un fuerte mareo que azotó su cuerpo. Harry se dio cuenta de que en ningún momento le suministro pociones a su pareja, ninguna que calmara el dolor o un reponedor de núcleo mágico.

-Vamos arriba -Se levantó ganando un sutil gruñido- Estas cansado.

Cállate, Potter, estoy bien.

-Iniciaste un ritual muy antiguo recién de regreso, tu magia esta resentida. -Lo miró serio, aún lo está -pensó preocupado

¿Y por qué estas tan seguro de eso? -Retrocedió.

-Llevas 4 días acariciándome con tu magia, pude sentir lo agotado que estas.

Harry se regodeo al ver a Tom, él poderoso Señor Oscuro Voldemort estar avergonzado tanto por sus sentimientos como por sus orejitas que bajaron ante las palabras que dijo.

¿Estuviste 4 días cerca de mí sabiendo eso?

-Bueno...-Se sonrojó ganando una mirada interesada del felino- Tu magia...

¿Qué tiene mi magia?

Harry llegó a solo un paso de Tom aliviado de que este no se alejara sino que lo mirara con curiosidad moviendo su cola de un lado a otro con lentitud con sus orejitas paradas y sus ojos brillando. Como deseaba acariciar su cabeza en este momento.

-Si me sigues arriba te lo diré

Tom bufó bajo, pero ante otra ola de mareo decidió seguirlo, necesitaba descansar otro poco, aunque se sentía muy incómodo hacerlo en el mismo lugar con Harry, aunque tuvo que admitir que si él lo quisiera muerto lo hubiera dejado morir en el ritual o los 4 días en los que estuvo inconsciente.

Fue de esa manera que los dos subieron a la habitación de Harry, él dejó entrar al imponente felino que ni dudo en subirse a la cama y acurrucarse en ella casi ronroneando ante el olor que desprendía.

Harry no comentó nada no queriendo arruinar la confianza que le estaba dando Tom al acostarse en su cama, por lo que se sentó a su lado viendo cómo se crispada y lo miraba cauteloso, pero su magia respondía suavemente a su presencia.

-¿Por qué contienes tu magia? -Se atrevió a preguntar ganando una mirada de Tom.

¿Puedes sentirlo?

-Sí, puedo sentir que contienes tu magia, no la dejas salir ¿Por qué?

Recuerdo lo que provoca mi magia y si no me has atacado o matado durante estos 4 días debo, por lo menos, devolverte el favor.

-¿No me mataras?

¿Siendo mi Horrocrux? Ni siquiera te tocare un pelo.

Harry gruñó bajo enojado con que ese era la única razón por la que Tom no lo atacaba, pero se molestó más que él no lo tocara, deseaba tenerlo de nuevo en sus brazos, pasar sus manos por ese suave cabello castaño oscuro.

-¿Puedes liberar tu magia? -Lo miró con intensidad, deseaba sentir la magia de su pareja de nuevo.

¿Acaso eres ciego Potter? ¿O no sabes leer? -Se burló.

-Quiero sentirla de nuevo.

No lo haré.

-¿Por qué? No soy uno de tus Mortífagos. -Lo miró serio- No sé qué efecto tenía tu magia en ellos, pero no obtendrás lo mismo de mí.

Tom sabe perfectamente lo que provoca su magia, apenas sacarla sus Mortífagos se sintieron asfixiados y cuando no estaba enojado o arremetía contra ellos se encontraban drogados por su magia, no quería ver eso en la única persona que se atrevió a confrontarlo de manera única.

Resignado la dejó salir sintiéndose relajado al no contenerla. Aun así, estuvo atento a la reacción de Harry para ver si necesitaba guardarla de nuevo. Sin embargo, no esperó sentir esa magia tan fría del adolescente apenas sacar la propia, se estremeció sintiendo un escalofrío recorrer su espalda.

Harry por su parte, se estremeció encantado con sentir la oscura magia de su pareja, tan cálida y que acariciaba su cuerpo y lo envolvía casi con cariño. Sin poder evitarlo liberó la suya sintiendo encantado como se enredaba con la de Tom y lo envolvía sacándole un jadeo de sorpresa.

Tom casi se derrite al sentirse envuelto en esa magia, se sentía cálido y protegido bajo esa fría magia que se enredó con la suya y se acariciaban entre sí. Casi cierra los ojos para poder disfrutar más, pero los abrió de golpe soltando un quejido bastante audible cuando la magia de Harry dejó la suya.

Harry consciente de lo que hacía deseaba ver cuanto dejaría su orgullo Tom para volver a sentir su magia. Se sorprendió gratamente al verlo moverse en su dirección hasta que estuvo lo suficientemente cerca para frotar su cabeza contra el costado de su cuerpo.

Podía sentir lo cansado que estaba y con la liberación de su magia pudo decir con firmeza que quedó bastante adormilado. Por eso, al ver como Tom dejaba su orgullo de lado para acercarse de esa manera sacó por completo su magia envolviendo a su compañero quien gruñó bajo satisfecho.

Tom por su parte, sabe lo que está haciendo, pero la magia que siente de Harry lo llamaba, se sentía tan bien tenerla a su alrededor, como ella acariciaba la suya con cariño que deseaba más, quería sentir mucho más de aquellas sensaciones que le provocaba estar así con Harry.

Sin darse cuenta quedó acurrucado junto a Harry apegado a su costado izquierdo y sobando su cabeza en su abdomen, Harry encantado con las reacciones de Tom se aventuró a subir su mano y dejar unas caricias tentativas en su cabeza muy cerca de sus orejitas.

Sonrió triunfal al escuchar un ronroneo ronco de parte de Tom que más dormido que despierto cerró sus ojos sintiéndose somnoliento y tan agotado que se dejó llevar por la calidez del cuerpo de Harry junto con la frialdad tan cálida de su magia.

Harry sabía que tarde o temprano le tenía que informar a Tom lo que sabía, merecía saber lo que hizo Dumbledore con ambos, lo que significaba que estuviera de vuelta casi completo y la conexión que siempre tuvieron.

Solo esperaba que no reaccionara igual que esta mañana.

Continuará

Hola gente!

No pensé que la historia les gustara tanto, en verdad agradezco los comentarios. De ahí el motivo para publicar el segundo capitulo.

Esperando que les haya gustado nos vemos en otra oportunidad. Cuídense y no se olviden de tomar agüita

Bye bye 💕✌