s e i s
Me levanté de la silla con cuidado donde estaba sentanda anteriormente para no provocar un ruido que levantara a Momo, quien dormía de una una forma muy plácida, me daban ganas de acostarme con ella.
Salí del cuarto para buscar a alguien que me explicara las palabras de Todoroki. ¿Con quien quedarse?, ¿a que se refería?.
Corrí pero al hacerlo choque con alguien callendo de senton, amortigue la caída con mis manos, estas ardieron por mi caída anterior y lo que ya ardían.
-auch!- me queje y miré mis manos, estas tenían sangre, estaban rojas y rapadas. Dolían a mares, y para colmo ahora mi maldito trasero también dolía.
-¿Te encuentras bien?- esa voz. ¿Shoto?.- perdón por eso, tu venías corriendo y...- lo interrumpi.
-callate- me levanté sola a impulso. Planeaba seguir mi camino pero Todoroki tomó mi mano apretandola para que me detuviera. -¡Auch!- me queje y el soltó mi mano al ver que me había lastimado.
-lo siento, te llevaré a curar- me tomó de la muñeca prácticamente llevandome a rastras hasta un cuarto del hospital.
-siéntate ahi- señalo una silla.
-puedo curarme sola, ¿sabes?- estaba por tomar una botella de alcohol, cuando el medio albino me tomo de la cintrura levantandome con fuerzas que a saber de donde carajos sacó. Me levantó como si de una maldita pluma se tratase y me sentó en la camilla, mis pies se quedaron balanceado de adelante hacia atrás.
-yo te curare- dijo dejándome con la palabra en la boca. Fue al gabinete, lo abrió y cogió un pedazo de algodón que convirtió en dos pequeñas bolas de algodón, remojandolas en el alcohol.
Eso dolerá.
Volvió donde estaba posicionandose frente a mi. Pegándose a mi, mis rodillas quedaron pegando en sus muslos y era incómodo.
Tomo mi mano y paso el algodón por toda la longitud de mi palma.
-Mmmmm..- me mordida el labio inferior con algo de fuerza para no gritar de dolor, el sólo hacia su trabajo, me miro y soltó una risa de nariz. Tonto.
-Todoroki- el me observó ante el llamado
-¿porque Momo necesita con quien quedarse?- pregunté.
-por lo sucedido- dijo se levantó y se fue hacia el gabinete. Tomo una bolsa de vendas y le quitó el empaque.
-pero el consultorio es serguro- dije y sople mis manos.
-si claro -dijo de forma sarcástica- ¿eres tonta?-
Coloco las vendas a mi lado y se sento frente a mi nuevamente. Quería golpearlo por lo sarcástico e irritable que era. Pero recordé el estado de mis manos. No valía la pena lastimarla mas con el.
-¿será temporal?- pregunte, el negó mientras enrebada la venda en mis mano.
-no, buscan a alguien que lo acepte de por vida en su casa- dijo.
¿Porque Momo no se quedaba con el?
-¿porque no se queda contigo?- pregunté.
-por que vivo con mi pareja-
dijo sonriendo.
- ¿por que no se queda contigo?- repitió la pregunta.
No lo habia pensado el Yaoyorozu se quedará conmigo. Después de todo vivía sola, pero tenía que ir al consultorio. La podría llevar conmigo cuando tuviera que ir.
¿era buena idea?
Jamás había intentado algo haci. Nunca en mi vida.
-puedo intentarlo- susurre.
-listo- soltó mi mano sonriendo.
-Y porque no se queda con su Tía Mei- el se subió a la camilla y tomo asiento a mi lado.
-ella.. ella es algo adicta a las drogas- su mirada estaba en el suelo, mientras yo lo miraba a el de forma fija.
-¿y sus padres?- el dio un suspiro sonoro y hablo.
-sus padres no son muy sercanos a ella por un problema que tuvo desde su "nacimiento". Ella es intersexual. Y cuando Yaoyorozu fue diagnosticada con Ezquizofrenia no quisieron saber nada de ella, no sabían como reaccionar, haci que le llevaron con su Tía, Mei, ..... pero esta comenzó a salir con un hombre mayor que la hizo drogadicta.- suspiro y continuo hablando.
-Ellos golpeaban a Momo, no le daban de comer ni tampoco le daban sus medicinas, esa fue la razón por la que su enfermedad empeoró, volvió a con sus padres tiempo después pero estos no la dejaron entrar y la sacaron de "su casa". Estuvo viendo conmigo en mi casa y mi pareja... dijo que ya no la soportaba, además de que....- dejó de hablar de repente.
-¿Qué de que Shoto?-el no respondió. Bajo de la camilla y poco después el me ayudó a hacerlo.
-¿no me vas a responder?- pregunté. El bufo por lo bajo.
-no....puedo- se mordió el labio inferior de foma nerviosa. -¿entonces se quedará contigo?- pregunto. ¿no quería quedarse con ella?.
-¿no quieres quedarte tu?- salimos el cuarto del hospital, al parecer nadie se dio cuenta de cuanto tiempo estábamos ahí.
-primero responde. ¿Te haras cargo de Momo?- pregunto.
Lo pense por un momento.
Talvez no sería tan mala idea intentarlo. Tenia la suficiente práctica para quedarse conmigo sin problemas.
-Si Joven, Todoroki- suspire. De un movimiento rápido estaba completamente pegada a ese chico, que me estaba abrazando. Era más baja que el, rayos.
-Gracias, por todo lo que haces por, Momo- me acarició el cabello. Yo correspondi el abrazo- nadie le había tomado cariño en tampoco tiempo, sólo tu.- se separó de mi sonriendo de oreja a oreja.- pero eso sí, hoy me quedare con Yao mañana le dejarán ir-
-Bueno, ¿entonces lo necesitas ahora?- pregunté, hacia tiempo que no veía a mi padre, el se había separado de mi madre hace ya unos años y no lo había ido a ver por el trabajo, además tenía que darle la noticia.
-No, ve a hacer lo que tengas planeado y vuelves por ella en la mañana- sonaba feliz. Yo asenti a lo que dijo. -Bueno... entonces .. iré con momo- se dio la vuelta camino a la habitación de la pelinegra.
-Todoroki- ante mi llamado detuvo su andar y se giró para verme -gracias- me sonrió de forma dulce y siguió caminando.
Suspire, salí del hospital camino a donde mi padre.
Yaoyorozu sufrio mucho, ya era momento de que sea feliz..... y lo sería.
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