Iban caminando por muchos lugares del bosque, por muchos lugares y paisajes y eso hasta que Daniel creyó ver unas huellas de pies humanos en el piso, las vio, le aviso a Tar que iba con él, entonces uso un truco que le enseñaron que era la "vista de cazador".

Contexto: "vista de cazador" es agudizar la vista para poder ver y seguir huellas de las presas que son rastreadas.

El chico se arrodillo para poder ver mejor entonces agudiza su vista lo más que puede ya que no perfecciono tanto esa habilidad, pero concentrándose puso ver las pisadas y le aviso a Tar.

Daniel: Tar, encontré las huellas de los nativos que se perdieron. (dijo sin dejar de mirar el sendero)

Tar: ¿A dónde ir?

Daniel: parece que van hacia enfrente.

Los dos fueron hacia esa dirección hasta que Daniel detuvo el paso.

Tar: ¿Qué pasar? (dijo confuso)

Daniel: dirás que estoy loco, pero creo que veo más huellas ¿Cómo cuantos de ellos se perdieron? (dijo volteándolo a ver)

Tar: salir de la tribu 2 hombres y 1 mujeres.

Daniel: ok, son 3 entonces tendrían que haber 6 huellas, pero veo más que eso (mirando el rastro) las otras se ven más pesadas.... (se dio cuenta) ¡fueron secuestrados!

Tar: ¿Dónde?

Daniel: no se creó que, por ahí, no se.

Tar: ¿quién?

Daniel: no sé, tal vez si seguimos el camino podamos saberlo.

Avanzaron un poco más hasta llegar una zona que parecía nevada.

Daniel: cielos. Bueno si queremos volver lo más rápido posible tenemos que apurarnos.

Iba a ir, pero Tar se lo impidió extendiendo su brazo delante de él.

Daniel: ¿Qué pasa?

Tar: ahí ser territorio Yangor.

Daniel: ¿de verdad? ¿viven en la nieve? (sorprendido) no puedo creerlo.

Tar: ellos tener a exploradores Zoyrus perdidos, ellos odiar a Zoyru. (dijo serio)

Daniel: ¿Por qué lo odian? Ah....

De la nada le vino un flashback de la primera vez que vio a su líder, Ghor.

Flashback:

Ghor: ¡AAARRGG! (gruño) ¡aquí no haber lugar para débiles Zoyrus! (grito mientras apretaba el cuello del chico) ¡y tú! ¡extraño! ¡Irte!

Fin del flashback:

Mente de Daniel: debes ser porque se creen superiores a ellos, es por eso que los odian.... Espera... eso me recuerda a...

Es en ese momento volvió a recordar algo, pero de su mundo donde él y sus amigos se burlaban de Sofi solo por no ser de la misma clase social que ellos, pensó que entonces eso lo hacía igual a los Yangor, lo que lo hizo sentirse mal hasta que Tar lo saco de sus pensamientos.

Pegándole en la cabeza.

Daniel: ¡auch! (tocándose la cabeza en el lugar del golpe) ¿Qué pasa?

Tar: ¿Qué tanto pensar?

Daniel: perdón estaba distraído con algo. (aun con la mano en la cabeza)

Tar: no perder tiempo, Zoyrus necesitar ayudar.

Daniel: está bien, está bien, vamos ya.

Emprendieron otra vez el camino para ir allá, caminando mucho después llegaron a más zonas, hacia frio, pero no tanto como para ser insoportable, hasta el solo iluminaba, Daniel no se dio cuenta en qué momento todo dejo de ser tan verde a volverse todo blanco y cubierto de nieve incluso en los árboles. 

Siguieron cruzando los paisajes y siguiendo el rastro, aunque era un poco difícil por la nieve, pero al final llegaron al territorio de los Yangor, se veía que era un lugar peligroso, los dos se ocultaron atrás de una gran piedra cerca para que no los vieran.

Autor: esta es su guarida.

Mientras que ellos en su escondite.

Daniel: bien y ¿ahora que hacemos?

Tar: haber demasiados, nosotros dos, necesitar distracción.

Daniel: bien ¿y que será la distracción?

El nativo lo miro a él.

Daniel: ay no. (dijo ya sabiendo a que se refería)

Entonces el distraería a los caníbales mientras Tar encontraba y liberaba a los prisioneros, el chico avanzo hacia la entrada.

Daniel: ¡Hey! ¡todos ustedes! (dijo moviendo los brazos al aire)

Todos los vieron y se empezaron a acercar a él con intenciones nada buenas, así que el retrocedió poco a poco sobre sus pasos.

Daniel: ok, ok vamos a calmarnos (retrocediendo poco mientras los veía frente a él había unos 5 de ellos) tranquilos todos.

Nativo Yangor: ¡RRRAAarrrr! (le gruño con garrote en mano)

Daniel: muy bien, si va a ser así (saca el garrote Yangor que le dio Asri) comencemos con esto.

Uno de ellos o quiso golpear con su garrote, pero Daniel lo esquivo a tiempo y pego un contundente golpe con ese garrote de madera y hueso en la nuca matándolo lo más posible.

Daniel: a ver ¿Quién más? ...Oh.

Vio que los otros se acercaban corriendo a él.

Estos tenían armaduras de hueso (como en la imagen) así que le sería más difícil lograr vencerlos, los golpeo lo más fuerte que pudo a ellos, esquivando los ataques de los caníbales, pero... mientras estaba entretenido con algunos otro se le acerco por detrás y lo golpe en la cabeza dejándolo inconsciente.

Daniel a veces abría un poquito los ojos, pero los volvía a cerrar porque seguía atontado por ese golpe, en esos breves momentos donde abría los ojos pudo ver que los caníbales lo estaban arrastrando sujetándolo de la pierna hasta que cerro completamente los ojos y no los abrió.

Todo estaba oscuro hasta que, sin saber cuánto tiempo paso, el abrió los ojos pesadamente mientras lentamente se levanta.

Daniel: ay (se agarra la cabeza, adolorido) ¿q-que paso? (se levanta) ¿Dónde estoy?

Ve a su alrededor y ve que estaba dentro de una jaula de madera, lo que lo sorprendió bastante, intento romper la jaula con sus manos, pero era demasiado fuerte y se cansó, parece que estos caníbales también sabes hacer trampas.

Daniel: ¡no puede ser! Ahora soy yo el animal encerrado.

????: estar despierto.

Se quedó paralizado al escuchar esa voz, giro la cabeza al mismo tiempo que el cuerpo para ver que detrás suyo, estaba sentado el líder de los Yangor, Ghor, que lo veía seria y fijamente.

Daniel: ¿ahora que harán? ¿comerme?

Ghor se inclina un poco hacia el acercándole su cara mientras aún tenía su mirada seria con ceño fruncido, su cara ya de por si era intimidante.

Ghor: debería darte de comer a Yangor, carne de Zoyru ser buena para Yangor.

Daniel: ¿ah sí? ¿y porque no lo haces? (pregunto tratando de ocultar su miedo)

Ghor: tu buscar Celtis.

El chico se quedó sin palabras al ver que este Yangor también sabia acerca de la fuerza extraña que lo trajo a este mundo, con una cara de sorprendido decidió preguntar.

Daniel: ¿q-queeee? A-ah n-no sé de qué hablas. (dijo nervioso)

Entonces Ghor extendió su brazo y lo tomo del cuello atrayéndolo cerca de él.

Ghor: tu extraño, más débil que Zoyrus así que tu venir de Celtis.

Mente de Daniel: no está del todo equivocado.

Daniel: a-Agh n-no se dé Agh que h-hablas (dijo apenas siento sujetado del cuello) ¿p-para que quieres, Agh, saber sobre c-Celtis?

Ghor: nosotros ir a otras tierras, antes no creer, pero tu ser prueba.

Daniel: ¿p-por qué? (dijo tratando de respirar bien)

Ghor: (lo acerca un poquito más a él) nosotros ser fuertes, necesitar tierras nuevas.

Daniel: ¿y p-porque no Agh van a otros lugares d-de aquí?

Ghor: nosotros querer otras tierras, otros mundos. Tu guiarnos a Celtis.

Lo suelta, pero al mismo tiempo lo empuja contra una de las paredes de la jaula.

Daniel: -cof- -cof- -cof- Agh... (tocándose el cuello) -cof-

Ghor: ¿Dónde? ¿Dónde Celtis unir tierras? (dijo serio)

Daniel: -cof- -cof- n-no te lo diré.

Ghor: decirnos o ser nuestra comida.

Daniel: Agh... (se levanta) adelante, cómanme, pero si lo hacen se quedarán sin saber dónde será el lugar.

El enorme caníbal se quedó callado un momento porque tenía razón así que le dijo.

Ghor: decirnos o tu ver a Zoyrus arder.

Daniel se quedó sorprendido por esa respuesta.

Daniel: no lo harías.

Ghor: si podemos.... Hablar.

Se quedo otra vez callado, no quería ver a esas personas que le dieron su confianza, cuidados, admiración morir por su culpa, por primera vez sabia como se sentía cuando tienes algo que proteger... algo por lo que pelear.

Ghor: hablar o Zoyrus ser cena esta noche.

Daniel se acercó a donde estaba el y solo dijo molesto.

Daniel: muérete. (dijo molesto)

De la nada se escuchó como los Yangor se alteraron.

Daniel: ¿Qué sucede? (pregunto dudoso)

Llega un Yangor.

Nativo Yangor: ¡prisioneros Zoyrus escapar! (dijo alarmado)

Ghor: ¡¿queee?!

Se levanta todo molesto, cuando llega donde el otro lo empuja y se va a ver que paso.

Daniel: seguro Tar lo logro, ahora debo salir de aquí (dijo mirando por todos lados) aja. (se le ocurrió algo)

Estos nativos no eran tan listos y no le quitaron su cuchillo de piedra que tenía atrás, lo saco y empezó a tratar de cortar las cuerdas que mantenían juntos los palos de madera que conformaban la jaula en la que estaba.

Corto casi desesperadamente hasta que por fin logro hacerlo y rompiendo unos de los palos en el proceso, salió afuera corriendo para que todos los presentes estaban alterados yendo de acá para allá. Aun con su cuchillo en la mano intento irse hacia la salida, pero los sujetos de armaduras de hueso de antes se lo impidieron poniéndose en frente de él.

Daniel: ay ¿Por qué hay tantos? ¿y enserio, armaduras de hueso?

Eran 3 de ellos, él quiso pelear, pero solo tenía un cuchillo de piedra así que no haría mucho daño así que mejor decidió escapar. Corrió hacia ellos, los cuales trataron de hacerle daño con sus lanzas, pero el cómo era un poco más delgado que ellos logro esquivarlos de pura suerte, saliendo por donde entro.

Mientras corría escucho que los Yangor gritaban mientras intentaban perseguirlo, corrió y corrió lo más rápido que pudo, no sabe por cuanto tiempo corrió, pero la noche empezó a caer así que se detuvo un momento para descansar.

Daniel: (inhalando y exhalando mucho) e-espero... haberlos.... Perdido.

Pero escucho gruñido de como estaban detrás de él, volteo y los vio acercándose con antorchas.

Daniel: Agh por favor. (dijo quejándose)

Quiso seguir corriendo cuando vio una pequeña fosa así que decidió meterse en ella, se pegó la espalada lo más que pudo a la pared de esa pequeña fosa y tratando de no hacer ni el más mínimo ruido para que no lo vean ni lo escuchen. Escucho como estaban arriba de donde estaba el viendo alrededor como los estaban buscando, escucho las pisadas de unos cuantos que sin darse cuenta se acercaban a donde estaba el, Daniel comenzó a suplicar en su mente que no encontraran.

Cuando de la nada se escuchó como ellos se alejaban, no sabía si era porque se rindieron o porque decidieron buscarlo en otro lado, pero no el chico no se atrevió a asomarse hasta no escuchar absolutamente nada, espero unos minutos guardando silencio y sin moverse, cuando no escucho nada en todo ese tiempo se asomó un poco mirando sobre el borde de la pequeña fosa poniendo sus manos también ahí, no vio a nadie así que solo suspiro aliviado y salió de ahí.

Daniel: uff, que estresante (dijo aliviado) ahora ¿por dónde regreso? (dijo mirando alrededor) ¿enserio, Tar no volvió por mí? Vaya compañero.

Pero cuando quiso empezar a caminar escucho uno extraños ruidos, se quedó quieto al instante para oír mejor esos ruidos, parecían.... Gruñidos, solo moviendo los ojos intento ver de dónde venía, ya sabía que era un animal, pero donde estaba. Sujeto fuerte su daga de piedra esperando el momento para atacar a lo que sea que estuviera acechándolo.

Algo se movía entre los arbustos amontonados un poco cubiertos de nieve, con la oscuridad de la noche no se podía ver bien y la luz de la luna que había ahí no ayudaba.

El misterioso animal estaba cada vez más cerca de él, Daniel sintió miedo porque no hay nada más aterrador que sentir como te acechan en la oscuridad, pero trato de ocultar ese miedo para tratar de ubicar a la bestia con su oído, cuando de la nada.... ¡un tigre dientes de sable salto sobre el!

Pero por suerte logro esquivarlo rodando en el piso a un costado, casi de inmediato se levantó y se puso en pose de pelea con su daga de piedra mirando serio al tigre. Pero se fijó mejor en él y vio que tenía la misma marca en el ojo que le hizo al arrojarle una piedra accidentalmente y el mismo que vio la primera vez que fue a cazar, estaba frente a él.

Los dos empezaron a caminar en circulo lentamente aun mirándose.

Daniel: nunca te cansas de seguirme ¿cierto?

Tigre dientes de sable: ¡RRRRrrrrrrr! (le gruñe)

Daniel: ¡oye! No me gruñas. (dijo serio)

Tigre dientes de sable: ¡RRRRROOOAARR!

Daniel: ok, está claro que solo uno de nosotros saldrá vivo de aquí.

Tigre dientes de sable: ¡RRROOOAAAWWRR! (ruge lanzándose sobre el)

Por suerte lo esquiva igual que antes peor se pone en guardia rápidamente apuntándole con su cuchillo.

Daniel: vamos, creí que eras más rápido.

El enorme animal le gruñe enojado y se prepara para atacar.

Daniel: adelante, estoy listo.

El tigre dio un gran salto hacia él, rápidamente Daniel cerro los ojos y le dio una estocada con su cuchillo al tigre mientras este caía sobre el cayendo los dos al piso.

Todo se quedó a oscuras cuando de pronto Daniel abrió los ojos y se levantó todo alarmado.

Daniel: ¡AAHH! ¿Qué paso? ¿estoy completo? (dijo desesperado mirándose el cuerpo) espera... ¿Por qué estoy vivo?

Levanto su cuchillo que estaba a un costado y vio al tigre en el suelo muy cerca de él.

Daniel: ¿l-lo mate? (dijo acercándose un poco)

Cuando se acercó lo suficiente para ver si estaba muerto escucho que aun respiraba.

Daniel: ¡ay no! ¡sigue vivo! (dijo alarmado apuntándole otra vez con su arma)

El animal solo se quedó ahí un momento sin hacer nada hasta que de pronto se levantó despacio hasta está de pie en cuatro patas (como es el animal) y alzo la cabeza y vio a Daniel.

Daniel: a ver, ven, ahora acabemos con esto ya. (preparándose)

Pero en vez de atacar el tigre se le acerco despacio a él, Daniel se asustó un poco, pero vio que tenía la cabeza agachada, cuando ya se le acerco por completo solo acerco un poco su cabeza.

Daniel todo confundido no sabía que hacer ahora.

Daniel: ¿Qué hago ahora?... ¿Mmmm? Parece que... quiere que... acaricie su cabeza.

Mente de Daniel: no debo confiarme puede que me muerda si lo toco y perdería la mano.

Así pensó negándose a hacer eso, pero paso el rato y el tigre seguía del mismo como así que pensó en intentarlo, rezando en su interior esperando que no le arranque el brazo. Muy lentamente acerca su brazo al animal y cuando estaba a unos pocos centímetros del contacto el tigre acerco su cabeza a su mano dejándose acariciar. Lo que dejo muy sorprendido al chico.

Daniel: no entiendo que pasa, pero esto es un poco raro (dijo mientras lo acariciaba) ¿acaso será por la estocada que te di con mi cuchillo?... ¿Mmmm?

Se fijo más de cerca que parecía que la cabeza del tigre estaba sangrando un poco de un lado de esta, pero un poco cerca al oído, pero sin tocarlo.

Daniel: no entiendo que paso, pero... creo que no me quejo. (dijo mientras aun acariciaba al animal en la cabeza)

Contexto: parece que cuando le disparas o hieres o algo parecido al costado de la cabeza de un animal cerca al oído como que lo vuelve más obediente o sumiso, es raro, pero es verdad.

Daniel: entonces... ¿esto significa que estas de mi lado? (dejando de acariciar)

El tigre dientes de sable solo lo miro y nada más.

Autor: este es. (imaginen que es de noche, no conseguí otra)

Daniel: creo que tomare eso como un si... ¿y ahora como regreso? (mirado alrededor) tendré que darme prisa me dijeron que de noche es peligroso.

Empezó a andar buscando regresar con la tribu, mientras caminaba se dio cuenta que el animal lo seguía.

Daniel: (volteando) ¿enserio vas a seguirme?

Solo lo mira.

Daniel: ay.... Ok, pero si quieres seguirme tendrás que ayudarme ¿ok? (se da cuenta de algo) ay, ahora soné como Tar o Drakk.

El animal se le acerca un poco más.

Daniel: de acuerdo vamos.

Siguieron ahora los dos caminando para volver, pero no daba resultado además de ser de noche sabía que debía dormir así que eligió un buen lugar y se arrodillo para prender una fogata como vio que hacían.

Daniel: ok, pongo unos palos... (los pone) ahora dos piedras y frotarlas para formar una chispa.

Así lo hizo, lo intento, pero al principio no parece hacer ningún efecto por más que las golpea y las frota a la vez.

Daniel: ¿Por qué no prende? (dijo frustrado y aun tratando de prenderlo)

Lo intento más veces hasta que por fin de la nada salió una chispa.

Daniel: hey si me salió. (dijo sorprendido)

Al ver que por fin le salió siguió golpeando las piedras entre si mientras más chispas comenzaban a salir, hasta que unas cuantas de ellas cayeron en las ramas que puso y comenzó a soplar despacio. Al ver que no hacía nada puso más ramitas y comenzó a encenderse, luego sopla otra vez y ya se prendió.

Daniel: ¡por fin! (acerca sus manos al fuego)

Luego de calentarse un poco, le dio un poco de hambre.

Daniel: tengo hambre, que bueno que guarde algo de carne aquí. (saca unos trozos de carne que cazo hace tiempo de su piel que lleva para guardar cosas)

Lo saca, toma un palo que había por ahí y atraviesa la carne que tenía y la pone encima del fuego.

Daniel: qué bueno que guarde algo (en eso recuerda algo) esto me recuerda a cuando tenía mi reserva de refresco y me negaba a tomar otras (dijo mientras mantenía sujeto el palo con la carne) ahora que estoy pasando por todo esto, eso de la reserva me parece un poco... estúpido.

En eso el tigre se le acerca un poco mirando fijamente la carne a lo que Daniel se dio cuenta.

Daniel: ¿enserio? ¿quieres algo de esto? (dijo mirando al tigre)

El animal solo se relamió.

Daniel: bueno creo que sí, a ver... (toma un trozo que tenía ahí y se lo da) toma.

Se lo acerca y se lo lanza a una corta distancia ya que estaba junto a él, lo atrapa con la boca y se lo come.

Daniel: jeje parece como si fueras mi mascota.

El animal no le prestó atención solo termino de comer.

Daniel: ¿Mmmm? ¿debería ponerte nombre?

Lo miro un momento pensado en un nombre, mientras el tigre solo se recostó a un lado de él, pero aun con su cabeza lanzada.

Pensó otro rato hasta que por fin se le ocurrió un nombre.

Daniel: ¡ya se! Oye... (llamo su atención y este lo miro) ¿qué te parece si te llamo Rajah?

Solo lo mira.

Daniel: creo que ese sería un buen nombre para un tigre y más creo para un diente de sable como tú.

El diente de sable solo le acerca su cabeza para que lo acaricie así que eso podría decir que le gusta ese nombre.

Daniel: jeje ok (lo acaricia) desde ahora te llamaras Rajah.

Luego de eso quito la carne de fuego y empezó a comérsela, aunque no tenía condimentos aun así es mejor que morirse de hambre y claro compartió un poco más con Rajah.

Después de comer dejo el fuego para que lo calentara durante la noche, así que se dispuso a dormir, pero lo único que tenía era el suelo, pero acomodo unas hojas que había por ahí, se recostó boca arriba queriendo dormir, pero como era su primera vez durmiendo fuera, pero trato de hacer un intento y cuando logro conseguir el sueño... solo durmió.

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