Parte 58

Narra Calum:
Morena sigue inconsciente y parte de esto es mi culpa, debí acabar con Axel de una vez. Permanezco sentado sobre una roca mientras miro mi navaja atentamente, me lo dio mi padre y se muy bien que es de plata pura, por alguna extraña razón la plata no me hace daño como lo suele hacer con los hombres lobos normales.

-Ya entiendo. -me digo pensativo -No puedo transformarme pero soy inmune a la plata, genial. -en ese momento escucho la voz de Michael, él preparó una cama con hojas para More y está cuidando de ella hasta que despierte.

-More, despierta. -murmura acariciando su mejilla estando arrodillado a su lado -Despierta, por favor. -él se inclina hacia ella para juntar sus frentes y luego cierra los ojos por un momento.

-No te preocupes, ya traerán a Alan y a Karen. -digo estando serio e impaciente.

-¿Por qué ordenaste que los buscaran? -me pregunta levantando la mirada.

-Alan era un cazador pero también sabe mucho de curaciones al igual que su hermana. -respondo mirandolo.

-Sé están tardando demasiado. -frunce el ceño levemente y luego mira a la chica inconsciente -Yo puedo llevarla a un hospital rápidamente. -se pone de pie dispuesto a llevarla pero lo detengo tomando su antebrazo.

-Piensa, allá te preguntaran que le pasó ¿Le dirás que un hombre lobo lo atacó y que tú la salvarte? -hablo arqueando una ceja.

Él se suelta bruscamente -No soy uno de tus perros para que me digas lo que tengo que hacer ¡¿Entendido?! -aprieta fuertemente la mandíbula.

-No, no lo eres pero trato de que no te maten. -contesto molesto.

-¿Ahora te preocupas por mí?

-Claro que no, debes vivir para poder cuidar de Morena. -hablo mirando a un lado.

En ese momento escucho unos sonidos a lo lejos, son pasos. No, son patas.

Los encontramos Alfa. -puedo escuchar las voces de los otros lobos en mi cabeza.

Alan se acerca decidido hacia mi teniendo su forma animal, un pelaje negro lo cubre por completo, cuando me ve a los ojos todos sus músculos tensos se relajan de a poco, tal vez pensó que otro lobo estaba a cargo.

-¡AY SUELTENME! -grita Karen retorciendose  mientras que uno de los lobos la tiene sujeta de su ropa con sus dientes dejándola a unos centímetros del suelo.

-Tranquila Karen. -le digo y es ahí cuando se queda paralizada con su mirada fija en mí.

-Así que tú eres el nuevo Alfa ¿Cierto? -dice Alan, ya en su forma normal, estando cruzado de brazos.

Yo solo asiento en silencio y la acerco a Morena -Quiero que la revices, Axel la golpeó y está inconsciente desde entonces. -hablo sintiendo su presencia junto a mí.

-Lo haré. -asiente arrodillandose junto a ella y comienza a ver sus golpes -Karen quiero que me ayudes. -le habla a la cazadora. Ella aún está con su ropa en el hocico de ese otro lobo.

-No curaré a un asqueroso lobo, sin ofender hermano. -contesta cruzandose de brazos y mirando a un lado.

-Ella es humana, tonta. -Gruñe Alan hacia ella.

-Pues así sí. -asiente y es cuando la dejan en el suelo, Karen mira mal a ese lobo que la sostenía y se dispone a ayudar a su hermano en todo.

-Espero que este bien. -habla Michael nervioso y preocupado.

Narra Hela
Luke viene corriendo hacia mí con una gran sonrisa en su rostro, su cabello es acariciado por la fresca brisa, sus ojos azules solo me miran a mí, como si no existiera nada más para él.

Yo también corro a su encuentro, mis ojos se llenan de lágrimas -¡Luke! -exclamo comenzando a correr con más fuerza, acaba vez estamos más cerca.

Cuando estamos por encontrarnos, él se detiene a unos centímetros de mí, pensé que nos abrazariamos y luego me basaría pero eso no pasó, sólo se queda ahí mirándome.

-¿Qué tienes? -pregunto preocupada, en ese momento el baja la mirada hacia su pecho, yo copio su acción y allí tiene un hierro clavado, la sangre comienza a manchar su camiseta y lo peor es que mis manos están sosteniendo el hierro. Yo lo maté.

Él cae al suelo y me arrodillo a su lado sosteniendo su cabeza -¡Lo siento, lo siento, no quise hacerlo! -comienzo a llorar, cierro los ojos con fuerza deseando que todos esto sea una pesadilla.

En ese momento siento una mano acariciar mi mejilla derecha que limpia suavemente mis lágrimas.

Abro mis ojos y me encuentro con los suyos, él se ve feliz, lo puedo notar por su sonrisa. Bajo mi mirada hacia su pecho y su herida desapareció -No llores Hela. -murmura tomando mi rostro con las manos.

-No, no, no. -niego siguiendo con mi llanto -E-Esto es un sueño, ahora... ahora lo entiendo, y-yo te maté, No quería hacerlo. -lo abrazo con fuerza, esta es la última vez que lo veré y no quiero perderlo.

Él acaricia mi cabello lentamente sin deshacer nuestro abrazo -Debías hacerlo. -Murmura y lloro con más fuerza, mis mejillas están mojadas con las lágrimas -Estoy bien, ya no llores.

Esas últimas palabras son susurros y abro lentamente mis ojos, una fuerte luz blanca me obliga a cerrarlos de nuevo, todo mi cuerpo me duele y no soy capaz de mover un sólo dedo. Escucho murmullos a mi alrededor y un sonido contante, como un pitido.

-Está despertando. -escucho la vos de una mujer.

-Hela, soy el Doc. -susurra en mi oído -Voy a protegerte. -es lo último que escucho hasta volver a desmayarme.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top