De regreso a casa Lance le dijo a Amelia que tenía una sorpresa para ella, Amelia se emocionó preguntando qué era. Lace negó en decirle riendo un poco, Amelia cierra los ojos y el espía la llevó al salón comedor donde tenía una cena romántica preparada. Estando allí Lance le dijo que ya podría abrirlos a lo que la joven científica sonriendo feliz y emocionada abre los ojos sorprendiéndose de ver aquel detalle tan lindo.

Amelia: (Sonriendo feliz) Se ve increíble, cariño. Me encanta. (Besa su mejilla)

Lance: (Sonriendo feliz) Gracias princesa, todo lo mejor solo para ti.

Lance la lleva a la mesa comportándose como un caballero, encantando mas a su amada novia. Sirvió a cada uno una copa de vino siendo el más caro y rico de todos, después ambos comenzaron a cenar, sin duda era más que perfecto y maravilloso como un cuento de hadas y princesas real. Se amaban con locura, hacían una linda pareja y eran un gran equipo imparable.

Al terminar de cenar Lance pasó al postre, se acercó a su pareja con algo en sus manos, se arrodilló frente a ella y sacó una cajita de terciopelo negra para después abrirla dejando ver un hermoso anillo de diamante puro.

Lance:Amelia Beckett, te amo demasiado desde que entraste a la Agencia. Todo de ti me enamoró, tus ojos, sonrisa, personalidad, eres tan dulce y amable...por eso quisiera saber si ¿quieres casarte conmigo?

Amelia: (Muy sorprendida y feliz asiente varias veces soltando varias lágrimas de felicidad) Si, si quiero casarme contigo mi vida.

Lance estando muy feliz le pone el anillo para besarla con amor. Sin duda era de lo mejor, ahora no solo eran pareja sino que también estaban comprometidos, ya querían decirles a los demás de la Agencia la gran noticia y preparar todo para la boda. Esa noche fue inolvidable.....