El bullicio en el Helicarrier de SHIELD era constante. Agentes especializados se movían de un lado a otro, monitoreando amenazas globales, realizando análisis y coordinando operaciones. En lo alto de los cielos, la nave insignia de SHIELD era el epicentro de decisiones cruciales para la seguridad mundial. Sin embargo, en la sala de reuniones principal, una conversación más íntima y reservada tomaba lugar, lejos del caos cotidiano

"Ok, el día de hoy volvió a hacer acto de presencia en el centro de Nueva York" - comenzó el agente Coulson, de pie frente a la gran pantalla que dominaba la sala. En el monitor, varias imágenes de la escena de un robo fallido en un banco de Nueva York se desplegaban - "Esta vez detuvo el intento de fuga de unos ladrones que habían robado un banco. Spider-Man también estuvo presente, ayudando a contener la situación"

María Hill, la subdirectora de SHIELD, no tardó en intervenir - "No nos interesa Spider-Man, agente Coulson" - dijo con un tono cortante, casi despectivo - "Lo que verdaderamente nos importa es Superman"

Coulson rodó los ojos, algo que no se molestó en ocultar - "¿Qué pasa, subdirectora? ¿Está enamorada de Superman o algo? Porque parece que está completamente pendiente de cada uno de sus movimientos" - Su tono era claramente una broma, una forma de romper la tensión palpable en la sala

Hill, sin embargo, no se inmutó. Su rostro permaneció imperturbable - "Debería tomarse las cosas más en serio, agente. Especialmente cuando se trata de asuntos oficiales de SHIELD" - Sus palabras eran directas, casi frías, pero con el peso de una advertencia oculta

Coulson iba a responder, pero la voz grave de Nick Fury lo detuvo - "Calmen el tono, ambos," - dijo Fury, quien estaba sentado en la cabecera de la mesa, con los brazos cruzados sobre el pecho. No necesitaba alzar la voz; su autoridad era incuestionable. Los dos agentes inmediatamente se quedaron en silencio

Fury le hizo una señal a Coulson con la cabeza, indicándole que continuara con el informe

"Como mencionaba" - retomó Coulson con un tono más serio -"no sabemos nada de él. Ni su nombre, ni su edad, ni quiénes son sus padres o de dónde proviene. Es como si hubiera aparecido de la nada y empezado a actuar como un héroe" - Las imágenes de Naruto, vestido con su característica capa y símbolo de esperanza en el pecho, seguían proyectándose en el monitor - "Lo más cercano que hemos visto a alguien como Superman es a Sentry... y su expediente es clasificado incluso para muchos de nuestros agentes. Pero fuera de eso, este tipo es un completo misterio"

Fury, con su único ojo fijado en la imagen en la pantalla, permaneció en silencio por un momento, como si evaluara cada palabra de Coulson. Finalmente, habló, con ese tono calmado y calculado que lo caracterizaba - "Vamos a mantener un ojo encima de él en todo momento. Necesitamos encontrar una forma de detenerlo, en caso de que se salga de control"

Hill frunció el ceño ante ese comentario - "¿Está diciendo que desconfía de él, señor?"

Fury desvió la mirada de la pantalla y la posó directamente en Hill - "No ha hecho nada que lo haga parecer una amenaza" - respondió, con esa calma que podía ser más inquietante que el propio contenido de sus palabras - "Hasta ahora ha operado con libertad, y mientras siga así, no tengo razón para detenerlo. Pero si algo llega a suceder..." - Fury dejó que sus palabras quedaran en el aire por un momento, mientras miraba nuevamente la imagen de Naruto en el monitor - "Será mejor que empecemos a rezarle a cualquier dios que conozcamos, porque no habrá nadie en el planeta capaz de detenerlo"

La gravedad en sus palabras era palpable. A pesar de la calma con la que lo decía, el peso de la posibilidad de que alguien con tanto poder se volviera una amenaza era suficiente para que todos en la sala comprendieran la magnitud del problema. Y aún así, Fury, en su naturaleza característica, no parecía particularmente preocupado. Para él, era un riesgo más que había que evaluar con frialdad y sin emociones

"¿Y cuál es el plan a seguir?" - preguntó Hill, su voz ahora más medida, consciente de que el director no tomaba este asunto a la ligera

"Observación constante" - respondió Fury - "Vamos a mantener un perfil bajo, no quiero que se sienta vigilado. Pero necesitamos respuestas, y las vamos a obtener. Coulson, coordina a tu equipo. Quiero informes detallados de cada movimiento que haga. Y si hay cualquier indicio de que pueda representar una amenaza... actuaremos en consecuencia"

Coulson asintió, recogiendo sus papeles y preparándose para salir de la sala. La imagen de Naruto, flotando sobre los edificios de Nueva York tras detener el robo, seguía en el monitor. Un enigma, un dios entre mortales, cuyo verdadero propósito aún estaba por descubrirse

Mientras los agentes abandonaban la sala, Fury se quedó un momento más, mirando la pantalla en silencio. A pesar de sus palabras tranquilizadoras, sabía que había algo en ese joven que iba más allá de lo que cualquiera de ellos comprendía. Y eso, en última instancia, era lo que más le preocupaba

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Naruto sonreía con calma mientras realizaba su trabajo en la cafetería. Vestía su uniforme con una sencillez que lo hacía ver como cualquier joven camarero, aunque aquellos que lo conocían de cerca sabían que era todo menos ordinario. De mesa en mesa, iba entregando tazas de café y platos con pequeños bocadillos, siempre manteniendo esa sonrisa despreocupada

"¡Naruto!" - Una voz femenina lo llamó desde una de las mesas cercanas. Al girarse, vio a Laura Kinney, quien lo observaba con su típica expresión tranquila pero siempre atenta. Él sonrió más ampliamente al reconocerla

"¡Hola, Laura! ¿Cómo estás?" - Su tono amistoso, casi familiar, no hizo más que suavizar el rostro serio de Laura, quien rara vez mostraba mucha emoción. Ella asintió con una leve sonrisa en respuesta

"Bien" - contestó Laura de forma calmada, aunque sus ojos se mantenían fijos en los de Naruto por unos segundos más de lo normal. Él inclinó levemente la cabeza

"¿Lo de siempre?" - preguntó él, ya anticipando su respuesta

Laura volvió a asentir, observando cómo Naruto se daba la vuelta para ir a preparar su pedido. Mientras él caminaba hacia la barra, la joven mutante soltó un suspiro silencioso y bajó ligeramente la mirada, aunque sus mejillas empezaron a calentarse. Era un calor familiar, pero a la vez incómodo, uno que había tratado de reprimir cada vez que estaba cerca de él

“¿Qué demonios me pasa...?” -pensó para sí misma, apretando los puños sobre la mesa. Era el novio de su amiga, por todos los cielos. Doreen tiene toda la maldita suerte del mundo

A pesar de su lealtad hacia Doreen, Laura no podía negar lo que sentía cuando estaba cerca de Naruto. Había algo en él, una presencia que no podía ignorar, algo más allá de su simple amabilidad. Ese maldito olor. Había algo en su fragancia, algo profundamente masculino, casi animal, que le afectaba más de lo que ella quisiera admitir. Era... intoxicante

“Es tan... varonil...” - pensaba Laura, mordiéndose ligeramente el labio. Sabía que estaba mal, que no debía sentir lo que sentía, pero cada vez que estaba cerca de Naruto, esa atracción latente surgía como una fuerza imparable, un deseo difícil de ignorar. Su cabeza decía que debía controlarlo, pero su cuerpo, cada vez que lo veía, parecía tener otras ideas

Cuando Naruto regresó con su café, ella se recompuso rápidamente, manteniendo su fachada estoica, como siempre

"Tu café" - dijo él, colocando suavemente la taza sobre la mesa

"Gracias" - respondió ella, esta vez más reservada. Lo último que quería era dejar entrever lo que realmente pasaba por su mente. Observó a Naruto alejarse de nuevo, mordiéndose la lengua para no soltar otro suspiro de frustración

Cada vez se hacía más difícil. El autocontrol que Laura tanto había cultivado a lo largo de los años empezaba a resquebrajarse cada vez que estaba cerca de Naruto. Quería lanzarse sobre él,  Besarlo, sentirlo, y después...

En ese momento, Laura se levantó de golpe y, sin siquiera pensarlo dos veces, se abalanzó sobre Naruto. El choque fue como embestir una pared de adamantium, pero para su sorpresa, logró tirarlo al suelo. Apenas lo había derribado cuando un fuerte estruendo resonó detrás de ellos

Un auto irrumpió por el ventanal de la cafetería, destrozando todo a su paso

Instantes antes con Naruto

Naruto había estado concentrado en preparar el café de Laura, su mente perdida en la tranquilidad del momento. A pesar de la tormenta emocional que lo perseguía constantemente, siempre encontraba un poco de paz en lo mundano de su trabajo

Sonreía mientras recordaba cómo había conocido a Laura. Era amiga de Doreen, por lo que no le costó integrarse en sus vidas. Pero, desde el primer momento, Naruto había sentido que había algo diferente en ella. Tal vez no tan distinto de Doreen, ya que Laura tampoco era "normal". No conocía a muchas personas con un esqueleto de adamantium y garras ocultas en sus manos

Justo cuando terminaba de hacer el café, el oído de Naruto captó un leve zumbido. Algo venía hacia ellos, rápido y sin control. Un auto, se dio cuenta. Naruto se preparó para moverse, listo para sacar a Laura y a los demás civiles de la cafetería, pero entonces la sintió moverse hacia él. ¿Qué demonios está haciendo? maldijo por lo bajo. Manteniendo su fachada de humano común, decidió dejarse derribar por Laura, cayendo al suelo mientras sentía el impacto a su alrededor

De manera discreta, Naruto dio un aplauso bajo y casi imperceptible, generando una ráfaga de viento lo suficientemente fuerte como para hacer que todos en el local se agacharan justo a tiempo, evitando que el auto los aplastara

El coche se estrelló con un ruido ensordecedor, destrozando mesas, sillas y el ventanal de la cafetería. Naruto fingió una mueca de dolor mientras Laura lo mantenía en el suelo

"Eso lo descontarán de mi salario..." - murmuró, con un tono exageradamente quejumbroso

Laura, aunque preocupada, no dejó de ser quien era. Con firmeza, mantuvo la cabeza de Naruto baja, asegurándose de que estuviera a salvo

"¿Qué demonios está pasando?" - preguntó Naruto, fingiendo confusión mientras intentaba mantener su identidad en secreto

Laura se inclinó, mirando con cautela por encima del mostrador destruido. Al ver el caos fuera, apretó los dientes. Sandman. Lo reconoció inmediatamente

Naruto también lo sabía. Había captado el olor a arena antes de que Laura pudiera confirmarlo. Ambos miraron en dirección al villano mientras este destrozaba una patrulla con una de sus manos, que ahora había convertido en un gigantesco mazo de arena

“¡¿Dónde estás, Superman?! ¡Vengo por ti!” - rugió Sandman con furia, golpeando el auto de policía con toda su fuerza, haciéndolo volar por los aires

Naruto rodó los ojos al escuchar eso. Sabía por qué Sandman estaba tan enojado. En su último enfrentamiento, había usado su visión calorífica para convertir al villano en cristal, algo que definitivamente no había olvidado

"(Típico...)" - pensó Naruto con exasperación

Laura seguía manteniéndolo en el suelo, sus ojos brillando con intensidad

"¿Qué vas a hacer?" - le preguntó en un tono bajo y frío, apenas perceptible para cualquier otro, pero no para Naruto

"Sacarlos a todos de aquí" - respondió él de manera calmada, pero en sus ojos había una chispa de tensión. No podía actuar de manera obvia, no allí, no en medio de tantos civiles y bajo la mirada atenta de Laura

“Déjame a mí. Quédate aquí” - dijo Laura, soltando finalmente a Naruto y poniéndose de pie, lista para entrar en acción. Sus garras estaban a punto de salir de sus nudillos, y su cuerpo se tensó en preparación para atacar

“Laura, esper..." -  Naruto comenzó, pero ella ya había dado un paso adelante, directa hacia Sandman

En su interior, Naruto sabía que no podía quedarse quieto, pero tampoco podía arriesgarse a revelar su verdadera identidad. Mientras observaba a Laura acercarse al villano, Naruto evaluó rápidamente la situación. Si jugaba bien sus cartas, podría resolver todo sin que nadie se diera cuenta de quién era realmente

Desde el suelo, Naruto se preparó para intervenir, observando cómo Laura se abalanzaba sobre Sandman con la misma ferocidad con la que había intentado derribarlo a él segundos antes

Naruto no dudó ni un segundo más. Sabía que el primer paso siempre era poner a salvo a los civiles. Se dio la vuelta rápidamente, observando los rostros pálidos y aterrados de los clientes y empleados. Levantó la voz, manteniendo un tono calmado pero firme

"¡Todos, por aquí! Síganme, tenemos que salir!" - Les indicó, haciendo gestos rápidos para que lo siguieran. Los condujo hasta la puerta trasera del local, vigilando que nadie se quedara atrás. Uno a uno, los fue ayudando a cruzar la salida de emergencia, asegurándose de que todos estuvieran a salvo antes de cerrar la puerta tras ellos

"¿Todos bien?" - preguntó a una pareja mayor que parecía confundida, y ellos asintieron nerviosamente. Naruto suspiró de alivio. Eso es, todos a salvo.

Ya con la conciencia tranquila, Naruto se preparaba para hacer lo necesario: cambiarse a su traje y enfrentar a Sandman como Superman. Pero justo cuando estaba a punto de moverse, algo captó su atención

Spider-Man

La figura inconfundible del trepamuros aparecía colgando de una telaraña, balanceándose ágilmente a través de los edificios. Naruto también notó a otra figura que lo acompañaba: Luke Cage. Ambos héroes llegaron rápidamente a la escena, y entre los dos no les fue difícil enfrentarse a Sandman

Naruto, al ver que la situación estaba bajo control, soltó un pequeño suspiro, relajándose un poco. Supongo que no tendré que intervenir tanto, después de todo. Con la ayuda de Laura, Spider-Man y Luke Cage ya estaban dominando al villano

Se cruzó de brazos, observando cómo Laura se movía con la misma letalidad y precisión que había mostrado antes. Sus garras brillaban bajo la luz mientras cortaba fragmentos de arena que Sandman lanzaba en todas direcciones. Mientras tanto, Spider-Man mantenía su estilo usual, lanzando bromas mientras esquivaba los ataques de Sandman y envolvía sus puños en telarañas

"¡Ey, Sandy! Creí que la última vez que te convertiste en una obra de arte moderna, pensé que no querías repetir la experiencia" - bromeó Spider-Man mientras lanzaba una red a los pies del villano, inmovilizándolo por un segundo

Luke Cage aprovechó el momento para avanzar con sus puños listos - "Te diré algo, hombre. Podrías haberte tomado unas vacaciones esta vez para descansar de las palizas que te dan"

Sandman no tuvo tiempo de responder antes de que Laura le cortara uno de los brazos de arena, haciéndolo retroceder con un gruñido furioso

Naruto observaba todo desde la distancia, un leve indicio de una sonrisa cruzando su rostro. Parecen tenerlo todo bajo control. Pero, antes de retirarse del todo, decidió hacer algo extra. Se preparó discretamente, moviendo sus dedos sutilmente hacia Sandman

En un instante, un pequeño rayo de calor salió de sus ojos, invisible para cualquiera que no estuviera prestando atención. El rayo golpeó justo el trasero de Sandman, y en un parpadeo, el villano sintió cómo una parte de su cuerpo se transformaba en vidrio. Un agudo grito salió de su boca mientras saltaba sorprendido por el dolor

"¡Mi... mi trasero!" - gritó Sandman, mirándose horrorizado mientras su trasero relucía como cristal bajo la luz. El villano apenas tuvo tiempo de procesarlo antes de que Luke Cage le propinara un sólido golpe en la cara, dejándolo fuera de combate en el suelo

Naruto no pudo evitar soltar una leve risa al ver la escena. Vaya, no puedo negarlo... eso fue gracioso

Luke Cage, mirando al derrotado Sandman, simplemente resopló - "Y así es como lo hacemos"

Spider-Man aterrizó junto a él, quitándose un poco de polvo de la máscara - "Sí, pero debo decir... ese grito de Sandman fue tan agudo que no dudo que haya sido capaz de romoer su trasero de cristal"

"Hola Laura" - Saludo Luke a la X-Men la cual se cruzó de brazos

"Presumidos" - Dijo al notar como ellos dos se había llevado todo el crédito

"Realmente no te había notado" - Dijo Spider-Man como si nada solo para recibir un golpe en el estómago por parte de Laura la cual bufo molesta

Naruto aprovechó la oportunidad para retroceder. No necesitaba hacer más en ese momento, y menos arriesgarse a revelar su identidad. Se retiró silenciosamente, asegurándose de que nadie lo notara

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Naruto llegó a su departamento y soltó un largo suspiro. El día había sido agotador, pero más mentalmente que físicamente. Cerró la puerta detrás de él y se quitó la chaqueta, dejándola caer sobre una silla cercana. Sin pensarlo mucho, caminó hacia la cocina, donde comenzó a sacar algunos ingredientes para preparar algo de comer. Hoy había sido un día relativamente normal, al menos según sus estándares. Había rescatado a un grupo de civiles, ayudado en la captura de Sandman y evitado que la situación escalara a algo mucho peor. Lo que para otros sería un caos, para él era solo otra jornada en Nueva York

Abrió el refrigerador, sacando algunas verduras y una botella de agua. Se inclinó sobre la encimera, comenzando a cortar con precisión cada vegetal mientras su mente divagaba. Esta ciudad nunca descansa, pensó, sonriendo con cierto cansancio. Las noches son siempre las más locas, pero le gusta estar ahí afuera.Ya tenía planeada su patrulla nocturna, era algo que hacía casi por instinto, como si la ciudad lo llamara para que estuviera atento

Justo cuando se disponía a preparar la sartén, algo lo golpeó suavemente en la parte trasera de la cabeza. Al principio pensó que quizá había sido alguna mosca o el viento moviendo algún objeto, pero la sensación no era usual. Lentamente, alzó la mirada, y entonces lo notó. Un pequeño agujero en su ventana

"(¿Un francotirador?)" - pensó, sintiendo de inmediato el aura de alguien a la distancia

Naruto suspiró, no con miedo ni preocupación, sino con algo de resignación. Hoy no iba a ser un día tranquilo, después de todo. Se dio la vuelta con calma, mirando a través del agujero y enfocando su vista. Desde su posición, pudo ver a un hombre temblando, su rifle aún apuntando en la dirección del apartamento. Naruto sonrió, haciendo contacto visual con el francotirador, quien parecía congelado por el miedo

Con el francotirador

"No... no me pagaron para esto..." - murmuró el hombre con la voz quebrada, sus manos temblaban tanto que apenas podía sostener el rifle. Sabía que había cometido un error fatal, y al ver que su disparo había fallado por completo, sintió el terror recorrer su espina dorsal. El lo había visto, y eso era suficiente para saber que estaba en problemas

Rápidamente, el francotirador recogió sus cosas, decidido a escapar antes de que fuera demasiado tarde. Estaba a punto de salir corriendo cuando, al girarse, chocó contra algo… o más bien, contra alguien

Sus piernas se debilitaron al instante. El rifle cayó de sus manos, rebotando en el suelo con un sonido seco. Lentamente, levantó la cabeza, y lo primero que vio fueron unos intensos ojos azules que lo miraban profundamente. Era como si esas pupilas lo analizaran, buscando cada uno de sus secretos

"Si no quieres que te use como pelota de béisbol y te lance directamente a la cárcel…" - la voz de Naruto era suave, casi amable, pero eso solo lo hacía más aterrador - "Será mejor que me digas quién te envió"

El francotirador sintió el peso de una mano en su hombro, y aunque no fue un toque brusco, le pareció que un monstruo lo sostenía. Su cuerpo entero se tensó de inmediato, y un sudor frío recorrió su frente. Cada segundo que pasaba, la sensación de estar en peligro mortal se hacía más real. Intentó hablar, pero las palabras simplemente no salían. Su boca se movía, pero ningún sonido coherente lograba escapar

"Yo… yo…" balbuceaba, casi en pánico.

Naruto no lo apretó más, solo lo observaba con esa calma aterradora, esperando pacientemente

"Flag… Flag Smashers..." - fue todo lo que el hombre logró articular antes de desplomarse por el miedo, perdiendo el conocimiento

Naruto soltó un largo bufido mientras el francotirador caía inerte al suelo. Se inclinó sobre él, verificando que estuviera realmente desmayado

"(Anarquistas…) - pensó, rodando los ojos con frustración. Cada vez que escuchaba la palabra "anarquista", su mente viajaba a una sola persona: Manchester Black. La sola idea de ese nombre era suficiente para irritarlo, y aunque Naruto intentaba dejar el pasado atrás, algunos recuerdos eran más difíciles de borrar

"¿Por qué siempre tienen que ser anarquistas?" - murmuró para sí mismo, observando el cuerpo inconsciente del francotirador

Ya no tenía sentido seguir pensando en ello. El tipo le había dado la información que necesitaba. Flag Smashers…

Naruto se incorporó, lanzando una mirada al cielo nocturno. Parecía que su patrulla tendría que empezar más temprano de lo que había planeado. Sin decir una palabra más, su cuerpo comenzó a elevarse del suelo, flotando con una elegancia que no delataba la fuerza descomunal que poseía. Se elevó por encima de los edificios y en pocos segundos estaba sobrevolando la ciudad, preparándose para lo que estaba por venir

Nueva York nunca descansa. Y yo tampoco

Fin de capítulo