Prólogo.

Aspiró un poco de su cigarrillo y acto seguido soltó todo ese humo que retenía en la boca. Sabía perfectamente que él, un chico de 17 años no debía fumar. Pero no era como que importara demasiado, ¿No? Al fin y al cabo las leyes ya no funcionaban más. 

Desde que su padre los abandonó por una mujer todo se había ido a la mierda. Su familia ahora era de únicamente dos integrantes y debido a que el sustento de la casa se había marchado su madre tuvo que hacer el papel completo; trabajar, cuidar de él y además ocuparse de cosas varias. 

Por supuesto, ayudaba en lo que podía pero como era tan pequeño en ese entonces no era mas que una carga. 

Más pronto que tarde su progenitora terminó enfermando y al final él tuvo que hacerse cargo de todo a su corta edad. 

Así es cómo entendió que no todo era felicidad. Que personas con un rol tan importante como un padre no dudarían en abandonar a sus esposas e hijos por una cara bonita, que el estado no titubearía en darle la espalda a él y a su madre. Porque sí, cuando su madre cayó enferma aplicaron a las ayudas del gobierno... Y según ellos, no cualificaban en lo necesario para el bono. 

Soltó un suspiro, incluso romperse el lomo trabajando era mejor que el mundo en el que vivía actualmente. 

...

El día era soleado, con el cielo teñido de azul y un par de nubes con semejanza al algodón de azúcar. Era una jornada como cualquier otra. Monótona, sin sentido y con las personas asistiendo a sus trabajos, escuelas y llevando a cabo sus deberes y labores. 

Un hilo de saliva escurría de la boca entre abierta del muchacho peliverde, se encontraba totalmente agotado después de trabajar varias horas a la semana y además de eso, estudiar para poder mantener a su familia de 2 personas.

No era fácil para él. Ya que a parte de tener 2 oficios simultáneos debía estudiar, entrar a la universidad y así conseguir un título y por consecuencia, tener un trabajo estable para así no tener que preocuparse nunca más del dinero. 

De la nada un fuerte sonido se produjo debido a que el libro de su maestro había chocado contra el pupitre en el que dormía el muchacho. De un sopetón se levantó, así provocando que su silla se desequilibrara. Al final, terminó cayendo de espalda junto a la silla. 

Unas estruendosas risas se comenzaron a oír. Miró a sus alrededores para notar que todas las miradas estaban en él; pronto un color carmín comenzó a inundar sus mejillas. Estaba avergonzado... 

── Midoriya Izuku... Te he dicho que no te duermas en clases.

Un hombre de aspecto descuidado regañó con cierta molestia en su voz. Aquel profesor era Aizawa y de no ser porque llevaba un atuendo semiformal se le podría confundir por un vagabundo. 

── . . . 

Ante las palabras del mayor el muchacho asintió con la cabeza para después mantenerla agachada. Un suspiro escapó de la boca del instructor. Este después con una leve sonrisa le extendió su mano para que se pusiera de pie. 

── Estate atento, la clase aún no termina.

El ojeroso podía ser bastante permisivo con el muchacho ya que estaba al tanto de su situación. Por lo que cuando se quedaba dormido en sus clases simplemente le despertaba y ya, no llevando a mayores el asunto. 

── Eh... ¡Sí! 

Las risas provenientes de sus compañeros por fin habían cesado. El adolescente se paró con ayuda de su maestro y después puso en su lugar la silla para acto seguido sentarse.

Una vez hecho eso, Aizawa reanudó su clase. Tomó atención durante unos minutos, pero entonces un "pssst", llamó su atención; sabía claramente que ese llamado era para él ya que podía ver de reojo a la fémina que lo citaba. Giró su cabeza un momento para encontrarse ahí a su amiga, Ochako Uraraka. 

── Oh, Uraraka-san. ¿Qué sucede?

Preguntó nerviosamente Midoriya esperando que Aizawa no los escuche hablar. 

── ¿Estás bien? 

Dijo en un susurro. Sobre el rostro de la muchacha se cernía una gran preocupación, ante aquello Izuku asintió con la cabeza. 

── S-sí, estoy fresco como lechuga. 

Bromeó en un intento por calmar el sentimiento de su amiga, sin embargo no surtió demasiado efecto debido al característico tartamudeo nervioso que tenía el chico. 

── ¿Seguro? Estás más ojeroso de lo común. 

El pecoso soltó un profundo suspiro con notable cansancio. Izuku negó con la cabeza de un lado a otro. 

── No tan seguro... El coste del medicamento de mi mamá ha subido últimamente. Pasó de 4000 ¥ a 6000 ¥ y no creo poder costearlo este mes. 

A la castaña le causó sorpresa, ¿Cómo es que pasó de costar 35 dólares a casi 60? 

── ¿Has pensado en pedir un aumento?, ¿O buscar un trabajo donde paguen más? 

Izuku estaba a punto de contestar, sin embargo Aizawa hizo acto de presencia diciendo lo siguiente: 

── Los escucho. 

Ambos guardaron silencio, Izuku para no dejar con la intriga a su amiga sacó su celular y le escribió un mensaje el cual posteriormente mandó. 

"Ya hablé con mis respectivos jefes, ellos no pudieron darme un aumento debido a que ya me habían dado uno cuando hace un par de semanas aumentó el valor del medicamento, de hecho incluso estaban haciendo una excepción debido a que sabían mi situación y me pagan más a que mis propios compañeros los cuales trabajan en lo mismo" 

"Entiendo, ¿Qué harás entonces? Yo tengo un par de ahorros debido a que me iba a comprar un boleto para el concierto de las K/DA pero si quieres puedo dártelos"

"Uraraka TT.TT" 

Con aquella carita le hizo sonreír, le miró hacia un lado y este también hizo lo mismo. Ambos tuvieron contacto visual el cual pronto terminaron con una sonrisa amigable. 

. . .

Así pasó el tiempo, la mañana se hizo de día y el día se hizo de tarde. Ya era momento de salir, las campanas sonaron indicando el término de clases y así fue; una esbelta mujer llamada Nemuri Kayama se despidió de sus estudiantes mientras salía del salón. 

El peliverde ordenó sus cosas y se levantó de su asiento con la mochila en mano, iba a ir con Uraraka a conseguirle el medicamento a su madre para después pegarle una visita al hospital. 

── No tengo el dinero en mano, ¿Te molesta ir a mi casa a recogerlo primero? 

La castaña preguntó mientras caminaba en dirección de la salida, Izuku negó con la cabeza.

── Obviamente que no... Muchas gracias por esto Uraraka, en serio. 

Deku sabía perfectamente de que su mejor amiga llevaba un buen tiempo ahorrando dinero para comprarse la entrada al concierto... Y ahora tendrá que dárselo a él para que su madre pueda vivir un poco más. 

En un principio no quería aceptar, más no era momento de ponerse regodeón acerca de donde sacaba los dólares para pagar. 

De lo que está seguro, es que le devolverá el "préstamo" con creces. Tal vez trabajando el doble para pagarle... Y después invitarle a comer o algo así. 

. . . 

Para el paso de los minutos ya habían tomado el bus, ambos se sentaron el uno al lado del otro. Uraraka sacó su teléfono y comenzó a revisar las redes sociales y mientras se deslizaba por la página principal de Instagram le mostró una imagen a su amigo el cual alejó la vista de la ventana y se giró a verle. 

── ¿K/DA ya está aquí? ¿No que el concierto era en un par de semanas? 

El peliverde dudó intrigado, ahora se sentía aún peor y lo peor es que no sabía por qué. 

── Sí, llegaron hoy al parecer. Ah...

La castaña soltó un profundo suspiro, no le molestaba en lo absoluto "prestarle" dinero a su amigo porque sabía que se encontraba en una situación delicada. Pero aún así aquello no le quitaba el mal sabor de boca que le restaba a causa de que no iba poder asistir a un recital que tanto esperaba. 

── ¿Uh?

Iba a comentar algo, sin embargo su atención se vio desviada a una publicación píxeles abajo. No se alcanzaba a ver la descripción por lo que pasó de largo y bajó relativamente poco para poder así enfocarse en lo otro. 

"¡Meteoritos pasarán por la atmósfera de la tierra! Según expertos se acercarán lo suficiente como para ser visibles, así dando origen a un fenómeno conocido como estrella fugaz. (Aunque en este caso sería más bien una lluvia de estrellas fugaces). No se sabe con exactitud cuando es que lo harán pero se estima que para el lunes de la próxima semana se comenzarán a observar los primeros avistamientos de cuerpos celestes en nuestro cielo nocturno."  

── ¡Mira, que interesante!

A la mente del muchacho le llegaba una imagen de cómo es que se podrían ver desde una montaña. Perfectamente podría ser una velada perfecta para una cita... Sí es que tuviera a alguien que le acompañara, claro está.

Izuku quitó de las manos ajenas el celular y luego le mostró aquello que leyó.

── ¡Uwah! ¡Podría pedir muchos deseos! 

Ahora ambos estaban emocionados cual niños pequeños. Se retorcían excitados sobre sus asientos con unas sonrisas ilusionadas.

Aquello que comentó Uraraka no era más que una superstición. En sí, ésta dice que si ves a una estrella fugaz cierres los ojos, juntes las manos y pidas un deseo de cualquier tipo. Supuestamente la cantidad es proporcional a los cuerpos que se ven... Y como ahora sería una lluvia de estos pues serían muchos deseos.

── Estación Musutafu.

Por un pequeño parlante se escuchó aquello. Los dos adolescentes dejaron de comportarse de manera boba y tocaron el timbre para poder bajar del bus e ir por fin a la casa de la fémina.  

. . .

── Bien, aquí está. 

Uraraka entregó en mano el dinero que tenía, eran alrededor de 60 dólares. (En Yenes por supuesto). 

── Yo... Lo agradezco mucho, demasiado. 

Izuku agachó la cabeza, se encontraba avergonzado de arrebatarle el dinero así a su mejor amiga. (En realidad no le está quitando nada ya que ella accedió a ello pero aún así el adolescente se siente mal)

── No te preocupes. Espero que pronto podamos ver a Inko-san mejor. 

Le dedicó una sonrisa mientras hacía que el pecoso alzara la cabeza. No le gustaba verlo de esa manera así que palmeó su hombro y posteriormente acarició su cabello. 

── Sí... 

Entonces fue que Izuku le devolvió aquella sonrisa. 






3 días antes del día del juicio final...


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Volví... O eso creo. (?

En fin, este es el primer cap de como dije; un fic de zombies ambientado en el mundo de BNHA (sólo que no será cliché como los muchos que he leído XD).

Espero les sea de su agrado, si preguntan por corazón frío ya veré que hacer debido a que aún estoy entre hacerle nuevamente un reboot o simplemente darlo de hiatus indefinidamente. (Aunque del reboot debo decir que tengo varios caps escritos así q a). 

Eso sería todo hasta el momento, sacaré caps de vez en cuando. Con más recurrencia que antes, pero igualmente tampoco estaré todo el día pegado al pc escribiendo como lo solía hacer al inicio de la cuenta. 

Viernes 10 de septiembre. 

2000 palabras.

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