La oscuridad abundaba en ese lugar desde el primer momento en que vio esa luz acercarse a él.

Juro ver su vida en solo unos segundos.

Creyó que moriría.

Pero,para su sorpresa,de alguna forma seguía vivo.

Aún no tenía alas para volar,y su Alma no podía descansar.

Al principio,solo escuchaba la voz de su madre hablarle de una manera tierna,o sus lágrimas cuando perdía por completo el control.

Luego,lo empezó a ver a él.

Y le dolía.

Realmente hubiese deseado nunca verlo,aunque en el fondo le gustaba.

Vio cada escena,cada cosa que hizo por él.

Por su muerte.

Eran visiones,como si fuesen uno solo y sus ojos estuviese conectados.

Sentía que allí solo habían pasado unas horas,aunque realmente habían pasado años.

Pero en la mente,en lo más profundo,las cosas pasan de manera diferente.

Lo que más le dolía era cuando el peli-turquesa recordaba el momento en que lo vio a él envuelto en una manta de sangre.

Digo,¿como reaccionarias si te vieras a ti mismo siendo atropellado mientras un montón de sangre sale disparada?

¿Tu propio accidente?

Dudo mucho que te sientas feliz.

A veces hablaba solo con la imagen que veía,decía algunas cosas, como si él fuese a escucharlas.

A veces su frágil voz se rompía,como un pedazo de vidrio que iba rompiendo hilos.

Lloraba,ya no quería estar allí.

Incluso,sientondolo como horas.

¿Por qué? Era desesperante.

Podía escuchar a su madre nuevamente llorar,ella había perdido completamente la esperanza desde hace mucho tiempo.

Pero ella lloraba,porque todos en el fondo nos queda solo un poco de fe.

¡Es su hijo! Obvio que es espera que despierte.Incluso si es imposible.

Muchas veces se preguntó que sería de él cuando Bon muriera ¿finalmente descansaría en paz?

¿Finalmente iría al cielo? ¿a dónde van la gente cuando muere? ¿Volveria a nacer?

Se hacía muchas preguntas...

Ese día en particular,no había pasado nada.

Estaba acostado con lágrimas deslizando por sus pequeños cachetes que no habían crecido en su mente.

Seguía siendo el mismo chico de 17 años que alguna vez fue.

-¡Bonnie,Bonnie,Bonnie!-

Se levantó del suelo con desesperación.

¿Quien lo estaba llamando?

Esa voz...

-¡es Bon! ¡a venido a rescatarme!-

Sin saber que la voz estaba en su mente...

No podía verlo,ni en sus ojos,ni en ese lugar.

-¡Bonnie,Bonnie,Bonnie!-

Los llamados no pararon,pero él no sabía a dónde ir.

Corrió a una dirección en donde se escuchaba más la voz de su amado.

Y en el centro de todo,había un agujero.

Allí,era color blanco.

No tenía gracia,nunca lo había visto antes.

Pero...Cuando lo vio sintió algo...

Sintió esperanza.

Esperanza de que esa sea su salida.

Empezó a correr más rápido hacia él,ya que se iba cerrando de a poco.

Cada vez que se acercaba la voz se escuhaba más y más lejos.

Y cuando saltó al portal...No paso nada.

Volvió al mismo lugar en donde había empezado.

-Bon...Te necesito...-

-Bon,te amo-

-¡Bonnie!

El peli-turquesa se despertó completamente asustado.

Su respiración estaba entrecortada y su corazón latiendo de forma inimaginable.

Estaba sudando y algunas lágrimas recorrían su mejilla.

Nuevamente,soñó con el accidente que le pasó al que alguna vez fue su novio.

Se levantó de la cama en busca de aire fresco.

En eso,tropezó con unos de los muebles de su habitación.

-¡Ahh! ¡por qué,por qué,por qué!-

Se volvió a sentar en la cama para acariciar si dedo pequeño del pie.

El meñique.

Vio como una fotografía tirada en el suelo,la recogió y con esfuerzo -Ya que estaba todo oscuro- la observó.

Lágrimas cayeron sobre el marco de la foto.

Era su -ex novio,ya que,no están juntos- y él.

Lo extrañaba...

Lo amaba.

-Te amo,Bonnie...-

-Yo igual,Bon-