Aguamarina deja a Spinel y Steven caer de cara al suelo -¡Bienvenidos a mi bella Italia!- La gema azul exclama emocionada, volando de manera risueña por el cielo, incluso dando unas pequeñas volteretas mientras que sus rehenes se levantan un poco confundidos. Para sorpresa del híbrido y la gema rosa, en aquel lugar en el que Aguamarina los suelta hay una pequeña y pintoresca villa, con edificios que eran exagerados en su intento de emular estilos romanos e italianos.

-¿Que es esto?- Spinel y Steven preguntan sorprendidos de ver aquel lugar, de las casas repentinamente empiezan a salir más Aguamarinas que miran a los recién llegados con suma curiosidad -Oh no- La pareja murmura, en parte aterrados de ver a más variedades de la gema azul, aunque era obvio que no todas debían ser como la principal.

-Les presento a mi villa, mi pequeño pedazo de Homeworld mezclado con Italia. Casi perfecto- Aguamarina exclama con grandilocuencia, haciendo que sus rehenes rueden los ojos. Steven y Spinel no tardan en empezar a saludar a las otras gemas, que los saludan a ambos de forma inocente y alegre -Oigan, podemos hacer las presentaciones después. Todas las gemas aquí se llaman igual- Aguamarina sentencia con molestia después de escuchar un saludo de las gemas azules más de diez veces -Vamos a mi oficina para hablar- Aguamarina exclama mientras arrastra a Spinel y Steven hacía una especie de ayuntamiento.

-...Linda oficina- Spinel exclama con calma mientras mira el despacho de Aguamarina, el lugar esta lleno de fotografías y pinturas de la gema azul, cada una en atuendos más lujosos y excéntricos. El híbrido tiene sus ojos cubiertos mientras se sienta después de haber visto una foto que no debería estar en un despacho, de paso era incómodo ver tanto color azul y tantas veces a la misma Aguamarina.

-Entonces, ya estamos aquí. ¿Que quieres?- Steven pregunta con molestia, él abre un pequeño espacio en sus dedos para ver a la gema azul, que esta sentada en una silla demasiado alta, mirando desde abajo a la gema rosa y el híbrido -Espera unos momentos. ¿De donde vinieron todas esas Aguamarinas, por qué ellas están aquí?- Steven añade con confusión.

-Bueno, yo las reuní aquí. Me nombre a mi misma soberana de todas las Aguamarinas de la Tierra, si ellas llegan aquí, yo las traigo a Italia, es lo mínimo que puedo hacer para permitirles salir de la barbarie de Homeworld y alrededores- Aguamarina responde con calma incluso ella tiene una sonrisa de orgullo en su rostro -Eventualmente fundamos este pequeño sitio, mi propia Roma. Ahora, porque los quiero a ustedes dos aquí. Bueno, que ellas estén aquí es tú responsabilidad, y como so tú responsabilidad, tienes una deuda que pagar con mi gente- Aguamarina explica con seriedad, su orgullo y supuesta magnanimidad se demuestran en su palabras, pero ella rápidamente se torna fría.

Spinel mira preocupada, ella se fija en como los hombros de Steven se tensan y el híbrido se inclina hacía adelante -Yo, no cause, nada. Punto final- El híbrido reclama mientras hace el ademan de levantarse, pero él desiste cuando nota el dedo de Aguamarina apuntándolo -No tengo ninguna deuda con ustedes- Steven continua reclamando.

-Claro que la tienes, la guerra civil es tu culpa. Vamos, solo te estoy pidiendo que des un baile, quizás algunas charlas y saludos. ¿Que cosa mala e hecho yo?- Aguamarina sentencia intentando conciliar un acuerdo con la gema rosa y el híbrido. Un Steven sorprendido no tarda en traducir muy ofendido las palabras de la gema azul a Spinel.

-¡¿Qué?!¡¿Que cosa mala?!¡¿Por donde iniciamos?!- Spinel estalla furiosa, Steven no tarda en controlar el temperamento de su novia, mientras que Aguamarina rueda los ojos con desinterés.

-Atacaste a casi toda mi familia, me atacaste y casi me violas- El híbrido exclama con molestia, señalando la lista de cosas malas que la gema azul le a hecho a él y sus familiares. Por su parte Aguamarina deja salir una risa sonora y un poco aterradora, ella sonríe entonces hacia ellos dos.

-Que buenos tiempos- Aguamarina sentencia, mientras las mandíbulas de Spinel y Steven caen por la indiferencia de la gema azul, ella vuela un poco de su asiento, colocándose encima de su escritorio, viendo cara a cara a sus rehenes -Vamos, puedo demostrar que e cambiado. Sin duda creo que ustedes dos debieron cambiar un poco. ¿Por que no les demuestras a ellas que perder su hogar no es tu culpa?- Aguamarina exclama con un torno enternecedor, extendiendo su mano hacía el híbrido.

-...Estas intentando manipularme emocionalmente- Steven dice con molestia.

-Estoy teniendo éxito- Aguamarina afirma sonriente. El híbrido y Spinel intercambian miradas por unos momentos, ambos no están precisamente cómodos, pero la gema rosa mueve la mano de Steven hacía la de la gema azul -Soy gloriosa- Aguamarina sentencia después de haber cerrado el pequeño pacto con el híbrido, ella da unos aplausos y repentinamente entran algunas Aguamarinas más al despacho -Ellas los llevaran a ustedes dos a los vestuarios... para cambiarse, aunque allí ustedes pueden hacer lo que quieran- La gema azul exclama de manera pervertida y sin pudor.

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Las pequeñas gemas azules entregaron algunas ropas tradicionales de Napoles a Spinel y Steven, dejando a la pareja en una única habitación, curiosamente allí había mucho espacio, suficiente cómo para que hubiera algunas sillas, un sofá e incluso casilleros -Spinel. ¿Podrías darte la vuelta para que me cambie?- El híbrido pregunta un poco nervioso, por ahora solo se había quitado la chaqueta.

-Steven, te e visto cambiarte antes, no totalmente pero al menos te e visto sin camisa y pantalones- Spinel sentencia con calma mientras se coloca el vestido de colores blancos y negros encima, la gema rosa se ría al ver a Steven sonrojado -Jeje- Spinel ríe al ver al híbrido, ella se coloca detrás de él y aprieta la panza de Steven.

-¡Ah!¡Oye!- El híbrido se queja sorprendido, Steven atrapa a la gema rosa por el cuello y él empieza a frotar su nudillo contra el cabello de Spinel, arruinando el peinado de la sonriente gema -¿Quien te dijo que puedes espiarme?- El híbrido bromea mientras Spinel se estira hacia él.

-Yo decido por mi misma- Spinel responde con una sonrisa de orgullo, ella toca la nariz de Steven -¿Vas a detenerme? Que bonito. Siempre te avergüenzas por ese tipo de cosas, tú eres muy hermoso, Steven- La gema rosa exclama tomando la mano derecha del híbrido, Steven sonríe sonrojado. La mano libre de Spinel empieza a levantar la camisa del híbrido, él entonces besa a la gema rosa, mordiendo el labio de ella.

Steven empuja a Spinel contra uno de los casilleros, colocándose frente a ella, están muy cerca -Tú eres hermosa- El híbrido corresponde mientras sus manos pasan por la cintura de la gema rosa, las manos de Spinel continúan estirándose debajo de la camisa de Steven, acariciando la espalda del híbrido mientras ellos continúan aquel beso. Después de unos minutos se separan pero únicamente porque Steven necesita respirar.

El rostro del híbrido choca contra el cuello de Spinel, empezando a dejar besos por el cuello de la gema rosa. Las caricias y toques empiezan a suceder entre ambos, hay una pequeña mirada entre ambos, Steven empieza a adentrar sus manos en el gran vestido que Spinel viste, aunque ella se lo acaba de poner.

Entonces una voz resuena del interior de uno de los casilleros -Oígan, yo también estoy mojada por lo que están por hacer, pero no arruines el vestido- Aguamarina sentencia, obligando a Spinel y Steven a abrir el casillero. La gema azul sonríe mientras que la pareja esta en silencio -...¿Van a follar o no? Se nota mucho que ustedes dos lo quieren hacer- Aguamarina menciona con calma.

-...Eres un pequeño ser pervertido y asqueroso, incluso White me da menos asco que tú- Steven dice, sorprendiendo a Spinel, era afortunado que Perla no estuviera allí para reprender a Steven por aquellas palabras, pero en realidad Aguamarina esta sonrojada.

-Muchas gracias- La gema azul exclama con una sonrisa, un escalofrío recorre la espalda del híbrido y la gema rosa -Miren, ustedes dos me gustan mucho, en plan...me los follaba aquí mismo, y me gusta la charla erótica como cualquiera. Pero ahora mismo creo que acabamos de perder valioso tiempo, tenemos que ir a seguir preparando el festival- Aguamarina ordena con seriedad, ella sale del casillero y nalguea tanto a Steven como a Spinel -Vamos tigres- La gema azul arrastra a sus rehenes afuera.

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Aguamarina esta bailando con otra gema azul, enseñando al híbrido y la gema rosa como realizar los pasos, aunque a diferencia de Spinel, Steven no esta tan acostumbrado -¿En serio tenemos que hacer esto? Soy más de bailar cualquier cosa antes que seguir un ritmo específico- El híbrido pregunta con curiosidad.

-Yo soy más de meter mi mano por tu culo. ¿Puedo hacer eso libremente?- Aguamarina responde con curiosidad señalando su puño.

-...No se si eso es uno de tus fetiches, o me estas convenciendo con amenazas. Pero en este punto, no quiero saber la respuesta y me iré a bailar- Steven exclama mientras intenta volver a imitar los pasos que las gemas azules le están enseñando, al híbrido aun le cuesta mantener el paso respecto a su compañera, pero Spinel y Steven siempre están alegres de bailar el uno con el otro. La práctica hace al maestro, y afortunadamente para su salud física, Steven puede aprender a bailar para el anochecer justo como Aguamarina ordeno.

La pequeña comunidad se llena de velas de multitud de colores, algunas actividades, incluso pequeños restaurantes para compartir comida hecha por las Aguamarinas, en el centro todos se están preparando para empezar a bailar. Aguamarina esta sentada en un pequeño trono, mirando desde arriba -¡Bienvenidos todos a nuestra pequeña celebración! Antes de empezar a bailar, quiero presentar a los invitados de honor. ¡Steven Cuarzo Universe y Spinel!- La gema azul exclama emocionada, señalando a sus rehenes.

Steven y Spinel sudan mientras sonríen y saludan hacía el grupo de pequeñas gemas, la curiosidad de todas las gemas azules sigue presente, ellas miran hacía el híbrido. Aguamarina vuela hacía él y le da algunos golpes en la espalda, a pesar del dolor, Steven da algunos pasos al frente para hablar -Hola...Es un placer estar aquí. Sé que las cosas han sido un poco malas en Homeworld...no se me da bien hablar en estas ocasiones pero. Hay muchas cosas bonitas aquí en la Tierra, espero que ustedes sepan apreciarlas- El híbrido declara.

La música empieza a sonar, al igual que los murmullos de las gemas que no tuvieron el tiempo de presentarse a los invitados de honor, repentinamente las Aguamarinas se empiezan a abalanzar alrededor de Steven -¡Mi diamante!- Cientos de murmullos empiezan a sonar, casi todas las gemas azules intentan obtener el primer baile de la noche, pero Spinel rápidamente saca al híbrido de aquel aprieto.

-¡Todas aquí pueden tener su turno, esperen!- La gema rosa exclama, inmediatamente todas las Aguamarina retroceden y empiezan a bailar unas con otras -...Estas son en realidad bastante agradables- Spinel menciona sorprendida de ver que las otras gemas azules son como pequeñas hadas llenas de alegría, muy diferentes a su líder -...¿Me concedes esta pieza, mi diamante?- La gema rosa se dirige hacía Steven.

-Por favor, no me llames así- El híbrido suspira, pero no tarda en tomar las manos de Spinel y empezar a bailar. La pareja gira, es un poco difícil realizar tantos movimientos mientras había tantas pequeñas gemas alrededor, pero los ojos de Steven están muy fijos en la gema rosa, ella sonríe hacía él -Todo es más fácil contigo, muchas gracias- El híbrido menciona.

-Tan encantador como siempre- Spinel sonríe con una pequeña risa.

-No, lo digo en serio. Seria muy difícil para mi sobrevivir sin tener a tantas personas ayudándome. Te valoro mucho- Steven responde con animo, el ritmo de la música va aumentando mientras los amantes se quedan uno cerca del otro, pero cuando ambos tienen que separarse por el ritmo del baile, las manos de ambos son tomados por otras Aguamarinas. Por lo que ellos cambian de compañero de baile.

El híbrido se distrae para mirar hacía Spinel, pero ella le sonríe y le señala un poco nerviosa hacía la líder de las Aguamarinas, que continua sentada mirando. Steven asiente y se fija en su nueva compañera de baile, en realidad Spinel tiene razón en su afirmación, las otras Aguamarinas eran bastante agradables, aunque ellas están obviamente nerviosas de bailar tan cerca de un diamante.

La noche empieza a pasar rápidamente, Steven había intentado volver a acercarse a Spinel, pero él no había tenido mucho éxito en esa tarea, esta vez la líder de las Aguamarinas toma las manos del híbrido, cuya espalda se tensa ante la mirada de la gema azul -No me di cuenta de que bajaste de tu trono- Steven menciona sudando un poco, en parte por el cansancio, en parte por el miedo.

-Estuve mirándote toda la noche, es mi turno- Aguamarina exclama ensanchando su sonrisa. Los pasos de ella son repentinamente más rápidos de lo que el híbrido puede esperar, pero él logra igualar el baile -Nada mal- Aguamarina declara con calma, ella entonces logra hacer que Steven se incline. En apenas unos momentos de baile, Steven y Aguamarina están cada vez más en la periferia del centro de baile.

-No me gusta lo que planees hacer- Steven asegura rápidamente, sus ojos se tornan de un leve color rosado.

-¿Amenazándome, tú?- Aguamarina pregunta con emoción -Que excitante- La gema azul añade.

Aguamarina vuela un poco, sin despegarse de las manos de Steven, ella muestra una sonrisa burlona hacía él, mientras que Steven hace una mueca. La gema azul se coloca demasiado cerca del híbrido, los ojos de ella siguen fijos contra los de él, pero Aguamarina cambia repentinamente de rumbo y esta a punto de morder el cuello de Steven, naturalmente ella tiene malas intenciones.

Un puño de color rosa se mete en la boca de Aguamarina, casi todo el brazo de Steven había tomado un color rosado -Voy a darte una paliza- El híbrido asegura con molestia, mientras que la lengua de la gema azul se retuerce entre los dedos de Steven. El rostro de Aguamarina esta sonrojado y claramente ella babea con un erótico deseo, el híbrido retira rápidamente su mano -Que asco- Steven dice con disgusto.

-Terminaré lo que empece. ¡Violarte será tan divertido!- Aguamarina exclama emocionada, ella prepara sus balas contra el híbrido. A Aguamarina le toma apenas milisegundos disparar, ella apenas había parpadeado, pero al momento del disparo, frente a ella no había nadie -...¿Cómo te moviste tan rápido?- La gema azul pregunta con curiosidad, una gota de sudor cae por la frente de Aguamarina mientras Steven es quien esta detrás de ella. 

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Hay una Aguamarina dentro de todos nosotros esperando ver a Spinel y Steven coger en Esperando :v. Se esperan. Dato curioso, por mis mini-depresiones empece a escribir porno :v.