Orario

El lugar en donde grandes hechos ocurrieron, la más destacada sin dudas es la caída de <Familia Freya>, siendo <Familia Loki> y <Familia Hestia> los responsables, aunque los principales protagonistas fueron la familia Loki, Bell Cranel capitán de la familia Hestia les hizo frente con su habilidad <Argonauta>.

Tras su derrota, Loki brindo una parte de los objetos que anteriormente le pertenecían a Freya a <Familia Hestia>.

Cuando se estaba decidiendo el destino de Freya, Bell Cranel la acogió como una sirvienta para su familia, con la condición de que no haría nada malo.

-Que problemático, si hace algo tu familia tendrá la responsabilidad – Advirtió Loki.

- ¡Lo acepto! –

Una vez concluido, Ottar, Hedin y Hogni pidieron unirse a <Familia Hestia>, Allen hizo las paces con su hermana Anya, los hermanos Gulliver se unieron al gremio, los demás miembros dejaron Orario.

-¿q-que hace aquí Freya-sama? – Pregunto avergonzado Bell, el cual veía que a su lado se encontraba Freya casi desnuda, teniendo solamente ropa interior.

- Ara ara~ buenos días conejito, la pasamos muy bien anoche, eres una bestia –

- ¡¿Qué significa esto Bell-kun?! – Pregunto con furiosa la diosa patrona de Bell la cual se encontraba al otro lado de la habitación para despertarlo, cuando justamente escucho la interacción de palabras entre Bell y Freya.

- Tranquila Hestia, solamente estaba bromeando –

- ¡¿Y tú que haces en la habitación de mi Bell-kun?! –

- ¿Qué no es obvio? Como una sirvienta tengo que atender a mi amo en sus deseos, incluyendo si quiere hacerlo conmigo –

- ¡Kami-sama por favor cálmese! –

- ¡Bell-sama! – Otra voz se unió a la conversación, esta vez se trataba de Sanjouno Haruhime.

- Haruhime-san, que alivio que estés aquí ¿podrías lleva... -

- Si Bell-sama t-también q-q-quiere hacerlo c-conmigo solo dígamelo –

Sus palabras fueron interrumpidas por la repentina declaración de Haruhime, el rostro sereno de Bell se tiño en rojo.

-Yo... yo... ¡Iré a desayunar en la anfitriona de la fertilidad! –

Saliendo, corriendo de su habitación, bajo por las escaleras dirigiéndose a la puerta principal, los que se encontraban desayunando en el comedor solo pudieron ver una figura borrosa antes de que esta desapareciera, aunque los miembros ya sabían de quien se trataba.

-De nuevo con su espectáculo matutino... - Expreso irritada Lili, desde que Freya trabajaba como sirvienta para Bell, todos los días pasaban, algunas veces iba a la mazmorra, otras a la anfitriona de la fertilidad.

- Lilicuajo has actuado extraño últimamente, normalmente te unirías a Hestia –

- Es parte de crecer Timmy –

- Creo que aún tiene secuelas... - comento Mikoto.

Continuando con Bell, este corrió llegando hacia un famoso bar, uno en el que continuamente frecuentaba, al llegar subió hacia las escaleras, viendo en una de las mesas a una bella elfa con el nombre de Ryuu Lion acompañada de una bella mujer de cabello largo castaño, de ojos indigo.

- ¡Buenos días Ryuu-san! – Hablo Bell acercándose a la mesa en la que se encontraba Ryuu.

- Buenos días, Bell ¿Qué te trae por aquí? ¿Lo de siempre? – Pregunto Ryuu sabiendo de los hechos que ocurrían a menudo.

- Si, lo de siempre –

- Ryuu ¿No te molestaría presentarme a este chico? –

- Oh, claro Astraea-sama, Bell ella es mi diosa patrona –

- Encantado Astraea-sama, yo soy Bell Cranel –

- He escuchado de ti por parte de Ryuu, realmente estoy contenta de conocerte –

- Lo mismo digo –

- ¿Qué vas a querer conejo nya? – Pregunto Anya al notar la presencia de Bell.

- Emmmm un especial, ¿Hay algo que quieran ustedes? –

- Yo quisiera un especial –

- Yo igual –

- Bien, 3 especiales enseguida –

Bell noto que Ryuu estaba por sacar su bolsillo.

-Ah, no te preocupes Ryuu-san yo pagare –

-¿Eh? ¿Estás seguro? –

- Si, anteriormente tu fuiste quien había pagado, quería devolverte el favor – Dijo mientras sonreía, Ryuu acepto alegremente mientras Astraea los veía a ambos felices.

- Y bien Bell ¿A ti te gusta Ryuu? - Pregunto Astraea fijando su mirada en Bell.

- ¿Qué cosas pregunta Astraea-sama? –

- Emmmm, bueno yo... Ryuu-san m-me gusta –

Ambos se encontraban avergonzados, cubrieron sus rostros con sus manos.

- ¿Qué hay de ti Ryuu? ¿Te gusta ese chico? –

- Si, desde hace tiempo, el había perdido su daga, aunque en realidad fue robado por una pallum, cuando nos encontramos le entregue su daga, sin embargo, se encontraba tan emotivo que tomo mis manos y me agradeció –

- Me sorprende que no te haya hecho volar –

- Lo lamento –

- Ya no hay de que preocuparse Bell, eso ya pasó, realmente me hace feliz conocerte, a pesar de que soy una vil asesina, tú me trataste con amabilidad, incluso en los hechos del asesinato en el piso 18 (En el arco del Juggernaut) buscaste la manera de probar mi inocencia, hay muchas cosas por las que agradecerte –

- Yo también tengo porque agradecerte Ryuu-san, la vez en la que consolaste tras mi asesinato a Artemis, tu apoyo en el juego de guerra contra la familia Apolo, entre muchas otras cosas –

- Ya me había dado cuenta acerca del arcanum de Artemis, ¿Qué fue lo que sucedió exactamente? –

- No lo cuentes si no quieres Bell, yo me encargo –

Tras la explicación por parte de Ryuu, Astraea vio con compasión a Bell.

-No te juzgaré, entiendo por qué lo hiciste – Expreso abrazando cariñosamente a Bell, el albino correspondiendo la muestra de afecto hizo la misma acción que Astraea.

- Lamento molestarlos, pero ya está su comida – Hablo Anya la cual sostenía entre sus manos una bandeja con 3 platos hondos, al escucharla Astraea y Bell se separaron avergonzados con un sonrojo notorio.

- Vamos a comer – Propuso Bell a lo que sus acompañantes aceptaron, tomando asiento comieron en silencio.

Al finalizar Ryuu se veía decidida a algo...

-Astraea-sama ¿Cuánto tiempo se quedará en Orario? –

- 2 meses –

- ¿Ya tiene un lugar en donde quedarse? –

- No –

Ryuu miro hacia Mama Mia, la cual al saber su intención negó.

-Esto, si no molesta puede quedarse en nuestra mansión, después de todo hay muchas habitaciones – Propuso Bell el cual noto por qué Ryuu miro a Mama Mia.

- ¿Estás seguro? –

- No me molesta –

- Te lo agradezco mucho Bell –

- Pensé que te opondrías –

- ¿Por qué lo haría? –

- Es el chico que te gusta después de todo –

- ¿Entonces no te molestara que me lo quede? –

- Deje de estar molestándome por favor –

- Si te sientes insegura ¿Por qué no vas a vivir en el sede de este chico? –

- Bien, lo hare –

- ¿Cómo es que llegamos a esto? –

Ryuu pidió a Mama Mia tomar sus pertenencias, al preparar la maleta, Ryuu, Bell y Astraea salieron de la anfitriona de la fertilidad, durante el transcurso hacia la mansión chimenea, Bell recibía constantemente miradas afiladas de parte de chicas, y chicos se encontraban celosos al ver que aquel albino tenía dos bellezas a su lado, por parte de las chicas porque era un mujeriego.

Mansión chimenea

Finalmente llegaron a su destino, Bell tomo la llave de la puerta principal, apenas abrió la puerta, Freya se lanzó hacia él, gracias a que Bell ya se había acostumbrado, evito caer sobre su espalda, deteniendo en seco a Freya.

-Tardaste mucho Bell-kun –

- Lo lamento Freya, ¿podrías preparar dos habitaciones? –

- Claro, pero podría responderme ¿Para qué quiere dos habitaciones? – Pregunto Freya, hasta que noto la presencia de Astraea y Ryuu entendiendo por qué – Enseguida preparare las habitaciones –

- Gracias –

- Hestia no se encuentra aquí, Lili se encuentra haciendo cuentas, Mikoto está entrenando con Haruhime, Hedin y Hogni están en la biblioteca, si no quiere que le diga a Lili quiero que me hagas un favor –

- ¿c-cual favor? –

- Duerme conmigo esta noche –

- ¿Q-qué piensas hacer? –

- Sera que... ¿pensaste otra cosa conejo pervertido? –

El rostro del albino fue cubierto en vergüenza.

-Si fuera así sería una broma, pero si quieres no es una broma –

- Esta bien, dormiré contigo esta noche –

- Trato hecho, ustedes dos síganme, las guiare hacia sus habitaciones –

- Nos vemos después Bell – Dijeron elfa y diosa despidiéndose del chico, el cual siguió su rumbo hacia la forja de Welf para hablar con el.

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Caída la noche, en la mansión chimenea se reunían los miembros para cenar.

-¡Atención todos! – Grito Hestia la cual sostenía en una mano una copa con vino en la otra una cuchara, con la cuchara choco un par de veces con la copa de cristal provocando que los miembros vieran a su diosa patrona.

- ¿Qué es lo que ocurre Hestia-sama? –

- ¿Saben que día será en 2 días? –

- ¿El día opuesto? –

- Bell compórtate, como sea, en 2 dos días será 24 de diciembre –

- Oh es verdad, lo había olvidado –

- Bell ¿no sabes tu fecha de cumpleaños verdad? –

- ¿Cómo sabe eso Kami-sama? –

- ¿De verdad no sabes tu fecha de cumpleaños? –

- No –

- .... Ire al punto, será navidad, así que pedí permiso para tener el día libre ¿Les parece bien tener una cena navideña? Pueden invitar a los que quieran –

- Por mí no hay problema – Comento Mikoto.

- Por mí tampoco – Respondieron los demás miembros.

- Además si así lo quieren, habrá intercambio de regalos "Con eso Bell-kun me regalará algo" –

Curiosamente las enamoradas de Bell pensaron lo mismo, al igual que Ryuu la cual se encontraba del otro lado de la puerta.

Al terminar la cena, Bell cumplió su palabra de dormir junto a Freya en su habitación.

A la mañana siguiente, las chicas habían salido de compras para adornar la sede, al igual que suministros para tener lista la comida para Navidad.

-Nos veremos después Ryuu iré a visitar a Demeter, Bell cuida a Ryuu tienes mi consentimiento – Dijo Astraea al notar que los demás miembros se habían marchado, ambos se sonrojaron al ver su reacción Astraea rio para después dejar la mansión.

- ¿Van a adornar la anfitriona de la fertilidad? – Pregunto Bell a Ryuu.

- Si –

- Entonces vamos –

- ¿Eh? –

- Quiero ayudarte, además de eso, quiero pasar el día entero contigo – Dijo Bell rascando su mejilla avergonzado, al voltear a ver a Ryuu noto una bella sonrisa adornada junto a un gran sonrojo, era notable por su piel pura.

- Esta bien – Acepto Ryuu alegre, el resto del día ayudo a adornar el lugar, atendiendo a los clientes e incluso cocinando.

- Vaya, logro lo que nosotras no logramos en 2 meses – Dijo con asombro Lunoire, debido a que Mama Mia tenía asuntos que atender, le pidió a Bell que cocinara, pidiendo a las cocineras enseñarle como se preparaba cada uno.

Lográndolo a la primera.

Las meseras y cocineras veían asombradas el logro de Bell, aunque no perdieron el tiempo, y sirvieron la comida a los clientes.

Tiempo después Mia Grand había vuelto, notando la conmoción entre sus empleadas.

- ¿Qué fue lo que paso en mi ausencia?

Pregunto Mia, una de la empleadas se acercó para responderle, al enterarse de la situación una gran sonrisa se marcó en su rostro.

- ¡Chicas tengo un aviso importante que dar!

Como si fuera una orden, las empleadas de inmediato formaron filas.

- ¡Tu también mocoso, ven aquí!

Grito Mia Gran impidiendo que Bell tratara de escapar, de alguna manera sentía temor, uniéndose a las filas escucho atentamente a lo que diría Mia Grand.

- ¡Muy bien! ¡Hoy se hará un nuevo hecho a como estamos acostumbrado! ¡Tendremos a un cocinero aquí! Ese es... ¡Bell Cranel! –

De inmediato, las empleadas dirigieron su mirada hacia Bell con sorpresa, pero sobre todo algunas con emoción.

No tuvieron tiempo para hablar con ella, pues Mia Grand hablaría de nuevo.

- ¡Entonces desde ahora! ¡Vayan a atraer clientes, cerraremos por hoy! –

De inmediato todas se pusieron a trabajar, limpiando completamente el lugar, al terminar fueron formando equipos, a excepción de Bell y Ryuu quienes fueron llamados por Mia Grand.

- Ustedes dos van a ir a descansar, pueden ir a invitar a sus seres queridos, eso es todo lo que tienen que hacer

Dijo Mia Grand sorprendiendo a ambos, las demás empleadas escucharon claramente deteniendo el trabajo que realizaban.

- ¡Eso no es justo!

Anya fue la primera en quejarse, siguiéndose por las demás, debido al ruido Mia no dudo en darle un golpe en la cabeza.

- ¡Ya cállense y pónganse a trabajar si no quieren que les vaya peor!

Demando Mia, aunque con dificultad se levantaron para seguir con sus labores.

- Entonces, salgamos

Propuso Ryuu, Bell sonrió y acepto, Ryuu subió hacia su habitación por una muda de ropa, Bell esperaba sentado en las escaleras que conducían al segundo piso, se encontraba nervioso, el día de ayer fue cuando se confesó, y dejo que ella viviera en una de las habitaciones de la sede de su familia.

Estaba nervioso...

Pero sobre todo...

Alegre...

Logro manifestar con claridad sus sentimientos, siendo estas correspondidos.

Lo mismo era para la elfa.

Mientras se cambiaba de ropa, recordaba las cálidas palabras de su amado, su corazón latia de manera acelerada, todo su cuerpo se volvió rojo, siendo bastante claro por su piel clara.

Claramente lo sabía, tenía que bajar para acompañar a Bell, ya había terminado de cambiarse desde hace rato, pero sus nervios le impedían salir, tomando algunos minutos para tranquilizarse.

Cada paso que daba se ponía cada vez más nerviosa, llego hacia el último escalón, viendo la espalda de Bell.

- B-Bell

Susurro Ryuu, la pequeña voz de Ryuu llego a oídos de Bell.

Dando un vistazo hacia el final de las escaleras veía a Ryuu, vistiendo con un vestido blanco largo de una sola pieza, junto a unos zapatos marrones su belleza llegaba a congeniar con la pureza del vestido.

Bell de inmediato se puso de pie, viendo de frente a la elfa, Ryuu cruzaba miradas con el antes de desviarla de nuevo.

En la mente de Bell permanencia el aspecto de la elfa.

Aunque...

Su imagen mental de Ryuu desaparecido como humo en una ventisca cuando Ryuu se encontraba detrás de su espalda.

- ¿M-me veo rara?

Pregunto Ryuu agachando la cabeza avergonzada, sostuvo su brazo con su mano con nervios, su mano temblaba por lo avergonzada que se sentía, hundiéndose entre hombros esperaba la respuesta a su pregunta.

Aunque su preocupación ahora era otra, comúnmente no le importaría lo que otros opinaran, pero otro caso era la persona que amaba, parecía como si le gusta que le dijera que era hermosa.

- Al contrario, te ves muy hermosa

Respondió Bell con sinceridad, las palabras de Ryuu confortaron el corazón de la elfa.

La respuesta había sido dada, los hombros volvieron a relajarse, sus manos dejaron de temblar, su rostro que mostraba preocupación paso a una de completa felicidad.

Ahora miraba con seguridad en si misma a Bell, la mano de Bell fue extendida, Ryuu tomo la suya y bajando las escaleras con cuidado.

- Muchas gracias mi héroe

Agradeció Ryuu besando la mejilla de Bell.

Saliendo del restaurante por la puerta trasera, pasaron por un callejón que tomaba línea con el camino principal, tomados de las manos veían la gran torre de Babel, ambos observaron el bello atardecer.

-Vaya, ya está por anochecer, que rápido pasa el tiempo

Expreso Bell, Ryuu afirmo sus palabras, y siguieron caminando hacia la mansión chimenea, sin embargo, ambos tuvieron un encuentro con algunas integrantes de la familia Loki.

- ¡Oh! ¿Ese no es Argonauta-kun?

Pregunto una amazona, tratándose de Tiona, la menor de las hermanas Hiryute, junto a ella su hermana mayor Tione, Lefiya Viridis y por último Ais Wallenstein.

- Que coincidencia 

Dijo Tione con sorpresa, notando que Bell y Ryuu se sostenían de las manos.

- ¿están saliendo?

Pregunto directamente hacia ambos, aun avergonzados y sonrojados respondieron...

-Si

- ¡Felicidades Argonauta-kun!

Felicito Tiona alegre por Bell, su hermana Tione igual felicito, aunque de manera menos energética a comparación de Tiona.

-Ahh, como quisiera que el capitán correspondiera mis sentimientos

Expreso con celos Tione.

A comparación de reacciones esperados de ambas hermanas, para Ais y Lefiya era otro caso.

- «¿Qué es esto que siento?, debería de sentirme aliviada, pero...»

En los adentros de Lefiya, un extraño sentimiento de tristeza apareció.

- Es una victoria sin pelea

Finalizo su línea de pensamiento con amargura.

La reacción de Ais no era muy diferente, por lo menos superficialmente su rostro, interiormente se derrumbaba por completo.

Se sentía tan aturdida que ni siquiera su mini Ais podía hablar.

- «Esto no es posible... yo... yo debería ser quien debería tomar su mano»

Quien había hablado esta vez fue Ais, sus puños se apretaron, su puño derecho se dirigió hacia su pecho...

Dolía su pecho.

Como si hubiera sido atravesada por una espada...

Un gran frio le recorrió su cuerpo.

Dando un paso se acercó a Bell.

Dos pasos...

Tres pasos...

Una furia notoria estaba por dejarse fluir, un gran puñetazo estaba por ser dado hacia el rostro de Bell, sin embargo, una gran fuerza la detuvo, al ver de quien se trataba noto que era aquella elfa.

-Apártate

Dijo Ais dando más esfuerzo en empujarla, sin embargo, la elfa no parecía retroceder.

-No lo hare, no después de ver cómo quieres dañar a unas de las personas más preciadas para mi

Afirmo Ryuu con determinación.

- Entonces te quitare a las malas

Amenazo Ais, una patada fue lanzada hacia el rostro de Ryuu para hacerla retroceder y tener vía libre hacia Bell.

La misma ira que sintió por el dragón negro volvió ahora se dirigía hacia Bell.

Creí que ella tendría a su héroe solamente para ella.

Sin embargo, sus acciones no tuvieron repercusiones sobre Ryuu.

Ais lo noto, ella se había vuelto más fuerte desde la última vez que peleo con ella.

- Te has vuelto más fuerte, eso es un alivio... así ya no me contendré

La velocidad con la que atacaba a la elfa había aumentado, dando todo lo que tenían.

Viéndose acorralada, decidió usar su magia.

-Te matare, maldito monstruo ¡<Lil ráfaga>!

A perspectiva de Ais, Ryuu era un monstruo, alguien peor que ella, un ser inmundo.

Ryuu aun con dificultad esquivaba los golpes de Ais, aunque lo que le provocaba mas daño eran los cortes de aire que emanaba Ais.

El vestido de Ryuu se desgarraba.

Sin embargo, seguía luchando, dando su mejor esfuerzo para resistir la tempestad con la que se enfrentaba.

Ni siquiera podía acercar su mano hacia el cuerpo de Ais pues si lo hacía recibiría profundos cortes.

Finalmente, una patada se conectó en el rostro de Ryuu, mandándola a volar girando varias veces sobre el suelo.

Su rostro y cuerpo sangraba, sus ojos habían quedado intacto, sin embargo, el resto de su rostro no.

Antes de que Ais siguiera, Bell se había posicionado delante de Ryuu.

Su mano brillaba, su mirada estaba determinada, su mano fue alzada.

- ¡<Firebolt>! –

De la palma de Bell se arremolino una bola de fuego, fusionándose con su habilidad <Argonauta>, fue disparado un potente disparo.

Aunque no surtió efecto en la armadura de Ais.

Pero en sus sentimientos si.

Tristeza...

Sorpresa...

Enojo...

Un remolino de emociones dio lugar en el corazón de Ais, al levantar la mirada, vio el rostro horrorizado de Bell, casi al instante su magia se desactivo.

- B-Bell

-Aléjate por favor

Demando Bell cargando a Ryuu entre sus brazos, Ais permaneció en silencio hasta que Bell se alejó lo suficiente.

- ¿Qué... fue lo que hice? ¿El me odiara?

Derrumbada, Ais suspiro y camino hacia la sede de su familia, siendo seguida por las demás.

Bell de inmediato llevo a Ryuu hacia su habitación, quien había notado su entrada fue Haruhime, preocupada decidió abrir la puerta de la habitación de Bell.

- ¡¿Hay algo que le preocupe Bell-sama?!

Pregunto Haruhime preocupada, Bell se sorprendió por la entrada de Haruhime pero a la vez se sentía aliviado.

- Haruhime-san, quisiera pedirte un favor, ¡ve a buscar el botiquín de primeros auxilios! ¡Hay un aquí!

Ordeno Bell, Haruhime sin cuestionarlo hizo lo ordenado, prendiendo las luces y buscando lo pedido, al encontrarlo lo llevo hacia Bell, viendo a Ryuu entendió la situación, por lo que Bell junto Haruhime se encargaron de atender a Ryuu.

Al terminar ambos tomaron asiento para estar atentos a lo que ocurriría con Ryuu.

- ¿Cómo fue que ocurrió?

Pregunto Haruhime, Bell respondió los hechos desde que vieron el atardecer hasta la pelea de Ais y Ryuu.

- Asi que eso fue lo que paso, me sorprende que incluso apuntaras hacia la persona que cautivo tu corazón

Expreso Haruhime asombrada.

- Me sentía igual, mentiría si dijera que no me sentí mal por ello, pero tampoco dejaría que Ais dañara a quien aprecio y amo

Expreso Bell, dándose cuenta de lo que había dicho.

- Asi que Bell-sama tiene esa relación con Ryuu-sama

Dijo Haruhime sorprendida, cuando Bell estaba por decir algo fue interrumpido.

- Entiendo por qué quería ocultarlo, le pediré a Mikoto-sama que me ayude a llevarla a mi habitación, hay mayor oportunidad que Hestia-sama la encuentre en su habitación, así que quisiera llevarla a mi habitación.

Propuso Haruhime, de inmediato Bell rechazo la propuesta.

- No es necesario, ella ya tiene una habitación para ella, de hecho, también otra habitación está siendo ocupada

Declaro Bell.

-... Bell-sama ahora veo porque Lili-sama lo regaña, sin embargo, me gusta mucho eso de usted Bell-sama

Haruhime junto a Bell llevaron a Ryuu hacia su habitación por pasadizos secretos.

Hestia ya había llegado después de una larga jornada, pidiendo que preparen la cena, Bell, Mikoto y Haruhime se encargaron de preparar la cena.

Al terminar frente a los miembros se encontraba un plato delicioso como cena.

Antes de que empezaran a comer, varios golpeteos sonaron, provenientes de la puerta de la mansión, Hestia al levantarse fue a atender a quien tocaba la puerta.

- ¡Astraea!

Dijo Hestia con sorpresa.

- ¿Qué te trae por aquí?

Pregunto.

- Solamente quería visitar a una buena amiga, ¿Puedo pasar?

- Claro, eres bienvenida

Dando paso libre a Astraea, Hestia se hizo a un lado, Astraea se dirigió hacia el comedor, la puerta había sido cerrada y Hestia estaba a un lado de Astraea.

- ¡Bien familia!, hay alguien a quien quisiera presentarles, ella es Astraea, una de las amigas en quien confió en mi estadía en el tenkai

Presento Hestia como si presumiera.

- Veo que has logrado tener una familia, y yo que pensaba que no lo lograrías

Comento Astraea burlándose de Hestia, la pequeña diosa grito "¡No te burles de mí!", aunque luego pudo relajarse.

- Pero todo fue gracias a mi Bell-kun, el fue el primer miembro que tuve, tuve suerte en encontrarlo, el junto a mi hemos logrado superar grandes obstáculos

Inflando su pecho con orgullo, Hestia presumía abiertamente.

- Quisiera escuchar todo

Comento Astraea emocionada.

- Bien, te lo contare todo, pero antes ¿Quisiera acompañarnos a cenar?

Pregunto emocionado por hablar, Astraea acepto gustosamente, mientras Hestia y Astrea hablaban, el resto de la familia comían sin prestarle atención, aunque llegaba el momento de presentar a los demás miembros.

- Nos vemos luego Kami-sama, ire a descansar

El primero en terminar fue Bell, despidiéndose del resto de su familia tomo rumbo hacia la habitación donde se encontraba Ryuu.

La elfa ya había recuperado por completo la consciencia, veía de manera tranquila el lugar cubierto casi por oscuridad, aunque una ventana permitía que la luz de la luna fuera proyectada y iluminara tenuemente el lugar, se sentía aliviada al ver un panorama pacifico, prefería eso a esa experiencia agitada con Ais.

Sin embargo, su calma se vio interrumpida cuando una trampilla fue abierta desde el suelo, poco a poco fue revelándose el responsable, tratándose de Bell quien sostenía una linterna para ver claramente.

- ¿Cómo te encuentras Ryuu?

Pregunto Bell preocupado.

- Estoy mejor, gracias por atenderme

Respondió Ryuu aliviando a Bell.

- Lo lamento, no pude traerte algo para cenar, al menos pude traer algunas frutas que dejo Freya en mi habitación

Dijo Bell dejando una cesta con frutas en el mueble a un lado de la elfa.

- Esta bien, agradezco tu preocupación

Mientras Ryuu comía las frutas, Bell se acostó en la misma cama de Ryuu con la excusa de verificar sus condiciones, para que al final quedara completamente dormido.

Ryuu se acurruco junto a él, tomando un profundo sueño.

Mientras eso ocurría, una chica peli dorada se encontraba a solas en su habitación.

Hace unas horas había llegado destrozada, al llegar a su habitación no dudo dos veces en cerrar la puerta en la narices de sus amigas.

Rendidas dejaron a Ais a solas.

Su tiempo a solas se vio interrumpida cuando la puerta fue abierta abruptamente por una alta elfa.

- Ais...

Menciono Riveria, cerrando la puerta acercándose cada vez más a Ais.

- ¿Qué es lo que harás?

Pregunto Riveria sentándose a un lado de Ais, mirándola con cierta presión, ya se había enterado de lo sucedido después de que las hermanas amazonas lo contaran.

- Es su culpa, el debería de ser quien se disculpe, se suponía... ¡se suponía que yo debería ser quien yo sería su pareja! ¿no es verdad, Riveria?

Pregunto Ais hundiendo su rostro entre sus muslos.

- .... Me equivoque Ais, no salió como un cuento de hadas

Respondió Riveria con cierta culpa, pensaba en que Bell sentía un profundo amor por Ais, pero en cambio, lo tenía a otra mujer.

- Sin embargo, no todo esta perdido, se que lo que hiciste fue algo imprudente, y también lo fue en sacar conclusiones rápidas, así que solo nos queda disculparnos y esperar que nos perdone

- Pero... ¿Y si me odia?

- Entonces su relación no volverá hacer la misma, las acciones que comete uno tendrán graves consecuencias, dentro de ellas perder la confianza de otros, como yo creo que tu perderás confianza en mi

- ...

Ais se mantenía silencio, estaba indecisa, no sabía que decir, entonces... palabras surgieron desde la profundidad de su corazón.

- No he perdido mi confianza en ti, tu has sido quien me ha guiado todo este tiempo, que Bell tuviera otra mujer que amara fue algo inesperado...

Hablo Ais intentando calmar a Riveria, Riveria se sorprendió por sus palabras, y sonrió al final.

- Entonces, ya esta decidido que haremos, así que descansa...

Riveria salió de la habitación, Ais se puso de pie dirigiéndose hacia su baño privado lavándose los dientes y acostarse...

-

-

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El amanecer dio lugar en Orario, un nuevo día para los civiles y aventureros de Orario, aunque debido a que se consideraba una festividad, la mayoría decidió estar en la superficie, y algunos otros fueron hacia la mazmorra.

Sin embargo, un hecho desafortunado ocurriría, al menos para el capitán de la familia Hestia.

- ¡Bell-kun! ¿Me podrías explicar que está sucediendo?

Hestia en el día había ido a la habitación de Bell para darle un beso en la frente, pero al notar que no estaba, sintió una profunda preocupación, por lo que busco en toda la habitación algún indicio que lo llevara hacia Bell.

Encontrándose con una trampilla por donde bajo por unas escaleras, siguiendo un camino de antorchar, para Bell solo era ida y vuelta, sin embargo, que durmiera junto a Ryuu estaba fuera de sus planes, debido a su descuido Hestia pudo rastrearlos con facilidad.

El grupo de Hestia había despertado por completo a la pareja, cuando la vieron ambos saltaron debido al susto, aunque no Haruhime, que ya se habia levantado desde antes.

- Vamos, date prisa Bell-kun, explícame lo que ocurre ¡Ya!

Bell acorralado tuvo que contarle lo sucedido.

- ¡Hmp! Lo dejare pasar, pero a cambio quiero que duermas conmigo esta noche.

Hestia al decir esas palabras, su aura amenazante cambio a un aura tranquilo y animado como siempre, aunque con un notorio sonrojo.

Bell acepto con la condición de que Ryuu y Astrea vivieran en la mansión, Hestia acepto completamente.

Reuniéndose en el comedor, Hestia tomo una copa junto a una cuchara, con la cuchara golpeo un par de veces la copa llamando la atención de su familia.

- ¡Como sabrán, hoy es navidad!, ¡Asi que pensé en la idea que además de una cena navideña, tendremos un intercambio de regalos! ¡No se preocupen por el espacio, ocuparemos el comedor y el patio interior y exterior!

Con eso dicho, todos se dirigieron por compras a para los preparativos.

Bell y Ryuu irían con Mama Mia, al llegar Ryuu solamente paso, ya que Bell estaría siendo interrogado por varias chicas.

- ¿Qué es lo que hizo Mia?

Pregunto Ryuu.

- Nada en especial, solo transmitir que Bell trabajaría aquí, tranquila, tendrá tiempo para cenar con su familia.

Respondió Mia, Ryuu suspiro como si esperara eso de ella.

- A lo que venía, quisiera que fuera hacia la sede de Bell, para que cocinara, por supuesto dijo que pagaría.

De inmediato Mia acepto.

Bell se quedo en el bar, mientras Ryuu ayudaría con los preparativos en la mansión chimenea.

El resto del día Bell estuvo trabajando con un traje de mayordomo.

Hasta que eran 5:00 de la tarde, al cerrar el establecimiento Bell se acercó a Mia Grand.

- ¿Por qué me fui envuelto?

- Veras, tu tienes un club de fans, así que quería aprovechar eso para ganar valis.

Respondió francamente Mia.

- Ahora chico, encárgate de cargar algunas cajas y llevarlas a tu mansión

- Claro

Bell se encargo de cargar las ultimas cajas, por lo que estaba, por último, su rumbo se vio interrumpido veía una alta elfa acercarse, era Riveria.

Bell pensaba que no le hablaría, pues estaba equivocado, Riveria toco un par de veces su hombro, al ver sus intenciones Bell bajo las cajas.

- ¿Hay algo que se le ofrezca?

- Solamente quisiera que le dieras una oportunidad

Respondió Riveria confundiendo a Bell, al dar un vistazo a un lado de la alta elfa vio a Ais.

- Bell...

Ais se acercó hacia Bell inclinándose.

- ¡Lo lamento! ¡Deje llevarme por mis emociones, deseo puedas perdonarme!

- Yo no soy a quien le corresponde perdonarte, con quien disculparte seria con Ryuu

- Bien, quiero preguntarte algo, ¿Tú me odias?

- No te odio Ais, solamente me asuste cuando te acercaste amenazante, pero todo está bien ahora

Respondió Bell, Ais sonrió y lo abrazo sonrojando a Bell.

- ¿A dónde te dirigías?

Pregunto Riveria curiosa al ver las cajas que cargaba Bell.

- Me dirigía hacia mi sede, llevaríamos a cabo una cena navideña. Ais-san, Riveria-san ¿Quieren acompañarnos?

Ambas aceptaron gustosas, ayudando a Bell cargar las cajas, sirviéndose comida cenando tranquilamente, hasta que llego el momento de entregar los regalos.

Lo extraño era que Mikoto, Haruhime, Ryuu y Freya no se encontraban, por la entrada hacia el comedor llego Mikoto arrastrando cajas.

- Bell-dono aquí están sus regalos

Dijo Mikoto, Bell emocionado se levantó, Mikoto le entrego un listón que enlazaba las 3 cajas, al jalarla, el rostro de Bell quedo completamente sonrojado.

- ¡Nosotras somos tu regalo!

En las 3 cajas, se encontraban Ryuu, Haruhime y Freya desnudas cubriéndose con un listón rojo largo.

Sin embargo, las sorpresas no habían acabado, una bella mujer ingreso por la puerta.

- Nos vemos de nuevo Orion

- Artemis-sama, ¿c-como es qué?

- Ouranos me dejo estar 3 días completos aquí, dijo que solamente es por deberte un favor. Disfrutemos lo mas que podamos Orion

- Fin del especial-

¿Quieren lemon de Ryuu, Ais, Riveria, Astraea, Haruhime, Freya y Artemis con Bell?

<Si>

<No>