Mi madre, mi maestra y tambien la mujer que nos amaba y nos odiaba a todos por igual, era una diosa, una famosa diosa mayor conocida como la:

La tejedora,la Araña, la Miradora, la diosa que vislumbro un camino que provocaria la muerte de hombres y dioses, e incluso miro el final de la Gran Diosmaquia cuando los dioses se decidian si salvar a los humanos o dejalos perecer en la oscuridad del tiempo, ella se nego pero unidos como un solo pensamiento descendieron a la tierra...

Ahi supo que comenzo el ocaso de los dioses.

Memorias de la Hilandera.

-NOS TRAICIONASTE- gritaron en desafio docenas de sombras, que blandieron rapidamente sus armas de plasma  asi como tambien armas blancas de energia, mirando a la sombra que habia entrado en total silencio hacia su ubicaciòn secreta, una caverna subterranea y perdida en un laberinto natural de formaciones geologicas de tiempos primigenios y solidificados con el paso de las estaciones,las paredes cubiertas de liquenes y predominantemente de roca como de sal que se aglomeraban y se encontraban hacian dificil el acceso si uno avanzaba sin cuidado podria perder el equilibrio y caer pero eso era uno de sus problemas.

El otro era no perderse para siempre, de tantos lugares y caminos y una oscuridad total, incluso con los tecno-totems era muy dificil ubicarse, la cantidad de energia magnetica y electrica producida tanto por el planeta como por los cristales naturales presentes en todas esas cavernas hacian de eso una misiòn titanica el poder moverse.

Pero esas dificultades y la cantidad de energia que acumulaba el lugar de maneras naturales, hacian de el un lugar idoneo para reuniones secretas a plena luz del dia, cientos de cadaveres ahora y despues se acumularian al intentar sortear todo el entramado subterraneo, eso no incluia que los Rebeldes, la Resistencia, los prohumanos entre tantos nombres, habian acumulado una fuerte cantidad de trampas y armas letales que hacia aun màs peligroso el sitio.

Los individuos apuntaron con deseo de venganza.

-Basta- clamo su lider, un hombre anciano que avanzo hacia la sombra-sus armas no pueden matarla- pero saco su arma y apunto al cuello-pero esto puede matarte, ¿o me equivoco?-

-No te equivocas- dijo la sombra quitandose la capucha y dejando a la vista, una hermosa mujer de cabellos negros, labios al natural y rosados, ojos verdes esmeralda, inocencia y lujuria combinadas en un ser, y tambien el como sus ojos brillaban tenuemente era sinonimo de que era una diosa-Soy una de las odiadas diosas!-

Hubo una conmociòn, tanto tiempo trabajando juntos y ahora se revelaba que era una diosa.

Muchos se miraron confirmando sus teorias otros se exasperaron en un anhelo de sangre por verla muerta, los dioses eran unos egoistas que creaban y destruian a placer, muchos habian sufrido bajo la tirania de alguno de los dioses, por eso los odiaban, y estaban dispuestos a sacrificios, seguro si se lanzaban ahora en ese momento a pesar de que muchos moririan, tal ves podrian matarla, una diosa menos que infestara el universo.

-Mi bisabuelo, mi abuelo, mi padre y yo, por estos 120 años, hemos ayudado al Gran Cienti-Mago Orson por muchos años, sus armas- palmeo su espada-son pocas pero capaces de matarlos a ustedes, y ahora que habia pasado los ultimos 20 años creando un arma definitiva contra los dioses, cuando habia mandado un mensaje que estaba màs cerca de lograr su cometido...una flota de 100 cruceros de batalla ataca su base secreta, ¿Dame una buena razòn para no creer que fuiste tu? ERES LA UNICA QUE CONOCIA LO QUE ESTABA HACIENDO- abalanzo la espada contra el cuello y ahora icor dorado caia del cuello de la bella diosa.

Ella se quedo con tranquilidad sin inmutarse de perder su divina sangre, tan tranquila y apacible, era su tuno de hablar, mientras el lider de la rebeliòn intentaba controlar el fuego en su corazòn ella era un mar profundo y silencioso.

-Se lo dije al padre, del padre de tu padre y te lo dire a ti: Los hombres y los dioses nunca debieron cruzar caminos- dijo con una fuerza y aura que hizo a todos retroceder menos al viejo, era por el arma, no solo tenia la capacidad de matar a los dioses, tambien podria repeler sus poderes, es un arma temible, pero mucha màs temible era lo que ha creado el Gran Cienti-Mago y me he esta vedado su visiòn -Soy la tejedora, yo tengo la visiòn puedo ver y entrever los hilos del futuro, desenradar los caminos y direcciones, prever y mirar lo que puede acontecer, lo dije a mis hermanos, les dije que si nosotros descendiamos seriamos exterminados, pero si nos quedabamos los humanos serian los exterminados, palabras verdaderas para seres hambrientos, Nunca me escucharon!-

-Entonces DIOSA, ¿Aun no me hablas en favor de tu inocencia?, eres la unica no confiable que sabia sobre la misiòn del Gran Cienti-Mago-

-Deberias agradecerme-dijo la Diosa-sin mi, nunca hubieran podido darle una mano a ese hombre, nunca hubieran conocido que tenia los conocimientos para matar a los dioses y sin mi, no sabrian que el crearia el poder para matar a los dioses definitivamente, yo he vislumbrado eso por ustedes- sin mi estarian ciegos, peleando en una guerra que nunca ganarian, soy los ojos que les permitiran llegar al otro lado del puente, màs me esta negado mirar lo que se encuentra en ese lado-y deberian agradecerme, yo he avisado a los dioses de donde estaba el-

De nuevo docenas de armas le apuntaban, y el lider de la rebeliòn, presiono la empuñadura con màs fuerza, estaba listo para cegar la vida de otro dios.

-Ahora lo que el Gran Cienti-Mago Orson ha creado, esta libre en el universo, el ha muerto pero su creaciòn sigue intacta- y ahora lo que estos ojos podrian ver se ha limitado, el futuro se estrecha y solo quedan pocas opciones.

-¿De que hablas?-

-Si El Gran Cienti-Mago hubiera terminado su proyecto, solo hubieras cambiado un monton de amos por uno solo, y uno màs cruel y poderoso, hoy el martir pudo ser tirano, como el tirano tal ves pudo ser martir, eso ha cambiado en la estela del tiempo- los miro a cada uno de ellos, cada uno que sufria, odiaba, amaba, anhelaba, se cansaba y a veces reia, estaban cansados de la tirania de los dioses, cientos años de guerra contra un poder indetenible.

Hermanos contra hermanos, el padre con el hijo y el padre contra los hijos, cuanta sangre se derramaba y cuanta màs se verteria, cuantas voces calladas, cuantas veces solo por complacer a los dioses, ella a diferencia de los dioses no encontraba satisfechos sus apetidos en esos horrores, ella hubiera preferido abandonar a sus hermanos, pero como lo veia en su futuro o las pocas visiones, en una era asesinada en un frenesi de los dioses, en otro asesinada por los poderes creados por el Gran Cienti-Mago y una ultima, ella la ultima de su estirpe retomando su lugar en el orden cosmico, dejando a los humanos a su suerte, una suerte que se habia consagrado con la sangre de tantos de ellos, los que quedaran al final serian màs fuertes y poderosos, se extenderian en una oleada humana que seria indetenible.

El lider de la rebeliòn pensaba de un lado a otro moviendose como un Leòn enjaulado, queria matarla, pero sus servicios eran muy utiles, les habian permitido matar a varios dioses en guerras contra ellos, pero tambien era la posibilidad de que estuviera mintiendo, ser el lider no solo era placer de mandar sobre el projimo, era una pesada carga, una carga que hacia que midiera cada una de sus palabras, que controlara cada uno de sus acciones y midiera con cuidado cada paso que diera, un error, un empuje equivocado,y seria el desastre, habian gastado miles de recursos financieros y tiempo en el Gran Cienti-Mago, habia creado una centena de poderosas armas, pero era inutil contra los terribles legiones y huestes de los dioses.

-¿Què ha beneficiado a nuestra rebeliòn dejar que ese hombre muera?...pudimos llegar mucho antes y quitarle lo que habia creado, hubiera sido una mejor opciòn, que dejar que una flota llegara a el-

-Ha ahorrado una tirania- ella cerro los ojos mirando los futuros perdidos, se desvanecian en el olvido, al menos una ultima luz de esos posibles-y tambien ha cegado a los dioses que ahora se creen màs fuertes que nunca, pero hay un ultimo sacrificio que debe hacerse...para que los dioses, mis hermanos sean destronados de todo su poder-

-¿Què es?- dijo el lider, tal ves la Diosa les habia ahorrado el peligro de un nuevo tirano, tal ves todavia la diosa era util, ademas tenia un arma capaz de matarla, las runas y la capacidad tecnologia de esa arma lo hacia inmune a muchos de los poderes y ciencias de los dioses, era el modo de sojuzgarlos.

-Toda la rebeliòn debe ser aniquilada y exterminada-dijo con lagrimas en sus ojos este sacrificio es necesario, es el ultimo empujon que se necesita para que los dioses no puedan ver la tormenta.

El suelo se levanto dejando salir docenas de soldados que comenzaron a disparar de un lado a otro matando alos presentes, el lider de la rebeliòn se lanzo a picada contra la diosa, entonces a tus ojos soy una traidora, que asi sea, ella genero un muro de roca retirandose en silencio mientras los soldados asesinaban y mataban a todos.

-Traidora, traidora- grito el lider de la rebeliòn repeliendo disparos y matando a los hombres que se acercaban a el-su camino hacia ella era imposible, ahora debia escapar de ahi, pero soldados enemigos llegaban, el mismo motivo de que fuera un lugar idoneo para reunines secretas era ahora el motivo por el que eran matados, solo una diosa como ella podria atravesarlo facilmente y llegar a ellos, sorteando sus trampas y pasando por pasajes desconocidos, con la cual esa fuerza de ataque entro sin ser detectados.

Ella se retiro en silencio, el olor a muerte, sangre, musgo y sal era fuerte,cada paso era una puñalada para ella "con esto tracione a los humanos y tambien a mis hermanos" cerro los ojos y miro el presente, el ahora, el ya

Cientos de soldados leales a los dioses avanzaban a bases ocultas, asaltando escondites en ciudades leales, atacando y asesinando a los altos mandos y comandantes dela rebeliòn, entrando a las casas de familias rebeldes y asesinando a padre, madres e hijos, estaciones de mineros, o de transporte atacadas por cruceros de combates hasta convertirlos en chatarras, la rebeliòn debia reducirse hasta la màs pequeña parte de si misma para que comenzara a crecer como una pequeña chispa que se convirtiera en un incendio.

Pero para un fuego se necesitaba combustible, miro màs de sus pecados, ciudades inocentes, gente que nunca se intereso por ni un bando y otro que vivian en tranquilidad, familias libres de la mancha de la guerra y la sangre, atacados, planetas que nunca atreverian a levantar la cabeza asaltados por los ejercitos leales, padres asesinados, madre e ehijas violadas, niños con las cabezas destrozadas y sobrevivientes con un odio profundo y recondito, habia ayudado localizando a los verdaderos enemigos pero tambien mintio y ataco lugares que nunca hubieran pensando en la sediciòn, este era la foma para preparar el incendio.

Recordo hacia miles de años atrás, cuando descendio con renuencia sabiendo los posibles futuros...

Encontro el una mujer que habian asaltado y golpeado por llevar un pedazo de pan putrefacto para sus hijos y no soltarlo, estos humanos deberian ser exterminados fue lo unico que podria pensar, tomo la forma de una chica y se acerco para ver el estado de la mujer, pero cuando esta la vio, extendio sus puños

-Por favor...llevalo a mis hijos- durante todo el tiempo en que la habian maltrado nunca solto el pedazo de pan, ella se maravillo de corazòn por esa prueba de amor incondicional a sus hijos y penso.

Tal ves los humanos merescan exterminarnos.