El rubio miraba desde lo lejos en lo alto de la copa de un árbol el ex reino del Blakk, la brila calida movia las ramas y le ayudaba a camuflar su precensia en el lugar, analizando todo lo que había ocurrido hasta el momento.

Desde que empezó a trabajar para el pelirrojo hace casi tres años noto varias cosas a su al rededor, los obvios sentimientos del rey, su soledad, asi como la presión de todo lo que debia y no hacer, la reaccion del pueblo ante su toma de poder, asi como empezar a dudar de las acciones del rey con respecto a las órdenes y trata que le daba. Digamos que si bien su relación no era cercana sino más bien profesional, Twist en el fondo no lo sentía tanto asi.
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La princesa se encontraba frente a la celda, de brazos cruzados, Twist jugaba con una pelota rebotandola contra la pared, ignorando por completo las palabras de la chica.

—Ay princesita ¿aun no te queda claro mis intenciones?

—Solo te estoy explicando la situación. Esto afecta a todos, y lo sabes.

—¿Y eso a mi que?

—Yo sé que en el fondo no quieres eso.

—Ay por favor ¿Desde cuando aquí puedes leer la mente de los demás? Suponiendo que este en lo correcto, cosa que no es.

—¿Por qué trabajar para Tad entonces? Investigué sobre ti, cosas ciertas, algunas falsas ¿quién sabe qué es verdad y que no sobre tu pasado? Eres el único que puede negar o corroborar pero hay algo que no entiendo ¿por qué encubrir tanto a Tad entonces?

—Mi relación con su majestad es algo altamente profesional, no estoy en disposición de brindarte información al respecto ya que mi contrato lo impide.

—Que yo sepa no hay ningún papel legal sobre eso. Esto es más personal.

—¿Y eso nos lleva a...?

—En que no estas obligado a ocultar información, lo haces por querer, y yo te pregunto ¿Por qué?

"Yo me pregunto lo mismo" pensó el rubio, dejando de rebotar la pelota, pero seguia sin mirar a la pelirroja, quien mantenia su ser de autoridad y firmeza.

—Sólo te pido una cosa, y te dejaré ir, nadie saldrá a buscarte y tampoco te verás envuelto en todo lo que pase de aqui en adelante bajo mi responsabilidad, salvo caso contrario ye veas envuelto nuevamente en un asunto contra mi y mi reino.

—¿Algún seguro se vida?

—¿Dudas de mi palabra pero confías en la de Tad?

Twist no estaba dispuesto a vender a Tad a la ligera. Pero de no hacerlo ¿qué sucedería? ¿Sería capaz de aceptar la responsabilidad?

—...Qué necesitan saber.
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El rubio aun pensaba en aquella conversación antes de su liberación, fue lo último que supo con algo involucrado con la realeza. Cuando ocurrió la muerte de Tad, él había huido lejos de la guerra, no se sentía capaz de encarar al joven rey, aunque lo que realmente le dolió fue que nunca preguntó o si quiera lo mandó a buscar. Pero ¿por qué lo haría? No eran amigos, era su simple mano derecha, fácilmente se podía conseguir otro, él era completamente reemplazable.

¿Entonces por qué se encontraba velando lo que era el castillo donde vivió por tres años junto al Blakk? ¿Algún tipo de cariño? Quién sabe.

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Twist caminaba por los pasillos del castillo, escucho el sonido de unos pasos junto a un tarareo, era constante, rítmico, agradable. Se acercó a la puerta y se asomó sin causar algún tipo de sonido, y ahí estaba él. Su alteza movía su lanza con gracia al compás de su propia canción, la vara danzaba con agilidad, su sonido ante un movimiento brusco era claro y firme.

—And it goes on, it goes on and on~ While you're here~—Tarareaba el chico, inmerso en sus movimientos—. And long after you're gone~ Can't pretend, no more~ —Sus movimientos acompañaban a su propia melodía, yendo a corde al ritmo de las palabras—. I just can't pretend I'm not in love with you~ —Se detuvo de golpe, su mirada era triste— That's not true...

Twist no pudo evitar quedarse unos segundos viendolo, sus movimientos eras ciertamente cautivantes, sumandole la mirada concentrada por parte del Blakk que ageno a su único espectador, continuo con su pequeña e improvisada danza, si se le puede llamar asi.
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—¿Por qué mierdas me puse a recordar eso? —Murmuro el rubio, soltando un amargo suspiro mientras pasaba su mano por su rostro tratando de no pensar en ello.

Tal vez esa era la razón por la que se sentía tan agusto con el pelirrojo, se podía ver a si mismo en algunos aspectos, quizas su única diferencia sea la toma de poder que poseen ambos, sin embargo han logrado complementar en muchos aspectos ¿qué sucedio entonces? ¿sólo eran cosas suyas?

El rubio bajo del arbol y se dispuso a marcharse, nada ganaba con quedarse en aquel lugar ¿qué esperaba obtener? Tadse habia ido y su único enlace con aquel lugar se había ido, ahora el nuevo rey será pronto nombrado y él no tenía nada que hacer de ahora en adelante.

¿Qué le preparaba el destino ahora, a aquel ladrón sin hogar en un mundo despiadado?

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Era casi media noche, la banda se encontraba durmiendo salvo la única chica del grupo, quiene estaba acostada en el sillon editando desde su tableta algunos videos que habia tomado en su estadia en aquel otro mundo, tratando de hacer el mayor silencio posible mientras revisaba cada video, Tornado se encontraba junto a ella observando su trabajo.

—¿No deberias irte a dormir ya?

Pregunto el Shane, quien bajo de las escaleras captando la atención de la chica la cual volteó a verle no sin antes pausar el video.

—Estoy exhausta, pero no con sueño exactamente —Le respondio.

—Tienes un serio problema de insomnio —Bromeo el chico.

—¿Y tu no?

—Tenia el presentimiento de que estabas despierta.

—Me conoces bien.

Trixie se levanto, Eli se sentó junto a ella, ambos con muy poca distancia entre ellos.

—Siempre que venimos de algún lugar nuevo te quedas hasta tarde revisando lo que grabaste, no me extraña verte aquí.

Trixie rió por lo bajo— ¿Qué? ¿Estuviste observandome?

—Es difícil pasar desapercibido la única luz encendida dentro del refugio en plena noche —Volvio a bromear el chico.

—Sólo queria ver unos detalles más, no me hará nada.

—Pensé que estarías más cansada tras todo lo que hicimos en un día.

—¿Tú no lo estás?

—Me relaja estar contigo.

Eli trato de tomar su mano, pero la timidez le ganó echando sus planes para atrás, Trixie trato de no reir, en el otro mundo se tomaron de sus manos como si nada ¿y ahora le daba vergüenza? Los sentimientos del chico de verdad eran extraños. Trixie se animó a entrelazar sus dedos con los de Eli, sabiendo perfectamente que eso le ponía al chico los nervios de punta, pero ninguno de animo a decir nada.

—Me alegra haber vuelto —Murmuró Trixie con una sonrisa, apoyando su cabeza del hombro del chico sin levantar su mirada.

—A mi igual —Le respondio, aunque su voz sonara tranquila realmente sentia como de alguna forma su corazon se fuera a salir.

Es decir, era el momento perfecto ¿no? Anteriormente había tenido oportunidades como esas pero por contexto de diferentes situaciones no lo sintió apropiado ya que sería algo muy fuera de lugar.

La cabeza de Trixie sin embargo estaba en otro lado, le era reconfortante tenerlo ahí, poder sentirlo y oirle ¿qué pasaría si algo impidiese a Eli estar con ellos? ¿Seguirían siendo una banda? ¿Cómo seguiría su vida? El susto que se llevo su otra yo le afecto, fue como vivirlo en carne propia, y le desagradaba aquella sensación, no la quería en ella, simplemente quería estar con su líder, le daba igual cómo.

—Eli —Se animó a llamarle, sin moverse de su lugar.

—¿Si?

—¿Tu promesa de mantenerte vivo sigue en pie?

—Por el momento si, sigo vivo —Respondió con una pequeña risa.

—Recuerda mantenerla en pie ¿De acuerdo? —Le recordó la chica, aferrandose al agarre de su mano. Eli sonrió de lado.

—Te prometo no separarme de ti.

—Eso es nuevo jaja ¿No querrás decir del equipo?

—Es más una promesa entre tú y yo —Afirmó con cierta timidez.

Ante aquellas palabras le hicieron levantar la vista con cierta sorpresa, notando que la distancia entre sus rostros era corta, ambos se miraron unos segundos antes de que la chica, apenada, bajara la vista.

—Perdón, n-no había notado que... —Trato de alejarse, avergonzada.

—Trix.

El chico le llamó, colocando rápidamente su mano sobre la mejilla de la chica evitando que se alejara más, ahora quien tenía los nervios de punta era la pelirroja, quien en shock ante el nuevo acto por parte de su lider que la silencio por completo, sintió como sus mejillas comenzaban a arder. La tonta mirada por parte del chico la ponía más nerviosa, notó de inmediato que los ojos azules se desviaban ocasionalmente sobre sus labios.

—¿Si? —Alcanzó a preguntar tomando aire tratando de lucir lo más relajada posible, sentía como el Shane la acercaba y ella no opuso resistencia ¿ya mencioné que estaba nerviosa?

Un escandalozo ruido de ollas y sartenes cayendo los separó casi de inmediato, con sus mejillas a más no poder del ardor, Eli volteó en direccion hacia la cocina.

—Olvidé que Pronto es sonámbulo —Habló con cierto alivio al ver al topoide buscar algo para comer para después caminar de nuevo hacia su habitación. Agradeciendo a todo ser porque no les haya visto, aunque maldecia a cierto punto ya que a fin y al cabo le habian interrumpido su casi beso.

¿Y ahora cómo le miraba a la cara a Trixie después de intentar besarla?

El pensarlo sólo empeoraba su estado. Se animo a voltear en direccion hacia ella y apenas pudo reaccionar cuando la chica en un imprevisto planto sus labios sobre los de él dandole poco tiempo para reaccionar.

Trixie separó y bajó la mirada, no sabia que decir exactamente, pero podemos mencionar que la ansiedad de besar al chico la estaba carcomiendo hasta ese momento.

—¿S-Sabes? Ya es tarde, me voy a dormir —Habló rápidamente la chica levantándose de su lugar, no sin antes volver a plantar un beso en la mejilla del chico para asi irse casi corriendo a su habitación.

Eli, bueno, era otra historia.