La princesa en un intento de no caer dormida trato de organizar aquella pila de papeles y cartas que tenía abandonada desde hace unos días y no había tenido el tiempo de organizar, mejor dicho, no había tenido las ganas de hacerlo.

—¿Sigues despierta? —Le pregunto Kord ingresando a la oficina de la princesa.

—No puedo dormir, no sé a qué hora regresaran y debo estar despierta para recibirlos con su informe del lugar —Notifico mientras firmaba unos papeles—, sólo espero que el viaje haya valido la pena —Comento en un suspiro— ¿Twist ha dicho algo o aún no?

—Se rehusa a hablar, pero sigue completamente aislado en su celda —Informo el troll—, pero no vine a hablarte sobre él.

—¿Sucede algo? —Le preguntó dejando su oficio de lado para prestarle atención al troll.

—Si, bueno ¿Qué opinas de nuestras otras versiones? Digo, la verdad es bastante raro ver un doble exacto de si mismo pero a la vez tan diferente.

—La verdad me causa cierta envidia —Confesó, apoyando su espalda en el respaldar del asiento mientras de cruzaba de brazos—, mi otra yo tiene prácticamente la libertad que tanto anhelo, las creaciones de tu otro tú inspiraron a otros inventores a hacer lo mismo, Pronto sorprendentemente es de la realeza pero pudo escoger entre la corona y sus aventuras sin dejar de lado a su gente. Y no hablemos de Eli, él verdaderamente tiene madera de lider, lástima que el Eli que conocemos se niegue a aceptarlo.

—Y por lo que me conto Eli, ya sabes,  su historia ¿De verdad está todo bien entre ustedes? —Se atrevió a preguntar— sé que aquel incendio tuvo una importancia en ti.

Trixie tomó algo de aire— Lo mismo que le dije a él, es mucho para asimilar... ¿Por qué la pregunta?

—Le llevas la contraria más de lo normal, creo que por eso.

—Ah, si —Recordo brevemente la chica— supongo que alguien debe de  evitar que se lance al peligro cada vez que se le da la oportunidad.

—Tu haces lo mismo, si tú lo detienes a él ¿quién te detiene a ti?

Trixie estuvo a punto de contestar hasta que alguien más ingreso al lugar, era Eli.

—Ya regresaron —Anunció.

—¿Tan pronto?

Kord y Trixie intercambiaron miradas preocupantes, rápidamente se dirigieron al establo donde el grupo les aguardaba.

—¿Qué pasó? —Pregunto la princesa extrañada ante su temprana llegada.

—Tad. Eso paso —Hablo Kord lanzador.

—No sé cómo lo hizo, pero sabía que estabamos ahí —Completo la lanzadora.

—¿Lograron encontrar alguna pista antes de que los atraparan? —Preguntó Eli medieval.

—Creemos que algo, pero necesitaría que Kathe lo vea —Indico la pelirroja sacando su cámara, el grupo de ese mundo miro extrañado lo que traía entre sus manos.

——————

—Esta cosa es increible —Habló emocionada Khaterine.

—Sigo sin entender como funciona, pero se ve realmente útil —Comentó la princesa

—Es un cámara, a veces olvido que estamos en prácticamente otra época —Menciono la lanzadora.

—Pero es que está genial —Murmuro la de cabellos morados analizando con la mirada la "cámara".

—Volviendo al asunto, el libro al que... ¿cómo se dice? Esto, que se ve aqui pero que no esta aqui —Trato de explicar la princesa.

—Una foto.

—Eso, lo que hiciste. Al parecer es de un libro bastante antiguo, pero por el estado de las paginas se ve bien conservado ¿No le habras tomado otra "foto" a las demás páginas?

—Si lo hice —Garantizo la chica.

—¿Dónde están? —Pregunto la científica.

—Aquí.

La chica se acercó a la cientifica y deslizó el dedo sobre la pantalla pasando a la siguiente foto, dejando maravillada a las otra dos chicas.

—Creo que tomé las necesarias, de todos modos no logré leer nada de eso. Está en otro idioma.

—Si, tardaré un poco en descifrarlo, pero es un buen inicio. Podremos saber qué investigaba Tad —Garantizo la de cabellos morados.

—Ya es bastante tarde, y han hecho suficiente, si gustan, dejen que les brinde una habitación para descansar —Ofreció la princesa.

—¡Al fin Pronto dormirá como un rey! —Chillo el topoide— ¿Podemos comer algo también? Pronto tiene hambre desde que llegamos a este mundo.

—Como gusten.

—¡Oye! A Pronto nunca lo trataste así —Reclamo el otro topoide.

—Si vives aquí prácticamente.

Katherine se llevo la tableta de la lanzadora para analizar más a fondo aquel libro sumando lo que logró filmar del laboratorio.

Los demás por otro lado fueron a cenar, Pronto fue quien más abuso respecto a la comida y aunque su equipo tuvo que disculparse ante la actitud de su compañero la princesa les dijo que no se preocuparan por ello, de todos modos el Pronto que conocía también hacía las mismas gracias.

Luego de cenar, la princesa les guío cada uno a su habitación, que era propia cabe destacar. Para luego ir a la suya, más simplemente se quedó de pie frente a la puerta.

Tenía tanta dudas, pero no tenia ganas de hablarlas con cualquiera.

Por otro lado, con la lanzadora, digamos, aun no procesaba el tamaño de la habitación.

—Esto es más grande que la sala de nuestro refugio. No entiendo por qué es tan... gigante.

Sus babosas disfrutaban tranquilamente todo el espacio, por otro lado Trixie veía todo con mucha impresión, la cama era una matrimonial con sabanas blancas y verde pastel, había una alfombra redonda debajo de la cama color verde tambien pero con bordes dorados, una ventana gigante con un asiento en el pie de esta y un pequeño estante de libros a un costado.

Habia un armario, que por entonces estaba vacio, pero no dejaba de ser ciertamente inmenso teniendo en cuenta de que era para una sola persona, ni hablemos del baño.

Se termino por sentar en el medio de la cama, pero su tranquilidad no duró mucho ya que alguien había tocado.

—¿Puedo pasar? —Preguntó su otra yo, quien se asomaba por la puerta.

—Claro.

La chica se dirigio hacia donde estaba su otra yo, las babosas al notsr su presencia fueron con su dueña, la princesa seguía mirando con asombro a las pequeñas criaturas, las cuales le saludaban y sonreían.

—¿Sucede algo? —Pregunto la lanzadora.

—Tengo curiosidad —Confeso mientras se sentaba en el borde de la cama, su otra yo se levanto y sentó de piernas cruzadas frente a ella— sé que Eli ya me contó sobre estas cositas pero, sigue siendo impresionante el como algo tan pequeño posee gran poder.

—Lo mismo digo de tu Quetzal —Menciono la lanzadora.

—¿Hablas de Tornado? —Preguntó la princesa, la criatura al ser mencionada salió del cristal donde se resguardada y se poso en el hombro de su dueña.

—Si, yo también tengo una babosa llamada asi —Comento la chica, la pequeña babosa se asomo por el hombro de su lanzadora.

—Awws que linda.

Tornado, el acompañante de la princesa voló hasta la otra Trixie y se poso arriba de su cabeza, la babosa en cambio fue a manos de la princesa, quien le brindó carisias agradando a la pequeña criatura.

—Perdón, le gusta hacer eso, no sé por qué —Se disculpo la princesa

—No te preocupes, a mis babosas también les gusta mi cabello, se la pasan sobre mis coletas.

—Tornado también, le gusta revolotear entre las cosas —Comentó con una pequeña risa, observando como su Quetzal con sus alas trataba de despeinar a la lanzadora, la princesa por su parte bajo la mirada y acaricio a la babosa de color naranja—... ¿Que se siente? Ya sabes, vivir aventuras.

—¿A qué te refieres?

—Como sabrás, por ser la única heredera no se me permite salir del castillo sin supervición, por ende muy poco conozco de mis tierras.

—¿Ni siquiera una vez saliste? —Preguntó sorprendida.

—...Una vez, había escuchado que había un torneo, cada quien en su respectiva área podia participar, sea lanza, espada, arqueria y así. Había solicitado poder ir a competir pero no me dejaron; escapé y en el camino ciertamente me perdí ¿puedes creerlo? Quien gobierna nisiquiera sabe cuál es la dirección correcta —solto una risa al recordar su perdida en el bosque—... ahí fue donde conocí a Eli y Pronto, si bien aquel torneo terminó de mal en peor, Eli hizo lo posible para sacarme a escondidas y junto a Pronto fuimos a varios lugares, luego, se sumó Kord y desde entonces somos bastante cercanos.

—Con que así se conocieron... —Murmuro la lanzadora—, con nosotros fue algo similar, yo conocí a Eli tras salvarlo de un maleante.

—¿Qué? ¿En serio?

—Era un lanzador completamente inexperto, ni siquiera podia apuntar bien jaja —Rio tras recordar los primeros días de lanzador del Shane—, aunque debo admitir que después de todo, demostró tener talento.

—Yo nunca vi ese lado del Eli que conozco. Cuando nos encontramos, él ya era un excelente espadachín, de hecho fue él quien me enseñó a usar mi espada.

—¿No sabías antes?

—Mi arma como habrás visto es versátil, pero antes no sabía regular cuándo quería que fuera una espada o un arco, así que cada que cambiaba a espada quedaba indefensa. Pero él me enseño a emplear bien ambas armas y gracias al regulador de Kord ya puedo manejar a voluntad los cambios.

—Pensar que con nosotros fue al revés —Comentó con cierta gracia ante el cambio de papeles en aquella historia.

—Es raro.

—Mucho diría yo jaja.

—¿Por que siempre el tema de conversación termina en Eli? —Pregunto con cierta risa.

—Tal vez le guste protagonizar toda conversación —Bromeó la lanzadora.

—O algo más —Se atrevio a decir la princesa bajando la mirada con una sonrisa.

—Si, efectivamente —Respondió a la indirecta, riendo por lo bajo.

—¿No te ha dicho nada? —Pregunto curiosa por su relación.

—No pero, ¿Qué me dices del tuyo? Digo, tu Eli se ve con más intenciones de hacerlo que el que conozco.

—Aún no, supongo que tengo que seguir dándole tiempo. Tú tampoco te animas a dar el primer paso ¿verdad?

—Es divertido ver que piensa que no estamos enteradas.

—¿Verdad que si? Y para variar pone una cara de tonto cuando nos ve.

—¡Es demasiado obvio!

Ambas rieron ante lo dicho, si bien les era muy tierno el comportamiento de su respectivo chico hacia ellas, era tan obvio que sus sentimientos eran correspondidos que solo les quedaba esperar que se animara a decirlo, digamos que era su forma de darle el tiempo de armarse de valor, aunque en parte, no querian arruinar la ilusión de aquel chico de ojos azules confesandose.

—¿Qué pasará cuando nos vayamos? Digo ¿Qué pasará con Tad? —Preguntó la lanzadora.

—Según la información que pueda sacar Katherine de aquel artefacto tuyo, se decidirá lo que podremos hacer a nuestro alcance —Informo sin alguna duda la princesa, queriendo garantizar el regreso a casa de dus otros yo.

Trixie sabía perfectamente lo que era capaz de hacer, eso quedaba más que claro aplicando a su otra yo ¿sería correcto decir lo que quiere decir? No lo sabe, pero de algo está segura, de no hacerlo, implicaría involucrar a más y no desea eso ¿debería confiar en sí misma al respecto de la situación?

—...Oye, hay algo que debo decirte —Finalmente decidio hablar la lanzadora, tal vez se arrepienta, pero ya abrió la boca.

—¿Qué cosa?