Sin rastro

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Iris se despertó lentamente con un ruido rasposo inconsistente.

Trató de volver a dormirse, pero los problemas habituales que tenía al despertar se encontraron con ella, y un regreso a la inconsciencia la evadió.

La idea de que ni siquiera vería a los Dursley este verano, y espero que alguna vez volviera a animarla un poco mientras se frotaba la cara contra la almohada.

De mala gana, se levantó y se sentó cansada en el borde de su cama.

Su pequeña habitación era cálida y brillante. Solo lo había estado usando durante unos días, por lo que todavía era un poco espartano. El departamento que ella y Shirou estaban alquilando había sido amueblado, por lo que su habitación incluía una cama y un escritorio. Se las había arreglado para cubrir parte del espacio vacío de la pared con algunos de los carteles y parafernalia que había recibido inesperadamente de las Kanto Katanas. Su baúl estaba abierto, con algunos de sus contenidos cayendo al suelo, y Hedwig dormía profundamente en una percha pegada a su escritorio.

Ella sonrió a la habitación en general. No era permanente, ya que ella y Shirou solo estaban alquilando el lugar para el verano. Pero durante el tiempo que permaneció aquí, esta habitación era suya.

El rumor llegó de nuevo, e Iris salió de su habitación, buscando la fuente del disturbio.

Pasó por la habitación de Shirou y el baño mientras caminaba por el corto pasillo que conducía a la sala de estar.

"Buenos días, Shirou". Iris dijo adormilada, viendo a su compañera de piso sentada en el piso de la sala, mirando fijamente una tabla de madera.

"Buenas tardes, Iris". Shirou respondió distraídamente. "Hice el desayuno y el almuerzo, y las sobras están en la nevera".

Iris se frotó la cara y miró a su alrededor.

"Supongo que es bastante brillante por la mañana ... ¿En qué estás trabajando?"

Shirou levantó un cuchillo afilado del piso junto a él y lo arrastró hacia abajo por la madera, creando un ruido raspante familiar.

"Estoy trabajando para configurar un campo acotado". Finalmente dijo.

"¿Un qué?"

Shirou se animó y pareció darse cuenta de que tenía una audiencia.

Él suspiró ruidosamente, la miró y luego frunció el ceño.

"¿Me necesitas para lavar la ropa?" Preguntó.

Iris se miró a sí misma. Todavía llevaba los pantalones cortos cortos y la camiseta sin mangas que solía dormir durante las calurosas noches de verano.

"No. Solo quería averiguar qué estaba haciendo ese ruido áspero que me despertó".

"Lo siento." Shirou en realidad parecía avergonzada por haberla despertado a pesar de haber dormido tan tarde en el día. "Terminaré en un minuto, y puedes volver a dormir si quieres".

"Estoy levantado." Ella lo despidió. "Y me cambiaré de ropa una vez que me digas lo que estás haciendo".

Shirou frunció el ceño y arrugó la cara de una manera familiar que Iris comenzaba a asociar con Shirou debatiendo compartir un secreto.

"Un 'campo limitado'", comenzó Shirou, "es algo así como una barrera. Se puede configurar para hacer ciertas cosas dependiendo de la habilidad y el conocimiento de la persona que lo hace".

"¿Crees que necesitamos protección adicional?" Iris preguntó. "El agente de bienes raíces dijo que los apartamentos ya tenían los últimos y más grandes encantos de protección y antirrobo. Y no es como si los muggles en los vecindarios circundantes pudieran pasar los encantamientos que repelen a los muggles".

"Los campos acotados de defensa activa no son mi especialidad". Shirou dijo. "Y aunque diría que no hay demasiada preparación defensiva, esto es algo completamente diferente".

Se puso de pie y llevó la tabla de madera a la esquina de la habitación, donde un pequeño hilo colgaba del techo.

Iris siguió el hilo con los ojos, y notó que giraba hacia el techo y seguía el perímetro de la habitación, creando una caja en el techo, con un solo hilo cayendo en la esquina que Shirou ahora ocupaba.

Ató su madera hecha a mano al hilo y luego se concentró por un momento.

Iris sintió que el aire cambiaba, como si estuviera ligeramente cargado, antes de que volviera a la normalidad.

"Este campo", Shirou se volvió hacia ella, "limitará la propagación de los efectos mágicos y contendrá hechizos dentro de él. Se alimenta principalmente por el exceso de energía mágica de los hechizos, por lo que es bastante eficiente".

Los ojos de Iris se iluminaron.

"¿Eso significa que podremos practicar magia durante el verano con esto en su lugar?"

"Esa fue mi intención". Shirou asintió con la cabeza. "Pero el campo limitado es solo la mitad de la solución". Levantó la mano y las motas de luz se unieron en la forma familiar y malvada de Rule Breaker. "Esta es la otra mitad.

"Se coloca un hechizo de rastreo en todos los mágicos menores de edad en Gran Bretaña. Informa al Ministerio cada vez que suceden tipos específicos de magia en lugares cercanos a ellos. Dado que estamos en un complejo de apartamentos mágicos, cualquier informe enviado por nosotros debería ignorarse, pero nosotros puede usar Rule Breaker para eliminar el riesgo por completo ".

"¡Vamos a hacerlo!" Dijo Iris, emocionada por la idea de usar magia fuera de la escuela, aunque sus movimientos fueron cautelosos mientras se acercaba al arma desconcertante y a Shirou, quien lo sostenía.

De alguna manera, la hoja era hermosa a la vista, en muchas otras formas, extrañamente repugnante. Pero Iris siempre lo asociaría con el dolor y la sensación empalagosa que atravesó su cuerpo cuando un fragmento del alma de Voldemort fue expulsada de su cráneo.

"¿Dónde necesitas apuñalarme?" Iris dijo en broma cuando estaba dentro del rango de apuñalamiento.

"Necesitaré leer el encantamiento de rastreo". Shirou la ignoró y le tendió la mano. Ella lo entendió.

Inmediatamente, comenzó a sentir la sensación de hormigueo que estaba comenzando a asociar con la magia extranjera que entraba en contacto con la suya.

El hormigueo retrocedió, y Shirou levantó el cuchillo torcido para descansar sobre el dorso de su mano.

"Rompedor de reglas." Dijo en un tono sin sentido, lo que sonó a Iris como un hechizo, a pesar de ser dicho en inglés.

Bajó la hoja y la pinchó con la punta.

Una pequeña chispa sufrió por un momento en el punto donde la cuchilla se unió a su piel, e Iris sintió una sensación de picazón arrastrarse por su cuerpo.

La chispa y la sensación se desvanecieron, y Shirou retiró la hoja, y esta desapareció en motas de luz.

"Eso fue ..." comenzó Iris. "No es tan malo como esperaba".

"Por lo que entiendo, la reacción tiende a depender de la fuerza del hechizo que se rompe". Shirou explicó. "Pero, de nuevo, Rule Breaker puede ser bastante quisquilloso".

"¿No necesitas romper tu propio hechizo de rastreo?" Iris preguntó.

Shirou la miró por un segundo, luego abrió y cerró la boca.

"Ya rompió el mío". Explicó apresuradamente.

Ella puso los ojos en blanco.

Iris era buena para detectar mentirosos. Después de todo, ella había crecido con algunos de los mejores mentirosos del mundo.

Los Dursley lograron convencer a todos a su alrededor de que eran una familia normal, sana y cariñosa. Una mentira en la que todo el vecindario en el que había vivido parecía perpetuarse sobre sus propias familias. Una mentira que protegerían con sus vidas, al mismo tiempo que intentaban exponer a todos los demás en sus mentiras, si la cantidad de chismes obscenos que Iris había escuchado en su vida era algo que podía pasar.

Shirou no era Dursley. Quizás era lo opuesto a un Dursley, y quizás como efecto secundario, era un mentiroso terrible.

"Derecho." Ella lo reconoció. Shirou tenía secretos. Eso fue normal para el curso. Lograr que derramara todo era solo una cuestión de esperarlo. Fue terrible en mantenerlos por mucho tiempo. "¿Estamos bien entonces?"

Shirou movió su muñeca, y su varita saltó a su mano de la funda de varita que ella le había traído para Navidad.

" Lumos ", dijo, haciendo que una pequeña luz blanca apareciera al final de su varita.

Ambos miraron a su alrededor, esperando que sucediera algo.

Aurores para derribar las puertas. Agentes especiales del Ministerio Secreto para caer del techo. Tal vez un búho con una letra fuertemente redactada.

Nada.

" Nox ", dijo Shirou, matando la luz. "Parece que ya estamos listos".

Pero Iris ya estaba corriendo por el pasillo hacia su habitación.

Cogió su varita y la funda de su cama, luego comenzó a buscar en su baúl el libro de duelos que Shirou le había prestado.

No había esperado usarlo durante el verano, por lo que estaba enterrado, pero de repente se encontró con mucho tiempo para aprender algunos hechizos interesantes.