Capítulo 38 - Futuro (+18)


Advertencia de contenido: Este capítulo contiene relaciones sexuales explícitas, si no deseas leer este tipo de contenido, el capítulo que sigue (Capítulo 38 - Fututo (sin contenído explícito)) está censurado para que lo puedas leer sin problemas. Eso es todo, los dejo continuar y gracias por su atención xD.

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Los tres reyes se habían reunido por largo rato para acordar lo que sucedería con los reinos. La reina Tian LanMei había sido asesinada por órdenes de su hermano mayor, Tian Huo, y ellos lo habían asesinado a él, por lo tanto, ahora eran los conquistadores.

Pensando en todo esto, por supuesto, decidieron dividir una vez más todo el territorio, pero no sería algo inmediato. Lo que habían ideado en primer lugar era crear una hermandad, la cual no debía romperse. Los "Cinco reinos" pasarían a llamarse los "Tres reinos". Esa hermandad llevaría el nombre de su amado padre "Tian". Solo quedaba idear una manera de dividir el territorio de manera adecuada y cómoda para todos, cosa que no se podría hacer en solo un par de días.

También habían estado recibiendo información del reino Huo, este se había convertido en un humedal gigante, con grandes pastizales abandonados, bosques sin hojas y cementerios enormes. Aún no se había logrado investigar muy a fondo el territorio, apenas un par de pueblos. Las personas que vivían allí, y que habían estado dispuestas a hablar con los desconocidos, contaron algunas historias interesantes, aunque también terroríficas.

Si bien vivían en paz, debían seguir reglas muy rigurosas implantadas por Tian Huo, por ejemplo: "No cultivar sin el permiso del rey", "todo hijo varón, fuerte y capaz, deberá ofrecerse al rey para convertirse en soldado", "no salir de su pueblo natal", "no salir del reino bajo ningún concepto", entre otras. Por esta razón, la población era, en su mayoría, de ancianos y mujeres, si había algún hombre entre ellos, quizá tendría algún problema de salud, o solo había logrado escapar de la segunda regla.

Además de solucionar el tema del reino Huo, debían cuidar y ayudar a la gente de Tian. Había lugares devastados que necesitarían mucha ayuda, materiales, medicinas, etcétera. Por suerte y para tranquilidad del rey Tian LiuYun, los cultivadores de Tian ya habían recibido su parte de la recompensa, e incluso más.

Wen ShanShui y You YuMo, por su parte, solo quisieron vivir en paz. Ser libres por los campos del mundo y derrotar bestias donde las hubiera. You YuMo con descaro había pedido dinero: "Para nunca preocuparnos por la falta de alimento", aunque el trabajo que ellos tenían como cultivadores espirituales, ya les generaba ingresos muy buenos.

Yi Hen trabajaría con la realización de una nueva biblioteca, y al mismo tiempo, sería el maestro de Feng Baoshi, apoyándolo con temas importantes de su futuro puesto.

Chang Gao, junto a sus sirvientes, reconstruiría los pueblos que habían sido atacados, para esto y para mejorar la situación de todas aquellas personas que habían sobrevivido. Además, solicitó muchísimo dinero para donarlo.

Wen ShanShui y You YuMo comenzaron a viajar hacia el sur para realizar el ritual de matrimonio en el "Templo de la Montaña del Diamante", luego irían hacia el este. Es decir, al territorio del reino Yun, para luego dirigirse hacia Guang. Querían conocer la otra parte que no era conocida por nadie de Tian.

Con lo único que viajaban en ese entonces era con dinero, algo de comida y dos caballos que les habían regalado los soldados, esto había ocurrido justo antes de partir del palacio principal.

No obstante, ya no estaban en un pueblo ni en lo que quedaba de la capital, ahora estaban en medio de la nada, You YuMo miró hacia el cielo, con una felicidad evidente observó el campo y los bosques lejanos. Luego barrió su mirada hacia otro lugar, junto a él vio a Wen ShanShui, con quien quería estar para siempre, con quien compartiría días y noches de ahora en adelante, solo estar a su lado le generaba una felicidad indescriptible. Sintió que su corazón era recargado con mucha calidez. Él rio alegremente antes de hablar:

—Ya es muy tarde, descansemos en el siguiente pueblo. Mis piernas no soportarán más esta posición y tengo hambre, ¿qué dices?

—Está bien. —Wen ShanShui suspiró—. Si estás cansado, podemos parar a descansar aquí, no necesitas aguantar, ¿quieres que nos detengamos?

—No es necesario, ¿cuánto nos falta?

Los ojos de Wen ShanShui subieron como si quisiera calcular. Aunque, por no estar del todo seguro, sacó un mapa desde el interior de sus ropas, luego lo rotó un par de veces.

—No debería quedar demasiado camino, en cualquier momento deberíamos ver el pueblo —Wen ShanShui pestañeó con lentitud mientras analizaba el mapa con detenimiento—. El reino Guang y Feng son difíciles de rodear. Hay varias montañas que impiden el camino.

—¿Podemos entrar en las montañas luego? Quién sabe si encontramos algo interesante en ellas.

—Claro, iremos —accedió Wen ShanShui, dando palmaditas en el cabello del joven, luego observó hacia el frente, señaló—: Mira, estamos cerca.

Como si fuera un rayo, el rostro de You YuMo se movió hacia delante. Casi poniéndose de pie sobre el caballo. Estaban cerca, sus ojos brillaron.

—¡Por fin, comida! —Apresuró al caballo blanco, y este de inmediato relinchó bastante inconforme. A pesar de eso, galopó a gran velocidad.

Wen ShanShui dudó nervioso:

—¡Espera! ¿Por qué el apuro?

Detrás de You YuMo, Wen ShanShui había realizado justo la misma acción, aceleró el paso del negro animal, y este comenzó a correr en dirección al pequeño pueblo que se veía a la distancia.

Los caballos habían estado caminando y galopando durante más de cuatro híchen, ya estaban bastante fatigados. Ellos también necesitaban descanso, agua y alimento. Por suerte, no tardaron en encontrarles un refugio para pasar la noche. Resultaba que en las afueras del pueblo había un gran establo, el cual pertenecía a una posada que se ubicaba más al centro. Los viajeros que decidieran dejar a sus caballos allí debían, sí o sí, hospedarse en la posada antes mencionada. Al ver que no había un mejor lugar para dejar a los animales, ambos accedieron. No importaba qué tipo de posada fuera, mientras estuviera limpio y tranquilo, entonces estaba bien.

Luego de dejar a los animales, You YuMo y Wen ShanShui continuaron su camino a pie. Era muy tarde ya. El cielo estaba de color naranja y azul, preparado para iluminar el mundo con estrellas. Ambos buscaron la posada para quedarse por la noche, y como era de esperarse, You YuMo primero recorrió todos los puestos callejeros, como si se hubiera olvidado que tenía hambre. Observó y paseó junto a Wen ShanShui, a veces tomados de las manos, a veces Wen ShanShui corriendo por detrás para no perderlo. Había sido una tarde agotadora. Solo luego de un buen rato, habiéndose aburrido un poco de ver casi lo mismo, entraron a la posada que habían escogido con anterioridad.

Era una posada algo vieja, pero ofrecía todos los servicios esenciales, incluso tenían el agua caliente que a You YuMo tanto le gustaba, claro que les servía para quedarse.

Por supuesto, quien pagó y habló con la recepción de la entrada fue Wen ShanShui.

La habitación era bastante buena, tenía paredes gruesas, quizá era una construcción pensada en ser cómoda para los viajeros que buscaban un descanso profundo. Aunque por fuera se viera algo gastada, por dentro en verdad no estaba mal.

—Cultivadores, les dejaré la cena justo aquí —dijo una señora desde afuera.

Wen ShanShui estaba con algunos papeles sobre la mesa, mientras You YuMo solo estaba recostado reflexionando en lo que harían al día siguiente. Al escuchar la voz desde el exterior de la habitación, Wen ShanShui contestó poniéndose de pie.

—Bien, ahora voy. —Antes de abrir la puerta, a la mente le llegaron algunos recuerdos, sonrió—. Esta vez, espero que nadie detenga la puerta para contar una escalofriante historia.

You YuMo comprendió de inmediato, sonrió con ambas cejas curvadas hacia abajo.

—No hay personas desaparecidas aquí. Hoy podemos descansar tranquilos.

Wen ShanShui se volteó con una mirada calmada y abrió la puerta. La comida era bastante, el vapor salía desde ella, estaba muy caliente y olía muy bien.

Tomó esa bandeja y agradeció. Cuando cerró la puerta, You YuMo logró visualizar toda esa comida, parecía querer devorarla solo con los ojos.

—Estará caliente, sopla bien antes —le aconsejó Wen ShanShui mientras colocaba la fuente en la mesa ratonera.

Transcurrió un tiempo, la conversación se había vuelto casual como solían ser cuando eran discípulo y maestro.

You YuMo volvía a pedir que Wen ShanShui le enseñara a crear más sellos y talismanes avanzados, además, ambos pensaron en cómo llamar a los nuevos caballos que les habían entregado. Habían sido escogidos justo para ellos, y entregados como agradecimiento.

Todo era tranquilo, todo estaría bien ahora, podían comer en paz y descansar.

Luego de haber terminado de comer, You YuMo recogió las cosas y las volvió a dejar afuera de la habitación, para que estuvieran al alcance en el momento que las fueran a buscar.

—Wen ShanShui, vamos a bañarnos juntos —propuso con fingida ternura e inocencia.

—¿Qué?

—¿No quieres?

—N-no es que no quiera. Sí quiero... Es solo que...

Aún no habían estado así de íntimos, sin ropa, en la misma bañera y rozando sus pieles. Wen ShanShui dudó de su propio control, ¿cuáles eran las intenciones de su ex discípulo? ¿Y si You YuMo no quería nada más que un simple baño juntos? Sus manos temblaron y el tono de su voz salió nervioso.

—Yo... —intentó acomodar su voz, pero solo lograba arruinarla aún más, por lo que suspiró y entró en razón—. ¿Está bien eso? Si para ti está bien, entonces no voy a negarme.

—Claro que sí, ¿acaso hay algo que no me puedas mostrar? Cabemos los dos ahí dentro, no pasa nada, no me quiero bañar solo y es difícil limpiar mi espalda, ¿qué dices? —preguntó con mucha felicidad en su tono.

Wen ShanShui volvió a mirarlo indeciso sin poder rechazar la tierna petición, al final aceptó.

You YuMo formó una expresión ganadora y jaló del brazo de Wen ShanShui, dirigiéndolo hacia el baño.

El agua era climatizada, eso era algo que You YuMo agradecía de todo corazón. Si la gente hiciera una lista de las cosas favoritas de You YuMo, la primera sería Wen ShanShui, la segunda los duraznos, y la tercera un buen baño de agua caliente.

You YuMo fue el primero en quitarse la ropa, quedando solo con una toalla en su cintura, luego, observó a un Wen ShanShui todavía indeciso en sus movimientos, por dentro se rio. ¿Wen ShanShui era más inocente de lo que se imaginaba? Se acercó a él y lo abrazó de improviso.

—¿Estás bien? ¿Quizás estás cansado? Si no quieres, puedes ir a dormir primero.

Ese abrazo no iba con segundas intenciones, solo quería transmitir tranquilidad, afecto y comprensión, y eso fue lo que llegó. Al sentir todo este calor, Wen ShanShui besó con ternura una de las mejillas del joven.

—No pasa nada, solo estaba pensando demasiado, tomemos un baño juntos.

You YuMo asintió sonriente y dejó el abrazo para dejarlo continuar.

El mayor se sacó su ropa superior e inferior, colocando también una toalla en su cadera, dejando ver todo el entrenamiento que tenía ese cuerpo. Wen ShanShui era en verdad algo que admirar, estaba muy bien entrenado. No era demasiado musculoso y tampoco demasiado delgado, era pálido como la porcelana, sus músculos eran marcados, sin dudas el resultado de alguien que entrena a diario y cuida su alimentación, además de su mente y espíritu. El joven frente a él no se contuvo para observar cada lugar, rara vez veía el cuerpo de su maestro, incluso desde que se habían convertido en pareja, nunca lo había visto con tanto detalle.

You YuMo parecía muy feliz, aunque a la vez sentía una picazón extraña recorrer todo su cuerpo. De la nada, Wen ShanShui lo había comenzado a observar entristecido, ¿qué pasaba? El joven se observó el lugar a donde el hombre miraba y, como era de esperarse, miraba hacia esa cicatriz que tenía en su pecho.

—Esta es... de aquella vez. —Se entristeció Wen ShanShui.

Con cuidado, como si esa marca se pudiera romper o volver a abrir, se acercó y la tocó con suavidad.

No era nada extraño que el hombre se sintiera culpable, You YuMo lo sabía bien, podía notarlo solo con verlo un poco. Ese era el mismo rostro que había puesto la primera vez, aquella ocasión cuando llegó a la academia hacía mucho más de un año.

—Sí, es la cicatriz que más cariño le tengo. Es mía, por salvar a la persona que amo ahora mismo.

Wen ShanShui sonrió con dulzura y lo abrazó.

—Te amo, You YuMo.

—Me lo recuerdas a menudo.

—Lo siento, cuando siento que debo decirlo, tan solo lo digo. Te amo demasiado. —Apretujó una vez más al notar que el joven devolvía el gesto.

—Está bien, dilo las veces que quieras. Me gusta eso. —Sonrió pegándose aún más.

Su voz era un poco temblorosa, quería corresponder a todo, caricias, abrazos, todo. Lo que fuera de esta persona, quería aceptarlo.

Los pechos de ambos estuvieron juntos el uno contra el otro por un rato, el latir de sus corazones estaban conectados. You YuMo, con descaro, comenzó a frotar su mano en la espalda de Wen ShanShui. Realizó movimientos suaves desde la nuca hasta la espalda baja.

—¿Qué haces?

—Toco tu espalda, es grande, suave y firme. Me gusta. —You YuMo sonrió burlonamente, en realidad quería provocar al hombre.

Como era lógico, Wen ShanShui no soportó las caricias despiadadas de You YuMo. Tomó ambas muñecas con una mano y lo llevó hasta dar con la pared y lo miró con ojos serios. Luego de acorralarlo y cruzar miradas besó sus labios, cosa que no estaban acostumbrados a hacer todavía. You YuMo se sintió debilitado al instante, de manera pausada fue deslizándose junto a Wen ShanShui hasta quedar arrodillados en el suelo. La posición no era muy cómoda, por lo que sin separar el beso, Wen ShanShui lo tumbó hacia un costado, teniendo cuidado en no golpearlo.

Ese fue realmente un beso prolongado, You YuMo jadeó en busca de aire, pero ya toda su sangre estaba hirviendo. ¿Por qué Wen ShanShui se detenía? Sin tener vergüenza alguna frotó sus manos por el pecho del otro, luego descendió rozando esa hermosa piel hasta llegar al abdomen.

Wen ShanShui no contestó con ningún movimiento, solo miró de manera fija hacia el joven que tenía por debajo, haciendo un tic involuntario con sus cejas.

You YuMo también lo observó a los ojos, estaba tembloroso, nunca había hecho algo así en toda su vida, sin embargo, tenía repentinas oleadas de valor como para hacer ese tipo de cosas. Sujetó las caderas de Wen ShanShui y lo presionó hacia él de un solo movimiento.

Wen ShanShui exhaló aire y apoyó sus codos en el suelo, como si estuviera acorralando al joven debajo de él. Su respiración estaba aumentando poco a poco, además, comenzaba a sentir cómo su miembro inferior ahora reaccionaba gracias al contacto. Contempló la mirada pícara del joven por un momento más y volvió a subir sus caderas. Quedando de igual modo sobre él.

—¿Cómo es que se te ocurren esas ideas? —preguntó Wen ShanShui.

You YuMo notó que la respiración de su pareja estaba algo entrecortada y le sonrió.

—¿Hace cuánto piensas que he estado esperando para que me toques un poco? No quiero que te contengas conmigo, ni por un segundo. Al parecer, si no comienzo yo, tú no lo harás.

Con una sonrisa provocadora, You YuMo apoyó un codo en el suelo para elevarse, con su otra mano enterró sus dedos en el cabello de Wen ShanShui, con la intención de acercarlo con lentitud hacia abajo junto a un beso. Cuando su espalda por fin llegó al suelo, lamió y mordió el labio inferior ajeno.

Mientras, Wen ShanShui parecía contener sus impulsos, o quizás solo estaba esperando a ver que más hacía el joven a continuación.

Buscando alguna reacción, una de las rodillas de You YuMo se atrevió a frotarse lenta pero de manera continua en el miembro de Wen ShanShui.

Esto lo hizo soltar un fuerte jadeo, bajó su cabeza y comenzó a besar a You YuMo en su cuello, luego, un poco más despacio, bajó hasta el pecho, mordisqueando de vez en cuando los puntos rosa que sobresalían de allí.

A You YuMo le recorrió una extraña sensación por todo el cuerpo, su espalda no pudo evitar curvarse, tensándose un poco. Luego de algunos juegos más se dejó caer. Apretó sus labios como si quisiera sellarlos, aunque en realidad solo estaba conteniendo sus palabras, ¿Wen ShanShui solo iba a jugar así? ¿Acaso no se había explicado bien?

El joven recurrió a ser más directo, si no entendía con palabras, entonces las acciones estaban bien.

De manera veloz, You YuMo desató la toalla de la cadera del otro, después hizo lo mismo con la suya. Las pupilas de Wen ShanShui se encogieron, no obstante, You YuMo fue más rápido y frotó ambos miembros al mismo tiempo.

—No, si me tocas así... ¿En verdad quieres que me vuelva loco?

—Está bien, tú puedes tocar donde quieras también. Ya te lo dije, no quiero que tú...

Sus palabras fueron silenciadas por otro beso acompañado de un mordisco.

—Como quieras entonces.

La mano del hombre se acercó para ayudar a You YuMo a frotar, los movimientos fueron lentos al principio, luego fueron acelerados.

Estuvieron juntos de esta manera por un rato, hasta que por fin You YuMo jadeó con fuerza primero.

—¿Ya estás? —preguntó Wen ShanShui al oído.

—Más rápido... —You YuMo parecía sentirse fuera de este mundo, hasta que un gemido que sopló en su oreja lo hizo volver a la realidad.

Su mano se había casi dejado de mover, era Wen ShanShui quien la sostenía firme mientras frotaba allí abajo. El hombre de ojos grises lo observó, ambos estaban al límite, por lo que el movimiento final fue rápido, y con él, liberaron el placer al mismo tiempo.

Ambos respiraron con dificultad, aun así, ninguno quería terminar allí. You YuMo lo abrazó, esta era la primera vez que hacía algo como eso, era la primera vez que demostraba cuanto amaba a alguien, que se entregaba por completo, no sabía qué era correcto decir, solo sabía que deseaba mucho más de esa persona.

—¿Por qué no seguimos hasta el final?

Ante esa declaración atrevida, Wen ShanShui se sobresaltó, sus cejas se fruncieron un poco, sus orejas y mejillas se enrojecieron. You YuMo no quería solo besos y pequeños juegos, si pedía ir hasta el final, ¿cómo podía rechazarlo? Ya de por sí era difícil contenerse, por lo que, con este presente ante él, ya no pudo hacerlo; era como si un bloqueo en su interior hubiera sido liberado. Ya no había manera de frenar el deseo contenido desde hace mucho tiempo atrás.

Wen ShanShui sonrió y besó una vez más al chico, solo que esta vez fue uno aún más profundo que todas las veces anteriores. El rostro de You YuMo era seductor hasta la muerte, sus palabras eran desvergonzadas y sus movimientos provocadores, ¿cómo no se había dado cuenta de sus verdaderos deseos? Había intentado ser paciente, mas, ¿acaso You YuMo se lo había pedido? Su cuerpo siempre reaccionaba de manera impulsiva cuando se trataba de él. Quería cuidarlo, no podía herirlo y por eso cuidaba de sus acciones, pero ahora era diferente.

—Recuerda que fuiste tú el que lo pidió. Esto puede doler, ¿en verdad estás preparado?

—Aún no sé qué estás esperando —dijo en tono tierno e impaciente, acercándose a la oreja del hombre, susurró—: Recuerda que también soy un hombre. Sé dónde se siente bien. —Al decir estas palabras, You YuMo llevó una mano de Wen ShanShui a su parte baja—. ¿Tienes alguna otra duda de cómo hacerlo?

Wen ShanShui ya estaba harto de esas burlas, con fuerza se colocó en medio de las piernas de You YuMo, abriéndolas de par en par, dejando al joven expuesto a él.

El joven aceptó feliz el agarre brusco de Wen ShanShui, levantó sus piernas y con ellas abrazó las fuertes caderas.

—¿Te parece bien hacer esto con un discípulo, maestro Wen TianZe? —se burló todavía más.

Wen ShanShui ignoró el comentario y besó sus labios para silenciarlo. Mientras, por debajo, utilizó lo que quedaba del líquido blancuzco para introducir uno de sus dedos, masajeando con lentitud el interior de You YuMo.

El joven de ojos esmeraldas se separó los humedecidos labios, una electricidad había recorrido toda su columna vertebral y ahora tenía repentinos espasmos. Su nuez de adán subió y bajó, eso no era algo que esperaba de su cuerpo.

—Solo ve... despacio... —dijo aguantando un poco la incomodidad del dedo—. Dime... ShanShui, ¿De dónde aprendiste... algo como esto? ¿Quieres saber cómo lo averigüé yo? ¿Quieres? —preguntó con provocación.

Antes de terminar su pregunta, otro dedo fue introducido, provocando que sus palabras se entrecortaran. Ya le dificultaba un poco la respiración y la sensación era algo incómoda, pero no importaba, inhaló de manera entrecortada para recuperar aire mientras apretaba uno de los brazos de Wen ShanShui.

La mirada del hombre de ojos grises se había vuelto algo burlona también, al mismo tiempo que se acercaba a la cara de You YuMo, contestó:

—Te daré una pista. ¿Cuánto tiempo crees que esperé a que me dejaras tocarte? ¿Hace cuánto tiempo me has gustado tanto?

You YuMo se puso nervioso y se ruborizó por completo, en verdad no sabía hace cuanto Wen ShanShui estaba interesado en él, ¿por qué ahora lo hacía sonar como si hubiera sido hace demasiado tiempo? ¿Por qué parecía como si Wen ShanShui se hubiera contenido desde hace quién sabe cuanto?

—Tú... Yo... ¿Hace cuánto tiempo tú...?

Wen ShanShui no contestó, solo le sonrió con ternura, apoyó su codo en el suelo de madera y levantó el mentón de You YuMo con su mano disponible. Luego lo besó con delicadeza.

Esta vez, You YuMo se acercó más, con ambas manos tomó a Wen ShanShui por detrás de la cabeza y abrió más sus labios, permitiendo que sus lenguas se entrelazaran y se sintieran aún más conectados que antes. ¿Hacía cuanto Wen ShanShui sentía esos sentimientos por él? ¿Por qué nunca se fijó un poco más en el hombre que siempre lo acompañaba? Tal vez se hubiera dado cuenta, tal vez hasta él mismo se hubiera percatado de sus propios sentimientos. Se sentía decepcionado de sí mismo. Se sentía un tonto, sabía que amaba a Wen ShanShui hacía mucho, mucho tiempo, ¿eso quería decir que si lo hubiera mencionado, lo podría haber conseguido antes?

«Qué impotencia, si me hubiera dado cuenta con anterioridad, hubiéramos ahorrado varias situaciones dolorosas, celos, incluso... podríamos...».

Mientras el beso continuaba, Wen ShanShui frotaba, introducía y movía sus dedos dentro del muchacho para acostumbrar la zona como debía. Aunque sabía como hacerlo, todavía era la primera vez que lo hacía.

Ambos alejaron un poco sus labios, de allí, algo de saliva se escapó entre las comisuras de You YuMo, bajando con lentitud por sus mejillas.

La nuez de adán de Wen ShanShui subió y bajó, ver a You YuMo en ese estado lo estaba enloqueciendo. Se acercó un poco más y limpió su rostro, ambos se miraron un segundo con los ojos entrecerrados mientras que Wen ShanShui sumaba un tercer dedo.

Al sentir esta sensación, You YuMo cerró los ojos con fuerza, lo envolvió con otro fuerte abrazo y gimió con nerviosismo.

Dejó caer sus piernas a los costados, curvando su espalda a medida que Wen ShanShui besaba y mordía su cuello y clavículas.

—ShanShui... se siente un poco extraño ahí abajo... es... —Se estremeció contrayendo un poco su abdomen, luego expresó con dificultad. —No puedo explicarlo...

Antes de poder terminar, algo más grande tocó la entrada, era como algo amenazante, el doble o triple de grande de lo que había antes allí.

—Voy a entrar, dime si duele... —susurró al oído.

El miembro estaba mojado, duro y caliente, You YuMo comenzó a temblar, ¿en serio entraría? Era muy diferente aprender en libros que hacerlo en realidad, ni él mismo lo había hecho con sus dedos antes, solo tenía la teoría. Quería golpearse la cara, ¿a dónde se había ido toda su confianza? ¿Por qué no podía controlar sus reacciones?

You YuMo no habló, abrazó al hombre por el cuello y cerró con fuerza sus ojos.

Con esto, Wen ShanShui sintió su corazón explotar. «Eres tan lindo, no puedo dejarte», de inmediato ese miembro caliente comenzó a introducirse en su cuerpo, poco a poco, con cuidado.

De inmediato, You YuMo tiró la cabeza hacia atrás, ese objeto se había introducido hasta casi la mitad, sin siquiera una pausa.

Su respiración salía con dificultad y sus gemidos se producían sin quererlo.

—Sh-ShanShui... No puedo con eso... es mucho... Ve más despacio —You YuMo sintió que sus caderas subieron y bajaron de manera involuntaria una vez, pero en realidad había sido otro empujón por parte del invasor.

Por la pérdida de fuerza soltó el fuerte agarre que abrazaba al hombre, cayendo al suelo sin poder hacer más que aceptar y aguantar algunos suaves movimientos.

Wen ShanShui jadeaba y respiraba con mucha irregularidad. Los quejidos de You YuMo solo lo provocaban, solo que, al ver que las lágrimas salían desde el rostro del joven, frenó sus movimientos. No había ingresado un poco más que antes, y You YuMo ya estaba en este estado, ¿debía parar ahí?

—You YuMo, ¿te duele mucho? ¿Quieres que me detenga? Pararé cuando me lo digas.

Su mirada estaba hecha un lío al igual que sus cabellos, el rostro estaba rojo y con algunas lágrimas resbalándose por las mejillas. Se acercó para analizarlo con más cuidado, estaba apretando los labios mientras que cerraba con fuerza sus ojos. Lo besó en una de sus mejillas para intentar relajar sus músculos, no sabía qué más hacer. Su miembro estaba todavía dentro y su cuerpo pedía seguir, no obstante, su control fue mayor.

—Lo siento... No quiero que te duela... Mírame... —susurró al oído.

You YuMo lo miró lleno de lágrimas. Al mirar hacia arriba, en esa posición, Wen ShanShui era lo único que podía ver sobre él, sintió una profunda felicidad en su corazón al notar lo tierno y preocupado que se veía con esos ojos. Estiró sus brazos y cepilló el alborotado cabello largo y negro de Wen ShanShui.

—Está bien, me duele, pero... Me gusta... Si eres tú quien lo hace, entonces está bien. Yo te amo y quiero hacer esto siempre, solo contigo. —Suspiró—. Es la primera vez que alguien me toca así, es por eso que duele, estaré bien. Me acostumbraré. Por favor, no te detengas. ¿Está bien? —dijo acariciando y ahuecando las mejillas ajenas con sus dos manos.

You YuMo apenas podía hablar por el objeto que parecía revolver y perforar sus entrañas, sin embargo, su mente se calmó debido a que sus sentimientos fueron transmitidos adecuadamente.

Wen ShanShui asintió con las comisuras de sus labios curvadas levemente hacia arriba, volvió a embestir para ingresar por completo, luego de entrar en lo profundo, salió con lentitud, para luego arremeter con fuerza de nuevo.

El sonido de chapoteos parecía volverlos locos. Wen ShanShui hizo estos movimientos por un rato mientras You YuMo gemía y apretaba los dedos de sus pies con fuerza. Sus manos ahora se aferraban a la espalda del hombre sin intención de soltarlo.

De repente, una sensación muy diferente lo hizo temblar sin control.

—ShanShui... Si lo haces de esa manera no duele tanto, justo ahí se siente diferente.

—¿Es aquí? —Empujó con fuerza—. Lo estuve buscando, estabas tan apretado que era difícil, ya ahora es diferente. —Sonrió victorioso.

El joven gimió otra vez, su cuello se movió hacia atrás, aunque claro, sus caderas hicieron lo contrario. Parecía como si no les perteneciera, como si tuvieran vida propia.

—P-pero... Despacio... —tartamudeó.

—Tú... te estás moviendo por tu cuenta. Justo ahora, eres tú el que se está moviendo. ¿Te gusta esto? Así... de esta manera... —Volvió a embestir quedando dentro por completo, golpeando justo en el punto que por fin había encontrado.

Al mirar aún mejor, Wen ShanShui sonrió, en verdad las caderas de You YuMo se movían ayudando a sus estocadas. Además, sus piernas lo apretaban con fuerza, en este momento sería incapaz de liberarse de allí si lo quisiera.

—¿No lo haces a propósito, verdad? ¿Sabes lo que tu cuerpo está haciendo ahora mismo?

—Espera... —sollozó por el placer. Agarró con fuerza los brazos de Wen ShanShui y los presionó—. Hazlo más suave... Es muy grande, me voy a romper...

Las palabras de You YuMo consiguieron que Wen ShanShui se ruborizara aún más, sintió su corazón bombear a una velocidad increíble. Su sangre hervía, todo era un caos, incluso su respiración se había vuelto más acelerada.

Junto a sus movimientos podía apreciar las expresiones de You YuMo, ya no parecía sufrir, parecía que en verdad lo disfrutaba.

—ShanShui... Ya no puedo más... Si sigues así voy a explotar. De verdad voy a explotar.

El mayor continuó con los movimientos, solo que esta vez apoyó un codo en el suelo para estar más cerca, con su otra mano sostuvo de cerca la cadera ajena, luego lo besó.

Por otro lado, You YuMo recibía oleadas de sensaciones, las corrientes de electricidad que hacían doler sus caderas no cesaban, apretaba y rasguñaba la espalda y brazos del hombre sin darse cuenta. Respiraban sincronizados a medida que los movimientos se volvían más rápidos y ágiles.

—You YuMo... Yo... Te amo —susurró al oído—. No podría seguir sin ti. En verdad, créeme, no podría.

Esas palabras sinceras llegaron al corazón del joven, claro que entendía ese sentimiento, claro que tampoco soportaría perderlo. Sus lágrimas cayeron, pero no eran de dolor, You YuMo se sentía la persona más afortunada del mundo. Solo con tener a alguien a quien amar y ser amado de la misma forma, lo era todo, no necesitaba más que a ese hombre en su vida.

—You YuMo... Ya no puedo... No puedo contenerlo... —advirtió, jadeando tras varias estocadas que no se detenían.

You YuMo reaccionó de inmediato, sabía lo que pasaría a continuación y presionó su zona baja con habilidad y movió sus caderas. Wen ShanShui no se quitó de allí dentro debido a esa presión, por esa razón, no pudo evitar soltar todo su líquido dentro. Al mismo tiempo, su abdomen había sido salpicado y mojado por el líquido de su pareja.

Ambos solo sintieron como cada nervio de su cuerpo se volvía placer. Sus mentes no tenían espacio para pensar en otra cosa más que en el otro, sus corazones latían tan fuerte que creían poder escucharlos, todo en ellos era un caos.

De inmediato, You YuMo abrazó a Wen ShanShui, quien se dejó caer sobre su pecho y besó el recodo de su cuello.

—Estás loco... debes sacar eso de ahí dentro.

Ambos intentaban recomponer su respiración, había demasiado sudor y líquido blanco que caía de sus cuerpos. Era todo un desastre.

Cuando You YuMo recuperó algo de su aliento, contestó:

—Yo quería lo de Wen ShanShui dentro de mí. Déjame ser egoísta una vez... eres mío —rio con burla en sus brazos.

—Luego te arrepentirás.

—No lo haré, nunca lo haría.

—Si dices esas cosas de manera tan deliberada, no te podré dejar ir hasta que llegue la mañana...

—Pues eso está bien para mí. Podemos continuar cuanto quieras.

Solo unas pocas palabras habían avivado las llamas en Wen ShanShui. You YuMo sintió que el miembro comenzaba a agrandarse de nuevo, solo que esta vez, más grande que antes, ¿eso era acaso posible? No había dudas, Wen ShanShui se preparaba para otra ronda más.

El más joven no sabía si sentirse feliz o un poco asustado. Sin embargo, sabía que su cuerpo tampoco quería terminar allí, incluso si estaba adolorido y cansado, todo en él cosquilleaba deseando más. Observó al hombre que se había incorporado de nuevo, esos ojos rebosaban con determinación y anhelo.

Algo le había quedado claro, eso no acabaría pronto.

—¿Quieres seguir? ¿No es suficiente por hoy, ShanShui? —bromeó con una sonrisa seductora y un movimiento de cadera.

Wen ShanShui se dio cuenta de que You YuMo solo lo estaba provocando y volvió a embestir sin esperar nada más.

—Nunca es suficiente si se trata de ti.

—¡Espera! De verdad voy a morir. Despacio, despacio... maestro Wen TianZe, ten piedad, este discípulo está cansado.

Con esas palabras, You YuMo consiguió prender una llama en el interior de Wen ShanShui a un nivel que ni él mismo conocía. El miembro volvió a crecer incluso más, por lo que You YuMo se impactó y sus pupilas se contrajeron, ¿era posible que eso creciera tanto? Ahora estaba incluso más profundo que en cualquier estocada anterior. ¡Se estaba arrepintiendo de sus palabras!

Apretó sus labios con fuerza, sin embargo, no quería arrepentirse, estaba negado a hacer eso.

—Es... Muy bueno... —No quería admitir que a veces dolía, pero las lágrimas volvieron a salir por el dolor y el placer. Era inevitable, su cuerpo reaccionaba de esa manera y ese tamaño dentro había sido provocado por sus palabras, no iba a quejarse de nada o moriría de vergüenza.

Wen ShanShui dirigió su mirada hacia él con lentitud.

—No vuelvas a llamarme así, ya no soy tu maestro —jadeó e intentó respirar, era difícil controlar algo como eso, luego, embistió con un fuerte golpe para entrar otra vez.

You YuMo lo agarró con más fuerza, rasguñó su espalda y apretó fuerte los dientes.

—L-lo siento, lo siento... Está bien... Aun así...

Wen ShanShui no dejó que terminara, besó esos labios atrevidos y descontrolados para silenciarlos una y otra vez, incluso esta vez los mordió para evitar que hablara.

—No sabes cuándo parar de hablar... Nunca supiste evitar los problemas, solo buscarlos —jadeó, siempre hablando con una voz ronca—. Si vuelves a llamarme así... donde sea que estemos... te morderé esa boca... tantas veces como sea necesario.

You YuMo lo miró emocionado, y aunque tenía terribles dolores en las caderas, solo quería seguir de esa manera por mucho rato más.

—Para mí... Eso no es una amenaza...

Wen ShanShui se rio con calidez muy cerca de la oreja.

—No es una amenaza, es una advertencia.

Cuando Wen ShanShui volvió a incorporarse para continuar con sus movimientos. You YuMo sintió una quemazón en la frente; sin embargo, gracias a la situación actual de su cuerpo no se podía imaginar lo que estaba pasando. Por otro lado, Wen ShanShui sí que logró ver ese momento, sonriente, notó esa última marca roja desaparecer desde arriba. Sonrió y besó con ternura ese lugar.

—Te amo.


Fin capítulo 38.


¡CONTINUARÁ EN ESPADAS DEL FUEGO!


 ¡NOS VEMOS PRONTO <3!


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¡Holaaa! ¡Ahora sí! Terminé de publicar Espadas del Cielo 😭💖

Me siento muy feliz de que hayan leído hasta aquí, espero que hayan disfrutado de esta historia, que por cierto, esto no se queda así, ya estoy trabajando con "Espadas del Fuego" que será una continuación de este libro, también explicaré algunas cosillas que quedaron en el aire.

Pero bueno, hasta aquí llega Espadas del Cielo. He puesto mucho esfuerzo en esta obra y mucho amor, de verdad espero que la hayan disfrutado, que ese es mi mayor objetivo, haber sacado al menos una sonrisa.

¡Muchísimas gracias por su apoyo y por leer! ¡Hasta la próxima! 💖

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