Capítulo 9

Akutagawa llegaba temprano a la casa de los gemelos, Momo iba con un vestido de princesa, quería llevarlos a comer para celebrar. Tocó varias veces pero nadie respondió, así que uso su llave extra. Entró pero ninguno de los dos estaba. Decidió llamar a Toru quien era el que se la pasaba en el teléfono.

El azabache contestó rápido — Akutagawa, ¿ya despertaste?

— si, estoy en su casa ¿donde están?

— ah lo siento, anoche volvimos con papá

— ah, cierto. Me olvide de eso por completo. ¿Están disponibles? Momo

— si, si, Momo. Claro, te envío la dirección

Colgaron y el azabache miró la dirección — esto... es un barrio más adinerado que el mío — pronunció molesto — maldito Jinko, debió decirme que era tan rico.

El azabache se marchó del departamento y fue a la dirección designada

Le dejaron pasar rápidamente, Tanizaki miró aquella casa — es más grande que su casa jefe

— solo conduce — pronunció molesto. Momo jugaba con un tigre de peluche.

En la puerta fue recibido por un chico de cabello blanco. — el señor Akutagawa, bienvenido — mencionó sonriente. — todos están en el comedor, lo llevaré

El azabache siguió al joven. Llegó al comedor topándose con Chuuya, y Dazai. Quienes también desayunaban con los gemelos y Tatsuhiko — Mr. Akutagawa, gracias por acompañarnos — pronunció el albino mayor

— Akutagawa, que bueno que viniste — dijo Dazai — oficialmente estás divorciado ¿no?

— así es — Atsushi se había acercado para tomar a Momo y la bebe comenzó a gritar alegre. Tatsuhiko sonrió de verlos — pudiste avisarme — susurro el azabache

— termine completamente dormido — se excusó y le sonrió a Momo — vamos Momo, Gogol-san hizo una papilla especial para ti

El albino se sentó con la bebe, Tatsuhiko le pidió sentarse a su lado. — aún no puedo creer que fue Chuuya quien les enseñó artes marciales — decía Dazai

— ¿En verdad? — pregunto Akutagawa

— mi familia era amiga de los Shibusawa

— Atsushi-kun entonces ¿por que trabajas en la aerolínea?

— es mi trabajo, el millonario es mi padre, no yo — dijo con un tono de desprecio que todos captaron

— yo trabajo en una guardería — les sonrió Toru — Atsushi y yo siempre hemos sido libres de conceptos, no es como si a veces no necesitemos ayuda ¿verdad Atsu?

— Ajá — repitió simple mientras alimentaba a Momo

— bueno... — el castaño miró al albino mayor — Shibusawa-San, ¿Que tipo de negocios maneja ahora? Usted es famoso por tantas obras arqueológicas y diamantes de minas

— Justo ahora, tengo muchos empleados, dejo que ellos se encarguen, estoy yendo a sesiones de ayuda, terapia y quisiera pasar tiempo con mi familia

Ante ello aunque fue leve, escucharon una carcajada de Atsushi en son de burla, Toru le dio un zape y se miraron mal entre hermanos. Solo siguió alimentando a Momo — no sabía que tenía problemas Shibusawa-san

— los problemas de la mente a veces son indefectibles, a veces solo es estrés y otras errores de la vida. Hay que llevar una vida sana

— nosotros nos vamos ya — dijo Chuuya — tengo un último chequeo hoy — les sonrió a ambos gemelos — espero seguir viéndolos.

— claro Chuuya — sonrieron ambos

El castaño ayudó al pelinaranja, salieron juntos después de la amable cortesía de quedarse. Una vez que se fueron Toru tomó a Atsushi de las mejillas — hombre relájate, papá lo intenta

— y yo también — se quejó el albino — suéltame

— chicos, esta bien, no peleen.

— ¿está bien que esté aquí? — cuestionó el azabache

— en realidad... ¿podemos hablar en mi despacho?

— no veo el problema.

Ambos se marcharon mientras los gemelos peleaban y Momo reía viéndolos

En el despacho, Tatsuhiko se sentó en una gran silla y dejó al azabache sentarse frente de él — he escuchado de ti por mi hijo Toru.

— nada bueno seguro...

— en realidad, me dijo que eras un mono simplon, serio, egoísta y que obligaste a mi hijo a cuidar de tu hija

— bueno si... pero yo no sabía sobre

Tatsuhiko puso su mano pidiéndole silencio y le sonrió — también me dijo que gracias a eso, Atsushi estaba de mejor humor, no llamó a Chicago y ademas, bueno que cargara un bebé ya fue un gran paso. Gracias

— no es nada, realmente no estaba enterado de nada y solo le hice cuidar de Momo

— está bien, actuaste como un buen padre, algo que lamentablemente yo no he logrado en 20 años.

— Señor no se castigue así, conozco mejor que nadie los sacrificios, cada día me levantaba odiando dejar a Momo a cuidado de cualquiera, cuando encontré a Atsushi me sentí bastante relajado

— si, yo estaba relajado confiando en mi esposa...

— Atsushi ¿estará bien?

— ha rehusado la terapia por años pero llegó pidiéndome algo.

— ¿llegó a pedirle algo?

— me pidió ayuda para tu divorcio, dijo que si le ayudaba iría a la terapia

— eso...

— la verdad no tenía que pedirme nada, lo hubiera hecho mientras me hablara pero no pude desperdiciar la petición para hacerlo ir a terapia. Me vino muy bien; además en el trato se agregó que debe estar en casa. Ahora depende de mi recuperar a mis hijos

— me alegro por usted señor, gracias por su ayuda

— y sobre Momo, Toru me dijo que lleva el ADN de Atsushi

— si, es una larga historia

— pueden venir cada que lo necesiten, siempre he querido nietos

— se-señor — le llamó sonrojado

— pero Atsushi no estará en ninguna relación, menos contigo

— oiga — se quejó molesto

— Atsushi debe ir a terapia, y tu eres un divorciado, ya tuve que callar muchas voces en el pasado. Esto es lo mejor

— comprendo...

Escucharon algunas risas, Tatsuhiko se asomó por la ventana de su despacho y sonrió — mira acércate — el azabache se levantó y se acercó a la gran ventana — diseñé este despacho para siempre poder verlos

Atsushi, Toru y Gogol jugaban con Momo. La bebe reía siendo llevaba en los hombros de Toru mientras perseguía a Atsushi. El azabache les miró tiernamente — señor, se que quiere lo mejor para Atsushi... Y yo seré lo mejor para el

— eso espero

Así fue como Atsushi y Tatsuhiko iban a terapia, Toru cuidaba de Momo mientras, a veces Akutagawa iba por ellos al consultorio, el reír felices estaba lejos pero Atsushi estaba más tranquilo.

Un par de semanas después fueron al hospital, el pequeño Osuya había nacido

Era un niño, Chuuya y Dazai estaban felices de tenerlo. Momo se había inquietado, quien la calmó fue Tatsuhiko. Dazai miró burlón a Akutagawa— tu hija quiere más a tu suegro

— calla. Aún... digo, yo no tengo una relación

— ¿no? Pensé que eras algo de Atsushi ya — se sorprendió — ¿te gusta Toru?

— no, guácala

— ¿Entonces?

— Atsushi está yendo a terapia familiar, le prometí a Shibusawa-san que me comportaría hasta que estuviera bien.

Dazai comenzó a reír — Osamu Dazai — le llamó la enfermera — ya puede entrar

— te quedas solo emo — dijo Dazai entrando a la habitación del bebé

Akutagawa suspiró, miró a la familia detrás de él, la verdad es que estaban perfectos para un cuadro, hermoso y pacifico. Trago sálica, Momo se parecía a ellos, específicamente en físico a Toru. Tenía el ADN de ellos. Y fue el único que logró su divorcio. Entonces... significaba que no iba a poder separarse jamás de aquella familia o perdería a Momo.

Así es, el diablo había sido atrapado.

Tatsuhiko sonreía viendo a Akutagawa a lo lejos en un estado de nerviosismos, probablemente ya se había dado cuenta — ya deje que dañaran a mis hijos antes, esta vez. Nada los dañará — pensó mirando al azabache.

Aquella tarde, Atsushi y Momo dormían en el auto de Akutagawa, el los llevaba a casa. Toru iba de copiloto cuando el teléfono del albino sono. El azabache no le importo tomarlo y contestar — ¿si diga? — preguntó Toru — no, soy Toru. Atsushi duerme... - se quedó callado y luego sonrió — si, le dire que le llame padre. Hasta luego — colgó y aventó el teléfono a la parte de atrás

— deberías cuidar las cosas de tu hermano y no contestar sus llamadas

— no pasa nada. — dijo confiado — Atsushi no ha querido llamarle al padre Nathaniel, obvio que lo esté buscando

— ¿Es?

— quien nos cuidó en America

— ¿como es que alguien como tú creció en una iglesia?

— es de los lugares más sexuales qué hay — dijo sonriente — pongámoslo así. Arrodíllate y pide clemencia ¿como no querían que lo entendiera? — labio sus labios saboreando — diablos, se me hizo verga a la boca

— eres un asqueroso, ruin, grosero

— si, si, ya — le sonrió — puedes estar tranquilo. Aquí no digo groserías, solo si Momo duerme

— ¿por que siempre me toca esto?

— te dire por que, por que llamemos destino de una forma peculiar ¿Que tal Miushi? Ese nombre me gusta

— ¿Que?

— sígueme la corriente. Bueno Miushi quiere agregar sabor a tu vida por pinche amargado culero. Pero tú te aprietas y aquel se acongoja; estoy para darle salsa a esto y darles el cumbion que necesitan para su revolquisa

— a veces creo que el que necesita al psiquiatra eres tú

— yo también voy

Llegaron a casa, Toru tomó a Momo y le sonrió al azabache — llévate a Atsushi — mencionó sonriente mientras se iba

— déjame el bulto pesado — se quejó el azabache

Movía al albino — Atsushi, despierta — le llamaba. Atsushi despertó aún adormilado y le miró mientras tallaba su ojo

— ¿ya llegamos?

— si

— ¿y Momo?

— la llevó Toru

Atsushi se levantó estirándose — ¿te quedas?

— si, no me gusta dejar a Momo

— lo sé, lo sé. Pasa, quédate en mi habitación

— pe-pero

— allí mi padre puso una cuna. Puedes ver a Momo, yo iré a otra habitación

— oh si, claro

Atsushi llevó al azabache a su habitación, en efecto, allí descansaba Momo en la cuna y Toru en su cama — lo siento, mejor te llevo al cuarto de invitados

— ¿Momo estará bien?

— si, Toru es loco pero jamás la dejaría

— cierto

Ambos fueron a la otra habitación, Atsushi acercó un par de sábanas y el azabache le miró — me sorprende tanto todo esto, eres un heredero multimillonario

— mi padre es el único millonario. Yo soy un chico común

— ven aquí — le llamo. Atsushi se sentó a su lado — tu padre trabajo mucho por esto, los lujos son para ti y Toru, para que vivan cómodos

— los lujos son cosas que no necesito, — suspiró — quiero volver a mi casa. Donde tengo que ver si hay gas o bañarme a brinquitos por el agua helada, pero se que es mía

— entiendo tu posición, pero piensa en el, trabajo duro para ustedes. Los llevó a lo alto, solo por ustedes

— hubiera... deseado que mi padre estuviera en casa en lugar de planear un futuro que no existe

El azabache acarició la mejilla del albino — puede existir, el pasado, es pasado y aunque es doloroso no puede ser borrado, tenemos el ahora, por eso se llama presente, llega a nosotros como un regalo — le sonrió — igual que Momo por las mañanas

Atsushi comenzó a reír — Gracias Akutagawa, jamás te imagine como un chico cuidador

— tengo varias facetas

Atsushi sonrió, se levantó — descansa

— claro, gracias

Atsushi iba a medio cuarto, trago saliva, se regresó sorprendiendo al azabache — ¿Que pasa algo se te olvidó? — pregunto pero respuesta no llego. Atsushi tomó sus hombros y lo besó.

El azabache se puso completamente rojo, le correspondió tomando su cintura, se separaron ligeramente. Una vez más con la cara roja le sonrió — solo olvidaba eso — se levantó casi corriendo y salió del cuarto

— su papá me va a matar

...

Aaay tan bonis

Ese Toru solo le gusta hacer referencias, tendré que darle otro trabajo...

Toru: ¡No le crean a Miushi! Mejor pidan que llegue mi Sousuke para darle más nietos a Shibusawa. ¡Exijan mi historia que aún no termina el primer capítulo!

¡Gracias por leer!