14
Atsushi intentaba dormir a Momo, había jugado toda la tarde en el jardín con Toru. Quien todo el tiempo la sostuvo para no caer pero tampoco la dejó descansar. Momo estaba llena de energías gracias a su tío pero su cuerpo estaba agotado.
Akutagawa llegó con leche tibia en una mamila — ¿nada? — preguntó el azabache viendo a la bebe jalar el cabello de Atsushi
— no, ¡ah! — se quejó — ¿por que siempre jalas mi cabello Momo?
Akutagawa le acercó la mamila, Momo prácticamente la aventó. No quería dormir y con ello ambos suspiraron de cansancio
Eran las 3:00 de la mañana cuando ambos lograron que Momo se quedara dormida. Ambos se habían dormido con Momo en medio.
Por la mañana, Momo despertó viendo a ambos a sus lados. Tomó los cabellos largos de ambos y los jalo alegre.
Atsushi y Akutagawa despertaron con el tirón de Momo. Se miraron primero adoloridos y luego rieron — que mal te vez
— tus ojeras son de mache
— buen día
— buen día
— ¡mamá, dada!
Atsushi tomó a Momo pareándola en su pecho — Momo, que cruel fuiste anoche
— cierto, esa bebe merece un castigo
— ¿castigó? — preguntó el albino
— si, cosquillas
Akutagawa tomó a la bebe y la puso sobre la cama, comenzó a hacerle cosquillas. Momo no paraba de reír.
Más tarde fueron a preparar algo de desayunar con Momo. Gogol y Tatsuhiko disfrutaban de un café cuando los vieron — vaya que ojeras tienen — dijo Gogol
— Momo no quería dormir — mencionó el albino con la bebe pegada a su pecho
— ¿aún bebe de tu pecho?
— bueno, Fukuzawa-san dijo que podía hacerlo hasta los dos años, y ella sigue atacandome así que...
— Ryunosuke ¿puedes quedarte en casa esta semana? — preguntó a Tatsuhiko
— si claro, ¿por que?
— Niko y yo iremos a unas pequeñas vacaciones
— Oh, eso suena bien — dijo Atsushi y Momo le mordió - ¡ah!
Akutagawa evitó reír, pero la verdad moría de la risa con la actitud de su hija. — si, bueno... van a quedarse solos
— Toru dijo que convenció a Sousuke para ir a Osaka por el festival
— está bien, podemos solos con Momo — mencionó Atsushi
Con la conversación encaminada, Akutagawa terminó el desayuno. Momo seguía sin soltar a Atsushi. Así que el albino comió de lado y con varios mordiscos
Por la tarde, Gogol y Tatsuhiko se habían ido al aeropuerto. No iban Yam lejos, habían decidido ir a relajarse a Hong Kong, precisamente a los templos dragones que tanto le gustaban a Tatsuhiko.
Habían llegado a un hotel, era con temática de yin y Yang, ambos estaban sintiéndose bastante relajados solo con entrar. Sus vidas habían dado grandes giros una y otra vez, pero ahora podían disfrutar de esos cambios.
Se relajaron en la cama un momento. Gogol se estiraba todo el tiempo mientras Tatsuhiko leía — oye, ¿vamos al spa?
— claro, será divertido
— quiero un baño de algas marinas
— ¿en verdad? Y... ¿un beso?
Gogol sonrió abrazándole del cuello — esos los quiero todo el tiempo - Tatsuhiko lo beso y Gogol sonrió — ¿y si mejor me das otro tipo de masaje?
— será un gusto para mi.
Con algunas horas después, ambos adultos salieron de la habitación para comer.
Comían variedad de sushi mientras platicaban — ¿crees que esos dos estén bien con Momo?
— son sus padres, no debería de haber mejor lugar
— tengo miedo por ellos, Momo los tortura mucho
— cierto — dijo Tatsuhiko entre risas
— deberíamos comprarle algo bonito
— quizá un chupete, para que deje el pezon de Atsushi
— quizá funcione
— ¿tú crees?
— no lo sé. No se muchos de bebés
— tampoco yo...
— fuiste padre
— ausente, si hubiese estado
Gogol tomó su mano — deja de torturarte, querías lo mejor para ellos. Tampoco ellos son culpables. Hiciste lo mejor que pudiste... Toru se recuperó rápido y Atsushi ahora tiene una bebe. Ya no te castigues más...
Tatsuhiko sonrió — creo... que la vida podría cobrar diversión ahora...
— ¿Quieres volver? Tengo muchas ganas de jugar con Momo
— No, disfrutemos... Quiero ir a ese paseo zen, un masaje y dormir más días a tu lado
— pero si ya dormimos siempre juntos
— pero no gimes como hace rato
— e-es por que estamos solos — respondió sonrojándose — uuuh. Que cruel eres
Ambos siguieron riendo.
Después de comer, fueron al paseo zen. Era una caminata por un estanque enorme de peces koi. Al final del recorrido fueron sentados entre bambú para tomar una clase de meditación.
Relajados y sin problemas en sus mentes, disfrutaron de una apasionada y loca noche. Su vida amorosa y sin castigos pasados estaba dando inicio.
Durante la semana, Atsushi y Akutagawa estuvieron solos en casa con Momo.
Estaban bien pero desde la noche de desvelo, Momo solo se dormía si los dos se acostaban juntos, esto hizo que ambos se sintieran nerviosos. Sobre todo el pequeño albino.
Solo con tener que entrar al baño o salir de el y topárselo ya lo ponía nervioso, era peor cuando estaban los tres en la cama.
Una mañana Atsushi se había liberado de Momo, hacia el desayuno mientras el azabache le daba un baño a Momo.
Atsushi veía videos para niños mientras cocinaba, le llamó la atención. La chica hablaba sobre un peluche especial para niños, ayudando a mejorar su seguridad y alejarse de sus padres un poco. Atsushi pensó que sería buena idea.
En cuanto terminó el desayuno, el azabache bajo con traje y con Momo en su brazo — ¿sales hoy?
— si, tengo una junta — le miró — ¿estarás bien? Solo me iré un par de horas
— Soy azafato en licencia de maternidad; si viajo a cada lugar diferente puedo pasar unas horas con una bebe
— uuuy disculpe señor todo poderoso
— no soy tan bueno como Jim Carrey
— por cierto, ¿volverás a los vuelos?
— es el plan
— ¿y Momo?
— estoy pensando en ello, también existes tu
— tu trabajo te hace estar 28 días fuera del país
— ya, ya, no hablemos de eso ahora. Desayuna
— Aaay tus humores son cada vez peores
— se llama conocer
Después de su pequeña discusión, el azabache desayuno, Atsushi se encargó de Momo. Al retirarse el albino y Momo se quedaron solos — Momo ¿lista para una salida al centro de Yokohama?
— ¡mamá!
Atsushi comenzó a reír — si, eso
Atsushi puso a Momo en la parte trasera de un auto, le puso su silla de seguridad y otro cinturón más. Salió de la casa en el auto con dirección al centro.
Al llegar, sacó un carrito de la cajuela y aseguró en el a Momo. Puso seguro al auto y fueron juntos por el centro. El albino compró una tela blanca, hilo negro, un poco de rellano suave y botones. Momo estaba feliz con un globo que el albino le compró.
Fueron a un parque seguro para niños. Allí dejó a Momo jugar cerca de él mientras comenzaba a coser con aguja e hilo. Miraba a Momo y daba una puntada, así continuamente. Hasta que terminó.
Atsushi había hecho un muñeco Teru teru pero con forma de tigre, tenía orejas y cola también. — ¡Momo! — le llamó alegre el albino. Momo se acercó, aunque casi se cae siguió caminando hasta llegar con su mamá.
— ¡Mamá!
Atsushi la cargó — hice algo especial para ti — mencionó y la niña le miró curiosa. Atsushi sacó el muñeco y a Momo le brillaron los ojos — este pequeño tigre va a cuidar de ti, te protegerá, cuidará tus sueños y será tu mejor amigo por siempre — Atsushi le entrego el pequeño tigre y Momo lo abrazó
— ¡Byko! ¡Byko!
Atsushi sonrió. Momo abrazó al albino también — ¡Mamá Byko!
— si, Byko cuidara de ti
Más tarde, Atsushi y Momo regresaron a casa, Akutagawa llegó una hora después. Entró y fue a la sala donde los vio — ¡dada! — grito la bebe y enseño su peluche — ¡Byko! ¡Byko!
— que lindo cariño — dijo el azabache abrazando a la bebe y miró a Atsushi — ¿que es Byko? — preguntó solo moviendo sus labios
Atsushi señaló en peluche y moviendo sólo sus labios dijo — el peluche
Akutagawa miró de nuevo a Momo quien sonreía — ¡Byko!
— oh si cariño, Byko está hermoso ¿verdad?
— ¡Byko, Byko, Byko!
Momo siguió jugando con el peluche en el suelo alfombrado. Akutagawa se sentó al lado de Atsushi — ¿donde lo consiguió?
— yo se lo hice
— oh, pues esta lindo
— solo es tela con hilo y relleno
— pues si, tiene mejores peluches — mencionó sincero. Por inercia el azabache besó la frente del albino — pero es su peluche favorito
Atsushi se sonrojó, el azabache reaccionó a lo que había hecho sonrojándose también — ¡Dada! ¡Mamá! — grito Momo emocionada
Esa noche, Atsushi y Akutagawa lograron dormir rápido a Momo, la bebe se había acurrucado con Byko en su cuna.
Habían terminado rendidos de todos los días que no habían podido dormir sus horas. Terminaron durmiendo los dos juntos.
A la mañana, el primero en despertar fue Akutagawa, miró al albino descansando, sus ojos cerrados, ligeros rayos de luz entrando. Sonrió sinceramente — desearía permanecer así el resto de mi vida — dijo para si mismo.
Se acercó besando la frente del albino. Este abrió un segundo sus ojos, aún dormido sonrió y abrazó al azabache para acurrucarse en su pecho. Akutagawa avergonzado simplemente lo abrazó de vuelta. Ya cuando Atsushi despertara tendría una excusa.
...
Les voy a confesar que adelante mucho esta historia.
Así que les puedo dar pequeños spoilers: el trauma se ira, Momo hará un enorme berrinche y habrá lemon demasiado tierno
¡Gracias por leer!
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top