¿Que demonios está ocurrido? De un momento a otro Angélica pegó un gran grito, a los segundos cayó inconsciente en los brazos de Lev. ¿Fue en ella quién fue poseída por una nueva alma o le hicieron saber que se encuentra en una simple historia de harem. ¿Que hará cuando despierte? ¿Seré su objetivo? ¿Por qué nadie se mueve o corre a llevarla a su habitación para que la revise el médico?

[¿Hay algún sistema al rededor de Angélica? Busca algo en su cabeza] <No tiene ningún sistema, sin importar que ya no estoy conectado al plano superior, podría seguir viendo a un sistema pero el a mí no. De igual manera no tiene ningún enlace con algo así> Intentaré meterme a su cabeza...<¡No puedo ver qué hay en su mente, está protegida para no ser invadida!> Es obra de los dioses de seguro.

Tengo que preocuparme por otra cosa todavía más tediosa. Si i ella sabe todo entonces, no dudará en apuñalarme. Sabiendo como son los dioses, puedo imaginar que condiciones le pondrán para poder liberarse de está historia, una de esas condiciones será torturarme de alguna manera u otra. De eso estoy muy seguro.

Me están entrado unas inmensas ganas de matar muy lentamente a ese maldito creador, llamado “mí hermano” solo espera malnacido tarde o temprano nos vamos a reunir pedazo de mierda. También voy a escribir una desagradable historia dónde estarán encarcelado los dioses y él. Sufrían un destino peor que el mío, ya verán malditos.

—¿Por qué demonios me miran a mí, pedazos de basuras? Llevarla a su habitación para que la revise el médico—Hunde sus dedos en su cabello, ese gestó provocó que se vea más seductor—¿También me culparan de su repentino desmayo como siempre lo han hecho?—Chasqueo su lengua.

Todos los presentes se exaltan al escuchar el evidente repudio de Valentín. En esa mirada solo podías ver desagradó y molestia.

[¿Nadie recuerda que Lucila me empujó?] <No, más bien todo lo sucedió estos últimos días fue borrado.> [¿Cómo así?] Tengo un maldito mal presentimiento.

—¡Valentín!—Exclamó molesto Luciano—¿Cuál es ese comportamiento? Se te olvidaron los modales, ¿Por qué no eres como tú.....?

—Nadie tiene el maldito derecho a darme órdenes o educarme—Los ve desafiantes—Como padres son una mierda, y a esos tipos ni siquiera puedo considerarlos conocidos—Mira a Sasha, le sonrie dulcemente—Menos tú, tu si me agradas.—Mucho.

<Para ellos usted nunca fue obligado a vestirse como Valentina. Los señores Whitley jamás lo han tratado mal, es más, para ellos recién viene llegado del extranjero> [¿Que? Eso significa que....

—¿A mí?—Se apunta sorprendido—Disculpe, ¿Nos conocemos?—Pregunta confundido.

—¿Que?—Su boca se volvió seca y amarga como si hubiese saboreado un montón de bilis.

[¿También fue borrada la existencia de Valentina?] <No, ella sigue en coma, volvió al hospital donde estaba anteriormente. Pero a ella la dejaron como la hermana dulce y usted como él loco desquiciado, al parecer>

"Jajajajaja" Sonríe con tristeza para si mismo "¡Les es tan fácil borrar el maldito sufrimiento de una persona en cuestión de un mísero segundo! ¡Cómo se atreven! Para ellos todo el dolor de los anteriores Valentín, es nada. ¡¡Malditos dioses hijos de puta, los maldigo mil veces!!"

—Si, Valentín. ¿Cómo es que conoces a mi sobrino?—Edmond tiene una expresión desconcertada—No recuerdo a ver hablado de él en ningún momento—Ni Lev, ni Nash, lo conocían anteriormente.

¿Por qué tiene esa expresión? Es como si le doliera saber que Sasha, no tiene reconocimiento de su existencia. ¿Lo conocería en el extranjero?

—¿Qué?...Deja de estar bromeando Sasha—Sonrío con rigidez.

Valentín sintió una leve punzada en su pecho, él no quería que la vida de Sasha terminara siendo manipulada por los dioses y el creador. Eso lo hace sentir molesto, más cuando él era la única persona que lo había ayudado a salir de ese infierno repetitivo. En quién había puesto la esperanza en que podía ayudarle salir de este mundo.

—¡¿También sabe mi nombre?!—Mira a su tío—¿Seguro que no has hablado de mí, tío?—¿Me he olvidado de algo? Sus ojos tienen una mirada extraña. ¿En serio me conoce? ¿De dónde?

—No—Responde Valentín, con una voz triste—Te confundí con alguien más—Aprieta sus puños. Sonríe con tristeza—Lo siento—Perdoname por verte metido en este lío, perdón por no poder ir a tomar ese café que te debo.

Hablaba normal pero había sido difícil de pronunciar ya que se sentía sofocado, esas palabras se ahogaron en su garganta unas cuantas veces antes de poder decirle "te confundí con alguien más" se conocían desde hace poco, pero Valentín le tenía alta estima, es la única persona que logró ver su verdadero yo, y quién le ayudo sin pedir nada a cambio, ¿Cómo no iba hacer una persona especial para él? Era imposible no tenerle apreció.

—Entiendo—Si es así, ¿entonces por qué me mirá de esa forma? Sus ojos muestran tristeza y culpa....me siento molestó, no quiero ver esa expresión....

Sasha sostiene con ambas manos su cabeza, le está punzado horriblemente por querer recordar a dónde había visto esa mirada anteriormente. Estába seguro que la había visto en algún lado.

—Yo....

—¿Qué están haciendo?—Lev se encuentra irritado, evitó que Sasha hablará—¡Llamen al médico! Ella es más importante que estar hablando con Valentín. ¿Se te subieron los sumos solo por ver estado en el extranjero?—Sonrie con sarcasmo.

Valentín agarró el florero que estába bajó sus pies, pretendió que se los lanzaría en la cabeza pero al final lo terminó tirado bajo los pies de Lev, este protegió el cuerpo de Angélica, con su cuerpo para que los pequeños pedazos de ese florero no lastimé su piel.

—¡Te volviste mas desquiciado!—Exclamó Edmond y Nash.

—Sí, estoy desquiciado, pero por lo vemos no soy un perro lame culos sin dignidad, te vez tan patético. Bueno, siempre lo fuistes—Dio medía vuelta en el proceso fulminó a Lucila, quién no comprendía de porque su cuerpo duele tanto y que había olvidado algo—Malditos títeres.—Bufo.

Sasha inconscientemente dio dos paso hacia adelante querido subir las escaleras, pero se detuvo abruptamente sin comprender del porqué quería ir trás Valentín.

¿Que iba a decir antes de que Lev, interrumpirá? Será que mi viaje en yate me aturdió mas de lo que hubiese esperado.

—¿Ese era su prometido?—Preguntó Sasha.

Si Valentín hubiese escuchado eso, se hubiera suicidado una cuantas veces más, hasta poder morir definitivamente. Tanto le había costado liberarse de ese matrimonio para que volviera a lo mismo.

—Él te odia, ¿Mentistes cuando dijiste que estaba loco por ti? Se nota que él los odia a todos. Hasta un ciego podría verlo.—Tanto su voz y mirada gritaban resentimiento.

—Ese compromiso se romperá pronto, no pienso casarme con un hombre—Susurró al mismos tiempo que puso una expresión de asco—Vamos, lleva a Angélica a su habitación. Tío Luciano, llamar al médico.

—Seguro—Le hace una muca al mayordomo, este solo asintió—Me disculpó por el comportamiento de mi hijo, desde que su hermana cayó en coma, él sintió que también perdió su vida.

Sasha lee las expresiones fáciles de Luciano y no le convenció mucho lo que estaba diciendo, luego vio a Lucila, está todavía seguía entrance. Alarmas se dispararon a su alrededor de que algo estaba sucediendo. Al final de todo, el Sasha que Valentín conoció en aquél entonces, seguía arraigado en el interior de la nueva versión que fue modificada por los dioses y creador. No lograron del todo borrar su esencia por completo.

Mientras ellos están preocupados por el bienestar de Ángela. Valentín se lanzó a su cama, su expresión es indescifrable. Sus ánimos se siente como la mierda. Su mente se encuentra en un completo caos.

—¿Sasha fue agregado al harem de Angélica?—Preguntó con su rostro hundido en la almohada.

Si él también llegará a ponerse en mi contra, interferir en mis planes, me veré obligado a ponerlo en su lugar. No quiero pero tendré que destruirlo junto a los demás. No estoy para tener compasión solo porque me ayudó en su debido momento. Yo estoy y estaré siempre primero ante todo.

<No sabría decirle, ya no tengo información de la historia o de que manera cambio....Si cambio a la ruta de Nash, entonces usted sería prometido de Edmond. nuevamente.....>

—¡¿Qué?!—Se sienta abruptamente en la cama, su expresión se tiñe de negro—¡Me estás jodiendo ¿Verdad?!—Sonríe horriblemente—¡Dime qué es una maldita broma!—Toma a Black por el cuello—¡Dime qué es una mentira!—Sus hermosos ojos se cubren de rojo por la impotencia y la ira que recorre cada célula de su cuerpo.

<Lo lamento, me gustaría que fue una broma, pero lamentablemente no es así....> Los ojos ojos de Black, se exaltan al ver y sentir las lagrimas de Valentín caer por su peludo rostro robótico.

Valentín estaba llorando de coraje, ese enorme coraje apresa su pecho de una manera agonizante que solo puede respirar si libera dichas lágrimas retenidas.

—¿Debería solo matarte?—Apreta el cuello del sistema—Tu eres el culpable de que este en esta maldita situación. Si tan solo hubieses dejado que muriera nada ésto estaría pasando.

<Si eso le hace sentir bien, más aliviado entonces, matarme. Quizás si muero usted tenga la oportunidad de volver> Cierra sus ojos, esperando que Valentín le de un golpe final.

—Asi no es divertido—Valentín lo soltó. Se acostó en la cama, dándole al espalda al zorro—Quiero que sufras y si lo permites de esa manera no estaré satisfecho. Quiero escucharte suplicar que no te mate, solo así estaré complacido.

Aparté lo necesito para que cuide mi espalda, en cualquier momento alguien puede entrar a mi habitación y hacerme algo mientras duerma, Black puede informarme de eso y de esa manera estaré preparado para lo peor. Pero no le diré que lo necesito, eso seria subirle los sumos.

—Dame el contenido de la ruta de Nash—La última vez dijo que esa ruta es turbia.

<Bien, se lo diré en breves palabras para que no pase de nuevo por ese dolor al ver la información como la última vez cuando recién llegó.>

—Solo habla sin tanto rodeó.—Rechina sus dientes.

<En la ruta de Nash, Angélica murió por un accidente provocado por Valentina, la cual se disfrazó cómo usted. Creyó que de esa manera los objetos de captura serían solo para ella y en el proceso se deshaceria de usted, quién en esta ocasión su abuelo le dejó toda la herencia de la familia Whitley.

Sí, en esta ruta Valentín es quien era querido por sus abuelos y el cual estaba enamorado de Edmond. Pero para sus padres, Valentina sigue siendo la favorita y si a usted lo toleran es por la herencia.

De igual manera los planes de Valentina no resultaron cómo querían y los objetos de captura terminaron por raptar a Valentín, en vez de matarlo. Lo tomaron como el remplazo de Angélica. Le hicieron de todo, desde abusar de él, sin amabilidad. Hasta quemar su piel con cigarrillo. Él se intentó suicidar un par de veces, pero no lo dejaban morir. Para ellos mantenerlo con vida era el castigo más adecuado para alguien que mato a su amada.>

La mirada de Valentín es una completamente vacía, algo en él se había terminado por romper. Le dolía, era doloroso por lo que tuvo y sigue pasando el cuerpo que posee.

—¿Qué pasó cuando descubrieron la verdad?

Black se estremeció al escuchar esa voz, no tenían humanidad en ella. La voz de Valentín parecía más robótica que la de él mismo.

<Pidieron perdón, intentaron remediar todo el dañó que le había causado. Ya era demasiado tarde y Valentín solo era un cascarón vacío lleno de miles de agujeros que solo quería morir. "Matarme, solo de esa manera los voy a perdonar" fueron sus palabras pero ellos se negaron a cumplir esa petición y para que Valentín no intentara quitarse la vida, ellos le cortaron las....manos. Fin>

En ninguna de las rutas Valentín es Feliz, en todas ellas muere como el villano que las personas creaban con sus mentiras y él terminaba pagado.

—La palabra "turbio" es poco comparado con lo que sucedió en esa ruta—Sus mira se encuentra fija en las sábanas, las gotas de agua las habían empezado a mojar.

Sus hombros tiemblan, no sé podía saber si lloraba de dolor de imaginarse y ponerse en los zapatos del verdadero Valentín o de los otros tres que llegaron a este mundo ante que él, oh si están temblando por la desbordante furia que se apoderado de su cuerpo.

Valentín se levantó de la cama, se limpió las lágrimas. Con una mirada fría abrió la puerta y salió de su habitación. Directamente al despacho de Luciano.

<¡Anfitrión!> Black sigue a Valentín <¿A dónde va? ¿Que piensa hacer? Es mejor que se calme un poco antes de comerte alguna cosa que lo perjudique? [Ya nada importa. ¡Tengo que matarlos aunque sea una vez!]

Valentín abrió los cajones del escritorio, sus ojos brillan peligrosamente al ver el arma, la agarra y se dirige a la habitación de Angélica, ahí se encuentran sus enemigos.

—¡Malditos bastardos!

Todos jaderon al ver a Valentín con esa expresión oscuridad y sus ojos rojos por el llanto de hace un momento atrás.

—Valentín...baja eso—Habla con suavemente, Luciano. Intentado calmar a Valentín, quién estaba temblando. Sus manos eran las que más temblaban.

—¡Cállate!—Gritó—Si alguno dice otra palabra, una bala será incrustada en su cien. Edmond, Nash, Lev, fuera—Él evita ver la mirada de Sasha.—¡Ahora!—Apunta el cuerpo de Angélica.—Salen o la mató en este momento—Sonríe desquiciado.

—¡Está bien, vamos a salir!—Hablan al unísono—Pero no le hagas nada—Con cuidado salieron de la habitación, pendientes de que Valentín, no jalé el gatillo por accidente.

—No salgas—Le advierte a Sasha—Quedarte aquí—Por favor.—No me obligues hacerte daño.

<Anfitrión, ¿Y si no resulta como quiere?> [No importa, solo quiero darles un poco de lo que merecen. Darle un poco de satisfacción a Valentín, él debe de estar viendo donde quiera que se encuentre. Por lo menos le daré un poco de alivió al verlos morir]

—¡De rodillas! No me hagan repetirlo—Le quitó el seguro a dicha arma.

—¿Que te pasa?—Pregunta Nash—Podemos hablar y de esa manera nos haces saber que te llevo a comportarte así.

—No entiendo cómo es que para él, ustedes eran sus preciados amigos por los cuáles estába dispuestos a morir. ¡¡No se merecían su cariño!! ¡Debieron luchar contra los hilos que los mueve como marionetas, justo como lo hizo él! Él confiaba en ustedes y ustedes solo lo apuñalaron sin piedad.

—¿De que estás hablando?—Preguntó Edmond.

—Valentín con el que crecieron durante tanto tiempo, él ya está muerto. Murió hace mucho tiempo y ustedes hijos de puta jamás se dieron cuenta y en ocasiones ustedes mismos lo enviaron a la muerte.

—Si quieres ganar nuestra simpatía con palabras absurdas, no lo vas a lograr—Expreso Lev, con una mirada arrogante—¿Crees que llamaras nuestra atención al comportarte como un loco?

—Pobre idiota, crees que quiero llamar su estúpida atención de mierda. Para mi ustedes solo son simples títeres en una historia dónde ni siquiera son dueños de su propia vida—Sonrío—¿En algún momento se han puesto pensar del porqué se enamoraron de Angélica, con solo verla? ¿Del por qué se comportan como perros encelo? ¿Por qué creen en su palabra sin siquiera ponerse a pensar si es verdad o no? Simple, porqué ni para pensar tienen tal autoridad.

—¡Aahhg!—Lev se sostiene el abdomen.

—¡Valentín! ¿Cómo pudiste?...¡Agh!—Edmond se había querido pasar de listo al querer quitarle el arma a Valentín, pero este jaló el gatillo mucho antes y le soltó una bala directamente entre la entrepierna.

Luego soltó unas cuantas balas más para inmovilizarlos y que ninguno pudiera levantarse o defenderse. De esa manera podrá hacer con más comodidad lo que hará acontinuación.

—Valentín....detente—Habla con dificulta, Nash.

[Cuchillo] <¿Anfitrión...?> [¡Dame un maldito cuchillo!] <Bien> El zorro negro no le quedó de otra que cumplir los deseos de Valentín.

—No soy Valentín, él ya murió—Empuña el cuchillo con ambas manos—Mi nombre es Timothy—Ensartó el cuchillo en el abdomen de Nash, una y otra vez. La sangre salpica toda su rostro y cara. En vez de estar feliz por vengarse, su expresión es indescifrable.

No sé sentía feliz haciendo eso, se siente repugnante, un mounstro que fue creado para vengarse por las dolencias de los demás Valentín.

—¡Valentín!—Sasha se posicionó detrás de Valentín, detenido así, los movimientos del de cabello esmeralda.

—¡Soltarme, todavía me quedan esos otros dos!—Gira un poco su rostro para encontrarse con esa mirada azul turquesa.—No te interpongas, por favor—Sus ojos se humedecen.—Por favor.

—¿Es necesario llegar a este punto?

¿Por qué no estoy asustado? En este momento debería estar sometiedole en vez de hacer esa clase de preguntas. ¡Es mi tío quien está agonizando en este momento!

—Sí, tal vez es la única manera de salir de aquí.

—Puede encontrar otra manera, una que no lo lleve a perderse en el abismo o volverse en un loco asesino...—Susurró—No se apuesto a pesar que tal vez eso es lo que quieren, que usted se olvide hasta de su propia existencia.

—Sasha—Sonríe—Aún cuándo te olvidaste de mi, te sigues preocupando por un mounstro cómo yo...eres demasiado bueno, dulce, para este mundo.

Se gira, quedado enfrente de Sasha. Pero con sus manos aún sujetado el cuchillo. Más bien ninguno de los dos lo está soltando.

—Es la primera vez que alguien se preocupa realmente por mí, alguien que no son mis padres.

Se acerca más cerca de Sasha, estremeciendo al ya mencionado. Sus ojos azul turquesa no pueden apartar su mirada de esos rojos labios que pensaba que quizás tenían un sabor a cerezas.

—Gracias, Sasha. Gracias por intentar ayudarme a salir de este infierno que por un momento creí que había terminado. Y perdón—Posa sus labios sobre los de Sasha.

Sasha se tensó y su corazón no dejaba de latir, podía escuchar ese ruido en sus oídos a la perfección. Antes de cerrar sus ojos de forma inconsciente, logró ver las lágrimas desbordarse por las esquinas de los ojos de Valentín.

Sus labios son suaves, creí que besar a un hombre sería y se sentiría una sensación diferente y poco tolerable, pero los labios de Sasha trasmiten una sensación dulce y hasta agradable diría yo.

Black estaba sorprendido al igual que los moribundos objetos de captura. Creían que su perdida de sangre les está causando alucinaciones.

Sasha soltó el cuchillo para poder sostener el rostro de Valentín, mientras el beso se iba profundizado, más apasionado.

Valentín aprovechó ese instante para apuñalar su propio corazón, quería poner aprueba si lo podían mantener con vida, ya que en este momento estába tocado a Sasha. Tenía la esperanza que Sasha, aún no estuviera por completo al merced de los dioses y creador.

<¿Por qué? ¿Por qué tiene que volver a lastimarse? Sabe bien que no funcionará> [Solo quiero saber si ellos todavía tienen un hilo en mi cuerpo. Se suponía que podían retroceder hacia atrás porque estaba atado a ti, pero ahora ya no lo estoy. Tendría que morir, ¿verdad? Aparte siento las emociones del Valentín original, el medio el permiso de poder dañar su cuerpo.]

—¿Valentín?...—Jadeo al ver cómo de esos labios brotaban sangré.—¡Valentín!—Sus ojos muestran terror—¡Le dije que no era necesario dañar su cuerpo! ¿Se le olvidó?

—¿S-Sabes quién soy yo?

—¿Cómo no podría saberlo? Resistas, llamaré a una ambulancia...

Nuevamente Valentín se encuentraba en su habitación, su mente se encuentra desorientada. El tiempo había retrocedido hacia atrás, otra vez y con ello una pantalla azul apareció frente a sus ojos.

"Timothy, Timothy, Estás perdido tu tiempo, no podrás salir de esté lugar por más que lo intentes. Cómo un bucle volverás hacía atrás una y otra vez...jajajajajaja.