CAPÍTULO 55: Te encontraré.
Narrador Omnisciente
Carl grimes
Los salvadores se habían adentrado a Alexandria cómo si simplemente fuesen los dueños del lugar, la razón por la que estaban aqui ya todos la sabian, ellos estaban en busca de Daryl y, algunos de aqui obviamente, no estaban demasiado felices como para soportarlos. Estaban preocupados y ahora con la llegada de estos la paciencia de todos estaba llegando al límite.
—¡Rick Hola!—había gritado Simón dirigiendose hacia el mayor de los Grimes y tomándolo de los hombros como si fueran viejos amigos—¡Y Hola de nuevo!
—Los esperábamos—respondía Rick en un segundo.
—¿Crees que es por un tributo?—cuestionaba Simón—¿En serio?
—¿Hay otra razón?—preguntaba el líder de Alexandria mientras que el Salvador se enojaba aún más.
—Claro, Vinimos por Daryl.
—Negan se lo llevó—Rick tuvo que fingir enojo ocultando el hecho de que lo habian ocultado en El Reino—Ustedes saben eso.
—Ahhh, pero cuando vino tu hijo, Daryl desapareció, ¿No serán eso dos hechos conectados?
—No—negaba el líder—No lo son, acabamos de enterarnos de todo esto recién por ustedes.
—Entonces será facil—aclaró Simon extendiendo las manos, dió una mirada con orden hacia su gente y les ordenó;—Ya, busquen a un compañero, tendrán que seguirnos, si esta aquí, todos tendrán que verlo morir.
Carl Grimes estaba junto a su padre observando toda la escena, Simón se acercaba hacia él mientras lo miraba lleno de odio y tocaba su sombrero riendo y burlándose del chico. Después de molestar se dirigió a buscar a Daryl por toda la comunidad, los salvadores entraban a todos los lugares posibles y desordenaban todo a su paso.
Tal acción hizo que el sheriff se enojara por completo mientras observaba lo que sucedía, Simón se dirigía hacia la despensa, lugar el cuál antiguamente era dirigido por Olivia, así que al chico no le quedó de otra que seguirlo, intentando proteger a su gente.
—¡Vaya, estos estantes si que están vacíos!, ¿Hicieron una parrillada o algo y no nos invitaron?—Simón una vez más se burlaba de la escasez de alimentos pasando su manos por los estantes vacios—En serio que triste, y no intenten escondernos nada porqué eso por lo general termina mal.
—Tenemos mucha gente, es cada vez más difícil encontrar cosas y ahora nos concentramos en buscar cosas que Negan podria querer—Aaron abrió la boca solo para aclarar aquello y Simón se le acercó con enojo—Seguimos adaptándonos al sistema.
—Hoy íbamos a salir a buscar más cosas, si nos esperan, traeremos más, encontraremos más—secundaba Rick mientras que Simón solo se burlaba—Solo tenemos que...
—Relajate, no vine a buscar nada, menos mal, pero ese día llegara—aclaraba el Salvador—Así que hagan lo que tengan que hacer, vayan más allá, arriesguense.
—Lo haremos—afirmaba Michonne.
—Bueno...eso esperamos—volvió a decir Simón saliendo de la despensa, justo en ese momento, un hombre de su grupo se acercaba hacia él y le susurraba algo al oido—Agradezco tu cooperación, Rick—decía Simon en tono burlón—Lamento haberles dejado esto hecho un desastre pero tenemos un montón de otras cosas que atender.
Su estadía aquí habia sido muy corta comparando a las otras veces en las que habían tenido que armar un show por simple gusto para asustar más a los habitantes de aquella comunidad, ahora el Salvador líder parecía que debía irse lo más pronto posible, su gente había sido muy hábil para buscar por toda la comunidad y ya que no habían encontrado a Daryl, Carl Grimes y el resto de su grupo entendieron que ya se largarían.
—Date prisa, ah Rick, Si Daryl llega a aparecer en dos días, dos meses, no sé, rayos digamos que en dos años, Debes saber que su crimen no prescribe con el tiempo—la orden de Simón hizo que todos le prestaramos atención a él con muchs claridad, el rió cínico y volvió a hablar—Ten a mano el hacha, vas a necesitarlo si se aparece por acá, a él no lo trataremos cómo a tu hijo.
Rick Grimes fingió hasta ver que Simón subía a su camioneta y se retiraba, una vez que todos los Salvadores desaparecieron de su campo de vista, dió un gran respiro intentando calmarse viendo todo el desastre que estos habían ocasionado y dió una vuelta fijando su concentración solo en Aaron.
—¿Qué pasó en la despensa?—se apresuró en preguntar.
—No sabemos—interrumpía Aaron con nervios—Tenemos que hablar de Gabriel.
—¿Donde está?—preguntaba Rick.
—Estaba de guardia la noche en que fueron a buscar municiones, yo debía reemplazarlo en la mañana y no estaba en su puesto—aumentó Tobin con suma preocupación por el problema—Esa noche teníamos la despensa super llena, ahora todo ha desaparecido.
—Vaciaron la despensa y falta un auto y nadie lo volvió a ver—aclaraba Aaron de nuevo.
—Maldición, se llevó todo—decía Rosita.
—Si, asi parece—aclaraba Tobin con lástima—Es confuso porqué él no haría nada parecido, no sin antes avisarnos.
—Me niego a creer eso—soltaba Tara mirando a todos allí.
—No puedo creer eso—murmuraba Rick con seguridad y sin saber la razón de aquel hecho—Ese no es Gabriel, él no nos haría eso.
—También creí que había cambiado pero no hay otro motivo—volvió a añadir Rosita enojada.
—Si que lo hay—decía Rick nuevamente.
Carl Grimes se quedó en ese lugar por un instante, viendo cómo su padre y el resto alli parecían estar más centrados en el problema de la despensa y encontrar a Gabriel, que en el problema de encontrar a Colman. En ese momento, Rosita dio un paso hacia adelante con molestia por todo lo sucedido.
—Tenemos mejores cosas que hacer, no tenemos tiempo para buscar a Gabriel—esta vez Rosita habia hablado directamente hacia todos—Con lo sucedido allá afuera no pienso quedarme de brazos cruzados, volveré.
—¿Qué fue lo que sucedió allá afuera?—Aarón observó a el resto de personas que estaban alli esperando a que le respondieran algo, pero estos solo se mantuvieron callados mientras Rick tomaba su cara con preocupación—Oigan.
—¿Y Colman?—logró preguntar Tobin observando el alrededor un poco confundido—¿Ella...
—Desapareció—comentaba Tara con firmeza—Detonó una bomba muy cerca de ella y no sabemos si está viva.
—¿Cómo que desapareció?—Aarón lucia confundido así que volvía a cuestionar aquello con molestia—¿No estaba con ustedes en ese momento?
—Ocurrió un problema, y teníamos que detonar la bomba de todas maneras—mencionaba Michonne un poco cansada—Logramos escapar pero ella no.
—Tuve que dejarla atrás porque nosotros ya habiamos logrado salir—siguió Rosita hablando con rapidez y de todos alli, parecía ser la más preocupada, Carl lo pudo notar—Tenemos que volver.
—Lo sabemos—habia dicho Rick con orden—Pero nosotros yendo nuevamente hasta ese lugar despertariamos sospechas, seguramente los Salvadores están alli ahora mismo preguntandose porqué sus explosivos detonaron y aquello nos arriesgaría muchísimo—Carl solo observó a su padre con cierta molestía—Por ahora, busquemos a Gabriel, debe de tener alguna pista escondida en su casa. Sería lo más fácil.
—¿Esto es enserio?—cuestionaba Carl de una vez por todas sin aguantar más observando a su padre—Qué estupidez.
[...]
Las esperanzas que Carl Grimes ahora tenía eran pocas, por más de que se había puesto a repasar el problema una y otra vez no encontraba alguna oportunidad sobre cuál decisión habría tomado Colman para salvarse, porqué era poco probable, eso lo sabia. Lo que el muchacho más temía en estos instantes era encontrar el cuerpo de la chica convertido en un caminante, tenía demasiado miedo, No quería perderla.
—Carl—la voz serena de su padre a través de la puerta le hizo alzar la vista, sin embargo, regresó su concentración hacia el arma que llevaba en manos mientras le colocaba unas cuántas balas—Abre la puerta, déjame entrar, por favor.
—¿Ella no es importante para ti?—cuestionaba Carl con rapidez reconociendo que estaba un poco enojado con él—Jamás te lo he dicho, pero ella si es muy importante para mi.
—Carl...
—No se que está pasando ahora mismo por tu cabeza papá, siempre respeto las desciciones que tomas para ayudar a la comunidad pero esta vez no puedo, yo no voy a quedarme de brazos cruzados.
La situación estaba llegando a hartarle al chico, era molesto haberle prometido que iba a estar con ella para siempre mientras ahora se encontraba sin hacer nada al respecto cuándo ella estaba en peligro, así que se estaba alistando lo más rápido posible con armas y demás suplementos para dirigirse a buscar a Colman.
—Carl, solo escuchame—volvia a decir Rick.
—¡No quiero escuchar a nadie, ese es el problema!
Carl pudo escuchar los pasos de su padre cada vez más lejos, quizás ya se estaba yendo, al menos comprendía cómo se sentía su hijo y estaba dejándolo solo por el momento hasta que su mente se refrescara y el enojo se esfumase de su ser para poder tener una conversación civilizada teniendo en cuenta los pros y los contras de aquella situación.
—Carl—la puerta volvió a sonar y está vez el chico bufó por la obstinación. Ahora no era su padre, era Michonne—Carl, dejame entrar.
—Quiero estar solo—soltó el chico lo suficientemente fuerte para que la morena detrás de la puerta lo escuchara—¿Por qué no comprenden eso?
—Todos estamos tristes por ella—decía la morena con una voz calmada—Te entendemos.
—Si, vaya que lo hacen—espetó el muchacho con molestia nuevamente, quitó el seguro de la puerta de su habitación y se dignó a hablarle a Michonne sin titubear para nada—Ustedes no lo entienden, si lo harían ni siquiera estarían aquí en primer lugar.
—Carl...—susurró la morena a su lado—Ella era especial para nosotros, era parte importante de aquí—tragó saliva y por las gotas que se acumulaban en sus ojos Carl pudo entender que ella también estaba triste—Sé cuánto te importaba a ti.
—Quiero que lo sepas porque confío en ti y sé que mi padre no entenderá pero no pienso quedarme aquí más tiempo—habia soltado el sheriff con rapidez mientras se sentaba en su cama guardando su arma en una mochila. Michonne asentía con serenidad, ella comprendía al máximo la preocupación de Rick hacia su hijo, pero sabia perfectamente que él ya no era un niño, ya había crecido—Iré a buscarla.
—Lo entiendo.
Carl grimes se levantó y colocó su mochila en su espalda, llenó las dos ultimas botellas de agua que quedaban y colocó sus navajas en su cinturón, totalmente dispuesto a retirarse, estaba listo para iniciar su búsqueda, estaba listo para encontrar lo que sea que pudiera darle indicios de la ubicación de Colman, quería seguir avanzando pero se detuvo por un instante observando de reojo a su amiga y queriendo ser fuerte frente a ella.
—Tu padre, Tobin, Aaron y Erick Irán a buscarla también.
—Michonne yo...—Carl susurró con un poco de miedo—Yo no quiero que esté muerta.
—La encontrarás.
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