CAPÍTULO 46: Estamos Tristes
Caí rendida por un momento al ver el carro que se alejaba con Daryl. Me acerqué a un árbol cercano y me deslicé hasta caer al suelo.
Nadie decía nada, todo estaba en silencio, todos estaban sentados sin emitir ruido alguno.
—Maggie...Maggie—llamó Rick observandola.
Miré a Maggie, la mujer trataba de levantarse y acercarse al cuerpo sin vida de Glenn.
—Maggie tienes que sentarte—sugirió Rick mirándola.
—No—respondió ella secamente, acercándose a Glenn.
—Te llevaremos a Hilltop—aseguró Rick mirando a la mujer.
Ella negó.
—Tienen que prepararse...
—¿Para qué?—preguntó Rick.
—Para pelear contra ellos—respondió Maggie casi sin fuerzas.
—Tienen a Daryl, tienen un ejército, moririamos...Todos nosotros—aseguró Rick, Maggie se puso de pie.
—Vayan a casa, llevense a todos—ordenó Maggie.
—No puedes estar de pie—aclaró Rick ayudandola.
—Tengo que irme, y ustedes tienen que ir a Alexandria, Estuvieron aqui para mi—murmuró llorando, tratando de pronunciar bien las palabras.
—Aun lo estamos—afirmó Rick, ella negó dos veces nuevamente.
—Puedo hacerlo sola, necesito que ustedes regresen, no los quiero aquí—sollozo Maggie.
—Maggie, no te dejaremos sola, ¿Esta bien?—admitió Michonne ayudandola al igual que Rick.
—Tienen que hacerlo—soltó casi como una orden la mujer de ojos verdes.
Respiraba algo dificultoso y a la vez estaba llorando.
—Eso no va a pasar—murmuró Rick decidido.
—Yo la llevo, yo la llevare ahí—se ofreció Sasha, nos miró a todos y se levantó comenzando a caminar hacia Maggie—La protegeré—nos dijo asegurando que ella estaría protegiendo a Maggie, Maggie negó dos veces—No te daré otra elección—continuó diciendo Sasha mirandola
—Lo llevaré conmigo—aclaró Maggie refiriéndose al cuerpo sin vida de Glenn.
Sasha se acercó a Rosita.
—Me lo llevaré...eso voy a hacer—aseguró Sasha mirando a Rosita.
Ella asintió, ya que después de todo Sasha había sido amiga de Abraham. La morena se acercó a Maggie quien comenzaba a caminar hacia Glenn.
—Necesito hacer sola esto, por favor—pidió llorando Maggie, tratando de levantar el cuerpo de Glenn pero Aaron se le acercó.
—Te ayudaremos—se ofreció Aaron.
—Yo me encargo, por favor, tú no puedes, Dejanos—soltó Rick haciéndole entender a Maggie que ella no podía cargar a Glenn, no en ese estado.
—Él...él es nuestra familia también—murmuró Rick triste.
Sus ojos lo transmitían.
Maggie se agachó y lloró una vez más al ver a Glenn. No pude evitar sonreír cuando vi a Carl abrazar a Maggie mientras le daba ánimos y fuerzas. Eugenne, Sasha y Rosita se encargaron de cargar el cuerpo de Abraham.
Todos lloraban.
Quité mi vista de Maggie por un momento, miré al suelo y, recordé los momentos en los que había tenido charlas buenas con Abraham y Glenn.
Y digamos que la última vez que los vi no los había tratado bien del todo, había sido una completa tonta, y no sólo con ellos, sino con todos los que se encontraban aquí.
—¿Estas bien?—preguntó una voz femenina, pude ver a la morena frente a mi, Michonne me sonrió.
Asentí.
Mi mirada estaba pérdida y fija en un lugar del suelo, estaba aún tratando de asumir las malditas cosas que habían pasado.
—¿No te hicieron daño?—quedé en silencio por un momento ante esa pregunta, si, me habían quitado a más personas importantes en mi vida.
—¿Te hicieron daño?—esta vez escuché la fuerte voz de Aaron mientras me observaba—Dime Colman—se agachó a mi altura y lo observé.
No sabía cómo rayos mantenerme calmada después de haber visto lo que Negan había echo.
Aarón suspiró y se alejó de mi.
—Ya todo está bien—aclaró Sasha acercándose a mi.
—Nada está bien—susurré, quizás era lo que yo pensaba, porque viendo el rostro de todos confundidos sabía que lo había gritado.
Golpeé el tronco del árbol en el que estaba apoyada y comencé a llorar, me sentía frustrada.
Definitivamente pensaba que le harían daño a Daryl. Por otra parte, aún no podía asumir la muerte del pelirrojo y del esposo de Maggie.
Pude observar a Michonne coger mis manos, las tomaba con tanta fuerza y evitaba que me hiciera más daño.
Los ojos del sheriff se centraron en mi y solo me limité a desviar mi vista, me sentía fatal.
—Las cosas pasan por algo—susurró Sasha.
Rick se arrodilló frente a mi e hizo un esfuerzo por sonreír.
—Tu también vendrás con nosotros a Alexandria—pidió Rick—no queremos dejarte sola, otra vez—soltó.
Una lágrima más bajo por mi rostro.
—Aún no puedo ir, nada está claro en mi mente, aún no—aseguré llorando.
No quería volver, debía de afrontar esto por mi misma, no tenía que depender de su ayuda. Mis lágrimas se calmaron en el instante en que sentí el cálido abrazo de Michonne.
—Tranquila, lo mejor es que vengas con nosotros a Alexandria. Nada es seguro aquí afuera—susurró la morena.
Acariciaba mi cabello como si yo fuera pequeña.
—No quiero volver ahí y enterarme de cosas peores, prefiero estar sola, yo sola—murmuré.
Estaba segura de que estaba haciendo mi mayor esfuerzo por dejar de llorar, pero no funcionaba. Rick se levantó y le dio espacio a Rosita quien me miraba con nostalgia.
—Escuchame pequeña, tu serás parte de nuestra familia siempre. No podemos dejarte sola, ni aunque tu lo pidas, siempre estaremos ahí—comentó Rosita.
La observé por unos instantes y suspiré.
—Rosita tiene razón, Colman. Eres una chica increíble, pero sabemos que sigues siendo un pequeña niña que aún necesita estar protegida. No puedes, no debes quedarte sola—secundó Sasha.
Vi el rostro triste de Maggie mientras ella se acercarcaba, abrió sus brazos y lloró junto a mí.
—Se lo prometí a Glenn, No abandonaría a nadie de mi familia, nunca—afirmó Maggie abrazandome.
Al instante recordé lo que le había prometido a Glenn, yo cuidaria de Maggie y de su futuro bebé.
—Tienes que entender que no podemos dejarte sola, Ya eres parte de nuestra familia, desde el principio habías sido parte de nuestra familia. No podemos dejarte sola—escuché la voz de Rick desde algún lugar.
Maggie se separó de mi, secó mis lágrimas y se esforzó al sonreirme, también sonrei.
—Todos te queremos de vuelta en Alexandria—intervino Aaron.
Sequé mis lágrimas y me detuve a asentir lentamente.
—En el bosque hay un 99.9% de que cojas una gripe y que enfermes—aclaró Eugenne tratando de dejar de llorar por lo sucedido.
Todos rieron ante su corto chiste que había soltado para animarnos.
—Eso debe ser cierto—agregó Michonne dándole la razón.
—Vamonos—ordenó Rick mirándonos.
Todos nos levantamos y nos retiramos de ese lugar espantoso llevándonos los cuerpos de Glenn y Abraham. Maggie y Sasha fueron a Hilltop porqué Maggie necesitaba ver al doctor de alli y el resto se limitó a regresar a Alexandria.
[...]
Suspiré lentamente fijando mi vista en las tres personas que se situaban frente a mi; Holy, Rosita y Eugenne.
Holy traía a Liam en sus brazos, y Eugenne junto a Rosita se sentaban a mi lado.
Rosita me observó con una sonrisa y comenzó a vendarme las heridas. Cuando Liam vino hacia mis brazos lo abracé con toda la fuerza que tuve, Lo había extrañado demasiado.
—Debemos decirte algo...
La voz pausada de Holy sonaba un poco preocupada, y examinando el lugar me había dado cuenta de algo. No estaba Carol aquí.
Observé a Rosita atentamente, las dos mujeres me observaron y comentaron que Carol no estába.
Me hacía falta Carol, me hacía falta Daryl, me hacían falta mis padres, mis amigos, todo me hacía falta.
Quizás estaba siendo muy quisquillosa, pero después de lo de hoy lamentablemente todos se sentían fatal.
—Daryl y Carol estaran bien, no te preocupes—aclaró Rosita calmando mis pensamientos, mientras terminaba de hablar con Eugenne.
—Rosita tiene razón. Daryl estará bien, preocupate por ti ahora—soltó Eugenne.
—Y en cuanto a tus heridas, éstas sanaran pronto—añadió Rosita.
Rosita me pasó una botella de agua y tomé todo su contenido, habían pasado dos días que no tomaba agua, tenía muchas botellas en la cabaña pero aún así no las tomaba por completo.
—Descansa Colman—susurró Holy.
La mujer de cabello negro me observó y sonrió por un instante, se acercó a mi y le cedi a Liam, quien dormía en mis brazos y ésta se lo llevó despidiéndose de mi.
Llegué hasta mi cuarto y me tiré por un momento a pensar, si, estaba segura de que Daryl y Carol estarían bien, pero ellos contra todos los salvadores eran unas simples personas que debían asesinar.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top