Cap. 4 "Ichibi"

Sentía todo el cuerpo entumido además de un gran cansancio.
Se removió en aquella cama que aun que era cómoda para él no lo era.

Abrió los ojos poco a poco intentando acostumbrarse a aquella luz que entraba por la ventana.
Se llevo una mano a la cabeza al sentir un leve mareo a su alrededor.

- Gaara -

Su mirada se dirigió ante ese llamado, era Yashamaru, se permitió mostrarle una sonrisa relajada para que la mueca de preocupación que tenia su tío, no, su padre, desapareciera.

- ¿Qué ha pasado? - pregunto mientras se reincorporaba para sentarse en aquella cama, al ver a su alrededor se dio cuenta de que estaba en su habitación.

Los brazos de aquel hombre castaño lo rodearon y lo tomaron fuertemente, escucho leves hipidos y lentamente correspondió aquel abrazo.

- estaba tan preocupado - los susurros de Yashamaru se escuchaban tan hirientes para él, pero de alguna forma también le daban fortaleza, para ser más fuerte y no permitir que lo alejaran de las personas que amaba.

- estoy bien, Yashamaru-otosan -

Hace años atrás que comenzó a llamarlo así, y el hombre castaño casi se pone a llorar cuando escucho eso la primera vez.

Se separaron un momento y Yashamaru comenzó a revisar alguna posible herida que no había notado antes.

- tus canales de chakra ya casi se llenan por completo -

- ¿cuanto tiempo estuve inconsciente? -

- dos días -

Gaara cerro los ojos por un momento y trato de levantarse pero Yashamaru se lo impidió.

- guarda reposo por otro par de horas, para estar seguros -

- ya dije que estoy bien -

- no voy a arriesgarme, Temari, Kankuro y Baki han estado haciendo un buen trabajo con la aldea, no debes preocuparte por nada -

Y como si los hubiera invocado, aquellos tres mencionados entraron a la habitación, lo hacían cada hora para saber acerca del estado de su kage.

Temari y Kankuro se acercaron rápidamente y lo abrazaron, sentían un gran alivio al ver a su pequeño hermano despierto.

Yashamaru sonrió ante la escena, le alegra ver como Gaara se había acercado tanto a sus hermanos, sonaba un poco mal pero todo mejoro cuando Rasa había fallecido.

Los hermanos se separaron y comenzaron a bombardearlo con preguntas acerca de su estado, Gaara soltó una muy pequeña risa y les dijo que estaba bien.

Baki se acerco un poco para expresarle su alivio y por un momento la habitación se lleno de un silencio incomodo.

Hubo un rápido intercambio de miradas entre Temari, Kankuro y Baki, preguntándose quien sacaría el tema que tenia intrigados a los tres.

- ¿hay algún problema? - el pelirojo estaba confundido ante tal silencio, estaba acostumbrado a eso pero sus hermanos nunca estaban callados.

- Cuando peleabas contra el intruso, Shukaku se hizo pequeño y... - Kankuro espero que esa pequeña explicación hiciera entender a su hermano para que pudiera explicarles mejor.

Gaara soltó un suspiro, no hubiera querido que se enteraran de esa forma pero Shukaku nunca quiso decírselo a nadie.

- (Shukaku) - lo llamo en sus pensamientos pero no recibió respuesta, ¿estaría dormido?

Una bocanada de humo se hizo presente, Shukaku apareció sentado en un sofá al otro lado de la habitación, cruzo los brazos y levanto la cabeza, su mirada seria observó a todos.

Temari, Kankuro y Baki sintieron un escalofrío ante esa mirada, antes ya estaban acostumbrados pero ahora sabiendo que era el ser más poderoso de la aldea cambiaba las cosas, se sentían nerviosos y pequeños ante él.

Lo único que rompió aquel silencio fueron las suaves pisadas de Yashamaru que se dirigió a él.

Los demás quisieron advertirle de que no se acercara tanto pero las palabras no salían de sus gargantas.

Se miraron por un momento hasta que Yashamaru se inclino un poco.

- Gracias - esas palabras descolocaron mucho a Shukaku, no lo esperaba - muchas gracias por ayudar y proteger a Gaara en su recuperación, Shukaku -

Una risa macabra para los demás, natural para Gaara salio de los labios del temido Ichibi.

- ya lo sabias - no pregunto, era una afirmación de su parte, Yashamaru sonrió gentilmente en respuesta.
- lo tomare como un si - le resto importancia al asunto pero si que estaba sorprendido, ¿desde cuando?

- lo se desde hace tiempo, tenia mis sospechas desde que me salvaste de la muerte, era extraño que desaparecieras y aparecieras de la noche a la mañana. Además de que por accidente escuche algo que no debía - lo ultimo lo dijo con una sonrisa un tanto nerviosa.

- ya veo - su mirada se poso ahora con los demás, esperando a que alguien dijera algo.

- esto es raro - le susurro Kankuro a Temari, la rubia estaba de acuerdo, pero sonrió un poco.

- Hasta que sabemos algo de ti - comento Baki en un tono neutral, su relación se basaba en breves peleas pero se soportaban mutuamente.

Shukaku guardo silencio y miro a los dos hermanos Subaku no, esperando alguna palabra, apretaba sus brazos, estaba nervioso.

Temari y Kankuro trataban de procesar la información dada, ese hombre, era el monstruo que ataco a su aldea, mato a millones de personas y ahora estaba frente a ellos.

Por otro lado.

También era el hombre que los vio crecer, él fue una clave para que ellos pudieran acercarse a Gaara, fue quien les había salvado la vida en misiones pasadas, Shukaku ya formaba parte de su familia, y aun que no compartían sangre, lo veían como un tío más, incluso en ocasiones: consejero, amigo y muchas veces sensei.

No podían verlo como un monstruo.

No debían.

No querían hacerlo.

- Esto si que fue una sorpresa - soltó Kankuro mientras colocaba una mano detrás de su cabeza.

- si, nunca pensamos que... - Temari se quedo con la palabra en la boca, no sabia que decir exactamente.

Soltó un suspiro, el ambiente era incomodo, sentía que se ahogaba en esa habitación.

- ¿Quien tiene hambre? - pregunto finalmente la rubia, dejando de lado aquel tema.

- yo tengo un poco - hablo Gaara, apoyando a su hermana a cambiar de tema.

- ¡Bien!, iré a comprar algo rápido, los llamare cuando todo este listo - sonrió un poco y salio de la habitación, Kankuro la siguió excusándose que la ayudaría.

Baki también se fue "por asuntos de trabajo" y en la habitación solo quedaron Yashamaru, Shukaku y Gaara.

- ¿que ocurrió después de que quedara inconsciente? - pregunto el kage, Shukaku levanto los hombros desinteresadamente, él también había dormido para recuperar fuerzas.

- Kankuro menciono algo de cuatro enmascarados - Yashamaru intentaba recordar aquella platica, cuando había pedido informes a Kankuro.

Los dos presentes pusieron atención, ¿enmascarados?

- Dijo que se enfrentaron a los dos sujetos que planeaban llevarse a Gaara -

- Akatsuki - interrumpió Shukaku, habían sabido un poco de esa banda criminal - tenían la capa negra con nubes rojas - informó.

- Pero según Kankuro, los enmascarados también querían llevarse a Gaara. No lo hicieron porque en ese momento se pudo desbloquear la entrada de la aldea y todos los shinobi salieron a dar batalla.
Al verse superados en numero se fueron, no pudieron capturar a alguno -



















El fuego de las velas era lo único que los iluminaba en esa cabaña, estaba rodeada de sellos para que nadie pudiera dar con ella.

Cinco personas estaban sentadas en la "sala de estar", nadie hablaba, todo había pasado tan rápido, y nadie quería hablar de aquel tema, solo uno.

- ¿Entonces no pudieron hablar con Gaara o Shukaku? - pregunto el hombre pelirrojo con ojos color sangre.

- no - fue la única contestación de alguno de ellos.

- Akatsuki había llegado primero y el Kazekage estaba inconsciente - informo Hinata.

- Akatsuki ya comenzó a moverse, van contra los Jinchurikis -

- Y nosotros debemos dar con ellos primero, mis hermanos no opondrán resistencia, mientras ustedes estaban en Suna pude hablar con Matatabi y me aseguro que convencería a su jinchuriki, si no funciona... - se quedo callado por un momento, mientras observaba los rostros de sus cuatro " Cachorros" - bueno, todos sabemos lo que pasara - se levanto de aquel sofá y se dio media vuelta dispuesto a irse a dormir.

- ¡Kurama-otosan! - se detuvo ante el llamado de Sasuke y esperó en silencio.
- respecto a esto. ¿Sigue insistiendo con su plan? - el Uchiha no era el único que estaba en desacuerdo, todos lo estaban.

- Ya hablamos de esto muchas veces, no voy a cambiar de opinión y ni siquiera ustedes lo harán - les dio una mirada de advertencia sobre su hombro - Y antes de que vuelvan a preguntarme lo mismo mañana. Recuerden quien soy para ustedes -

Y con eso dicho se marcho a paso tranquilo hacia su habitación.

Los cuatro jóvenes shinobi, se quedaron un rato en silencio, repasando esa misma frase en sus cabezas.

"Recuerden quien soy para ustedes"

- Su sensei.
- Su amigo.
- La primera persona que creyó en ellos.
- El que los salvo del abismo de soledad.
- Su padre.

Kurama era tanto para ellos, que no podían desobedecer el único favor que él les había pedido, y por eso mismo se encontraban ahí.

- Mañana también sera un día pesado - Naruto se levanto de su asiento y los demás copiaron su acto, de acuerdo con sus palabras. 

Después de un "buenas noches" departe de todos se dirigieron a sus respectivas habitaciones.

Sasuke se quedo un momento frente a su puerta, su cabeza estaba en otro lado menos en aquella cabaña donde "viviría" después de que deserto de Konoha.

- gracias por preguntar - volteo hacia aquella voz, Sakura lo miraba desde su puerta, sus habitaciones estaban justo al lado de la otra - yo quería hacerlo pero no tuve el valor, aun que, ahora sabemos que él no cambiara de opinión. Descansa Sasuke -

- Descansa, Sakura -

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