Nombre del personaje: Nilia 
Canciones inspiradas: Merlin de Infected Mushroom
¿Nivel de spoiler?: Medio
Multiverso o universo al que pertenece: Multiverso O, universo Ji, código 025

Su nombre resonaba en una canción, en unos ánimos que a la joven la alteraba, sus ojos llenos de lágrimas veían con terror la decisión que tenía que tomar, si le hubieran dicho que en el futuro ella sería la salvadora de su planeta, se habría reído en su casa e ignorado esa advertencia, pues ella solo era una desgraciada que dependía de un contador de fama, y si ese contador llegaba a 0, moriría.

Ahora mismo su contador había llegado a una cifras absurdas y eso iba a más, su fama crecía hasta un punto en el que entendía los rumores que decían los demás, ser famoso te daba un poder, una fuerza, unas capacidades que Nilia nunca pensó que obtendría. Cada número nuevo que se añadía en el contador era una habilidad que el famoso podía elegir, y en el caso de NIlia estaba aun por decidir sus estadísticas.

—Basta, no quiero hacer eso —pidió desesperada.

Su decisión era importante para salvar el planeta, aun le costaba el hecho de que estas estúpidas pruebas que estaba haciendo con sus amigos iban a ponerla en esta situación de vida o muerte, pero no de ella, sino de todos los seres que viven en el planeta. Literalmente aquel hombre o mujer que creó este lugar junto a las pruebas tenía el poder similar al de la muerte, aniquilarlos a todos con el chasquido de sus manos.

Y ahora Nilia estaba allí, decidiendo si seguir con las pruebas, enfrente suya había un arma, un martillo cuyas runas le eran imposible de descifrar, pero sabía que si lo tomaba, un gran poder sería otorgado a ella, salvar a todos los habitantes del planeta, acabar con aquel hombre o mujer que creó estas pruebas y liberarlos de un futuro horrible.

El problema es que Nilia detestaba a todos los habitantes del planeta, los odiaba a todos y cada uno de ellos, pocos se salvaban, sus amigos, su profesor y su padre, pero cada uno de ellos había sufrido un destino desafortunado... a excepción de su padre, que se encontraba allí junto a esos seres famosos gritando aquella canción que Nilia detestaba:

—¡Ella es Nilia, nuestra salvadora!

Sus ojos miraban hacia el único sitio que le permitían ver, el martillo que brillaba en colores verdes, desprendiendo una esencia, un tipo de magia, que se acercaba poco a poco a Nilia, quien tenía la cabeza apuntando al suelo, sintiendo horribles escalofríos en su cuerpo, respirando angustiada, llorando sin saber que elección tomar. 

Dejaría que esa mala suerte afectara a todos y que se murieran, se lo merecían por ser unos cerdos egoístas que no se preocupaban por los demás cuando ellos mismos pasaron por una situación similar, pero cuando miraba a su padre y veía esa esperanza en sus ojos, el dolor y la rabia la consumían, pues él fue uno de los pocos que seguía apoyándola, era el único que seguía a su lado, que sacrificó todo para que ella siguiera viva en este planeta.

Cantaban esa maldita canción una y otra vez, pero Nilia se había vuelto totalmente sorda, observando solamente a su padre, sintiendo un dolor que poco a poco cambió a una esperanza. 

—Lo haré por ti, y solo por ti.

La emoción aumentaba cuando la mano de Nilia iba acercándose al martillo, escuchándose la esperanza en aquellos seres que sabían la verdad de su destino: Si esa niña no superaba las pruebas, todos morirían.

—Ignorabais mi presencia porque era una maldita inútil, una basura —contestó, agarrando el mango del martillo—, pero irónico es la vida cuando ahora dependéis de esa maldita basura.

Y con todas sus fuerzas, levantó el martillo en una posición determinada, apuntando al cielo, disipando la oscuridad de su alrededor para ver enfrente suya al culpable que organizó todas estas pruebas. Vestido con una larga capa negra sin mostrar su rostro ni cuerpo, este observaba con los brazos cruzados.

—Estás en la prueba veinticinco. Te queda la mitad —avisó aquella voz grave que resonaba en aquella sala donde Nilia había entrado de golpe, un bosque profundo donde el universo le era revelado en el cielo—. No me decepciones.

Aquellas últimas palabras dejaron helada a Nilia, ¿no decepcionarlo? ¿A qué se refería? Supuestamente ese ser se burlaba en todo momento de sus acciones que tomaba con sus amigos, pero ahora en estas últimas pruebas se mostraba muy interesado e intrigado, como si ese sujeto viera algo en ella.

—Les devolverás la vida, al igual que mi profesor —habló Nilia determinada, dando pasos valientes hacia el sujeto, que parecía ser un tipo de mago—. Se acabaron tus malditos juegos.

Vio como ese mago creaba una oscuridad alrededor suya, una que sus amigos temían cuando la sentían, pero en cambio Nilia le daba igual, se acercaba aunque su corazón bombeara con fuerza, aunque su mente le gritara un peligro, como si escuchara la sinfonía de unas campanas anunciando la muerte de alguien, la suya.

Escuchar la risa del contrario hizo que Nilia apretara los dientes.

—¿¡Será posible que seas la elegida?! —gritó emocionado, alejándose un poco mientras esa oscuridad formaba un arma, algo similar a una guadaña—. ¡Solo quiero ver más de ti, Nilia! ¡Eres un caso único! ¡Y no pienso perderlo ahora que lo tengo después de tantísimos años!

Curiosidades:

➤ Conoced el planeta Swedelay, donde la fama es lo que te permite mantenerte con vida. Este planeta toma inspiración de las películas futurísticas y películas como "In time"

➤ Nilia es un personaje de gran importancia, recordar bien su nombre owo

➤ La canción de Merlin de Infected mushrrom es la que me dio la idea principal de esta escena y a su vez el libro que tengo guardado con algunas ideas xD. Cuando dice "So this is Merlin, who comes to save us" en mi cabeza un "So this is Nilia, who comes to save us", que en este caso serían los habitantes del planeta gritando y cantando angustiados para que los salve.