《 POV Omnisciente 》

En la cocina de la mansión del Clan Mukami, se encontraban 3 de los hermanos discutiendo.

- Él ganado no baja desde hace 3 horas- mencionó el mayor, aunque no fuese notable, preocupado.

- M-neko-chan no suele faltar para la comida- acoto el idol, pegando su dedo índice en la mejilla en un gesto pensativo.

- cuando...pase...por la ...habitación de...eve...la puerta...estaba...cerrada.

- Debería ir a ver si esta bien- sentenció el peliazul, listo para ir a la habitación.

- Iré yo, no te preocupes, señorito.

De la nada llega Yuma, que con un  caminar perezoso se dirige a la habitación, metiéndose un cubo de azúcar a la boca y masticandolo ruidosamente, mientras ignora sea lo que sea que Ruki le este diciendo, en definitiva no dejaría que ninguno de sus hermanos vea a su novia desnuda y prácticamente desmayada, luego de la apasionada noche que tuvieron. Luego vería que excusas dar, para las preguntas que harían del extraño caminar que tenía  (t/n) y del porque tantas mordeduras en su cuello.