" Para que estemos solos amor en un día sin fin, sin preocuparnos más del que podrán decir, donde durmamos abrazados y si entonces nos sorprende el amanecer saber que estas ahí que estamos solos "
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Una mañana Moonbin estaba trabajando cuando le llego un mensaje:

Binnie hoy 6pm en el departamento, te amo.

Moonbin sonrió ampliamente al leer de quien era ese mensaje, y espero ansioso todo el día en la oficina hasta que dieran las 6pm.
Estaba por salir de su oficina cuando entro su asistente y mejor amigo Eunwoo.

- ¿Ya te vas? - pregunto Eunwoo

- Si, y te quiero pedir un favor - contesto el castaño, Eunwoo asintió para que él otro continuará hablando, - si Eunbin llegará a hablarte, por favor dile que fui a cenar con unos socios y que se me ha apagado el celular.

- Iras a verlo, ¿cierto?.

- si - dio un suspiro.

- Bin, solo cuídate ¿Si?, si eres feliz lucha por ello y por favor no sigas engañando a Eunbin ni a tus padres.

- Lo se Nunu, se que lo que le hago a ella esta mal y no se lo merece, y respecto a mis padres, ya sabes como son ellos, pero también tienes razón, necesito lucha por mi felicidad.

Nunu le dio un abrazo a Bin y le deseo suerte.

Y así Moonbin salió en su auto rumbo a su destino, feliz y nervioso por volverlo a ver.
Llego y saludo al portero, subió al ascensor y apretó el botón con el número 10 donde se encontraba el penthouse, no tuvo la necesidad de tocar la puerta pues justo cuando él se paro frente a ella rápidamente se abrió dejando ver a un chico con una hermosa sonrisa, un leve sonrojo en sus mejillas, ojos color miel que lo volvian loco, cabello rubio, labios rosas y esponjosos, vestido de pantalón de mezclilla con una camisa a rayas, muy casual.

Éste al abrir la puerta se encontró con un chico no más alto que él, de cuerpo fornido, unos ojos gatunos que tanto amaba, venía de traje pues sabía que acaba de salir de la oficina.

Este atrapo Bin en un abrazo que fue correspondido al instante.

- si veniste, no sabes cuanto te extrañaba Binnie - dijo sanha con un puchero.

- Amor yo también te extrañe, no sabes cuanta falta me hacías - respondió, aferrado a la cintura del contrario dando un pequeño beso en sus labios.

Yoon Sanha un chico rubio, alto, delgado, labios esponjosos, ojos color miel, 24 años.

A la edad de 23 años empezó a ir a la empresa con su padre para aprender del negocio familiar, era un buen hijo, siempre respetuoso, amable, un chico dulce, tierno, tenia el amor y apoyo incondicional de sus padres, por que si, Sanha era gay y sus padres sabían eso y lo apoyaban.

Moonbin un chico alto y fornido, cabello castaño, ojos gatunos, labios delgados, 26 años.

Tenia 2 años con su novia Eunbin, que pronto pasaría a ser su prometida, él no la amaba estaba con ella más que nada por conveniencia de su padre para beneficio de su empresa.
Él estaba enamorado de alguien más.

Pasaron al departamento, Sanha había preparado unos bocadillos y también había comprado vino, Bin quedó sorprendió y volteo a ver a Sanha que lo veía con un brillo en sus ojos.

- ¿Es una ocasión especial?- preguntó Moonbin.

- El verte siempre es una ocasión especial- respondió Sanha con un leve sonrojo.

Moonbin se acercó a Sanha, lo tomó de la cintura lo pego mas a él y le dio un beso suave pero lleno de tantos sentimientos.

- Te amo - confesó Moonbin volviendo a besar a su chico.

- También te amo Binnie - dijo Sanha viendo los labios del nombrado.

Estuvieron platicando de su día, entre risas, besos y caricias, disfrutando de los bocadillos preparados por el rubio, se sentían en una burbuja, ese departamento era su lugar seguro, un lugar solo para ellos dos, sin que nada ni nadie más exista fuera de éste.

- ¿Qué? - pregunto Sanha cuando se dio cuenta que Bin no lo dejaba de mirar.

- Nada, eres realmente hermoso, estoy locamente enamorado de ti - contestó el castaño, acercándose lentamente a un Sanha todo sonrojado.

Se besaron, se besaron tanto que Bin pego al contrario más a su cuerpo, poco a poco las manos de Bin se colaron por debajo de la camisa del rubio, sintiendo su suave piel, Sanha soltó un suspiro.

- Hazme el amor Binnie - dijo, viendo al de ojos gatunos que tanto le gustaban.

- Tus deseos son órdenes amor - contesto besándolo nuevamente, lo cargo y Sanha enrredo sus piernas a la cintura de Bin para no caer.

Esa noche Bin y Sanha se entregaron completamente, haciendose uno, demostrando cuanto se aman con suaves besos, caricias, gemidos, repitiéndose mutuamente varios "te amo" entre cada gemido y lo que darían por estar juntos, pues ambos sabían que eso era algo imposible debido a su situación actual.
Ambos eran un desastre, el cuerpo de Bin aperlado debido al sudor, sus labios entre abiertos, con mechones sudados en su frente, veía a Sanha debajo de él, el rubio con unos mechones pegados a su frente debido al sudor, labios inchados y entre abiertos, jadeando, aferrando sus uñas a la ancha espalda de su chico, aferrando sus piernas a la cintura de Bin.

Ambos sintieron sus orgasmos llegar, unas estocadas más y Sanha gimio fuerte el nombre de "Moonbin" , mientras Bin sentía como el rubio apresaba su pene y dejaba salir toda su esencia en el interior de su chico.

Bin salió de Sanha y fue por toallas húmedas para limpiarse. Una vez que se limpiaron se quedaron acostados en la cama, Sanha en el pecho de Moonbin mientras que este le daba suaves caricias en su espalda. Voltearon a verse, ambos tenían en su mirada un brillo hermoso, se amaban y estaba seguro de ello.

Moonbin se quedó mirando a Sanha, lo amaba, realmente lo amaba, y tenia tanto miedo de que su padre se enterara de eso, por que sabía que haría todo por separarlos, su padre quería que se casara si o si con Eunbin, aunque él ya le haya dicho una y mil veces que no estaba enamorado de ella, pero a su padre no le importa con tal de conseguir lo que quería, que en este caso era tener más poder.

Pero aún así ellos se arriesgaban a vivir su amor, pues no era algo pasajero o del momento, realmente se amaban y sintieron esa atracción desde el primero momento en que sus miradas se cruzaron hace 2 años en una reunión de socios, donde sus padres los presentaron al uno con el otro, se tomaron de la mano al saludarse y sintieron una corriente eléctrica por todo su cuerpo.
Bin quedó enamorado de esos lindos labios esponjosos y mejillas sonrojadas.
Sanha quedó tontamente hipnotizado con esos ojos gatunos que lo veían con intensidad, hasta el punto de ponerlo nervioso.

Poco a poco fueron coinciendo en más reuniones, se fueron acercando, conociendose, saliendo de vez en cuando, mandandose mensajes todo el día, todos los días, pequeños detalles que los dos se daban, Bin amaba ver la sonrisa de Sanha y este amaba que lo hiciera sonreír.
Con el paso del tiempo fueron sintiendo cosas uno por el otro, teníamos más acercamientos, roses de manos intencionales, miradas profundas y coquetas, hasta que Moonbin no pudo más y le robo un pequeño beso a Sanha, quien se sorprendió y Bin rápidamente le confesó a Sanha todo lo que sentia por él, quien quedó sorprendido al saber que era correspondido.
Han estado en un relación a escondidas y el día que ambos decidieron que se lo confesarian a sus padres, sus planes dieron un gran giro, al enterarse de los planes del padre de Bin.

Sanha se paro de golpe asustando a Bin.

- ¿Que paso Sanhie?- preguntó preocupado Bin.

- Binnie, vamonos - el nombrado lo miraba con una cara de confusión.

- Si Bin, escapemonos tan lejos de aquí, distante de todos. - dijo el rubio.

- Sanhie, ¿estas completamente seguro de lo que estás diciendo?- preguntó Bin algo preocupado pero también con una pequeña ilusión al imaginarse una vida junto a su pequeño.

- Muy seguro Bin, realmente quiero hacerlo, quiero estar contigo sin importar que. - contesto Sanha con los ojos llorosos, sentándose en el regazo de Bin hundiendo su nariz en el cuello del castaño.
Este lo miraba dulcemente pensando en mil cosas, respiro y le dio un beso en los labios, ambos sonrieron, Bin acaricio la mejilla de Sanha y finalmente habló.

- Escondamonos de la multitud del absurdo dia dia - dijo finalmente y Sanha lo miro sorprendido.

Sanha vamonos lejos, donde todas esas cosas que perturben, no estén más es nuestras vidas - dijo nuevamente, para después sonreír y abrazar fuertemente al chico frente a él.

- Si el amor está, no hay por qué esperar el dónde o el cuándo - respondió Sanha besando a su chico gato.

Se besaron por un rato más, hasta que decidieron bañarse, arreglar las pocas cosas que tenían en su pequeño nido de amor, como le decía el menor, subieron sus pequeñas maletas al auto de Bin.
Sanha envío un mensaje a sus padres donde les decía que se iba a vivir su felicidad a lado del hombre de su vida, este recibió una respuesta positiva, donde ellos lo apoyaban y si necesitaban ayuda alguna vez, estarían para él y Bin, por que si, los papás de Sanha sabían que éste estaba enamorado de Moonbin, se habían dado cuenta en una de esas reuniones, cuando vieron la forma que su hijo miraba al castaño, por la forma en como sonreia cuando estaba con él, Sanha se sintio feliz y tranquilo por la respuesta de sus padres.

Subieron y se miraron por un segundo.
- Amor, antes de irnos tengo que hacer algo, no tardaré ¿esta bien? - dijo Moonbin. Sanha solo asintió pues podría imaginarse de que se trataba.

Llegaron a donde vivía Moonbin, este bajo del auto diciendo a Sanha que esperara aquí que no tardaría.

Llego a su departamento y abrió la puerta, todo estaba en silencio, se adentro al pequeño despacho que tenía en casa, abrió un cajón que tenia bajo llave, saco un poco de dinero que tenia guardado y su pasaporte por cualquier cosa. Cuando en eso escucho como la puerta se iba abriendo poco a poco viendo entrar a Eunbin, quien lo miraba con algo de enojo y tristeza.

- Bin, al fin regresas a casa, estaba muy preocupada - dijo soltando un suspiro.

- Eunbin, toma. - le entrego un sobre que contenía una carta, donde le pedía disculpas y le explicaba todo y el porque de lo que estaba por hacer.
- Perdóname por hacer las cosas de esta manera, de verdad espero puedas perdonarme. - dijo finalmente para agarra sus cosas y salir del departamento.

Ella lo tomó del brazo antes de que él pudiera salir. - ¿Es por él verdad? ¿Te vas con él? - preguntó ella con lágrimas en los ojos.

Moonbin se sorprendió un poco.

- Eunbin, mereces algo mejor, sabes que no íbamos hacer felices si llegábamos a casarnos, se que te he lastimado, pero es mejor parar aquí. - se soltó del agarre de ella.

- Bin -. El castaño volteo a verla. - No te odio si es lo que crees, en realidad siempre lo supe por como lo mirabas, cuando te veía con él eras radiante, siempre con una sonrisa a comparación de cuando estabas conmigo, les deseo lo mejor y los apoyo. - dijo finalmente ella con una sonrisa sincera que Bin no dudo en responder igual.

Llego al auto donde estaba su chico, subió y se pusieron en marcha hacia su nuevo destino.

- ¿Todo bien Binnie? - pregunto Sanha algo nervioso.

- Todo más que perfecto amor - sonrió dulcemente, extendió su mano hacia Sanha, entrelazando sus dedos, dando un leve apretón y se dirigieron a un nuevo lugar, donde nadie los conozca donde pudieran amarse libremente sin tener que esconderse de nadie.

Fin.

Bueno esta es mi primer historia, realmente algo corta jaja pero bueno, se me ocurrió mientras escuchaba una canción de Marc Antony jaja.
Espero que les haya gustado.

Se la dedico a aspiradoraskuad gracias por animame a subirla.

Karla Alvarez 🌙