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- Tu nombre será JiMin...- una mujer dice al encontrar a un bebé junto a la basura. No había nada más que una maleta pequeña a su lado y la llevó junto al pequeño al lugar dónde trabajaba.

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- Yo no soy tu madre, hijo...- le dice la mujer ahora rubia.

- Pero tu me quieres y me cuidas...- le dijo el pequeño.

- Ya sé, pero una vez encontré a un bebé y dije que lo cuidaría, ese bebé eres tu...- menciona.

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- Tu madre es una prostituta...- le dijo una niña que siempre lo molestaba.

- ¿Y qué?- preguntó cruzandose de brazos- Al menos ella me ha enseñado a ser educado y puede ser una mujer mucho más refinada que tu madre que pasa dentro de su casa...

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- Hey, nerd...

- No estoy para tus bromas...-responde.

- Si yo digo conejo, tu saltas, así son las cosas...- responde el más alto.

- Lo sueñas- la pelea empezó terminando con un castigo en dirección.
Un chico parecía solo avergonzado delante de la mujer que llamaba madre.

- Perdoname...- decía viendo a la mujer que le miraba contrariada.

- Siempre cumples con todo...

- No voy a dejarme humillar por nadie... ninguno de esos idiotas, sabe mi vida ni las razones de nada, pueden joderse, pero a mí no...- responde decidido- Han sido mi familia cuándo la que se suponía debía serlo me dejó de lado...

- Eres el mejor hijo, que yo pude haber tenido...- la mujer lo abraza cómo cuándo era un niño de cinco años, y aunque ahora ya son diciesiete años, no deja de sentir la misma sensación de calidez con ella.

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- En esta vida, debes aprender de todo, hijo...- le decía un ladrón retirado.- No te digo que hagas lo que yo hice, te digo que mientras más conozcas de este mundo, sabrás comprenderlo y prepararte para cada circunstancia que se te presente, no lo olvides, valora lo que ella hace por ti tanto cómo lo has hecho hasta ahora...

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- ¿Chico estás bien?- pregunta a un joven pelinegro asustado.

- No, yo...- en su mente aún puede revivir lo que acaba de vivir- Ese hombre y esa mujer casi... yo... me drogaron y no sé...- está paralizado.

- Ven conmigo, no puedes estar esta noche sin un lugar dónde descansar...- menciona y lleva al chico del brazo a una casa sencilla en el barrio más pobre de Seúl.

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- Encontramos a las personas que buscabas...- le dice un chico vestido de negro.

- JB- le mira fijo- Quiero un trabajo limpio, no más sospechas...- demanda y el mencionado asiente y se retira con otros cincl hombres. Todo se trataba de tráfico de personas, había rescatado a un chico que sufrió todo tipo de atrocidades en manos de personas enfermas.

- Haré lo mismo que hicieron conmigo, ahora yo soy tu familia...- le dijo al chico dormido en su cama.

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- Min, encontramos algo interesante que quizás quieras ver...- dice una de las chicas que conocían a su madre.

- A ver...- dice divertido. Ellas siempre lo arrastran a todo tipo de cosas.

- Es el chico... es un gran genio con las máquinas, quizás tu puedas ayudar con eso...- Min asiente.

- Hey, Hope...- le dice y se sienta a su lado.

- Dime...

- ¿Quisieras estudiar la universidad?- pregunta distraído sin dejar de observar al interrogado.

- Es muy cara, pero siempre me gusto esto de la ingeniería...- menciona con una sonrisa leve.

- Bien... estudia, tienes un examen que presentar, las inscripciones son pronto, yo las pago...- deja un apretón en el hombro contrario y se va dejando a Hope sorprendido, quien se levanta y corre a abrazarlo.

- Muchas gracias..

...

- Mami...- una voz se escucha dentro de un callejón oscuro.

JiMin se acerca. Y mira a un niño de no más de trece años llorando solo mientras tiembla de frío.

- Hey, amigo...-le dice y le invita a que se acerque. Se quita su abrigo y se lo da.

- Hola...- dice- Gracias...

- ¿Qué pasa? ¿Por qué lloras?- le pregunta. El chico se encoge en su lugar y más lágrimas salen.

- Estoy perdido... no sé dónde estoy...- dice llorando. JiMin toma su mano y lo invita a que lo siga. Se suben a un auto negro y el mayor conduce hasta su casa.

- Puedes venir conmigo hasta que tu mamá pueda encontrarte, tendrás comida y una cama para dormir...- le dice y para su sorpresa el niño ya está dormido. Suspira y llega hasta su casa pequeña. Baja con el chico en brazos y pide a uno de los jóvenes que siempre andan rondando por allí que vayan por algún enfermero o médico de la zona.

Cuándo una mujer llega, le pide que revise al chico. Hope está asustado y solo mira de lejos.

- Solo está deshidratado... quien sabe cuanto tiempo pasó allí afuera.- menciona con pesar.

JiMin le agradece y le da una buena cantidad de dinero.

- Muchas gracias por venir- despide a la atónita mujer.

- Creo que tendremos un nuevo inquilino...- Hope menciona y JiMin asiente.

...

- Hyung... yo quiero pedirte algo...- JK se acerca lentamente. Los años habían pasado y nadie llegó a buscarlo.

- Dejame adivinar... ¿vas a estudiar robotica y programación?- pregunta dejando de lado su celular.- De acuerdo, espero que lo disfrutes...

- ¡Gracias, Hyung!- el menor se tira sobre él. Y JiMin ya no dice nada porque tanto JK cómo Hope son sus hermanos y se ha acostumbrado a sus muestras de afecto inesperadas....

...

- Aun no debes moverte...

- No lo entiendes, tengo que llegar a ellos de nuevo...

- JiMin, escucha a tu madre...

- Pudiste quedar esteril, es un verdadero milagro que no haya sido más grave, quedate quieto y callate...

- Pero...

- Saldrás de aquí hasta que me asegure, que nada atentará contra tu vida de nuevo...

- Pero mamá...

- No, escucha, has sido un orgullo para mí, gracias a ti, ya no tuve que seguir en la calle cómo prostituta, me siento cómo una gran señora, pero ahora, dejame cuidarte... deja que haga lo que quizás debí hacer desde el principio...

- Siempre me cuidaste... nunca permitiste que abusaran de mí... llegabas a protegerme...

- No hablo de eso, dejé que te criaras en las calles, no tuviste una niñez normal...

- Normal o no, mamá, te tuve a ti... y eso era más importante...