POV De Emma

Él chico tenia ojos color miel muy bonitos, piel bronceada y su cabello era castaño, tenia la mandíbula apretada y una sonrisa de lado, todo un idiota.

—¿Quieres una foto? —Dijo con una sonrisa burlona, rodee los ojos, este tipo de personas no eran de mi agrado. Tantas humillaciones me han hecho "valiente".

—Ya tengo suficientes fotos de mierda en mi celular —Dije alzando los hombros sin importancia, su cara se desfiguro, ahora tenia un semblante serio y escalofriante.

Se fue de ahí no sin antes chocar su hombro conmigo, casi me voy de lado pero logre mantenerme firme. Puff hombres.

Camine más en busca de Amanda, pero ahora si me fije por donde iba, no quería toparme al imbécil de hace rato. Esta guapo pero lo que tiene de guapo lo tiene de idiota, me gustan sus ojos son muy profundos con ese toque de brillo especial.

«¡Deja de pensar en él Emma!»

Me repetía una y otra vez mientras caminaba. Logre localizar una cabellera castaña muy familiar, camine hasta ahí para ver si era Amanda, Si es. Uff por fin, pensé que nunca la encontraría.

—Hola Amanda, te estaba buscando mujer —Dije con una sonrisa.

Estaba sentada comiendo.

—Lo siento, yo también te estaba buscando, sientate —Dijo haciéndome un espacio, me sente y ella me ofrecio una bandeja de comida— Es para ti, yo aquí tengo la mía.

—Gracias —Dije y empezamos a comer, mientras platicabamos, ¡Cierto! Le iba a decir lo de Nash.

—Oye Amanda ¿Quien es Nash, Nash Grier? —Dije dejando de comer, ella se puso pálida.

Que raro, tan misterioso era ese chico.

—¿Te lo encontraste? ¿Te hizo algo? ¿Estas bien? —Dijo tocándome por toda la cara, mientras yo hacia muecas.

¿Pero que mierda le pasa? Ni que fuera un asesino serial, ¿Verdad?

—Tranquila Amanda, ni que Nash fuera un asesino serial, no no me hizo nada —Dije con una mueca, se que se preocupa por mi pero se cuidarme sola.

—Dicen que Nash es un asesino, al igual que su banda, Todos son los más temidos aquí. Nadie se les acerca, pero el peor es Cameron Dallas es un maldito playboy, utiliza mujeres, drogadicto, dicen también que es narcotraficante, y dicen que una vez un chico lo hizo enojar y lo mando directo al hospital con graves fracturas, yo que tu no me les acercaba —Dijo Amanda horrorizada.

Todo lo que me dijo Amanda me dejo en shock, no creo que esos chicos sean así. De seguro son rumores de la gente.

—Amanda ¿Ellos han dicho algo? ¿Los haz visto? —Dije seria, nunca me a gustado creer en los rumores, solo son eso, rumores.

Además de que siempre la gente inventa rumores para quedar bien o para hacerle la vida imposible a esa persona, y como nosotros somos tan ingenuos no ¡los creemos fácilmente!.

—No...—Dijo en un susurro, Sonreí.

—Ahí esta, Nash es un buen chico, me lo encontre y él me ayudo, tambien me encontré a otro chico de cabello castaño, ojos mieles y moreno, es guapo pero todo un imbécil —Dije recordando a ese idota.

De tan solo recordar su mirada me da escalofríos y un enojo profundo.

—Es Cameron, Cameron Dallas —Dijo mi amiga con una mueca, con que así se llamaba ese idiota. Por lo que me dijo Amanda el era el más temido de aqui.

Terminamos de comer y toco él timbre, hoy no nos tocaba juntas en la siguiente clase, así que para no perderme le pregunte a Amanda donde quedaba él salón de Literatura.

Camine por los pasillos en busca de una puerta color azul, me dijo que la clase de literatura era la única con la puerta azul.

Abrí la puerta y observe él salón, me senté en las filas de al ultimo, como ya lo había dicho antes, no me gustaba llamar la atención. A los pocos minutos él profesor entro por la puerta, empezó con la clase, explicándonos de algunos libros. Como reseñas y demás.

—Bien alumnos. Hoy encargare un trabajo para la próxima semana, tendrán que hacer una reseña de algún libro, pero sera en equipos. Los formare yo para que puedan socializar y se acoplen más al salón, pues muchos ya tienen su grupito. Así que empezemos —Dijo él maestro —Pero como yo se que muchos se van a quejar de que yo los acomode por que quise, vamos a poner todos los nombres de los del salón en un papelito, así que uno por uno va a ir sacando un papelito y ahí vendrá él nombre de quien sera su equipo.

Él profesor empezó a llamar algunas al azar y pasaban a tomar su papelito, a mi se me hizo justo, era nueva y casi no conocía personas así que para mi estaba bien. Algunas personas se emocionaban al saber que les tocó con alguien que conocía y otras estaban molestas por no tocar con quien querían.

Al frente paso Cameron, él chico imbécil de hace rato, no sabia que Cameron compartía clase conmigo. Saco un papelito y lo vio, después recorrió la mirada por todo él salón como que buscando a alguien, hasta que dio conmigo y me guiño un ojo. Lo mire confundida, ¿Porque me guiñaria él ojo? Acaso es bipolar este hombre, ¿Sabia quien era yo?.

—La señorita Emma Stevens sera con él joven Dallas —Dijo él profesor apuntando nos en una lista, por eso Cameron me guiño un ojo.

¿Acaso fue él destino? Ni idea. Todos los del salón voltearon a verme haciendo que me sonrojara, sus rostros mostraban tristeza y compasión, la verdad no me molesto que me hayan elegido con Cameron, no creo que todo lo que hayan dicho de él y de Nash sea verdad, tendré que averiguarlo.

Las clases pasaron y ya era hora de salida, Cameron no había ido conmigo para ponernos de acuerdo, así que ahora lo estoy buscando, ¡Bingo!.

Estaba en la salida del instituto con sus amigos, temerosa me acerque ahí. Le había dicho a Amanda que me esperara en él auto.

—Cameron —Lo llame, estaba de espaldas, volteo conmigo con él ceño fruncido, pero cuando vio que era yo su semblante cambio a uno serio.

—¿Que quieres? —Dijo Cameron, las miradas de sus amigos me recorrieron de arriba a abajo, me senti incómoda.

—Vine...para...lo del trabajo —Dije nerviosa, sus amigos no dejaban de mirarme.

—En tu casa, ten mi número para poder contactarnos, adiós —Dijo frío, pero que bipolar. Me entrego un papel donde efectivamente venia su número.

Lo guarde en mi mochila y salí de ahí.

Camine hacia donde Amanda tenia él auto. Me subí y arrancó, me dejo enfrente del edificio.

Después de haber subido por él ascensor abrí la puerta de mi departamento, deje la mochila en él pequello sillón de ahi. Camine hacia la cocina y prepare un sándwich para poder comer algo.

Termine de comer y me metí a bañar, me puse mi pijama. Mierda, no tengo celular, si compro uno sería gasto inecesario, tendría que ponerme a trabajar lo antes posible.

Cameron me va a regañar por no haberle dicho, pero ni modo me tiene que entender.

Me arrope y me dormi.

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